Partida Rol por web

Harry Potter y la Nueva Generación

Gran Comedor: Mesa de Hufflepuff

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26/06/2014, 13:56
2ºH - Daphne Relish

Cuando Daphne llegó al comedor, las gemelas y Neil estaban haciéndose fotos a sí mismos. Ese era el momento de preguntárselo al chico. Quería asegurarse de que su amiga estuviera en buenas manos-. Buenos días, Neil. Oye, una cosa. ¿Es verdad que vas a ir con Sara al baile? Que me parece muy bien, ¿eh? Es una niña encantadora y seguro que os lo pasáis genial. Pero te diré algo: Es muy sensible y tímida. No le hagas nada malo o te las verás conmigo -Tenía que proteger a su amiga de buitres que quisieran aprovecharse de su naturaleza bondadosa-. Por cierto, bonita cámara.

Y dicho todo eso, se sirvió el desayuno y comenzó a comer. Entonces Daphne miró asombrada a las gemelas-. ¿Sabéis hablar español? Mmmm... Salsa, muy bueno, soy contento... –Su vocabulario era limitado y su acento inglés muy fuerte, a pesar de que sus padres vivían en España. Nunca había tenido la oportunidad de aprenderlo. 

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26/06/2014, 15:16
Out(H) - Neil Barreiro

Hola Daphne, ¿qué ta...? la empezó a saludar. No obstante lo directa que era la chica de segundo con su pregutna le dejó noqueado.

Al mismo tiempo, las gemelas seguían insistiendo con el tema de Sara. ¿Sara es española? No recordaba eso pensó mientras soltaban palabras graciosas en español Algo que Daphne también hizo, aunque ninguna de las tres lo hacía de manera muy afortunada.

Neil tomó aire y respiró hondo. Chicas de verdad... dijo en un susurro, como teniendo miedo de que alguien le escuchase, empezaba a ponerse rojo de vergüenza. ... de verdad, no sé de que me estáis hablando ¿me he perdido algo? Pensaba ir al baile... solo pensó, pero no dijo, temiendo que las chicas se riesen de él, o peor, que se lo dijesen a Sara y se lo tomasecomo un insutlo.

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26/06/2014, 19:11
1ºH - Maxwell Alden

En ocasiones, dormir en los dormitorios de Hufflepuff, a pesar de estar bajo tierra, donde no había ventanas y los crujidos del castillo amenazaban con que el imponente edificio se desmigajara y dejara a los niños enterrados bajo toneladas de piedra por toda la eternidad, tenía sus ventajas.

Cuando el sueño todavía atenazaba al pequeño que recorría los pasillos hacia el comedor, la tentación de tirarse en un banco era pequeña. Solo unos pasos separaban las salas de los tejones del gran salón donde se disfrutaban de las comidas.

Maxwell agradecía esa cercanía cuando apareció en el gran comedor. El niño alcanzó una silla y se desplomó en ella, hundiendo los hombros con tanta profundidad que algunos hubieran apostado que iban a tocar el suelo.

No era fácil reconocerle esa mañana, pues estaba escondido detrás de un par de ojeras que, por su tamaño y coloración, parecían berenjenas. Aunque no de las suaves y relucientes, sino de esas que han perdido el brillo y adquirido la textura de pasas.

Desencajó la barbilla del esternón y levantó la mirada para mirar a sus compañeros.

—Días… —gruñó con la voz ronca de quien todavía no había despertado completamente.

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26/06/2014, 22:48
1ºH - Erzsébet y Orsolya Padurearu

Las crías saludaron con lo que pudieron a Daphne, dado que estaban ocupadas en comer con ambas manos. Casi se atragantaron al escuchar que la chica se había creído aquello, pero se repusieron rápido y afirmaron con la cabeza.

Bueno, pues si no quieres ir con ella seguramente se moleste, dejó caer Erzsébet. Tú sabrás...

Ah, ya sé, dijo Orsolya, si vas solo, te llevas la cámara ¡y nos sacas fotos a todos! Aunque será tu culpa si Sara va sola, susurró al final.

Jajaja, no pudieron las gemelas evitar reírse al ver llegar a Maxwell. ¿Qué haces disfrazado tan pronto?, hizo alusión Erzsébet a la mala pinta del chico.

Sí, tenemos clase antes de la fiesta. Aunque ese disfraz de Zombie está muy logrado, confirmó Orsolya.

