Partida Rol por web

Kintsukuroi

TERMINADA- Escena personal (Ryota- Alexei)

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09/02/2019, 19:28
Director

Siete días antes del incendio, 16:00 horas

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09/02/2019, 22:01

Los ojos fríos e inexpresivos de la máscara me devuelven la mirada desde el expositor. Cuanto más la miro, más me invade la extraña sensación que siempre me provoca el contacto con lo antiguo: la de estar contemplando el eco de personas desaparecidas hace mucho. Ensimismado, echo un vistazo al rótulo.

Máscara ceremonial. Período Jomon, c. 2500 a. C.

«Ceremonial». Sonrío. Recuerdo que la señora Harase, en una charla sobre museología, nos dijo una vez que cuando los arqueólogos no tenían ni idea de para qué podía haber servido un objeto descubierto, lo clasificaban como «ceremonial». En cualquier caso, ceremonial o no, alguien llevó esta máscara hace casi cinco mil años. Aquella persona ha sido olvidada junto a toda su civilización, pero la máscara y muchos otros utensilios de la misma era están aquí. No puedo evitar sentir que, en cierto modo, esto trae a esa gente a nuestro tiempo, a nuestro mundo tan distinto. La idea me resulta a la vez ominosa y esperanzadora. Quizá dentro de mucho tiempo alguien descubra las cosas que hicimos, y eso nos haga de alguna forma permanecer.

El Museo de Historia Tohoku abrió sus puertas en 1999. En el tiempo que lleva en activo se ha convertido en un importante referente de la investigación histórica del norte de Japón, de lo que es especialmente responsable su exposición de las sociedades de cazadores-recolectores del período Jomon. Su colección de jades goza de reconocimiento a nivel nacional. Además, recorriendo las instalaciones, uno puede hacerse una idea de cómo debía de ser vivir en aquel período tan lejano gracias a las fidedignas reproducciones de casas y pequeños asentamientos. Un auténtico paseo por el pasado.

Saliendo de mi trance, desenrosco el tapón de mi botella de agua y echo un trago. Ya casi estamos saliendo del verano, pero aún hay días en los que hace un calor insoportable. Al levantar la vista del expositor, una cara me llama la atención entre los visitantes del museo; no solo porque sea un chico alto y rubio, claramente extranjero, sino porque me resulta familiar. Lo reconozco casi al instante: es uno de los estudiantes del intercambio con los que comparto estancia en la residencia universitaria. Ya lo había visto unas cuantas veces en el recinto deportivo, pero nunca hemos hablado. Vuelvo a enroscar el tapón, y me enjuago la boca antes de tragar el agua.

Decido que voy a saludarlo.

A zancadas pausadas aunque decididas, me acerco al joven, preguntándome si entenderá mejor el japonés o el inglés. Para cuando llego a su altura me he decantado por el inglés.

¡Hola! —lo saludo con una sonrisa y una leve aunque enfática inclinación de cabeza—. Creo que te he visto en el polideportivo de la universidad. Soy Ryota Ogawa*. Encantado. —Refuerzo la última palabra con un nuevo cabeceo, algo menos acentuado que el primero. Echo una mirada a mi alrededor—. Interesante lo que tienen aquí. ¿Has visto ya las máscaras?

Espero su respuesta, manteniendo la distancia de cortesía como es debido.

Notas de juego

*He leído que los japoneses suelen presentarse a los desconocidos usando su nombre completo, en orden nombre-apellido si el desconocido en cuestión es extranjero (entre ellos, los japoneses usan su nombre en orden apellido-nombre). A partir de ahí, lo más normal es referirse a los demás por su apellido, a menos que sean amigos.

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11/02/2019, 17:53

Hacia calor, bastante deberia decir, lo cual me recordaba que habia hecho bien de traer algo de agua. Aun asi con tanta vuelta, apenas me quedaba para un par de tragos y no es que tuviera problemas en comprar mas, pero preferia esperar a terminar la vuelta por esta seccion, como minimo.

La verdad es que me estaba divirtiendo bastante con el paseo que estaba dando. El museo habia resultado, bueno, una sorpresa. Aunque debia admitir que dentro de las posibilidades, habia sido una sorpresa buena. Los diferentes cuencos y otro tipo de arte decorativo, hecho de ceramica, que estan expuestas tenian una pinta la mar de interesante, y aunque de Historia de Japon no es que fuera muy bien, leyendo los diferentes cartelitos conseguia hacerme una idea. Ademas asi de paso hacia una inmersion mas profunda en la cultura, aunque estaba seguro de que si le decia a alguien no japones que habia estado viendo herramientas del periodo Jomon, se quedaria con la misma cara que yo hacia una hora atras. Ya ni hablar de Tasha. Esa si seria buena, deberia probar en la proxima videoconferencia.

En eso estoy cuando escucho un saludo en ingles muy cerca de mi, provocando que me gire para ver quien parece dirigirse a mi. Nada mas ver esa sonrisa y ese saludo, mi sonrisa aparece en mi boca e imito su gesto. La sonrisa es de las que llaman y atraen para bien, agradable, sincera y sin duda amigable.

Hola. - Un tono animado, pero formal. Me suena mucho... pero...¿de donde?. Es justo cuando mencionas el polideportivo que caigo entonces. El japones grandote. Es verdad. Sonrio un poco mas, una de esas sonrisas que hacen que la gente se sienta bien. - Si, es verdad. Lo siento, no habia caido de primeras. - Una inclinacion de cabeza muy leve a la izquierda, que acompaña a la disculpa. Hago una reverencia tambien tras la suya, notandose que se lo que hago. - Soy Alexei Shishkin. Es un placer. - Al igual que hace Ryota mantengo las distancias de cortesia.

Si, si que es interesante, aunque para ser sincero si no fuera por las plaquitas explicativas, iria bastante perdido. - Una sonrisa sutil, que indicaba la realidad de lo perdido que estaba en esos temas. - ¿Mascaras? - Abri levemente los ojos, notandose mi interes. - No, la verdad es que no. Creo que estaba en la parte de cuencos como arte decorativo, ¿los de la "marca de cuerda"? - Mire en la direccion por donde habia venido y señale con la cabeza, con un gesto leve. Esperaba haber acertado, la verdad es que habia mucha informacion.

Volvi a mirar a Ryota tras eso sin perder la sonrisa. - ¿Donde has dicho que estan esas mascaras? ¿Me las enseñas? - Igual estaba siendo algo directo, esperaba que no se molestase.

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11/02/2019, 20:07

El chico me saluda con una amabilidad medida y respetuosa, presentándose como Alexei Shishkin. Ruso, entonces. O ucraniano, o de por ahí. Respondo a su sonrisa con otra cuando confiesa su poca familiaridad con el contenido del museo; siempre es buen momento para aprender. Lo de las máscaras parece picarle la curiosidad.

Claro que sí. Las estaba mirando justo ahora —contesto cuando me pide educadamente que se las muestre. Vuelvo el rostro un momento para mirar en dirección a los expositores que estaba viendo—. Están ahí.

