Partida Rol por web

Thanes de Carrera Blanca

1. Consejo de Thanes.

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07/04/2014, 02:05
Suro

Suro bajó ágilmente del caballo y con un gesto rápido enredó las riendas en una rama cerca, escabulléndose a continuación en las sombras buscando rodear al jinete solitario, simplemente para comprobar que realmente era eso y solamente eso. Al mismo tiempo, agradecía la interrupción para no tener que seguir escuchando la absurda cháchara de sus acompañantes, una cosa era decir tonterías en una taberna y con suficiente cerveza encima, y otra era hacerlo mientras cabalgaban de noche por Skyrim, con los peligros que eso conllevaba. Y más en una misión secreta... o no secreta... mierda, todavía no tenía ni zorra idea de a qué demonios iba. Toda aquella mierda de tejemanejes políticos se le escapaba, su mundo era más sencillo, acechabas a una presa y la cazabas, y con un poco de suerte había algo de valor tras ella.

Notas de juego

¿Hago tiradas o las haces tú?

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07/04/2014, 11:30
Volshyene

No habían pasado más que unas cuantas horas y ya echaba de menos su cama y su casa caliente. "Me estoy ablandando mucho", pensó Volshyene, aunque lo cierto es que también disfrutaba del viaje nocturno. El gélido aire le parecía estimulante, y el cielo tachonado de estrellas le traía recuerdos del pasado. Aquella ambivalencia era muy propia de ella, se dijo para sí misma con cierto humor.

Cuando vieron al jinete tambaleante, Vol frunció el entrecejo, lo que hizo que Innominado sacara su cabecita del bolsillo donde se resguardaba del frío para curiosear.

—¿Será una trampa? No sería la primera vez que ponen como cebo a un supuesto herido para atraer a los viajeros incautos. Claro que igual está herido de verdad… o simplemente dormido. Aunque dormitar sobre el caballo cuando viajas solo no es buena idea, desde luego… —dijo en voz baja.

Volshyene esperó a ver qué decían Suro y Khaled.

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07/04/2014, 11:34
Innominado

—Dadle un mordisco para ver si está vivo, y continuemos —dijo irascible el armiño, que había estado dormitando. El súbito ramalazo de interés y alarma de su ama le había arrancado de su sueño, e Innominado odiaba que le despertasen bruscamente. Comer y dormir eran asuntos muy serios que no debían interrumpirse así como así.

Si le muerdes y grita, está vivo.

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07/04/2014, 15:42
Karin

- Estoy de acuerdo con el bicho - dijo Karin señalando a Innominado con la cabeza

El frío aire de la noche había refrescado hasta cierto punto su cabeza. Recordaba todo lo que había dicho. Todo lo que le habían dicho y...lo que no tendría que haber dicho. ¡Maldita sea! Bueno, ya no podía arreglarlo, y como bien había dicho Vol, los nórdicos eran conocidos por sus tradiciones, y una de ellas, al menos para Karin, era ser pragmáticos; se preocuparía cuando tuviera tiempo de preocuparse, intentó convencerse, aunque sabía que sería incapaz.

- Khaled, Thadeus, vosotros que sois tan...simpáticos - sonrió Karin -. ¿Querríais saludar al desconocido?

Podría haberlo hecho ella, ero ya había crispado bastante a Elynea por un día.

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07/04/2014, 16:52
Khaled

No habían cabalgado demasiado tiempo todavía, aunque sí lo suficiente como para que el cerebro de Khaled hubiera dado más vueltas dentro de su cráneo que una moza con un buen par de tetas durante un baile de fiestas. Era de noche, y no tenía muy claro si iban a pararse a descansar, o iban a seguir tirando hasta Cauce Boscoso para dormir al amanecer. Cabalgar de noche, dormir de día, como vampiros.

Podríamos dormir sobre los caballos. No sería la primera vez...

Su reflexión fue casi premonitoria. Primero llegó al grupo el sonido de los cascos contra el suelo, después la silueta se hizo visible en la oscuridad, y finalmente, la figura del caballo y su jinete, que se tambaleaba sobre la montura, como si se hubiera quedado dormido.

Los thanes discutieron sobre si se trataría de una rampa, o simplemente un pobre incauto que viajaba solo, y de noche, y había decidido echar una siesta mientras su caballo seguía su camino.

Khaled hubiera llevado su montura hasta la altura del durmiente, pero cierto era que la situación resultaba sospechosa, por lo que se imponía actuar con más sutileza. Uno de los trucos que le había enseñado su padre, hacía ya media vida, bastaría.

Un simple gesto de la mano y el recuerdo de un sonido, reproducido en su mente, produjeron el efecto deseado. El rugido de un dientes de sable smilodon rasgó la noche, surgido justo junto a la oreja del individuo del caballo.

