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One Piece: La creación de un nuevo orden mundial

0. Prólogo de Sobek

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22/05/2022, 13:56
Sobek
Sólo para el director

Sobek en un momento de inconsciencia se adelantó a la Marina y se interpuso en trayecto de la bella mujer. - Y si pago yo su deuda? Él quedará libre? - No lo decía en tono amenazante aún que su aspecto de normal imponía. Mas bien era curiosidad, pensaba que era una posibilidad de hacer una acción buena por una vez en su vida. - Creo que ese hombre ha cometido un error y no puede pagarlo, pero si puedo pagarlo yo, quedará en libertad, verdad?.

Los miró bien a los dos de arriba a abajo, porqué estaba exponiéndose por un desconocido? Valía la pena todo aquello? Estuvo unos segundos dándole vueltas y llegó a una conclusión. Su acción podía cambiar el destino de un hombre que solamente tenía hambre, aún que por el tamaño de ese hombre estaba convencido de que el hambre que debía sentir era como la de diez hombres. Arrugó la nariz y apuró la última calada de su cigarro. 

Tengo un barco atracado en el puerto. No me iré de aquí sin pagar la deuda de ese hombre. - Sonrió, a veces dar información incompleta y obvia era sensación de seguridad, apoyándose en lo que era evidente la gente solía ceder. Solía.

Notas de juego

Espero que te parezca bien la intromisión :D 

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23/05/2022, 09:10
Bai Qu

El guardia se quedó atónito ante la proposición de Soberk y, aunque la mujer permitió que hicieran lo que quisieran los guardias, ellos no parecían tener una respuesta a aquel dilema, así que instaron al joven fumador a visitar al gobernador para que dictaminara su juicio. Uno de los guardias fue a buscarle inmediatamente y, tras unos minutos de espera, apareció el que presumiblemente era Bai Qu, el gobernador de Tortuga, un hombre entrado en años pero cuya presencia inspiraba un profundo respeto en los soldados que allí había.

- Soy Bai Qu. - Se presentó secamente, molesto por algo. - Y me han dicho que quieres pagar por los crímenes de éste hombre.

Haciendo una clara referencia al gigante apresado, pudiste ver que la mujer desconocida también se había quedado a ver aquel desenlace, mientras que los demás pueblerinos inconscientemente habían dejado un espacio bastante amplio entre ellos y Bai Qu e intentaban pasar desapercibido a sus ojos.

- Las leyes están para cumplirse. No todo se puede arreglar con dinero. - Sentenció el gobernador. - Si aceptas pasar junto a él la noche en el calabozo, ambos seréis libres por la mañana y daré vuestra deuda por saldada.

Aquel castigo parecía no ser tan severo como uno esperaría, ya que hasta los guardias hicieron un amago de contradecir a su gobernador, pero guardaron un estricto silencio.

- Va a salir un carruaje para allá en un rato, por si quieres subirte a él. - Zanjó el tema sin capacidad de réplica, pero aguardando una confirmación o una negativa a su propuesta.

Notas de juego

Sin problemas.

Como anotación, los guardias de la ciudad no son de la Marina. Es más parecido a un destacamento de pueblerinos que no parecen muy bien formados.

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23/05/2022, 16:16
Sobek
Sólo para el director

La espera se hizo un poco mas amena cuando decidió encenderse otro cigarro, con su intención mas amable se levantó de donde esperaba sentado cuando Bai Qu llegó dejando un buen espacio entre ellos.

Un placer señor gobernador. Mi nombre es Sobek. - Dijo cuando el hombre le dio algo de tiempo para presentarse, justo después le dejó continuar. Cuando acabó, Sobek no cambió su gesto amable, simplemente miró en dirección al gigante y sonrió con una amplia sonrisa de satisfacción. Poco después se acercó a Bai Qu aún sonriendo. - Está bien, me parece una sanción mas que justificable, voy a echar de menos esto pero... - Cogió su paquete de cigarrillos y se quitó el que tenía en la boca, apagándolo en la misma caja y guardando la colilla dentro. - Yo no me echo para atrás cuando tomo una decisión. Pasaré la noche con él. 