Después de cederle el paso con un gesto del brazo, echo a andar entre la gente hasta que ambos estamos frente a las máscaras. Guardo silencio durante un minuto, dejando que Shishkin las examine tranquilamente. Es agradable ver que un estudiante extranjero quiere saber cosas de la cultura del país donde estudia. A muchos solo les interesa la juerga, pero supongo que la juerga es igual en todas partes.

Además…

Lo que me parece curioso es que pongan juntas cosas de momentos tan alejados —observo, hablando quedamente y con un ritmo relajado—. Ya sé que el Jomon duró unos dos mil años, pero no sé. Por ejemplo, esos mangos de hacha son de hace dos mil quinientos años, y esta máscara de aquí, de hace cuatro mil quinientos. ¿Te imaginas que en un museo pusieran juntas una espada medieval y, yo qué sé, una moto de ahora, y dijesen que son del mismo período? —Sacudo la cabeza y me encojo de hombros, sonriendo. Probablemente lo que acabo de decir no tenga demasiado sentido. Señalo entonces una de las máscaras, la que hace unos minutos me tenía tan cautivado, con la mano extendida y la palma mirando hacia arriba—. Esta mola mucho, ¿verdad? —Me giro para mirar a Shishkin, tratando de ver si la máscara le produce la misma sensación que a mí—. ¿Y qué estás estudiando, Shishkin?

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12/02/2019, 14:51

Ryota acepta y eso me hace sonreir de forma agradecida. No hay nada mejor que un nativo, o al menos alguien que sabe algo mas que tu, te enseñe las cosas. Eso suele evitar que prestes demasiada atencion a cosas no especialmente importantes, y pases por alto las mas significativas.

Sigo la mira de Ryota en direccion a las mascaras y me pongo en camino, esperando que se me una. No es cuestion de dejarlo atras cuando esta siendo tan amable. - Seguramente las hubiera pasado por alto, hay un monton de cosas que mirar... y todas resultan muy interesantes.

Una vez consigo una buena vision de las mascaras me las quedo mirando. Me fijo sobretodo en las hendiduras para los ojos, porque muchas veces parece como si estuvieran mirando o pudiera sentir algo similar. Nada macabro, solo es la sensacion. Lentamente mi cuerpo tiende a inclinarse hacia delante para poder prestar atencion a lo que mas me llama la atencion, asi como para facilitarme la lectura de algunas de las plaquitas, cuya letra es francamente pequeña. Sin duda para la epoca estaban muy bien hechas, ademas pone que son ceremoniales. Interesante. ¿De que tipo de ceremonia? ¿Seria algo asi como las Navidades? Eso me llama la atencion, pero antes de poder decir nada y mientras me vuelvo a enderezar, Ryota me habla.

Le miro directamente a los ojos mientras escucho sus palabras. ¿Alejados? No lo entiendo de inicio hasta que comienza a hablar y hace esa comparativa, con la motocicleta. Mis ojos se abren de la impresion mientras vuelvo a mirar lo que hay en la vitrina mas cercana. - Ya decia yo que resultaba raro lo de las fechas. Pensaba que igual era que estaban remodelando las vitrinas o algo asi. - Negue levemente, mientras miraba de nuevo a la vitrina por un instante. - Visto asi sin duda tiene poca logica... ¿Quizas es porque no tienen bastante materiales para dividirlos por epocas mas cortas? ¿No se, cada 500 años o asi?

Señalo la mascara que teniamos delante... la que habia estado mirando ahce un momento. Vuelvo mi atencion de nuevo a ella, hablando mientras me fijo en los detalles de la misma. - Si, la verdad es que es muy bonita. El acabado es increible si tenemos en cuenta la epoca de la que proviene, aun asi si no leo mal, pone que es una mascara ceremonial. ¿Sabes a que se refiere? ¿Es decir, a que ceremonia? - Con esas dos ultimas preguntas, devuelvo mi atencion a Ryota, esperando su repsuesta.

Ademas, no se si te has dado cuenta, pero si intentas mirarla de frente, casi parece como si te devolviera la mirada. - Devuelvo la mirada a la misma, con verdadera curiosidad. - Es muy intensa.

Devolvi mi atencion a mi acompañante, donde debia decir que estaba siendo la mar de entretenido tenerlo como compañero de visita. - Estudio Ciencias Politicas. ¿Y tu, Ogawa?- Mientras espero tu respuesta, parece que caigo en algo, por la manera en que se me entrecierran los ojos, hasta que todo vuelve a la normalidad. Espero a que termines de hablar, para hacerlo yo.

Si no me equivoco es normal que me llames por el apellido segun la cultura nipona, pero puedes llamarme por mi nombre. Lo hara mas sencillo, no estoy acostumbrado a responder a mi apellido. Espero que no sea un problema. - Una sonrisa amable, agradable, de esas a las que es dificil decir que no. - Aunque no tengo problema en llamarte por tu apellido o nombre, como tu prefieras. - No habia mala educacion, y estaba claro que estaba dispuesto a seguir con tu costumbre si era como lo preferias, solo se me hacia raro que me llamaras por mi apellido.

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12/02/2019, 18:58

Shishkin se queda mirando las máscaras con una concentración analítica. Ante mi comentario respecto a la distancia entre las fechas, parece igual de extrañado que yo.

Bueno, la duración de las eras es irregular. La tecnología, las técnicas artísticas, el descubrimiento de materiales nuevos… No siempre evolucionan al mismo ritmo —trato de justificar aun sabiendo que me estoy contradiciendo con lo que he dicho antes, dando a mi explicación un tono ligero para evitar sonar pedante; esta ni siquiera es mi especialidad—. En realidad lo que he dicho era una tontería. No se puede comparar lo rápido que cambian las cosas últimamente con cómo lo hacían antes. Pero no sé, al final creo que eso da una idea falsa del paso del tiempo. Aunque supongo que por algo lo harán. Ellos sabrán.

No puedo evitar reír cuando Shishkin pregunta por lo de los objetos ceremoniales. No me lo puedo creer, qué casualidad.

Qué gracia. Antes estaba pensando en lo mismo, en lo de «ceremonial» —le explico—. Una profe me explicó que, cuando los arqueólogos descubren algo y no saben muy bien para qué se usaba, lo catalogan como ceremonial. Así, sin más. ¿Encuentran una daga de un material demasiado frágil como para haber sido usada en combate, y que tampoco parece tener un propósito artístico? Objeto ceremonial. ¿Un… cono de madera, que parece formar parte de algo pero no se sabe qué? Objeto ceremonial. En resumen: ni idea. Es un eufemismo, una categoría «cajón de sastre» para cosas que no pueden identificar.

El chico me comenta entonces su impresión de que la máscara lo está mirando. Asiento lentamente con la cabeza, sin decir nada. Exactamente lo mismo que yo pensaba. Me dice entonces que está estudiando Ciencias Políticas. Sonrío.