Khaled usa "sonido fantasma" para emular.
Armonía arcana 1/6 usos.

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08/04/2014, 08:59
Aerin

Reconoces al jinete: es Aerin, ese pesado que no dejaba a Mjoll ni a sol ni a sombra. Lo que te alarma, precisamente, es que tu antigua compañera de aventuras no esté con él. ¿Qué habrá pasado? ¿Por qué está tan lejos de Riften?
 

- Tiradas (1)
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08/04/2014, 09:05
Narrador

El jinete se sobresaltó por el repentino rugido procedente de la nada, se retorció en la silla, braceó y se cayó del caballo. Se pegó un buen topetazo y se quedó ahí, tendido de bruces, como si hubiera perdido el aliento... o se hubiera roto algo al caerse. El viento arrastró unos gemidos lastimeros.
 

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08/04/2014, 09:09
Uthgerd

—Buen trabajo. Has derribado al jinete sin tan siquiera sacar el arco —observó Uthgerd con una sonrisa socarrona.

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08/04/2014, 09:53
Suro

- Es Aerin, un amigo, lo conozco. Elinea, creo que necesitaré tu ayuda... 

La voz de Suro surgió al lado del caído, a donde había llegado rápidamente.

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08/04/2014, 18:42
Karin

Karin no pudo reprimir una risa entre dientes.

- ¡Vaya Khaled! Algún día tenemos que improvisar algo juntos. Entre los dos podríamos detener una carga de caballería, bueno, siempre y cuando estuvieran dormidos...

El hombre-trapo que gemía en el suelo, al parecer, era amigo de Suro. Toda una proeza, según los esquemas de Karin. ¿Lo habría conocido antes de que el explorador renunciase a comunicarse por el simple placer de hacerlo?

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08/04/2014, 19:43
Thadeus Allectus

Thadeus iba a decir algo al extraño, pero Khaled se le adelantó. De hecho, él hubiera hecho algo del estilo; si hubiera sido un intento de emboscada con cebo, mejor acercar una imagen de sí mismo que presentarse ante el misterioso jinete.

 

-Así que un amigo tuyo, Suro - dijo de primeras, aunque como parecía herido, al momento preguntó-. ¿Bandidos? ¿Trolls? ¿Qué ha sido? Los caminos son peligrosos, pero por lo pronto, atendedlo primero -miró a Elynea insinuando que era su trabajo.

 

Él poco podía hacer por un herido; se le daba mejor intentar evitar que lo hiriesen e incluso lanzar algún contraataque, así que andaba receloso de los peligros que podrían poblar la noche. Por lo pronto, él seguiría con el papel de mercader, así que se acercó curioso hacia el viajero, y continuó con su pantomima, manteniendose cerca del tal Aerin.

 

Esperó cerca mientras le atendían para preguntarle algunas cuestiones; seguro que sería buena idea saber algo sobre los caminos en los últimos días, y estaba más que claro que había sucedido algo en su viaje. Pero no quería forzarlo justo ahora, sino cuando se encontrase mejor. Thadeus podría disfrazarse y actuar para parecer otro, pero ante tal circunstancia era incapaz de actuar como si fuese un bruto, aunque sospechaba que alguno de los presentes podría, y no sería parte de una actuación. De hecho, percibió el poco tacto que tuvo la guerrera; menuda bruta. Aun la creía capaz de hacer caso a la bolita peluda de la otra maga.

 

De repente, notó que su familiar no se encontraba en la grupa de su corcel...

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08/04/2014, 20:20
Medea

La gata no se lo pensó dos veces, he hizo caso de lo que la pequeña bola de pelo blanco dijo; se acercó a dar un mordisquito al amigo de Suro. Si realmente se encontraba consciente, se quejaría, y si fuese magia como la del amo, probablemente no. 

 

-¿Qué? Para una buena idea que tiene y nadie la lleva a cabo... -se excusó sin ningún otro argumento ante los allí presentes, aunque como sintió las miradas de todos clavados en su atención, se sintió casi obligada a realizar algún acto gracioso para que le perdonasen si había hecho algo malo; se puso a revolcarse por el suelo con gracia, como otras tantas veces había hecho con algunos niños para hacerse la graciosa y que le dieran comida-. ¿Miau? -terminó diciendo.

 

Con otra gente, funcionaba, por lo que se quedó quieta para ver la reacción de los presentes.

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09/04/2014, 00:12
Khaled

—Y no ha hecho falta que me bajara los pantalones esta vez —murmuró en respuesta a Uthgerd.