Fue Erzsébet quien dijo a Max: Bueno, ¿al final vas a ir, o no? Kelly vendrá con nosotras, o conmigo si tú te decides a ser el acompañante de Orsi, indicó a su hermana.

Seguro que no has visto un Halloween de magos, trató Orsolya de avivar así la curiosidad del chico.

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26/06/2014, 23:05
2ºH - Mircea Padurearu

Al entrar en el comedor, el ambiente estaba sobrecargado, con todos los alumnos emocionados y terminando de planificar para la fiesta de la tarde. Se fijó en las decoraciones samhaínicas dispuestas por todo el recinto y sobre cada una de las mesas, en especial en la de los profesores que mostraba una sobrecarga decorativa excesiva, con un Booky sonriente llevando una diadema con el rabo de una calabaza sobresaliendo de su gran cabeza.

Llegó hasta donde estaban sus compañeros y se detuvo un momento al ver al muerto viviente que tenía como compañero de cuarto y compararle con la jovialidad y aparente sonrojo del español. Saludó a ambos: buenos días.

Al sentarse, tuvo la breve esperanza de que sus hermanas no recordaran el día que era o que al menos fuesen discretas. Orsalía, Elisa, saludó a las pequeñas con una sonrisita taimada pues sabía que odiaban esos apelativos, y buscando así que se enfadasen y olvidasen lo que pudieran tener preparado.

Daphne, saludó a la niña con una ligera inclinación de cabeza. ¿Al final con quién vas a ir al baile este año?, preguntó convencido que sin Amon algún otro chico se lo habría pedido. Por casualidad ayer escuché que Peter Cardish de tercero te lo iba a pedir. No le interesaban los rumores, para nada. Era la antítesis de sus hermanas, pero aunque no le importara que Daphne fuera al baile con pareja, al menos prefería saber si el chico merecía la pena o no.

Se maravilló al encontrar prajitura egipteana y se sirvió un trozo. No le gustaban los dulces, pero era un día especial, así que haría una excepción.

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26/06/2014, 23:29
1ºH - Maxwell Alden

Cuando el sueño y la ducha matinal no funcionaban, el remedio infalible llegaba de mano de los elfos domésticos de las cocinas: Comida. Maxwell se dio prisa en cortar un pedazo de pastel de zanahoria, servirse un vaso de leche —y el mismo volumen del líquido blanco derramado alrededor del vaso—, y empezar a desayunar.

Las gemelas y Neil hablaba de Sara —que no estaba sentada a la mesa todavía— y de cámaras de fotos. Maxwell recordó la cámara de su teléfono móvil. El aparato no funcionaba correctamente en Hogwarts, y encualquier caso se había quedad sinbatería semanas atrás. No tenía ninguna otra, y menos como la del chico español, que parecía sacada de una película en blanco y negro.

Devolvió el saludo a Mircea, que acababa de llegara la mesa, y atendió a lo que le decían las dos chicas.

—No lo he visto —reconoció. Ni Halloween, ni Navidad, ni en realidad nada de nada, salvo la casa del viejo, el Callejón Diagon y el colegio—. Pero he oído algo: baile, peleas con hombres lobos, disfraces, banquete...

Las celebraciones no solían ser de su agrado, aunque en este caso, el banquete y la pelea con hombres lobo tenían su atención.

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27/06/2014, 23:46
2ºH - Sara Lago

Sara llegó al Gran Comedor mucho tiempo después de haber dejado la Sala Común. Después de que las gemelas le habían dicho que Neil le iba a pedir ir al baile con ella, y posiblemente matrimonio, la muchacha católica se perdió por todo el castillo.
¡Si no nos conocemos! Menudo descarado... pensó. Pero, al llegar a la mesa y ver que estaba allí, con todos los demás, se puso más roja que un tomate.
Buenos días murmuró, tímida. Y se dispuso a hacer lo que mejor se la daba. Dar las gracias al Señor por los magníficos alimentos que iba a ingerir. Y, ahora que Daphne volvía a hablar con todo el mundo, la cogió de la mano para que rezara con ella.
Mi Señor, mientras seas mi pastor, nada me falta. Muchas gracias por los alimentos que vamos a poder comer hoy. Cuida de Ardeen, que ya no puedo hacerlo yo. Amén
Abrió los ojos y, aunque tenía mucha hambre, empezó a comer poquito a poco, como si fuera un pajarito.