En ese momento le tendió el paquete de cigarrillos a algún guardia cercano y se volvió a girar hacia Bai Qu. Le clavó la mirada aún con la sonrisa en la boca. - Tratadme como lo trataríais a él, es lo mas justo. - Este alzó los brazos hacía Bai Qu y los miró, claramente estaba pidiéndole que lo esposara. 

Notas de juego

Lo siento master. Como buen friky de One piece que soy tenía que poner esto:

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26/05/2022, 02:53
Bai Qu

La mirada interrogativa de los guardias miraron a su gobernador, que no tardó en aceptar las condiciones de Sobek.

- Eso es extraño en estos tiempos que corren. - Dijo encogiéndose de hombros al tiempo que sacaba unas esposas para ti. - Vamos a tener los calabozos llenos estos días.

Con más suavidad de lo que cabría esperar, unos guardias locales te condujeron a la salida del local y, ya en la plaza exterior, te subieron a un carromato con unos cuantas personas esposadas más. El panorama era bastante decadente.

Dentro del carruaje, cinco eras los que allí estaban. Te acompañaban dos hombres y una mujer, aparte del gigantón que ya conocías y que no había pronunciado palabra alguna tras ser capturado y que ahora sus pequeños grilletes le habían tornado las manos rojas. De los desconocidos, había un joven muchacho de pelo marrón que por lo que habías oído de los guardias, había participado en una pelea en el bar, noqueando a un capitán experimentado. Un hombre trajeado, el cual habías visto en la sala de apuestas y se rumoreaba que se hacía llamar capitán Kaizen, cuya característica bandana le cubría la frente y los abalorios que llevaba le hacían llamar la atención. La joven poseía un pelo entre gris y plateado y portaba un arco de exótica manufactura a la espalda.

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26/05/2022, 15:38
Sobek
Sólo para el director

El joven fumador no opuso ningún tipo de resistencia, de hecho fue exhibiendo su cara de satisfacción en todo momento. Cuando Bai Qu se dirigió a él este solo alcanzó a contestar.- Siempre he pensado que el cambio empieza en uno mismo. - Le miró a los ojos con simpatía y no hizo ningún tipo de ademán ni movimiento extraño, cuando lo acompañaron parecía estar de tan buen humor que hasta le sonreía a los guardias. 

Una vez dentro del carruaje el rostro de Sobek cambió, ya no sonreía pero el buen humor lo llevaba por dentro, el intento de apuesta con el capitán había acabado de una manera bastante extraña. Los giros del destino inesperados le producían una excitación tan grande que simplemente se dejaba llevar por el momento, así le habían enseñado en su familia: A veces los muros que intentamos saltar tienen maneras mas fáciles de ser superados. Aquel era prácticamente el lema de su familia, una familia de la que solo quedaba el recuerdo. 

Se agarró a ese recuerdo para no dejarse llevar demasiado, aquel gigante le había llamado demasiado la atención como para no dejarse guiar por su instinto. Miró a todos a su alrededor y luego miró las esposas en sus manos - Serán de Kairoseki? - Nunca lo iba a saber ya que él no era un usuario, en cambio se había fijado en las manos rojas de su nuevo objetivo. Cuando acabó de pensar clavó la mirada en el gigante y con su voz mas amable le preguntó.- Tan buena estaba la comida? - No había atisbo de reproche en la pregunta, mas bien denotaba una curiosidad pura e inocente. 

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30/05/2022, 03:43

El gigante se encogió de hombros ante la pregunta de Sobek, dando a entender que su raciocinio no era tan grande como cabría esperar y por momentos parecía analfabeto, incapaz de comunicarse correctamente.

Cuando el carromato empezó a moverse, el chico que parecía más joven se presentó como Ash, para luego pedir a los guardias que aflojaran las esposas del hombre gigante que evidentemente estaba sufriendo en aquel castigo, aunque sin ningún éxito.

