Partida Rol por web

Hace ya dos días que no tenemos noticias de una nueva misión, hacía tiempo que no disfrutabamos de una paz semejante. Ya está atardeciendo y pronto será de noche, hoy nos quedaremos aqui.

Hemos parado a descansar en un alto del terreno, en esta zona de verdes praderas los arboles estan bastante dispersos, y son raros los desniveles, no es facil que nos pillen por sorpresa aqui, un lugar ideal para aprovechar esta paz y pasar la noche junto a un pequeño fuego.

-Ya hace ... dos dias.

Tanto él como yo sabemos que es raro, pero tambien sabemos que aparecerá un mensajero en cualquier momento. Clavo mi claymore en el suelo y lo utilizo de respaldo, esta es mi postura favorita para descansar.

-A veces me pregunto que sería de nosotros si todos los yomas fuesen aniquilados, vaya.....

"Que pregunta"

-Nos desecharían, como ya hacen con los que no les son utiles. Somos montruos al fin y al cabo.

Quizá mis ultimas palabras fueran una reproduccion de otras que no son mias, La verdad es que no lo creo asi.

-Debes intentar controlarte en cada batalla, vosotros sois mas propensos a sobrepasar los limites, no dejes que la ambición de poder nuble tu juicio... eres uno de los ultimos...

"Y no quisiera perderte"

Observé en silencio a Véronica mientras peleaba con dos piedras intentando hacer una pequeña hogera que calentara nuestros cuerpos en la noche...

De todas maneras tenía pensado hacer la primera guardia no deseaba descansar.

Al oir las palabras de mi mentora, sólo pude sonreir levemente mientras asentía dandole la razón por sus palabras... era una sonrisa fugaz pero despues de todo era una muestra de mis sentimientos y quizás de mi timidez.

La fustración abandonó mi cuerpo cuando una pequeña chispa bailó desde las piedras hasta las pequeñas ramas secas, creando el fuego que tanto ansiaba.

Suspiré levemente despues de soplar varias veces hasta avivar la hogera acomodandome en una piedra en la que me senté, cerca de Véronica.

Con gesto distraido retiré mi Claymore de la funda de mi espada, dejandola descansar sobre mis rodillas aprovechando una de las dos piedras con las que hice la hogera para afilar con cuidado y casi devoción el filo de mi hoja...

Después de varios segundos, en encontrar una postura comoda y un ritmo suave que no rompiera el silencio y la tranquilidad de nuestro improvisado "refugio" reuní el suficiente valor o ganas para observar de reojo a Véronica separando mis labios finos para hablar.

- Creo que no deberíamos los dos estar despiertos toda la noche, si deseas descansar Véronica, me quedaré vigilando durante la noche, no tengo mucho sueño -

Una nueva sonrisa adornó levemente mis labios, desapareciendo con la misma velocidad con la que se creó.

Sonrío ante sus palabras mientras me quedo hipnotizada por danzar de las llamas, me recuerdan a Seranna, una de las pocas ciudades que fue invadida enteramente por yomas y todos sus habitantes devorados, bueno, almenos uno se salvó. Los ultimos supervivientes intentaron incendiar la ciudad creyendo que asi acabarían con aquella plaga, pero eso no los detuvo, aun veo mi casa en llamas cada vez que cierro los ojos, y a veces tambien con ellos abiertos.

- .... te lo agradezco. Avisame si sucede cualquier cosa.

Sin mas mis ojos se cierran, mi cuerpo queda estatico en aquella posición, como si todos mis musculos se bloquearan, a simple vista puediera parecer que no estoy dormida, simplemente, con los ojos cerrados.

Una noche realmente encantadora, la temperatura es ideal y la luna hace facil el camino, que belleza. Hoy debo visitar a dos de mis montruos favoritos, juegan a ser humanos y gracias a eso son en conjunto una herramienta realmente util. Merece la pena el esfuerzo de venir a verles.

Camino hasta una roca cercana y me siento a contemplar la luna y las estrellas, no todas las noches el cielo ofrece un espectaculo similar. Perfecta para conversar bajo esta mistica luz.