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28/06/2014, 00:06
2ºH - Daphne Relish

Daphne se sorprendió por la reacción de Neil-. ¿Cómo que no sabes...? –Entonces se giró hacia las gemelas, que estaban soltándole otra pulla al niño y presionándole aún más para llevar a Sara al baile-. Os lo habéis inventado, ¿verdad? –Les dirigió una mirada un tanto de reproche. Aunque en realidad, a pesar de que le parecía un acto de maldad por su parte, al mismo tiempo le hacía gracia. Aunque pensó que mejor que Mircea no se enterara. Seguramente a él no le parecería tan gracioso que sus hermanas estuvieran metiéndose en vidas ajenas de esa forma. Menos mal que Sara no se ha ilusionado con el tema. Si no... menudo chasco.

- Buenos días –saludó a un Max un tanto castigado por la falta de sueño; aunque para ese día le venía de perlas su aspecto. Siguió desayunando mientras Erzsébet le invitaba a ir con su hermana y el niño, sin enterarse muy bien, obvió la petición.

En ese momento apareció Mircea por la puerta-. Muy buenas, Mir -Apenas habían hablado desde las recuperaciones de la semana anterior y ese día, el día del baile, tenía muy presente las palabras de Oliver. Mientras pensaba en cómo sacar el tema y en cuándo hacerlo, el chico se le adelantó. Y, para sorpresa de Daphne, insinuó que la niña tenía otro pretendiente.

- ¿Cómo? ¿Peter Cardish, el baboso? ¡Para nada! Si apenas hablo con él. No sé dónde habrás escuchado eso Quizás otro rumor difundido por las señoritas Padurearu-. Pero Sylvia Smith, la de Gryffindor, contó anteayer en el baño que iba a ir con él, que ya se lo había pedido. Lo que ella no sabe es que antes se lo había pedido también a Katherine McDonald y a Mei Yuan, esas de cuarto de Ravenclaw que van siempre juntas.

Iba a seguir contándole la historia de cómo estuvo alardeando Sylvia, cuando llegó Sara, roja como el carmín, y se puso a rezar con ella, igual que hacían antaño. Daphne, que se encontraba ya a mitad del desayuno, paró para complacer a su amiga-. Eso, amén. ¿Qué tal Sara? ¿Cómo va todo? ¿Lista para esta noche?

Quizás debería haberle dicho en ese momento que lo de Neil era mentira. Pero se le olvidó. O, más bien, el tema quedó apartado en cerebro en cuanto recordó que no había acabado su conversación con Mircea-. Bueno, respecto a lo de antes... Que no, que no tengo pareja aún. Ni Peter, ni nadie.

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28/06/2014, 00:41
2ºH - Mircea Padurearu

Buenos días, saludó a Sara cuando la niña llegó. Hacía mucho tiempo que no se juntaban en la mesa tantos. ¿Donde estaría Oliver? Se lo estaba perdiendo. Fue entonces cuando Mircea creyó ver la figura regordeta de su amigo por la mesa de Gryffindor. Vaya, un cambio al fin, pensó el chico. Tanto estar con los viperini como Cassius acabará pudriendole el cerebro. ¿Qué haría Oliver por la mesa de los leones?

Aguantó la funesta mirada de sus hermanas cuando les llamó de la forma que ellas tanto odiaban y consiguió aguantar más que ellas. No era difícil sabiendo que debajo de sus rostros tenían platos rellenos de comida a la que tenían que dar entrada.

Se sirvió zumo de calabaza en vez de té y tras un breve sorbo, se vio buscando una jarra con un líquido ambarino. Se echó en una copa extrañado, sin convencerse que pudiera ser lo que se imaginaba. Y sí, lo era, Socată. Hacía mucho que no lo bebía. Disfrutó del sabor de saúco en aquella bebida.

Escuchó todo lo que Daphne decía sobre Peter y se preguntó como sabía todo aquello. Sus hermanas eran iguales, ¿Acaso las chicas tenían un oído más desarrollado para los secretos de los demás? Al final resultaba que lo que él había escuchado estaba más que pasado de fecha.