La chica joven, por su parte, se presentó con el nombre de Xan, alegando que habían sido un poco exagerados al apresarla para luego preguntar que habíais hecho para acabar allí.

Por su lado, el joven trajeado no emitía palabra alguna, ajeno a lo que ocurría en el carromato.

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30/05/2022, 16:00
Sobek

Suspiró en profundidad cuando no obtuvo respuesta del gigante, claramente no era lo que esperaba, pero había ayudado a un hombre en apuros y con eso le bastó. Le contentó el gesto de Ash ya que se había preocupado también por el enorme hombre. Formaban un grupo peculiar, pero al menos no parecían maleantes o dispuestos a iniciar una pelea, no encontró un motivo para mentir. 

Ese hombre ha comido demasiado y como no hemos podido pagarlo me han ofrecido pasar una noche de suite en el calabozo de la prisión junto a él. No creo que sea su culpa tener un apetito tan grande no? - Por suerte había desayunado antes de salir del barco, tenía la suposición de que a ninguno le iba a gustar la comida del calabozo, si es que les daban alguna. 

Vosotros estabais en la taberna cuando he desafiado al capitán Rosha a una apuesta verdad? - Alzó una ceja, curioso, algo mas debió pasar después de que él se marchara. - Parece que nuestro camino nos hace pasar la noche aquí. Espero que haya merecido la pena lo que nos ha traído a este lugar. - Miró con una sonrisa a Ash, que presentaba algunos signos de haber peleado o al menos eso había llegado a mis oídos.- No quiero saber como quedó el otro... - Dijo admirando las capacidades de combate del hombre, no las conocía, pero animarlo un poco le llevaría a hablar del incidente, o al menos eso le enseñaron en casa. 

Poco después miró a Xan. - Llevas un arco precioso a la espalda, pensaba que nos requisaban todo antes de ir al calabozo... Quizás no debería haber dejado mis cigarrillos. - Miró con tristeza unos segundos al suelo. - Pero bueno, así intento quitarme un poco de eso, que me tiene poseído. - Por último miró al hombre callado y trajeado. - Y usted siente la misma curiosidad por este gigante que yo, verdad?.- No las tenía todas con él, pero era inevitable no mirarlo con lo grande que era, quizás le funcionaría la estratagema. - Aún no he conseguido que me diga su nombre, pero seguro que tarde o temprano lo consigo. - Dijo refiriéndose al gigante. 

Había decidido dejarse llevar, si iba a pasar la noche en el calabozo, no se pensaba aburrir en prisión. - Por cierto grandullón, me llamo Sobek, si ahí dentro te pasa algo acuérdate de mi vale?. - Le sonrió desde el fondo de su corazón, estaban juntos en esto, si iba a pasar la noche en un calabozo por él, que menos que seguir con ello hasta el final. 

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02/06/2022, 17:13

El gigante intentó hablar con un lenguaje bastante rudimentario que no fuiste capaz de entender, por lo que descubriste que habías ligado tu destino esa noche a una persona prácticamente analfabeta incapaz de comunicarse correctamente con los demás, sólo con palabras sin enlazar, pero parecía que entendía tus palabras y te respondió con un amigable: Gracias.


Parece que los demás "huéspedes" no habían estado presentes con tu jugada con el capitán Rosha pues o bien estaban prestando atención a otra cosa o aún no habían llegado al lugar. Por su parte, Ash se reafirmó en su victoria contra el capitán Akama pero que, casi sin proponérselo, había acabado con él sin recibir ni un rasguño, haciéndolo el único culpable de aquella pelea visiblemente unidireccional.


El aún desconocido integrante se presentó como Kaizen, de forma seca y tosca y pronto volvió a girar su cara deseando no haber sido apresado con una gente tan charlatana.