¡Vaya! Ahora entiendo por qué parece que me estés leyendo la mente —bromeo. Vaya con el tipo. Si estudia Ciencias Políticas debe de ser de familia rica. La verdad es que tiene la pinta—. Yo estoy estudiando Dirección de Empresas. Mis padres tienen un hotel balneario en Yuzawa. Eso está en Niigata, a unos cuatrocientos kilómetros de aquí. —Meto las manos en los bolsillos de mis vaqueros, torciendo la boca en un gesto que podría querer decir cualquier cosa. Inconscientemente me he puesto serio, pero en cuanto me doy cuenta vuelvo a sonreír—. Por eso estoy complementando con Turismo. Y por eso es por lo que sé un poco de museología. Pero solo un poquito, ¿eh? Vamos, que nos dieron una charla un día en segundo y ya está.

Entonces mi acompañante aborda el asunto de los nombres y apellidos, diciendo que prefiere que lo llame por su nombre personal. Asiento.

Muy bien, Alexei. —Saco las manos de los bolsillos, sonriendo—. No pretendía ser estirado, ¿eh? Es solo una manera que tenemos de dar a la otra persona la oportunidad de que nos dé permiso de usar su nombre personal. —Hago una pausa, poniendo una cara de fingida confusión—. ¿Se me ha entendido? —Vuelvo a sonreír—. Aquí consideramos que usar el nombre personal es una señal de confianza y cercanía, así que gracias. Puedes llamarme Ryota. Así estamos en igualdad de condiciones.

Vuelvo a tomar mi botella de agua, dándole otro trago. Me paso una mano por la cara con expresión distraída cuando veo que me la he terminado. Levanto la vista hacia un reloj cercano que cuelga de una pared, uno de esos planos y redondos que ni siquiera tienen números.

¿Un descanso? ¿Vamos a la cafetería? Me muero por un té frío.

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12/02/2019, 19:30

Viendo como intenta explicarse, no puedo mas que sonreir levemente, sobretodo cuando empieza a contradecirse... aunque no demasiado. Aun asi espero educadamente a que termine para negar levemente. - Si me lo permites. - Un leve paron, para estar seguro de que no te molestaba. - No creo que sea una tonteria. Al menos no cuando hablas de la velocidad de evolucion del desarrollo humano. Sino recuerdo mal y no me hagas mucho caso, hubo herramientas en Europa que se utilizaron durante cientos de años, sobretodo en agricultura creo... asi que en cierto sentido, tendria logica. - Se nota que dudo un poco, dejando claro que no soy un experto y que seguramente sea algo que he leido en algun sitio. - Aun asi es cierto que la distribucion provoca una percepcion sesgada del tiempo. - Acabo sonriendo, dejando claro que tu lo has expuesto mejor que yo. "Ellos sabran porque lo hacen"

Te miro cuando me hablas de lo ceremonial, atento pero no especialmente directo, puesto que no quiero molestar, aun asi voy desviando la mirada entre tus explicaciones y la mascara en si misma. Se nota como tus palabras, me sorprenden y en cierta forma decepcionan por igual. - Vaya... - No puedo evitar mirar hacia el lugar de donde venia, por un instante antes de volver a los ojos de Ryota. - Siendo sincero tras ver varios de los cuencos y haber leido ya varias veces lo de ceremonial, esperaba que en algun momento alguien explicara que tipo de ceremonia. - Una sonrisa parcialmente de lado, porque me sentia ligeramente tonto por ello.

No puedo evitar sorprenderme cuando dices que te he leido la mente y acabo riendo.- ¿Como? ¿Por que? - Me rio con mas ganas, se nota que me ha hecho mucha gracia, pero sin llegar a ser tan ruidoso como para llamar la atencion de la gente de nuestro alrededor. Aun asi me coloco la mano delante para sofocar el ruido.

Te escucho cuando hablas de tus estudios y de tu familia. ¿Un hotel balneario? ¿En serio? ¿Los de las aguas termales?- Perdona pero cuando dices un hotel balneario te refieres a los que parecen aguas termales y tienen un jardin y estan al aire libre. - Habia leido un poco sobre ello, pero aun no habia ido a ninguno. - Eso suena genial. Ademas con esos estudios seguro que se te ocurren un monton de cosas para la empresa familiar. - Si la diferencia de clase o posicion economica debia ser un problema, sin duda no lo parecia por mis formas. Me doy cuenta de mis palabras. - Perdon. Espero no haber hablado de mas. La verdad es que llevo tiempo mirando de ir a uno de esos hoteles e igual me he emocionado un poco. - Se nota cierta contrariedad en mis formas, mientras estoy atento a ver si he metido la pata. Tu seriedad no ayuda mucho y espero un poco mas.

Tanteo el terreno ante tus siguientes palabras, sobretodo porque has vuelto a sonreir asi que espero que no haya pasado nada de verdad. - Bueno para ser una sola clase esta muy bien, has ayudado a un extranjero perdido. - Sonrei de nuevo, como si nada hubiera pasado, porque es lo que parecia. - Lo de turismo suena bien, yo tenia idea de coger algunas asignaturas de Derecho cuando estuviera en quinto seguramente. - De nuevo la confianza y tranquilidad del principio, notandose que estaba acostumbrado a hablar.

Por cierto y perdona mi ignorancia pero ¿Niigata en que direccion esta? - Una postura relajada, seguida de una sonrisa ladeada, con las cejas ligeramente elevadas, mostrando mi curiosidad real por el tema.

Acabo sonriendo ampliamente cuando dice lo de estirado. - No lo habia pensado sinceramente. - No puedo evitar reir levemente, ante tu pregunta. - Si, si se te ha entendido. No te preocupes he leido un poco sobre la cultura japonesa y durante los cursos en los que estuve para aprender el idioma, siempre nos daban algo de informacion sobre la cultura japonesa. Asi que si, te doy permiso para usar mi nombre. - Notaste la broma implicita en esa ultima frase, porque resultaba extraño dicho desde un extranjero a un local.

Asenti cuando dijiste tu nombre e hice un gesto como que no habia nada que agradecer. - En todo caso te tendria que dar yo las gracias a ti, has convertido un paseo normal por un museo en algo de lejos mucho mas entretenido. - Una sonrisa amigable y sincera, aunnque quizas lo mas sobresaliente es que no parecia ensayada, sino natural.

Miro como bebe y ante la mencion del te frio, se me iluminan levemente los ojos. Le doy un ultimo trago a la mia y asiento de nuevo, mientras trago. - Suena genial. Te sigo.

Nos ponemos en camino, en direccion a la cafeteria cuando no puedo evitar preguntar. - Por cierto, ¿Es la primera vez que te alejas de casa? Me refiero a estar una buena temporada fuera. - Sabia que 400 kilometros no eran anda, si teniamos en cuenta mi viaje, pero no era tanto la distancia fisica como la mental, la que fuera a madurar.

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12/02/2019, 23:43

Cuando saco el asunto del hotel balneario de mi familia, Alexei parece interesado, de modo que decido extenderme más en el tema.