Sin prisas me levanté, alzandome en mi estatura para observar en silencio algo alejados de nosotros a Rubel.

Con un sonido suave envainé  mi claymore a mi espalda, colocando mi larga capa  gris de manera que cubriera y tapara todo mi cuerpo, destinado a esconder y tapar mis ropajes y el arma que me indentificaban con lo que soy.

Me tomé unos segundo en observar a Véronica en esa postura sumida en la paz no pudiendo evitar sonreir.

Nunca encontraremos ese descanso, dos dias ya era demasiado.

Me acerqué a ella intentandola despertar con cuidado posando mi mano derecha sobre su hombrera.

- Véronica, Rubel ya está aqui - Le susurré.

Ella era mi maestra y un claymore de rango superior a mi, si a alguien Rubel tenía que informar de una misión sería a ella y no a mi. esperaría a que se decidiera avanzar para seguirle en silencio.

Nada mas entir algo que no es el roze del viento, mis ojos se abren casi como acto reflejo, mi mirada no tarda en alzarse, es Ragnar, y parece que.... Rubel ha llegado, es muy probable que nuestro siguiente encargo esté en curso.

Me levanto, desclavo mi claymore y lo enfundo a mi espalda. Me tomo unos segundos para respirar hondo. Pronto vuelve a sonar el tintineo de mis pasos.

-Vamos....

Una aparición muy tipica de él, es uno de los pocos mensajeros que guarda una apariencia y un saber estar que no dista mucho de cualquier humano, pero la información de la que disponen probablemente es mucho mayor de la que nadie imagina, tambien su desprecio hacia los de sangre yoma.

Camino hasta quedar a escasos metros de él, al igual que Ragnar, y hago un saludo militar, suficiente para que sepa que le escucho, que le escuchamos.

Siempre juntos, son adorables.

-Lamento irrumpir en una noche tan romantica como esta.

No puedo evitar sonreir al mirar al número 27, uno de los ultimos guerreros que aun se resiste a su naturaleza, de todas formas no creo que le quede mucho, todo un problema para la numero 15.

- Es raro encontrar a compañeros con tanta diferencia de poder que deseen viajar juntos por propia voluntad, no os preocupeis, podreis seguir haciendolo todo el tiempo que querais.

"Como si a mi me importara"

-Tengo vuestro siguiente encargo , no muy lejs de aqui esta la Aldea de Sontera, al parecer ha aparecido un yoma de "grandes dimensiones" allí, por lo visto el numero de muertos es mayor de lo normal, necesita gran contidad de alimento asi que no os confieis, puede tener sorpresas.

Vuelvo a sonreir y a ajustar mi sombrero.

-Bien, eso es todo, volveremos a vernos, si todo va bien. Adios.

Hecho. ¿Y bien? donde me llevarían mis pasos ahora, no se sabe, dejemos que el destino decida, el siguiente monstruo al que tirarle de la correa.

Mi mirada fría carente de emociones y dura se clavó en Rubel sin molestarme en ocultar el desden que sentía hacia él, era conocido en la asociación el odio que nos profesaba...por mi se podía ir al infierno.

imbecil

Escuché en silencio lo que tenía que decir, a Sontera ¿No? Pues bien...más de lo mismo matar hasta que tuviera que morir. Una vez que Véronica se despidió de él me alejé sin despedirme volviendo sobre mis pasos hasta el campamento donde descansabamos , sentandome en la piedra donde estaba mirando al fuego hasta que volviera Véronica y decidiera lo que tuvieramos que hacer.

Si no recuerdo mal ace algunos años Sontera fue atacada, en aquel momento yo era una novata y solo se trataban de 2 yomas corrientes, en ese combate perdí mi primer brazo, un mal recuerdo sin duda.

Asiento a Rubel y le sigo unos segundos con la mirada hasta que se pierde en la noche, es obvio que no es del agrado de Ragnar, pero dada la frialdad de los mensajeros de la organización podría decirse que Rubel es el unico con el que se puede entablar una conversación normal y sencilla, me ha hecho llegar mis misiones desde que me fue entregado el simbolo.