Finalmente, el carruaje paró y todos bajaron al llano, pudiendo ver que se encontraban enfrente de una fortaleza cercana al mar, con un pequeño puerto con algunos barcos amarrados, la mayoría fuertemente armados. Allí, una mujer de rostro agudo y baja estatura recibió el informe de lo guardias, pero no llegaste a oír lo que decía, pero apuntaba todo en un cuaderno bastante ornamentado. Al lado de la mujer, tres guardias de evidente debilidad física, carentes de músculos y que enseguida os rodearon, haciendo que los prisioneros quedaran en una especie de círculo imaginario formado por los tres hombres, mientras que la mujer los encabezaba y el carromato volvía presumiblemente al pueblo del que os habían traído.

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02/06/2022, 18:27
Sobek
Sólo para el director

La gente del carro no parecía dispuesta a contarle mucho a Sobek, pero sin duda había aprendido que a Ash era mejor tenerlo a buenas. Por un momento sintió curiosidad, quien saldría airoso si pelearan?. Sonrió decidido y miró los grilletes una vez mas. En el nuevo viaje que había emprendido quizás llegaba el momento de luchar contra gente fuerte, quizás tocaba mentalizarse de que no todo sería charlar y pasear en barco. 

En cuanto al gigante no había mucho mas que decir, Sobek había intentado sacarle una espinita de información o conocimiento, su esfuerzo había sido en vano. Su corazón se hinchó cuando escuchó el Gracias del gigante y se decidió a protegerlo en la corta estancia de la prisión, a la salida si el destino no lo impedía se despedirían, al menos Sobek recordaría que hizo un buen acto con alguien que no se merecía ningún tipo de daño.

Al bajar del carro Sobek se preocupó por un aspecto, esto era un calabozo, no deberían los guardias aparentar fortaleza?. Arrugó las cejas y la nariz por un momento, hoy iba a ser la ejecución de los emperadores. Le parecía una buena idea pasar la noche en un sitio totalmente ajeno a la marina, pero la debilidad de los guardias le alarmó de que los calabozos quizás no era tan buen sitio para pasar la noche. Aún así no se resistió cuando estos interactuaron con él. Había accedido a esto voluntariamente, no había motivos para estar nervioso, Sobek ya había jugado sus cartas, tocaba esperar a la siguiente mano.

 

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05/06/2022, 08:52
Contramaestre Serin

Todos los presos siguieron tranquilamente a sus captores mientras guardaban silencio, salvo Ash, que lamentaba su condición y mostraba una actitud impertinente hacia los guardias a los que exigía explicaciones.

No fue hasta que la paciencia de la mujer que encabezaba la marcha se agotó que acabó concediendo una respuesta a todos los presos que allí estaban.

- Vais a pasar la noche en el calabozo y no se hable más. - Dijo evidentemente superada por la situación. - No quiero más problemas en un día tan importante. Os encerraré, esperaréis y mañana seréis libres, a menos que se agote mi paciencia y comunique vuestra muerte fortuita a las autoridades.

Aquellas palabras parecían una amenaza, pero viniendo de la pequeña mujer parecían más un intento de promover su autoridad que de realmente cumplir con aquellas amenazas.

Poco a poco os encaminabais hacia la fortaleza y ya en el límite de aquel edificio, pudiste ver como la mujer sacó un manojo de llaves y abrió, con increíble seguridad las puertas de lo que sería tu posada aquella noche.

Las dependencias estaban poco iluminadas y pronto la mujer sacó una vela de su mochila y la prendió, alumbrando su propio camino y dirigiéndolos hacia donde sólo ella sabía, seguida de sus tres infatigables guardias.

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05/06/2022, 19:09
Sobek
Sólo para el director

Sobek no cedió de su sitio cuando Ash replicaba contra los guardias, no tenía que solucionar todos los problemas del mundo, lo sabía bien. Miró con diversión aquella escena, no iba con él, todo lo que pasara a su alrededor era mero espectáculo. 