Se mordió un carrillo al escuchar que su amiga no tenía pareja para el baile. ¿Como era posible que ningún chico la hubiera invitado? ¿Ni siquiera los de cursos superiores? Sí era cierto que se había quedado bajita respecto a las otras chicas de curso, pero era una niña muy agradable y cuando encogía su nariz haciendo que sus pecas se juntasen, resultaba adorable. Él no tenía ninguna gana de ir al baile, pero era incapaz de olvidarse del intento de Oliver de que fueran los dos juntos. ¿Esperaría ella que él se lo pidiese? ¿Era posible que hubiera rechazado a algún chico por él? No, eso era imposible...

¿Quieres que vaya contigo?, estaba a punto de preguntar. Pero no, no podía, aquello sonaba a un: como vas sola, puedo hacerte el favor e ir contigo. Que aunque pudiera ser verdad o no, estaba claro que no era lo adecuado. Él prefería ir a la biblioteca, en vez de a un baile de disfraces. Aunque recordando que el año anterior habían tenido que defenderse de un hombre-lobo, quizás sí debía ir. No era demasiado fuerte, pero al menos sería un alumno más que velaría por la seguridad de sus amigos. Sí, esa era razón suficiente para ir.

¿Te gustaría ir conmigo al baile, Daphne?, propuso, no carente de pomposidad, con inclinación de torso y mano extendida, como en una corte rumana.

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28/06/2014, 01:17
1ºH - Erzsébet y Orsolya Padurearu

Tras volver a sus platos, gruñendo para sí por culpa de Mircea, las gemelas decidieron aplazar su sorpresa para su hermano, cada una por separado, pero una simple mirada entre las dos valió para darse a entender.

Fruncieron el entrecejo y apretaron los labios al ver lo idiota que era su hermano al preguntar sobre Peter. El Orejudo era posiblemente el más lento de todo tercero, incluyendo los lumbreras Joroba y Alelado de Slytherin que no eran capaces ni de deletrear sus nombres.

Notaron el sonrojo de Sara y sonrieron. Ellas ya habían hecho su labor de alcahuetas. Solo faltaba que el bobalicón de Neil recogiera el sedal y tendría compañera para el baile. Sara era una chica animosa y vivaracha, aún con su manía de seguir teniendo un amigo invisible con 12 años.

Ponte algo que represente el miedo del bajo Londres, recomendó Orsolya a Maxwell. Ella había estado trabajando su vestido junto a Erzsébet y Kelly toda la semana y creía haber hecho una buena labor.

Terminaron de desayunar y estaban a punto de marcharse cuando repentinamente Mircea le pidió a Daphne ir al baile. Contuvieron el aliento esperando la respuesta de ella. Ojala no se demorara o se asfixiarían.

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30/06/2014, 13:38
2ºH - Daphne Relish

Primero Daphne sintió alivio cuando Mircea le pidió ir al baile. Si le hubiera tocado a ella se habría puesto muy nerviosa, le habría entrado la risa floja, habría tartamudeado y el chico habría pensado que era tonta... Más. Por suerte, todo salió mucho mejor. Luego sintió euforia, aunque no la demostró. Le sonrió al tiempo que pillaba de reojo a las gemelas conteniendo el aliento.

- Sí, claro –Respondió tranquilamente al rumano, mientras su yo interior pegaba saltitos de alegría-. Pero, Mir, no sabía que querías ir al baile. Pensaba que esas cosas no te iban. Ya te imaginaba en la biblioteca haciendo compañía a Booky -Mientras, pensaba en la envidia que podría darle a la atontada de Sylvia Smith en cuanto se enterara; el año anterior se había burlado de ella algunas veces por pasar tanto tiempo con un niño tan raquítico y extraño. Y este curso, tras el espectacular cambio de Mircea, que parecía incluso un par de años mayor de lo que era, Daphne había pillado a la leona de tercero mirándolo con la boca abierta más de una vez.

Se giró entonces hacia las dos niñas, cuya salud mental parecía depender de la respuesta de Daphne. Y, cuando por fin las vio respirar, les preguntó:- ¿Y vosotras? ¿Vais a compartir a... –Miró de reojo a Maxwell, que aún no les había dicho si quería o no ser su acompañante-. ...una misma pareja o ya habéis buscado a alguien más con quien ir disfrazadas y bailar? –De hecho, a Daphne le resultaba extraño incluso que hubieran invitado al chico. Pasaban siempre tanto tiempo juntas, que las imaginaba en el baile la una con la otra. Además, sabía que no necesitaban a nadie más para montarse su propia fiesta y pasarlo bien.