Antes de que mi hermana y yo naciésemos, nuestros padres invirtieron todo lo que tenían en comprar y reformar una finca que incluía varios edificios, entre los que había unos antiguos baños termales. En Yuzawa hay mucha actividad geotérmica, ¿sabes? No es raro encontrar zonas donde el agua sale muy caliente de la tierra. Eso está muy bien, porque es una zona fría. Y montañosa. De hecho, gran parte de las visitas que tenemos son turismo de esquí. —Lo miro un poco extrañado cuando pide disculpas por su entusiasmo. ¿Por qué habría de pedir perdón?—. No, hombre, no pasa nada. Estaremos encantados de recibirte si alguna vez estás de paso por Yuzawa. Tú avísame antes para que pueda hacerte un descuento. —Le doy un ligerísimo golpecito con el puño en el hombro, sonriendo, aunque por algún motivo parezco un poco distraído por alguna cosa que me está pasando por la mente.

Sin embargo, río cuando Alexei me confiesa que está pensando coger créditos de Derecho para completar su formación.

Pues te irá de miedo por si alguna vez te metes en algún lío cuando seas presidente. —Vuelvo a reír, una risa libre y desenfadada. Sacudo la cabeza, mordiéndome la lengua, y le guiño un ojo a mi compañero—. Es broma, evidentemente.

Me pregunta entonces por la ubicación de la prefectura de Niigata.

Niigata está al sudoeste de aquí. Pero Yuzawa está en el sur de Niigata, muy cerca de las prefecturas de Gunma y Nagano.

Después del breve intercambio sobre la onomástica japonesa y de una broma jocosa por su parte, me agradece que le haya hecho de guía improvisado, a lo que yo respondo levantando una mano y negando con la cabeza, restando importancia al asunto. Finalmente, tras terminarnos nuestras botellas de agua casi a la vez, nos ponemos en marcha hacia la cafetería. De camino allí, Alexei me pregunta si es la primera vez que me voy lejos de casa. La expresión de mi cara vuelve a ser pensativa, seria.

En realidad vine a Shiogama hace ya diez años —respondo—. Mis padres querían que heredase el hotel. Yo quería otras cosas. Jugar a rugbi, que era mi pasión, ver un poco de mundo… —Me encojo de hombros. Abro la boca un instante para decir algo, pero después de dudar unos momentos ladeo la cabeza, visiblemente incómodo, y lo que sea que fuese a decir se queda dentro. Finalmente me animo a continuar hablando, aunque parezco haber redirigido la intención original de mi discurso—. Durante un tiempo me fue bien. Bueno, más o menos, pero no fue lo que yo pensaba. —Vuelvo a encogerme de hombros, con una sonrisa apretada en la cara—. Hace algo más de dos años vi que me había equivocado, y nada, me puse a estudiar para tomar las riendas del hotel. Así que en esas estoy, reconvirtiéndome en hotelero-barra-guía turístico.

Paso el resto del recorrido hasta la cafetería sumido en mis pensamientos, aunque atento a responder a cualquier posible pregunta de Alexei. Una vez en la cafetería, pido un té verde frío para mí, además de lo que desee Alexei, e insisto en invitarlo. Me dirijo con él a una mesa alta con taburetes y me siento en uno de ellos, dando un sorbito pequeño al té. Qué refrescante. Lo miro sonriente, el ánimo aparentemente recobrado.

Bueno, ¿y cuál es tu historia? Vienes de lejos, ¿no? ¿Qué tal la experiencia?

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14/02/2019, 18:01

Escuche con atencion todo lo que Ryota dijo sobre su familia y el hotel balneario, notandose un repunte de curiosidad sobre el tema cuando menciono que podria ir a visitarlos cuando quisiera, asi como ese punto donde crees que alguien va a preguntar algo pero no lo hace cuando dijo que tenia una hermana. El golpe en el hombro me mueve levemente del sitio, mas por la sorpresa, que por la fuerza en si y no puedo mas que sonreir, hasta el punto de mostrar los dientes. Obviamente no me habia molestado. - Sera un placer avisarte en caso de ir por alli, no lo dudes. Pero creo que en lugar de un descuento, prefiero un paseo turisitico por la zona con algun guia local - Me rei de nuevo, demostrando que sin duda le iba a tocar pringar como siguiera siendo tan amable.

Fui consciente de que habia algo mas, pero no crei que fuera buena idea preguntar, cuando recien lo habia conocido, pero se le veia distraido por algo.

¿Tu crees? Si, sin  duda que si... - Aunque hubieras mencionado lo de que era una broma, yo mantuve por un momento un semblante serio. - Ademas si la lio mucho, siempre puedo venir a refugiarme por aqui ¿no? - Fue en ese momento cuando acabe por sonreir, rompiendo mi seriedad anterior. - Ademas ya conozco de un hotel balneario donde no me buscarian... - Una sonrisa amplia, pero sin risa, mientras no duda en guiñarle un ojo, de forma simpatica.

De nuevo recibo por parte de Ryota una explicacion, por lo que estoy atento a sus explicaciones, aunque sepa que es dificil que vaya a acabar por alli en este viaje, pero en el futuro quien sabe. Es posible que acabe olvidando algunos de los nombres, pero otros, sobretodo los relacionados con el hotel balneario, los tendre presentes.

Una vez sin gota de liquido en nuestras botellas, nos ponemos en camino. Mi pregunta vuelve a traer un semblante serio al rostro de Ryota, aunque mas bien diria pensativo. Aunque tengo curiosidad, no quiero darle mas vueltas y prefiero esperar a ver si lo acaba diciendo el por su cuenta. Al fin y al cabo son un recien conocido.

Le escucho y soy consciente del momento incomodo que sobresale por un momento. Le dejo espacio y me mantengo en silencio, para que sea el mismo el que continue hablando cuando lo considere oportuno. - Se suele decir que el hombre aprende a base de sus errores. Yo creo que aprende en base a sus experiencias, buenas o malas. Es cierto que los errores son los que mas suelen llamar la atencion de los demas, pero no son los demas lo importante, sino sacar de cada experiencia su lado positivo y negativo, ser capaz de comprender ambos y aprender y mejorar en base a ello. - En ese momento, soy yo el que pone cara algo seria, incluso incomoda, como si estuviera recordando por un momento, algo negativo. Es solo un momento, antes de desviar la mirada hacia la cafeteria que se ve a lo lejos. - Tomaste un camino, y no fue como esperabas... pero si no lo hubieras tomado e intentado, ¿quien sabe donde estarias ahora? Las otras alternativas pueden parecer mejores ahora,  pero no tienen porque ser mejores, solo diferentes. Seguramente si no hubieras decidido venir aqui hace diez años... no nos habriamos conocido. - La sonrisa vuelve a mi rostro mientras devuelvo mi mirada  Ryota. - Un ruso menos que darte la paliza... - Sonrio amablemente, trasmitiendo tranquilidad y apoyo en cierta forma. Sin intentar saber mas del tema, a menos que el decida contarmelo.