Se cuadró cuando la Contramaestre se giró. No le imponía mucho respeto, pero algo en las palabras de la mujer le provocó un sabor amargo en su pensamiento. - Nos van a soltar a todos mañana? - Pensaba que ese pacto se aplicaba solo a él y al gigante. - Estoy totalmente seguro de que esta noche va a pasar algo. - Miró de arriba a abajo a la Contramaestre y se fijó con suma precisión en las llaves que había sacado. - Míralas bien, esas llaves son la puerta de la celda, si pasa algo, serán las llaves para sacarnos a todos de aquí. -  Aun que Sobek estaba convencido de que solo las usaría si su vida corría peligro, un peligro que no pudiera afrontar.

Continuó caminando en la formación y comprobó lo oscura que estaba aquella zona, lo suficiente como para tener que alumbrarse con vela. Aún no sabía como iba a ser su celda, pero en su búsqueda de soluciones a problemas inventados Sobek pensó en la fuerza del gigante. - Si nos tienen encerrados, no podría ser posible que si pasara algo el gigante derribara los muros? - Era una idea maravillosa, si no existiera el inconveniente de que el gigante a penas parecía poder sumar dos números impares. Continuó pensando.

No pienses demasiado, no trae nada bueno... - Se dijo a si mismo, negando con la cabeza, estaba demasiado enfrascado pensando en posibilidades catastróficas. Solamente debía permanecer tranquilo en su celda. - Entretente como puedas. - Pensó Sobek antes de llegar al tramo final.

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09/06/2022, 02:47

Tras deambular unos pocos minutos por aquella oscura fortaleza, la mujer pareció llegar a su destino, donde fue metiendo a los cinco prisioneros en distintas celdas colindantes, separadas por una pequeña pared de piedra que conformaba todas las paredes de la fortaleza. Algo que llamó tu atención fue que no os quitaron las esposas en ningún momento, pero tampoco ningún efecto personal.

Una vez todos estuvieron encerrados, la mujer habló con sus hombres un momento antes de que sus caminos se separasen, haciendo que la contramaestre se dirigiese más al interior de la fortaleza, mientras que sus hombres se encaminaron a la salida.

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09/06/2022, 13:32
Sobek
Sólo para el director

Antes de irse la contramaestre Sobek rompió su silencio. - CONTRAMAESTRE! - Intentó llamar su atención una vez encerrado y enseñó las esposas. - Yo no tengo ningún inconveniente en llevarlas. Pero mi compañero el gigante va a perder las manos si pasa toda la noche con los grilletes puestos. - Le diría si se acercaba. - Hemos acatado pasar la noche sin rechistar, pero me gustaría poder darle un apretón de manos a mi compañero cuando partamos. 

No lo dijo con tono desafiante, mas bien de preocupación. Se había jurado velar por el bienestar de ese enorme hombre y a veces la miel atraía mas a las moscas que la mierda, iba a comportarse. - Así que si hay que atarnos con cuerdas, cadenas o lo que sea te lo pido por favor, hazlo. Bai Qu me aseguró que compartiríamos el mismo trato y me pareció un hombre lo suficientemente honorable como para asegurarse del bienestar de ese hombre.

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13/06/2022, 10:51
Contramaestre Serin

La contramaestre se giró con una pequeña mueca de desagrado, pero rápidamente asintió a uno de sus guardias.

- Ha venido pacíficamente, no hay razón para no hacerlo. - Dijo para luego ordenar a tu compañero que se acercase a la reja y, una vez allí, pudo librarle de sus grilletes.

Tras aquella obra, la mujer se adentró en la oscuridad de la fortaleza mientras el gigante soplaba a sus manos, que se habían hinchado un poco, haciendo aún más notable el tamaño de aquel hombre. 

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13/06/2022, 13:47
Sobek
Sólo para el director

Sobek sonrió aliviado cuando le quitaron los grilletes al gigante, era enorme, o al menos lo que podía ver de él desde su celda. La sonrisa se difuminó cuando vio que a él no se las iban a quitar, Bai Qu sería un hombre de palabra, pero su gente quizás no tanto. 