Vuelvo sobre mis pasos, hasta nuestro campamento, con Ragnar. Le miro de reojo y recojo la pequeña bolsa que había dejado ahi.

-Partiremos enseguida, cuanto antes empecemos, antes terminaremos, Sontera es un pueblo bastante grande, puede que nos lleve tiempo localizar al yoma .... o puede que no. En marcha.

Comienzo a caminar, nuestro destino no está lejos, y el descanso me había sentado bastante bien.

Una hora mas tarde aproximadamente llegamos a un pequeño alto, Sontera se situa en un valle y la cruza un rio, todo eso se ve calarmente desde aqui, tan solo con la luz de la luna.

-Este pueblo ya fue limpiado una vez, si ha vuelto a él un yoma, quiere decir que confía mucho es sus posibilidades, habrá que tener cuidado... sigamos...

Pronto llegariamos....

Ya estaba todo dicho, no había mucho más que comentar o decir.

Me tomé un breve tiempo observando la ciudad desde el alto, ocultando finalmente mi cabello y mis ojos tras la capucha parte de la capa.

Buscar un Yoma no debería entrañar mucha dificultad, sólo habría que seguir el rastro de sangre y muerte.

¿ Algun dia sería yo uno de ellos? Nunca se sabe.

Observé delante mia, dandome su espalda a Véronica por unos momentos me gustaría decirle todo lo que siento, abrazarle, despedirme de ella por si no la vuelvo a ver.

Cuando todos esos sentimientos ya están concentrados y apunto de ser escupidos un nudo atasca mi garganta, bajo la cabeza decepcionado.

Finalmente, logro reunir todo el valor para ponerme a su par, mirandola con seriedad a los ojos, era una mirada fría la que tenía acustumbrada, pero se esa mirada se conocía lo suficiente mostrava preocupación y determinación.

 - Yo te protegeré Véronica, sea cual sea el coste -

Después de ello volví mi mirada hacia el norta, hacia nuestro destino sumiendome en el más sagrado de los silencios, un silencio que no debía ser interrumpido pues no iba a haber contextación a través de el.

Sea cual sea el coste

Puede que en una situación normal sus palabras me reconfortaran y no me hubiese pensado dos veces en decirle lo que siento, pero en nuestro mundo no hay cavida para cosas como el amor, podemos morir hoy, o sobrepasar nuestros limites mañana, siempre  tan cerca de la muerte que las cosas que mas valoramos como humanos, pierden toda su riqueza.

Apenas me atreví a sonreir, en momentos como este, mirarle solo me haría mas debil.

-Una vida no se debe cambiar por otra, incluso cuando no valen nada, como la nuestra. Somos un equipo, con todo lo que ello implica.

Quisiera que fuesemaos mas que eso, pero degraciadamente no podemos.... no debemos.

-Vamos

Caminamos la hora restante hasta las puertas de la ciudad, es la hora.

-A partir de aqui estate alerta, si te concentras podras sentir su presencia, todos nosotros mitad yoma mitad humanos tenemos cierta sensibilidad al yoki, al poder yoma en otras formas de vida, sentir su presencia dependerá de lo habilidoso que sea nuestro objetivo para ocultarse, si ya esta advertido de nuestra llegada es posible que sea dificil encontrarle, a veces su mimetización es casi perfecta.

Hablo mientras camino, segun el informe aqui se esconde un yoma o varios bastante poderosos, sin embargo apenas siento su aura, esto no me gusta.

-Vamos a la posada, puede que allí consigamos algo de información extra.

Hay muy poca gente en la calle, probablemente esten encerrados en sus casas, aterrorizados, quizá esta sea una muestra mas clara del yoma que nuestra propia percepción. Señalo una pequeña señal en forma de flecha en la que pone "Posada", Ragnar no sabe leer, en el futuro podrá asignar facilmente esa palabra a su significado una vez se la revele.

Ignoré sus palabras, al menos la mayoría, una cosa es lo que ella digera y otra lo que yo sentía , incluso los medio yomas teníamos sentimientos...