Acabo rascandome la cabeza y sonrio mirando al suelo. - Siento como si igual me hubiera metido donde no me llaman. - Te miro de reojo de nuevo, siendo consciente de la cercania de la cafeteria ya. - Espero que no sea asi, pero creo que seras un buen hostelero-barra-guia turistico. - Un leve toque en el hombro. Suave, pero con confianza.

Dejo pasar unos segundos antes de cambiar de tema. - Has dicho rugby... ¿Ese es el que se juga con armadura o sin? No soy un experto, pero creo que me gusta mas el de sin, aunque a mi me partirian en dos en nada.

Pedimos nuestras bebidas y nos sentamos en una de las mesas. En mi caso prefiero pedirme algo de agua con sabor a limon, pero sin gas. Viendo como Ryota parece haber recobrado el animo tras el primer trago de te, me preparo para contestar a sus preguntas cuando las lanza, es lo minimo. - Si, vengo de Rusia, mas concretamente de Moscu. - Miro a mi alrededor. - La verdad es que esta siendo muy intensa y me esta gustando mucho. Aprendi el idioma antes de venir y me defiendo dentro de lo que cabe, con lo que todo resulta bastante mas entretenido, al poder perderme por la ciudad sin problemas. Asi que podemos hablar en japones si quieres, asi me ayudas a mejorarlo... aunque el ingles no me molesta. - Sonrio levemente, mientras le doy un suave trago a mi bebida.

He estado casi toda mi vida en Rusia, aunque antes de empezar la universidad pase dos años en Inglaterra, para perfeccionar el idioma y de paso, como diria mi padre, hacerme un poco al mundo y vivir sin las facilidades de tener a mi familia al lado. - Sonrio tranquilamente, mientras mi mirada se pierde por un momento mas alla del hombro de Ryota.

Cuando devuelvo la mirada, decido centrarme en lo que antes me ha llamado la atencion. - Antes has dicho que tenias una hermana. ¿Esta ella tambien en la ciudad o esta con tus padres? - Se notaba que el tema familiar, me resultaba interesante.

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14/02/2019, 20:05

Absorto, escucho con atención a Alexei mientras da su punto de vista de mis decisiones vitales, de los aspectos positivos y negativos de las experiencias y de cómo es uno y no los demás quien ha de valorar y sacar conclusiones de ellas. Tiene razón. Las cosas que nos han pasado son las responsables de cómo somos, de quiénes somos. No esperaba que la conversación fuese a ponerse tan profunda, pero no puedo por menos de estar totalmente de acuerdo con él. Al final hace una broma que me deja pensando. Mi propia sonrisa es el reflejo de la suya.

Vaya, vaya, vaya. Menudo pico tienes, chaval. Desde luego podrías vender hielo a los pingüinos. —¿O era a los esquimales? Una vez más, Alexei se muestra cauto, dudando de la pertinencia de su reflexión—. Para nada, Alexei. Gracias por tus palabras. A veces no hay nada como una opinión neutral para que te vuelvas a encarrilar. —Me dice que sería bueno en mi carrera—. ¡Gracias, hombre! Tú también serás un buen presidente. Si alguna vez voy a vivir a Rusia, te votaré seguro.

Agradezco que el ánimo de la conversación se haya aligerado, y tomo nota mentalmente de que debo tener más cuidado con importunar a los demás con mis cosas. Alexei entretanto expresa sus dudas sobre el equipamiento que se utiliza en el rugbi.

No, no, en el rugbi no se usa «armadura». Eso es en el fútbol americano. Nosotros a veces usamos algo de protección ligera por debajo de la ropa y en la cabeza, tobilleras, canilleras… Aunque casi siempre salimos sin nada. Bueno, con ropa sí, claro —me corrijo inmediatamente, riendo—. Eso sí, una funda para los dientes siempre es muy recomendable si quieres conservar tu bonita sonrisa.

Ya en la cafetería, mientras degustamos nuestras bebidas, Alexei me habla de sus orígenes, de su trayectoria estudiantil y de los idiomas que ha aprendido, por los que parece sentir un gran interés. Acepto su propuesta de que continuemos nuestra conversación en japonés, para ayudarlo a practicarlo.

En un momento dado me pregunta por mi hermana, lo que me arranca una sonrisa. Mis ojos, sin embargo, se desvían a un lado, al lugar invisible reservado a los recuerdos.

No, Kyoko está en Yuzawa. Alguien tenía que quedarse para ayudar a mis padres con el hotel, sobre todo después de… —Dejo escapar un suspiro por la nariz, y me doy cuenta de que quiero contárselo. Carraspeo—. Sobre todo ahora que sé que mi padre está enfermo. Pronto me necesitarán a mí, y por eso tengo que estar listo cuando ese momento llegue. —Me quedo en silencio unos segundos, más melancólico que preocupado, al menos en apariencia. Entonces sonrío, decidido a no permitir que la gravedad se instale otra vez en la charla. Doy unos golpecitos en la mesa con los nudillos—. Bueno, ¿y tú qué? ¿A quién has dejado atrás en Rusia? ¿Alguna amiga especial? —Mirada pícara—. ¿Más de una?

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17/02/2019, 11:08

La reaccion de Ryota me pilla desprevenido. ¿Venderle hielo a los pingüinos? Eso es... no se pero tiene gracia. Sonrio de manera simpatica y halagado, porque aunque no lo entiendo del todo, creo que medio entiendo lo que dice, es como un elogio. Asiento cuando acepta mis palabras sin tomarselas a mal, ni entender que me he metido donde no debo. La verdad es que cada vez me cae mejor el grandote. Acabo riendo ante lo de presidente, no se si ese es mi camino, pero aun asi tiene gracia, sobretodo porque no podria votar aunque viniera a Rusia. - Lo tendre en cuenta, quizas te use como reclamo publicitario para los extranjeros de alli. - La sonrisa se vuelve picara, simpatica, de las que dejan claro que estoy de broma.

Sonrio levemente, mientras escucho con atencion las palabras de Ryota sobre el rugby, entendiendo poco a poco cual es el deporte al que se refiere. - Si, si, menos mal que salis al menos con ropa, sino seria todo un espectaculo. - El fisico de mi compañero es mas que notable, no hay que ser muy listo para adivinar los musculos que lo componen. - Yo creo que aun con funda, me quedaria en la grada animando, o si te veo jugar, animandote, pero la parte de darte de golpes te la dejo a ti.  Yo te consigo a unas animadoras.- Aunque estoy en forma, no tengo ni una sola posibilidad contra las moles que he visto que juegan a ese deporte.

No tardamos una vez comenzamos a beber con tranquilidad nuestros refrescos, en cambiar al japones y es algo que agradezco con una leve inclinacion de cabeza cuando él comienza el cambio de idioma. Noto el cambio en sus ojos al hablar de su hermana y entiendo y comparto eso, su mirada se desvia, recordando algo supongo, asi que me callo y espero, a que decida hablar.