El rugido cumplió su función: despertar al jinete. Y aún más. Dio con sus huesos en el suelo. Y aún más, lo dejó fuera de combate. Si era el cebo de una emboscada, sus compañeros sabrían que no se tocaba las narices a esos viajeros, que podían tumbar a uno de los suyos sin el menor esfuerzo. Lo cual era una lástima, pues el ejercicio habría activado los mecanismos de su cuerpo para combatir el dolor potencial, lo que hubiera sido un alivio para la resaca.

—Ahora lo entiendo —musitó Khaled—. El chico solo sabe mantenerse en la silla dormido. En cuanto se despierta, se estozola.

Suro fue el primero en llegar junto al jinete caído, a pesar de su rodeo. Probablemente porque los demás mantuvieron la distancia, como si el pobre hombre fuera el portador de alguna desagradable enfermedad contagiosa, o fuera un vendedor ambulante.

Khaled se apeó finalmente de la yegua y se acercó al pobre desgraciado, a quien el explorador había identificado como su amigo. Y sin duda debía ser buen amigo, si lo reconocía incluso a oscuras, con la cara hundida en el barro del camino. Los Divinos sabían a qué tipo de amigo se reconocía por el cogote.

Cuando pasó junto a Karin, la chica estaba riendo y bromeando.

—Ya sabes que mi cama está lista para cualquier improvisación a dúo —le respondió, guiándole un ojo.

La bola de pelo felina de Thadeus se había acercado también al yaciente, y después de probarlo, había decidido que no era de su agrado.

Khaled se agachó y rascó al gatito en la tripa. Prefería los caballos, pero los gatos no eran desagradables. Al menos no eran putos cangrejos de barro. Agarró un puñado de pellejo del pescuezo del animal, lo levantó en volandas y se lo plantó al jinete derribado junto a los morros.

—Aerin —le llamó, agitándolo por el hombro con la otra mano—. Despierta, hombre. No me digas que un hombretón como tú se ha asustado de un gatito.

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09/04/2014, 00:42
Karin

Ya estaba tardando. Siempre tan educado Khaled, dejándose la piel para demostrar que era un dechado de elogios y contritos halagos. Qué difícil era recibir una atención tan romántica y hermosa. Karin supo cuando conoció a Khaled lo que debían sentir las damas en las canciones...¡Era tan bonito!

- Lo siento, Khaled, en mi templo de Kyne no pueden entrar dragones negros, sería el fin del mundo, y no estoy preparada para tanta responsabilidad

Pero sonreía al Guardia Rojo mientras este intentaba reanimar al susodicho amigo de Suro.

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09/04/2014, 01:11
Elynea

Claro. Primero nos pelamos las rodillas y ahora venimos a ponerle ojitos al clérigo—suspiró Elynea mirando al cielo dramáticamente.

Por supuesto la dunmer no es que fuese una experta en tonos jocosos pero el caso es que se las arregló para no sonar sarcástica. No la molestaba echarle una mano a alguien, es más, aquello del clérigo resultaba una especie de broma recurrente entre aventureros.

Aunque también podrían haber pasado sin tener que tirar a aquel pobre diablo de la montura. Fuese quien fuese.

—¿Se ha hecho daño por el trompazo o es que está herido?

Bajó del caballo emitiendo un tintineo metálico al aterrizar... acompañado de un gruñido molesto de tener las rodillas doloridas por haber andado tanto tiempo en la misma posición. Le tendió las riendas a Voshyene que no se había bajado para que se lo aguantase y se acercó al jinete accidentado.

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09/04/2014, 02:13
Suro

- No lo sé, algunos de nuestros compañeros tienen un extraño sentido del humor, más de uno se ha roto la crisma por caerse del caballo como para andar tirando gente así por las buenas, bien podrían haber esperado a que yo explorase los alrededores... 

» Hace años solía salir de aventuras con Mjoll la Leona, una aventurera que ahora vive en Riften. Nos metimos en unas ruinas enanas en el Norte, por aquel entonces nos arriesgábamos demasiado, pero esa era parte de la gracia; y fuera de las aventuras todo eran risas sexo y vino, y saquear viejos túmulos para conseguir dinero que guardábamos para cuando nos hiciésemos viejos. Pero ese día pinchamos más de lo que podíamos trinchar, ambos habríamos muerto de no ser por este chico, nos sacó de allí, le debo la vida. Teníamos un tercer socio, un viejo veterano que practicaba la magia arcana, él no sobrevivió, dejó una viuda en Hibernalia. Tras recuperarnos ambos sentamos la cabeza, Mjoll se estableció en Riften con Aerin y ahora combate al gremio de ladrones. Yo me vine a Carrera Blanca y compré la cabaña donde vivo ahora. La espada de Mjoll todavía está allí, la Cercenadora Sombría... enMzinchaleft. Fue una época divertida, fue antes de ser uno de los Compañeros o de ser Thane. Recuerdo una vez que caminábamos por los bosques del Sur de Riften, un ladronzuelo nos asaltó, cuando ella sacó la Cercenadora Sombría creímos que se lo haría encima... Mjoll siempre contaba esa anécdota a todo el mundo. Me preocupa que él esté aquí, sin ella, y en este estado. Puede que le haya pasado algo a Mjoll...  