Ahora estarás mas cómodo. - Dijo en alto para que él gigante pudiera escucharlo. Se apoyó en la pared de su celda y se sentó. Había sido mala idea renunciar al tabaco. - Orgulloso y emocionado... Así nos va. - Pensó mientras suspiraba profundamente. Ahora solo quedaba esperar. 

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17/06/2022, 15:15

Podías oír susurros de la oscuridad del lugar, pero nada de la celda del gigante, que era la única contigua a la tuya salvo quizás un ligero llanto casi imperceptible.

Notas de juego

Te actualizo poco para poder dejar avanzar la trama un poco más antes de que transcurran los siguientes eventos.

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18/06/2022, 16:48
Sobek
Sólo para el director

Notas de juego

Tenia la sensación de que había llegado antes de lo previsto a mi destino, tampoco hay mucho mas que vaya a hacer, esperar tranquilo en la celda era la intención hasta que pasara alguna cosa.

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22/06/2022, 03:14

Cuando te acostumbraste a los ruidos del lugar, en una posición más cómoda que diera paso al descanso, pudiste oír partes de la conversación que mantenían otros presos en aquel lugar.

Al parecer, uno de ellos, aunque no identificabas quién, estaba buscando tripulantes para su nueva tripulación, mientras que la voz femenina, supuestamente procedente de la única mujer que os había acompañado parecía estar interesada en esa proposición.

Por otro lado, otra de las voces masculinas estaba alentando al hombre gigante a liberarse, añadiendo que con su fuerza esas celdas en las que se encontraban no deberían ser mayor problema, pues aunque los grilletes fueran irrompibles, no eran así aquellos barrotes. Sin embargo, el hombre grande al que había ligado tu destino parecía hacer oídos sordos a aquella conversación y podías escuchar débiles sollozos desde su celda.

Cargando editor
22/06/2022, 15:19
Sobek
Sólo para el director

Sobek se había mantenido distraído pensando en tonterías, su mayor tiempo libre lo pasaba pensando en que tipo de Fruta del Diablo le gustaría obtener. Eran una fuente de poder inmensa y abría las puertas a muchas posibilidades que los humanos normales no eran capaz de alcanzar, o al menos eso creía él. 

Estaba imaginándose como sería tener una zoan de un perro o de un cocodrilo y que forma tendría cuando escuchó voces ajenas a los presos. No hizo mucho caso, hasta que se lo hizo. Habían asaltado la prisión? Porqué los guardias no habían hecho nada? Y la contramaestre? 

No le gustó ni un pelo todo aquello pero se mantuvo callado hasta que alguien empezó a incordiar a su amigo el gigante. - Eh, vosotros, dejad de molestarlo! - Llegó a exclamar, se paró delante de los barrotes para ver quien tenía la desfachatez de molestarlo. - Él viene conmigo y hemos decidido pasar la noche aquí tranquilamente. Si queréis hablar con alguien es conmigo. No tiene nada que ver con esto y no tiene maldad alguna, no vais a conseguir nada de él.

 

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28/06/2022, 07:10

Las palabras de Sobek hicieron que su desconocido interlocutor rechistara y permaneciera en silencio desde ese momento.

Sin embargo, del pasillo por el que había ido la contramaestre anteriormente salió una sombra mucho más corpulenta, un hombre fornido del que apenas se podía ver el contorno. Sin ser capaz de reconocer ninguna de sus facciones en aquella oscuridad, aquel ser arrancó las puertas que encerraban a todos los allí presentes con una facilidad pasmosa, continuando su camino como si nada y dejando a aquellos cinco presos que hacían un tiempo que estaban encerrados libres.

Ni siquiera sabes por que, pero un instinto primitivo te obligo a permanecer en tu celda en silencio hasta que aquella mole musculosa estuviera lo suficientemente lejos, incapaz siquiera de oír sus pasos, ahora eras libre. Por desgracia, las cadenas aún sostenían tus muñecas y no te librarías tan fácilmente de ellas.

Notas de juego

Perdona el retraso en esta actualización.