Kyoko. Bonito nombre. Escucho hasta que noto que algo pasa. Se detiene y suspira de una forma que indica que pasa algo y no bueno. Sus palabras agrandan levemente mis ojos, mientras mi sonrisa desaparece y mis labios se convierten en una fina linea. Soy consciente de que parece ligeramente ausente, seguramente pensando en su padre. - Siento mucho oir eso Ryota, de verdad que si. - Acerco mi mano y la coloco muy suavemente sobre la suya, en un gesto inquivoco de apoyo emocional. Solo son unos segundos, antes de retirarla. Es un gesto muy leve. - Lo estaras. No me cabe duda. - El tono aunque algo mas formal, tambien esta lleno de conviccion, ni siquiera tengo claro por que, pues acabo de conocerlo, pero parece justamente de ese tipo de gente. Confiable, solido.

Aun asi como es normal, no quiere profundizar mucho en el tema, por lo que no tarda en cambiar de tema. Sonrio muy levemente, y le sigo la corriente. Que menos. Mas tus preguntas me provocan desazon, mi mirada se gira hacia la derecha levemente y abajo, mientras un leve gesto, provocado por algun mal recuerdo, cruza mi rostro por un momento. Leve, eso si. - Si... quiero decir que he dejado a alguien atras,  pero no, no hay nadie especial. Ya no. - Notas un leve gesto como de decepcion por un momento, antes de desecharlo y mirarte a los ojos. Le doy un breve trago a mi bebida, mientras trago y desecho los malos pensamientos, creia que eran agua pasada, pero me ha pillado a contrapie. Maldito Ryota, menuda punteria.

Acabo por sonreir de nuevo, como si todo hubiera pasado. - Nada especialmente malo, complicaciones con la que era mi novia hace un tiempo, por culpa de terceros. - Una leve sonrisa y una mirada baja a mi bebida. Agua pasada. - Ahora bueno, tengo amigas... si, pero ninguna en ese sentido. - No es del todo cierto. - Aun asi mi mejor amiga sigue alli, suelo hablar con ella a menudo. Tasha. - Espero a ver si tiene alguna pregunta, no me importara contestarla, simplemente supongo que el momento ha provocado que bajara mis defensas y me ha pillado en un momento bajo.

Por cierto... antes no lo he mencionado, pero yo tambien tengo una hermana mayor llamada Ekaterina y un hermano menor, Dimitri. Los dos estan en Moscu. - Sonrio al recordarlos a ambos, he estado tiempo fuera de casa, pero siempre me alegra volver a verlos. - ¿Y tu que? ¿Alguien especial en tu vida? - Sonrio tambien de forma picara, como tu has hecho antes.

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17/02/2019, 18:39

En el momento en que Alexei posa su mano sobre la mía, me quedo paralizado, con una expresión de vago desconcierto, y de pronto mi boca está tan seca que no puedo hacer otra cosa que tragar, incrédulo. Siento como una bola de plomo en mi estómago, que sube rápidamente para convertirse en un fuerte hormigueo que trepa por mi cuello y mis orejas, y sé que debo de haberme puesto rojo. El primer impulso que me pasa por la mente es el de apartar la mano como si me hubiese mordido una serpiente, pero para cuando este instinto llega ya es demasiado tarde, y no acierto a reaccionar; además, probablemente el gesto quedaría incluso más inapropiado, o llamaría aún más la atención. Así que, en vez de eso, me quedo congelado en el sitio, mirándolo, preguntándome si esto es algo habitual en su país (¿en Rusia?, ¡imposible!), si debo de estar entendiendo algo mal…

… Y entonces, tan rápido como ha venido, el momento pasa. Alexei retira su mano como si nada, dejándome mudo y con cara de confusión. Ni siquiera oigo lo siguiente que dice. Repentinamente autoconsciente, arrastro la mano por la mesa hasta recogerla en mi regazo, asintiendo a lo que sea que haya dicho. Pero tengo que hacer algo o se dará cuenta, de modo que me esfuerzo por sonreír y cambiar de tema, preguntándole por sus seres queridos y si tiene alguna novia, como si tal cosa, como si no hubiera pasado nada.

Vaya. Ahora es el turno de Alexei de adoptar un talante taciturno. Evita mi mirada, y solo entonces me doy cuenta de lo raro que es eso en él. Me cuenta que sí, que tenía novia, pero que hubo problemas. Alguien se metió en medio, como siempre ocurre. Me habla de su mejor amiga, Tasha, y de sus hermanos, Ekaterina y Dimitri. Por algún motivo, no sé por qué, me viene a la cabeza que, por su construcción, Ekaterina perfectamente podría ser un nombre japonés. Sonríe entonces abiertamente, y me siento aliviado por que el momento incómodo haya quedado atrás. Me devuelve la misma pregunta que yo le he hecho, a lo que dejo salir un suspiro.

Soy complicado —respondo. Muy específico, Ryota; eso podría significar cualquier cosa. De modo que, sonriendo, decido clarificar—. Siempre he sido un poco… «viejo» para estas cosas, en el sentido de que soy muy exigente. No me conformo con cualquier cosa que caiga. Doy mucho, pero pido lo mismo. Y supongo que pocas personas están dispuestas a eso. —Me encojo de hombros—. No sé, será que soy de pueblo.

Le doy otro sorbo pequeño al té, intentando no terminármelo demasiado pronto.

¿Y qué te parece la residencia? No está mal, ¿no? Yo podría seguir en mi casa, pero creo que eso me dificultaría un poco socializar con los otros estudiantes del intercambio. Y además, así no me tengo que preocupar por hacer la compra. —Sonrío—. ¿Has hecho ya muchos amigos?

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20/02/2019, 16:24

Noto un cambio desde el momento en que pongo la mano sobre su mano. ¿He hecho mal? Se supone que es algo habitual en otras partes del mundo, aunque en Rusia podria quedar extraño entre dos hombres. Mas él me ha contado lo de su padre, eso implica que somos no cercanos, no me atreveria a decir algo tan fuerte, pero eso no es algo que se diga sin mas... a un extraño. Seguramente no deberia haberlo hecho, pero se supone que es una forma de mostrar consuelo o apoyo emocional. Resulta dificil seguir el baremo de cada sociedad en ese tipo de cosas. No lo repetire, pero con el tema tratado, parecia lo apropiado.

Al retirar la mano, la llevo hasta mi bebida y la alejo sustancialmente de la zona mas comun de la mesa, por decirlo de alguna manera. Todo de forma sutil y sin mostrar demasiado, para no hacer de esto algo mas extraño. Solo espero que no se lo haya tomado a mal.

El momento se rompe y de que forma. Joder. Le explico por encima el tema, no hace falta entrar en detalles, pero parece entenderlo y no hace mas preguntas, lo cual es de agradecer. Aun asi es lo minimo, sobretodo tras lo que él mismo me ha contado.