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30/06/2014, 23:21
1ºH - Erzsébet y Orsolya Padurearu

Aunque pareciera que solo eran amigos -lo cual preferían por ahora, dado la cantidad de impúberes creyéndose adultos que vagaban por la escuela-, las gemelas volvieron a respirar y sonrieron ante la contestación de Daphne. Tampoco es que se esperaran otra cosa, dado la cantidad de noes que la habían visto soltar cuando otros chicos le preguntaban. Aún así, aplaudieron: a ver con qué nos sorprendéis, comentó Orsolya haciendo referencia a las indumentarias que llevaría la nueva pareja de baile.

Sí, Kelly será mi pareja, dijo Erzsébet según se iba levantando del banco, y ese de ahí, apuntó hacia Max, el de Orsolya. Seguramente lo más probable es que las parejas estuvieran confundidas, pues tenía más sentido que Max fuera con la más vivaz y peligrosa de las gemelas y la cándida Kelly con la semi-vergonzosa Orsolya, pero así habían salido las cosas, no siempre como uno se esperaba.

Nos vemos luego, se despidieron, lanzándole una mirada a Mircea que parecía significar que tenían aún algo pendiente con él.

Salieron corriendo del comedor con las mochilitas rebotando en sus espaldas.

Notas de juego

A clase

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01/07/2014, 00:00
2ºH - Mircea Padurearu

La respuesta de Daphne hizo que Mircea afirmara con la cabeza. Sabía que a una fiesta de Halloween había que ir disfrazado, pero si era un baile... mejor ir de etiqueta, como en la corte. No tenía el traje a mano, pero no había nada que un Artifficus no pudiera resolver. Además, el uniforme valaco bien podía pasar por disfraz. Bueno, tenía tiempo para pensarlo.

De acuerdo, contestó el chico. No era frío, simplemente aceptaba lo ocurrido, no había porqué hacer un espectáculo de ello, ¿verdad? Daphne era su amiga y era lo más normal del mundo que la acompañase al baile si ella no tenía pareja.

Tengo entendido que Booky también irá al baile. Es muy reservado con quién será su pareja, así que la biblioteca estará cerrada. Encogió los hombros, sabiendo que la chica esperaría otra respuesta. Además, habrá que ver si en Hogwarts saben como montar un baile, sonrió ligeramente.

Achicó los ojos en actitud intimidatoria hacia sus hermanas, que se rieron. Era de esperar, no tenía sentido que un gesto así pudiera intimidar a nadie, sino más bien hacer entender que tenías miopía o ganas de irte a la cama. Despidió a las crías y volvió su atención a Daphne, a la que volvió a sonreír.

Se sirvió otro vaso de refresco de saúco y terminó lo que aún tenía en el plato.

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01/07/2014, 08:19
2ºH - Sara Lago

Sara, olvidándose de Neil, imitó el gesto de las gemelas al aguantar la respiración. Movía su cabeza como si de un partido de tenis se tratara, entre Mircea y Daph. La muchacha se llevó las manos a la boca, para ocultar su sorpresa, hasta que Daphne asintió a la petición. Le hubiera gustado soltar alguna risita que otra, pinchar a su amiga con el dedo en las costillas y cuchichear, pero la reacción de él parecía fría y sin emociones. Rancio pensó mientras no dejaba de mirar a su amiga y sonreír

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01/07/2014, 12:36
2ºH - Daphne Relish

Kelly... Kelly... ¿Kelly Highwire, de quinto? No creo que sea esa a la que se refieren. Daphne supuso que sería alguna Kelly de su curso, que ella no conocía-. Lo pasaréis genial, ya veréis. Que os vaya bien en clase –Se despidió de las gemelas y siguió con los últimos restos de su desayuno.

- ¿En serio? ¿Booky con pareja? Siempre pienso en él como en alguien solitario, con sus libros como amantes. Amable con todos pero cercano a ninguno... –Se dio cuenta mientras hablaba de la cantidad de cosas en común que tenía el elfo bibliotecario con su amigo Mircea. Parecían de la misma familia. Sonrió al chico de vuelta y terminó por fin de desayunar.

Pilló a Sara de reojo mirándola con sonrisitas y, aprovechando que Mircea se estaba sirviendo un refresco de saúco, le devolvió un gesto en el que mostraba su emoción por lo recién acontecido-. Bueeeno, Sara. ¿Y tú qué harás? No me preocupa para nada que vayas sola. Luego eres la que mejor se lo pasa... –Le dijo con una sonrisa pícara. Al final el tímido de Neil no se había atrevido a pedírselo, aunque seguro que Sara no acababa sola. La niña sabía cómo triunfar en estas fiestas.