Aunque el tono inicial había sido de enfado, el explorador parecía haber caído en un ataque de melancolía, recordando tiempos felices desaparecidos para siempre, recordando quizás que hubo un tiempo en que había sido un joven alegre y temerario, pero eso había sido antes de entregar todas sus ganancias a una llorosa viuda que lo era por su propia imprudencia. Pero más allá de esa melancolía estaba la preocupación, real, por Aerin y por Mjoll. El muchacho que hace muchos años le había salvado la vida, y su vieja compañera de aventuras.

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09/04/2014, 09:13
Aerin

El pisaverde que Suro había presentado como Aerin soltó un gritito poco masculino cuando Medea le mordió, y la apartó cuando Khaled se la puso en los morros. Gimoteó plañideramente.

Estaba herido, pero ni se había raspado las rodillas, ni se había roto nada al caerse del caballo: sus heridas parecían anteriores. Tenía el peto de cuero rasgado en varios sitios, y la ropa rígida de la sangre seca. Aerin estaba pálido por la pérdida de sangre, y dudabais de que fuera capaz de volverse a subir al caballo o caminar hasta Carrera Blanca en ese estado.

¿Eres tú, Suro? —dijo, abriendo un ojo pues el otro lo tenía pegado por la sangre reseca. Tosió— Por Ysmir, lo he logrado. Mjoll...

Tosió, y por como se le crispó el rostro debió dolerle todo.

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09/04/2014, 09:20
Uthgerd

Recibiste una dura mirada de advertencia de Uthgerd. Y te pareció detectar celos en ella.

- Tiradas (1)
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09/04/2014, 10:16
Karin

Karin desvió la mirada a Uthgerd. Ya estaba la simpática mata-compañeros con sus miradas. Apenas habían salido de Carrera Blanca. No se podían hacer chistes. Vaya viaje le esperaba si ni siquiera podía contestar a Khaled.

Suro dijo cosas. Muchas cosas. Muchísimas cosas. ¿Desde cuando hablaba tanto? Así que quizá en su pasado hubiera sido un alegre aventurero en lugar del taciturno de rostro tallado en madera que era entonces...tenía sentido. Karin había conseguido tener algo parecido a confianza con él tras mucho tiempo bebiendo juntos como thanes, pero nunca había hablado tanto. Bueno, en una ocasión explicó algo sobre los Draugr que quizá fueran nada menos que tres frases seguidas. Pero aquello...

Mjoll....Mjoll...no le sonaba...¿Quizá lo hubiera oído cuando había vagabundeado cerca de Riften? Se devanó los sesos, pensando en rumores y cotilleos que tuvieran que ver con alguna Mjoll...

- Tiradas (1)
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09/04/2014, 11:53
Narrador

Mjoll la Leona es una ciudadana ilustre de Riften, conocida por ser una férrea defensora de sus gentes y determinada a arrancar de raíz la corrupción que campa a sus anchas por la ciudad. Se opone frontalmente al Gremio de Ladrones y se queja a quien quiera que la escuche de cómo las autoridades hacen la vista gorda.

Pero entre los bardos y trovadores es aún más conocida por sus hazañas como aventurera. Ha recorrido todo Tamriel en busca de aventuras desde que era una joven ingenua sin apenas fuerzas para blandir una espada. Sus viajes la llevaron de Roca Alta a Bosque Valen, y de Elsweyr a Morrowind, incluyendo otros mil sitios por en medio. Nunca ha vendido su talento como mercenaria, sino que aboga por ir de aventuras siguiendo tus propias normas y ética.

Has oído que se retiró de su vida de aventura cuando perdió su espada, la Cercenadora Sombría, en las ruinas de Mzinchaleft, tal y como ha contado Suro. Pero no te parece el tipo de persona que pueda retirarse de una vida aventura, o que sea capaz de echar raíces en un sitio

Se supone que la información del Conocimiento de Bardo tiene que venirte en forma de historias o canciones, así que roléalo así. Si compones una canción a Mjoll tipo rapeo de Nach como la que compusiste a Vol, te daré un incentivo de px.

Puedes encontrar más info sobre ella aquí o inventarte alguna aventurilla.