Escucho atentamente lo que dice, desviando apenas mi mirada de él, pero en ningun momento mi atencion. Solo para que no se sienta observado muy directamente. - No creo que seas viejo, al menos no me lo parece. Esta bien ser exigente. - Me muerdo ligeramente el labio, por un momento y miro la botella que tengo delante. - Tener unas ideas claras sobre lo que se quiere, incluso en algo tan personal como una relacion, demuestra madurez, no vejez - Le doy un breve trago a mi bebida, con una ligera sonrisa. Mezcla de algo de humor por el ritmo de las palabras, pero tambien con un toque de profundidad, por la realidad descrita.

Yo... no sabria si definirme de igual manera, pero quiero pensar que encontrare a una mujer por la que merezca perderse sin importar nada mas que los dos. - Rei levemente por lo bajo. La libertad estaba... muy bien la verdad. Mire en direccion a la ventana. Habia un punto de ilusion en mi mirada y en mi sonrisa. - Sienta bien, muy bien, poder elegir un camino y que te dejen recorrerlo. - Por el tono parecia mas un pensamiento expresado en voz alta que otra cosa. Aun asi ese pequeño chiste, me hace acabar por devolver mi mirada a Ryota. - Si eso es cierto, quizas seria mejor si todo vinieramos de pueblo. - Una sonrisa amigable y tranquila, que deja atras el momento de introspeccion atras.

Se me notaba a gusto, una vez dejado los temas profundos atras, aunque ni en esos momentos habia vacilado, poco a poco mi sonrisa se hace mas amplia levemente. - La residencia esta muy bien. No tengo queja ninguna, aunque me se de alguno que podria intentar no poner la musica como si tuviera que despertar a todo un ejercito. - Una risa breve, seguida de un sorbo pequeño de mi bebida.

Cocinar esta bien, aunque es cierto que es mas comodo que te hagan la comida cada dia. De vez en cuando esta bien destensar los dedos y probar de cocinar algo. - Sonrio levemente. - Aunque no todos los dias eh. - Niego levemente ante su ultima pregunta. - La verdad es que no, aun no he tenido tiempo de conocer a casi nadie. Podria decirse que eres la primera persona con la que hablo tanto rato seguido, aun estoy aclimatandome. La verdad es que me parece que los compañeros de residencia, son todos interesantes y espero ir conociendo a mas gente con el tiempo. La mezcla cultural puede dar lugar a muchos momentos interesantes y graciosos. - Otro trago de la bebida. - ¿Y tu? ¿Mucha gente conocida?

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20/02/2019, 20:15

Escucho a Alexei con atención. Por su manera de hablar transmite la sensación de ser un tío muy en condiciones, fiable. Lamento un poco el momento incómodo que se ha producido antes, y me gustaría poder volver atrás y hacer como si nada. Solo espero que sepa que no ha sido su culpa.

¿Verdad? ¡Son superruidosos! —exclamo, con los ojos muy abiertos, cuando Alexei habla de nuestros compañeros de residencia—. Se les va la pinza. Algunas tardes tengo que ir a estudiar a la biblioteca, porque en mi cuarto es imposible. —Me pregunta entonces si conozco ya a mucha gente de la resi. Encojo un hombro, con una sonrisa ladeada—. Bueno, ya te habrás dado cuenta de que me encanta hablar. Normalmente, cuando llego a un sitio, intento conocer a todo el mundo, y que todo el mundo me conozca a mí. Es la mejor manera de empezar a encontrar afinidades y hacer amigos. Me he hecho bastante colega de los dos hermanos chinos, Kueng y Niu Xu, ¿los conoces? Son muy majos. Y Samantha, la chica hafu*… La japonesa americana. No sé, todos parecen simpáticos. Mejorando lo presente —concedo con una inclinación de cabeza. De repente recuerdo algo—. Oye, ¿te molaría quedar alguna noche para ir de karaoke con algunos colegas?

Acabo por terminarme el té, y dejo el vaso vacío sobre la mesa.

Bueno, ¿te animas a seguir con la visita?

Notas de juego

*Hafu: Derivado del inglés half (medio, mitad). «Hafu» es como los japoneses denominan a aquellos individuos de herencia étnica mixta, mitad japonesa y mitad extranjera. Nótese que no es un término despectivo ni discriminatorio, sino de identidad cultural: los hafu japoneses se denominan a sí mismos empleando esta palabra.

Una pregunta: ¿cuánto deberíamos extender la escena? Que conste que la estoy disfrutando mucho, pero creo que nuestra relación ha quedado bien establecida y definida :).

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21/02/2019, 12:32

El asentimiento generado por tu reaccion a lo de la musca es mas fuerte, hecho con mas firmeza, dejando claro que estoy mas que de acuerdo contigo. - Si, si que lo son. - Rio levemente. - Aun no he ido a la biblioteca la verdad, pero si he ido a alguno de los jardines para estudiar tranquilo bajo el sol, o mas bien a la sombra mientras hace sol alrededor. - El color de mi piel dejaba claro que igual demasiado del astro rey, provocaria que me pusiera como un cangrejo.

Abro los ojos en plan sorpresa. -Si? te gusta hablar? No me habia dado cuenta. - Una pequeña risa que mueve ligeramente mis hombros, mientras busco de nuevo la botella. - No te preocupes, me pasa igual. - Sonrisa amplia. Por si no se habia dado cuenta ya.

Le escucho con detenimiento, pasado el momento de broma y voy asintiendo levemente hasta que menciona lo de hafu. Se nota mi sorpresa por no entender a lo que te refieres, aunque no dudas en explicarlo cuando te pregunto*. La sorpresa no se va, porque es algo que sin duda me sorprende. - Todos parecen simpaticos. Creo que he visto a Kueng, o me suena haber oido su nombre, pero seguro que no tardo en verlos a los tres. Por cierto... - No parece un tema delicado en japon, pero sin duda en otros paises lo es. - he notado que cuando dices hafu, no hay connotaciojn negativa en el tono. Es una sorpresa sin duda, porque no es asi habitualmente en otras culturas. Me has sorprendido vamos, pero para bien... - Sonrio mientras casi termino mi bebida. - Es lo bueno del intercambio, conocer nuevas culturas y creo que en Europa, por mas que nos la damos de civilizados, deberiamos aprender algunas de las costumbres de los paises de Asia. - Se notaba mi sorpresa en ese sentido, pero tambien como un pensamiento interno estuviera tomando la forma de idea.

Gracias, gracias... parece ser que a ti tambien se te da bien las palabras. - Un leve asentimiento, algo mas formal, que denota mi agradecimiento por tus palabras, obviando el tono de broma de las mismas.

Tu invitacion me hace reir. - Karaoke? No puedo decir que este familiarizado con ello la verdad, pero no veo porque no. Suena divertido, asi que puedes contar conmigo... solo espero que al menos sea cantar en ingles. - Rio algo mas, mientras la bebida ya esta a punto de terminarse. - Incluso me hare alguna foto si eso, a Tasha le hara mucha gracia.

Observo como deja su bebida y yo me termino la mia, justo antes de recibir la invitacion. - Por supuesto... pero tu guias. - Hago un leve gesto de caballero, indicandole que pase delante. Tiene parte de humor, parte de formalidad. - Que toca ahora?