Avanzé hasta ponerme a su par atento a cualquier movimientos que pudiera parecerme raro.. Finalmente cerré los ojos cocentrandome intentando sentir algo donde las miradas no bastantaban

Entramos a la posada, parece que en el piso de abajo es una taberna y hay bastante gente almorzando. Camino hasta el posadero quedando frente a él, solo separados por la barra.

-Disculpe anciano, cuales han sido las ultimas victimas del yoma estos ultimaos dias.

El posadero dio un paso hacia atras, estaba ante dos guerreros de ojos plateados, muchas personas decian que ya no quedaban hombres, que solo eran mujeres ahora, aquella imagen lo desmentia....

-Claymore..... ehmm.... si.. ehm, hace tiempo fueron atacadas familias en sus propias casas, pero desde que el voluntariado de seguridad patrulla por las noches son las victimas mas frecuentes, ya han muerto siete en el centro, en la zona del mercado y la iglesia.

Bingo, para que esforzarse en sentirlos cuando te pueden decir directamente por donde se mueven. Dejo unas monedas, cojo una manzana del frutero y salgo de allisentandome en un banco cercano a terminarla.

-A menudo toman la forma de alguien medianamente influyente o que conozca bien a los habitantes del pueblo, eso les permite escojer bien sus presas y conocer sus habitos, y a la vez les ayuda a que no sospechen de ellos, desde luego no todos los yomas son tan listos, pero es muy probable que sea asi.

Lo cual nos deja un lugar mas que probable para nuestro molesto inquilino, la iglesia. Se que Ragnar no es muy bueno llevando a cabo investigaciones dentro de la sociedad humana, pero quiero que comprenda, que muchas veces es mas util basarse en las pistas que en los sentidos.

-¿Que opinas? si nos la jugamos a una carta puede que hayamos terminado esta noche.

Si son mas de uno, las cosas se pondrían feas en un enfrentamiento contra todos. Cuando son varios, lo mejor es aniquilarlos por separado.

Ragnar se encogió levemente de hombros, de  pie al lado de la sentada Véronica.

- Todo acaba igual, hablando por nosotros nuestras Claymore -

No lo podía negar, la admiraba, se desenvolvía a la perfeción entre la sociedad a la que en un pasado perteneciamos, absorvía una a una sus enseñanzas a pesar de demostrar una actitud distante.

- Hagas lo que hagas estaré a tu lado, decide tu Véronica ahora mismo mis ojos están ciegos -

Sonreí levemente para después ocultar una vez más mi rostro aun más tras el capuchón.

Sonrío ante las palabras de Ragnar, siempre tan servicial, solo espero que no olvide cada una de nuestras experiencias, puede que algun dia yo ya no este aqui, o simplemente la organización me mande a un destino diferente al suyo.

Termino la manzana y me pongo en marcha, hacia la iglesia. Miro a mi alrededor, la poca gente con la que nos cruzamos huye de nuestras miradas y cierran puertas y ventanas, saben a lo que hemos venido, saben que se va a derramar sangre.

Una vez ante el portón de la vieja iglesia me detengo unos segundos. Mis sentidos tratan de alertarme de algo, miro por un momento a Ragnar, me quedo pesativa unos segundo y entro..... Dios mio.

Hay apenas cuatro personas contando con el cura, y almenos tres, son yomas, mis ojos plata brillan en la oscura iglesia escudriñandolos uno a uno. Desenfundo mi claymore dejando que el sonido haga eco en los viejos muros.

-Ragnar, cierra la puerta, no dejes que nadie salga, ni entre .... estan aqui ..... todos.

El primero en hablar fue el cura.

-Alto, no derrameis sangre en la casa del señor.

Viejo estupido, o quizá debería decir, yoma estupido, diablos, no soy capaz de distinguirlos bien.

-Vuestra pequeña reunión ha acabado.... ya no saldreis de aquí.

Miro a los presentes mientras hablo, sin embargo es el cura quien vuelve a hablar de nuevo.

-Vosotros..... tampoco....

La peor de mis sospechas se cumple, todos los presentes adoptan su forma de yoma, incluido el cura, pero él es un yoma especial, mide mas de tres metros y su aura de yoma es mucho mas fuerte que la de los demas.