- ¿Os venís a clase? -les preguntó a Sara y a Mircea-. Ya va siendo hora. Hasta luego, chicos –Se despidió de los de primero, cogió su mochila y salió del comedor hacia el aula de duelo.

Notas de juego

A clase.

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01/07/2014, 22:08
2ºH - Sara Lago

Nadie me lo ha pedido, iré sola dijo Sara, poniéndose roja otra vez al recordar lo de Neil. Empezó a engullir la comida a toda la velocidad que pudo. Quería irse de allí y dejar de pensar en todo eso... Así que cuando Daphne se levantó para ir a clase, la imitó con tanta fuerza que derramó la copa de agua, pero no se preocupó por ello.

¡Sí, yo también voy! dijo, enganchándose al brazo de su amiga dejándose llevar.

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01/07/2014, 23:42
1ºH - Maxwell Alden

El miedo del bajo Londres…

Lo único que le venía a la mente eran los pobres que pedían por los pasillos entren las estaciones de metro y las vías. Cumplía las tres condiciones: se encontraban en Londres, concretamente en su parte más baja, y la gente aceleraba el paso sin mirar atrás cuando se los cruzaba, lo que probaba el terror que les infundían.

No creo que se refiera a eso…

Y, de todos modos, ya tenía el disfraz preparado. El viejo se lo había enviado junto con la túnica de gala, que Maxwell había olvidado convenientemente meter en la maleta antes de salir hacia el expreso a Hogwarts. “Un Alden no puede mostrarse como si fuera un indigente”. Paridas.

Cuando terminó de comer, se despidió de los que todavía quedaban allí.

El desayuno no fue la resurrección que esperaba, pero le dio fuerzas suficientes para levantarse de la silla y arrastrarse escaleras arriba, hasta el aula de adivinación.

Notas de juego

/A clase de adivinación.

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02/07/2014, 10:03
2ºH - Mircea Padurearu

La verdad era que Mircea sabía bien poco de Booky. Quizás era un rompecorazones entre los elfos y otros seres mágicos y la biblioteca era su pequeño refugio personal entre cita y cita. Bah, se sacó eso de la cabeza, imposible.

Si de algo se había enterado era que Neil debía pedirle ir a Sara al baile y al final no lo había hecho. Según se levantaba, miró un momento al español y levantó los hombros. Pasó el año pasado con Oliver e incluso con él mismo: no era bueno tener a Sara en tu contra.

Claro, contestó a Daphne según seguía a las chicas a una distancia prudencial. Dejaría que chafardeasen sin que él estuviera inmiscuyéndose mientras se dirigían a clase.

Notas de juego

/a clase

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03/07/2014, 23:48
1ºH - Matthew Williams

La mayoría de los chicos de su casa ya habían comido cuando él entró, así que se perdió las conversaciones de éstos. Claro que viéndole, cualquiera pensaría que le importaba bien poco. Hoy estaba más distraído que otros días haciendo que cogiera casi mecánicamente la comida y que luego la comiera con el piloto automático.

Le gustara admitirlo o no, hoy su mente estaba en otro sitio, así que terminó rápido de comer y se fue a clase de adivinaciones.

Notas de juego

A clase.

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04/07/2014, 00:08
Out(H) - Neil Barreiro

Todo pasó en unos escasos minutos. Neil seguía allí como si se tratase del sauce boxeador pero al revés, se llevaba palos de todos en lugar de darlos. Se había quedado con la boca entreabierta y rojo como un tomate viendo como Mircea le pedía a Daphne ir al baile. Como las gemelas hablaban de sus parejas como si tal cosa. Como Sara rezaba y le miraba de soslayo. Cuando se dio cuenta de lo que pasaba todos empezaban a irse ya a clase. Y él, a pesar de haber llegado el primero, se quedó el útlimo en el banco.

Yo... Yo también iré solo dijo a media voz mientras Sara se iba, incapaz de pronunciar esas palabras.

Neil no se había dado cuenta de el tono severo que Daphne había usado con las gemelas y como las miraba con el ceño fruncido. El joven tejón se puso en pie medio zombie y emprendió el largo camino hacia el aula de Adivinación.