Notas de juego

*Tomo la explicacion de abajo, como que al preguntar, le respondes. Espero no sea problema.

Jajajaja, yo tmabien la estoy disfrutando mucho. Como tu gustes :) Si quieres dar el salto a otra escena, o mirar de hacer la del karaoke por mi bien.

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22/02/2019, 23:24

Bueno, la palabra hafu en sí no tiene connotaciones negativas —me siento obligado a aclarar cuando Alexei quiere saber más sobre este término—. Como te digo, ha sido reivindicada por la propia comunidad hafu aquí en Japón, que por cierto, una de cada treinta personas nacidas en Japón es hafu. Otra cosa son los prejuicios que puedan existir hacia ellos. —Me encojo de hombros—. Japón tiene muchas cosas muy buenas, pero tiene una mentalidad muy, muy conservadora. Hay cierta desconfianza por todo lo que se salga de lo tradicional, de la norma. Por suerte las cosas están cambiando poco a poco, pero aun así… No es que ser hafu se vea como algo malo, pero mucha gente opina que, si no tienes dos padres cien por cien japoneses, tú eres menos japonés, y se te asumen ciertas ideas fruto de influencias culturales que pueden chocar con la forma de pensar general. Algo así. La verdad es que no lo entiendo muy bien. —Me froto la nariz, empezando levantarme de mi taburete, dispuesto a reemprender la visita al museo. Tiene gracia que le hable a un ruso de lo conservador que es mi país; me pregunto cuál será su opinión al respecto—. Por mi parte, cuando digo que alguien es hafu, no quiero decir nada malo. Solo me refiero a que tiene parte japonesa y parte de fuera. Y eso no es ni bueno ni malo, ¿no?

Pasamos buena parte de la tarde dando vueltas por el museo, viendo todas las exposiciones visitables. La verdad es que el Tohoku no es muy grande, pero hay tantas cosas que ver y tan interesantes que las horas pasan como si nada. Durante ese rato, Alexei y yo continuamos con nuestra amigable charla, haciendo comentarios y alguna que otra broma hasta el final de la visita. Volvemos juntos a Shiogama en el brevísimo viaje de tren. Aún falta un buen rato para que oscurezca cuando llegamos a la residencia universitaria.

Bueno, pues ha sido un auténtico placer —le digo con un asentimiento vehemente—. En estos días voy a organizar lo del karaoke, a ver si consigo enganchar a alguien más. Ya verás, ¡es muy divertido! —Sonrío ampliamente—. Ahora voy a estudiar un ratillo antes de la cena, así que supongo que ya nos veremos. Ah, y por cierto, cuando quieras podemos quedar en el polideportivo para entrenar, si tienes ganas.

Después de despedirme, me dispongo a volver a mi habitación. Tengo que aprovechar bien el tiempo si quiero ir bien en el curso, así que unas horitas de estudio no me irían nada mal.

Notas de juego

Pues por mí ya. Cierra tú la escena como quieras :).

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26/02/2019, 18:05

Escuche atentamente los detalles que involvian el termino hafu, no pudiendo mas que mostrar una leve sonrisa mientras mi mirada se desplazaba a mis manos por un segundo cuando mento que Japon era una sociedad conservadora. No tarde en levantar mi mirada hasta Ryota de nuevo. Eso era algo que sabia, no tenia duda de ello porque sin duda se parecia o por lo menos tenia una mentalidad similar a la de mi hogar. Era un Shishkin, teniamos raices en la Madre Rusia desde que se llamaba URSS. Mi familia no era de las que aceptaba muy bien los cambios, es mas si no fuera por todo lo que habia demostrado ni me hubieran dejado ir a Inglaterra, ni mucho menos venir a Japon. Despues de todo, todos aquellos que no eran realmente rusos, pero rusos de verdad, solo podian aceptar que habia sitios donde nunca serian invitados por poderosos o fuerza que tuvieran... eso, por quedarse cortos. En Inglaterra habia visto una libertad en muchos campos que no existia en mi pais y aunque no la condenaba, ciertamente en algunos aspectos me era mas facil la vida en Rusia.

Tras terminar de explicar el termino incluyo su opinion y yo negue con la cabeza. - No, la mezcla no es mala. - No lo era en si misma. Se notaba que no parecia molestarme la mezcla en si. - aunque sin duda dependiendo de en que circulos es posible que se vea de otras maneras, o simplemente seas excluido, aun sin saber por que... - Era peor cuando alguien te lo explicaba, habia estado en una situacion similar y no habia sido agradable para aquella persona. Habia tranquilidad en mi tono, pero parecia saber de lo que hablaba. Mi sonrisa decayo levemente. - Sin duda no soy quien para juzgar una cultura por ser conservadora. - Una sonrisa mas amplia, seguida de un encogimiento de hombros leve... y que aun asi sin duda tenia todos los visos de ser una broma.

La tarde paso de una manera admirablemente rapida. Disfrute de la compañia de Ryota, de la conversacion que daba, de las bromas y comentarios que nos arrancaban a los dos sonrisas mientras disfrutabamos del menudo museo. Incluso acabamos por volver juntos a la residencia, lo cual fue de agradecer porque por poco no me bajo dos veces en la estacion que no toca y casi me voy en direccion contraria justo antes de llegar a la residencia. Mas bromas y risas sobre esos hechos, sin que nada pareciese ir mal en ningun momento.

Lo mismo digo. - Una amplia sonrisa de las que emanan confianza y empatia. Sin duda era obvio que me lo habia pasado en grande. Acabe riendo ante lo del karaoke. - No esperes que sea ningun tipo de voz, ni nada por el estilo. La fiesta en Rusia va encaminada a otras cosas, los karaokes no son... muy habituales. - Eso era un eufemismo en toda regla. Mas alla donde fueres, haz lo que vieres. Aun asi sonrei dejando claro que no lo dejaria en la estacada, por raro que en realidad fuera para mi. - Vaya bien con el estudio y claro que si. - Entonces ante una de sus palabras, no dude en sacar mi movil. - Si quieres podemos darnos el numero, hara mas facil contactar. - Tras el intercambio de los mismos, sonrei para mi mismo por un momento. - Suelo ir casi todas las mañanas, pero te pegare un aviso, no te preocupes.

Veo como Ryota se va hacia dentro de la residencia y no dudo en entrar con él, aunque nos separemos para ir cada uno a su habitacion. Caminando en direccion a mi cuarto pienso que es una buena hora para llamar a Tasha. Nada mas entrar en la habitacion tendre una videollamada con ella. Fijo que se lo pasa bomba sabiendo que voy a ir a un karaoke.

Notas de juego

No problem. Pues ya esta! :D

Un placer leerte ;)

Cargando editor
02/03/2019, 15:00
Director

Notas de juego

ESCENA CERRADA

Por favoh que alguien me ponga en la escena adecuada la nueva escena a abrir. Si, se que lo puedo mirar yo, pero quiero que quede constancia.