-Ragnar, yo me encargo de él, quitame de encima al resto.

Libero mi poder, corro por el medio de la catedral sin dar tiempo a los yomas normales a cruzarse en mi camino, cargando contra la bestia. Estoy segura que los tres restantes irán a por él, de momento.

Me avalancé contra el primer Yoma convirtiendo en un borrón dificil de ver a los ojos de los demás ( Velocidad Yoma) desencadenando una serie de golpe con mi espada, mientras me esforzaba por ver que suerte conría Véronica.

No gruñia simplemente combatía en el más absoluto de los silencios...

Tenía que matarlos cuando antes lo hicera antes podría proteger a Veronica no podía permitir que la dañaran...

Rápido .... date prisa matalos.

Las habilidades de Veronica eran excepcionales, el yoma es increiblemente rapido, pero aun asi es incapaz de dañar a la numero 15, que no porta su bajo rango por nada. Verónica combate liberando mucho poder esto la hace muy superior, no tardan en aparecer cortes profundos en el cuerpo del gran yoma.

- ¡ARGGGG!, MALDITO INSECTO

Todo parece indicar que la batalla le es favorable a la claymore, por otra parte, el combate para Ragnar, a pesar de la desventaja numerica se torna rapidamente a su favor, la velocidad de su Claymore, es demasiado para el insignificante yoma, que cae roto en dos al suelo y dejando un abundante charco de sangre morada.

Los otros dos se lanzan al ataque, pero no se sabe si por miedo, o por debilidad no parecen muy convencidos al acercar sus garras al joven guerrero.

Demasiado lentos....

Sus movimientos eran torpes y predecibles, estupidos Yomas. Me fue escesivamente facil esquivar sus movimiento soriendoles de manera burlona.

Pronto mi actitud defensiva se tornó de nuevo en un torbellino de violencia, mis espada giraba con violencia ya no silbaba auyaba.

El segundo Yoki caería de nuevo ante mis pies

Demasiado rapido, el yoma lo mas que puede hacer es seguir el claymore de Raganr con al mirada, y a duras penas, antes de que reacciones su brazo cae al suelo, luego él mismo con su cabeza cortada por al mitad, solo resta uno, que ya sea por miedo al yoma superior se lanza en un ataque desesperado, algo mas efectivo que el anterior, pues ha comprendido de sobra, que le va la vida en ello.

Sin embargo, algo sucede cerca del altar, la voz del yoma que tiene un corte en la cara que le ha hecho perder un ojo, suena en toda la sala.

-Has luchado bien, liberaste tu poder sin pensarlo, jajajajaja, tengo que admitir que por poco lo consigues, pero.... te atrapé.

Si Ragnar levanta la vista puede ver que los dedos de las manos del yoma se habían extendido y habían atrabesado el cuerpo de Verónica, su gesto de dolor lo dice todo.

-Tu compañero será el siguiente.

Con su otra mano agarra salvajemente la cabeza de Veronica mientras esta está momentaneamente inmovil y unde su dedo pulgar en su cuello, brotando una cantidad enorme de sangre, probablemente había desgarrado la arteria, el resto de dedos se alargan, clabandose a lo largo de su cabeza quedando todo su cuerpo suspendido en el aire, solo sostenido por los dedos del yoma, con un rapido movimiento la desnuca y cae al suelo inerte, aquella era una herida fatal, incluso para una claymore poderosa como Veronica.

El yoma gigante se queda mirando a Ragnar esperando su reacción, mientras regenera sus heridas, aunque su ojo tardaría algo mas de lo normal.

El corte fué limpio y la cabeza y el cuerpo calleron al suelo separadas con un sonido sordo.

Me giré para encarar a mi ultimo adversario, maldiciendome en mi fuero interior por se tan lento...alcé mi espada para intentar bloquear el golpe pero ya era demasiado tarde...

Estupido...asi nunca vengarás a tu hermana... !!!reaciona!!!

El golpe era inminente apreté con fuerza los dientes, esperando el golpe.