Partida Rol por web

Dhaeva 2: El Caballero de las Tinieblas.

Transilvania: 1) Alba Iulia: Castillo de Balgrad. - Mazmorras.

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11/09/2013, 23:21
[RIP] Innya.
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La reacción del señor me sorprendió y me asustó. ¿Qué había hecho mal? Le había dicho lo que quería. ¡No había mentido! 

Su violencia, tanto física con en sus palabras, me hizo retroceder un par de pasos y me puso el corazón a cien. Pero por Dios... ¿Qué estaba ocurriendo? Miré a mi sobrino con temor mientras el señor nos menospreciaba, insultaba y nos decía (en muchas palabras), qué íbamos a morir. ¿Me preguntaba qué quería de él? ¡Pero si había venido por su cuenta! Yo no le había pedido nada a nadie, sólo a Dios. Le había pedido protección y misericordia. ¿Era esta su respuesta? Imposible, ¡imposible!

Cuándo el hombre desapareció en la oscuridad de las mazmorras, me permití acercarme más a mi sobrino. Mi respiración estaba agitada, al compás de mi acelerado corazón. Necesitaba notar la compañía de mi sobrino, era lo único que me quedaba.

Oh, Dagu, querido... -  le susurré mientras intentaba absurdamente,y obviamente en vano, darle un abrazo.

No sabía que más decirle, no había frase coherente que fuese a salir de mis labios en probablemente un buen rato, pero notar su presencia era reconfortante.

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12/09/2013, 08:01
12 - El Colgado.

Flaviu:

¿El Secretario Ducal? ¿No estáis aquí por Otto de Sajonia, sino por orden del mismísimo Durius Trémere?

Oh... ya veo...

Davinnya, querida... Lord Trémere parece tener predisposición por convertirse en mecenas de jóvenes rubios imberbes, de rostro atractivo y afeminado. Me temo que el pobre Lindor ya no será el único que recibirá las atenciones de su Señor. Puede que el Primer Caballero haya propiciado esta situación para hacerse con Fogus. Si es así, el próximo paso del Secretario Ducal será ofreceros una salida, en persona o através de un enviado suyo.

Será mejor que nos centremos en cómo sacaros de aquí cuanto antes...

Bien. Reconozco que mis influencias no llegan hasta Durius Trémere, pero en ocasiones la inteligencia se muestra una gran baza para compensar las desventajas sociales, y yo soy un gran estudiante de las leyes... Veamos... ¿Conocéis el término servidumbre? La servidumbre se produce entre un noble y un plebeyo, analogamente a lo que en el vasallaje se produce entre dos nobles. Uno se supedita a otro y jura lealtad a cambio de protección.

Os pongo un ejemplo... hipotético. Si yo cometiere, que no digo que haya ocurrido, una falta contra el Duque... Hubiere sido el Caballero Iacobus Radoslav, señor al que debo obediencia por ser su escudero, el encargado de darme castigo. Si vos ya fueseis siervos de otro noble, la pena impuesta por vuestro delito la impondría vuestro Señor directo, y no Durius.

Así que yo os pregunto... ¿Quién es el Señor de vuestras familias? ¿O sois parientes y estamos hablando de la misma familia? ¿A quién juró lealtad vuestro...? No sé... ¿Vuestro bisabuelo? ¿Vuestro tatarabuelo?


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12/09/2013, 10:53
Dagu el Lisiado.
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Dagu dio un pasó atrás tras el estadillo de Flaviu. No esperaba aquella reacción tras oír la respuesta de su tía. 

¿Pero que te esperabas?- piensa el muchacho mientras ve como se marcha el caballero de allí. ¿Acaso pensaba que la respuesta de Innya iba a ser otra? Era completamente absurdo. 

Oh, Dagu, querido... 

Oye el susurro de su tía y vuelve acercarse a los barrotes.

Tranquila, tía- es lo mejor que puede decirle. A decir verdad, Dagu sabía que se encontraban en una situación que distaba mucho de poder solucionarse satisfactoriamente. Ahora solo quedaba que el plan de Mikail saliese bien, pero tampoco ponía muchas esperanzas en ello. 

Con eso en mente retrocede de nuevo hacia el fondo de su celda.

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12/09/2013, 17:38
12 - El Colgado.

Innya:

- Mi... mi señor, discúlpeme, pero soy una simple sirvienta del castillo.

Le debo lealtad al secretario Ducal, al igual que mi familia... Y fue el propio Señor el que dio la orden.

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12/09/2013, 17:39
12 - El Colgado.

Flaviu:

Ya veo... el sui iuris del derecho romano... No... no me lo estáis poniendo nada fácil, ¿no creéis? Quiero decir... He sido muy amable al interesarme en vuestro caso... ¡¿Y VOSOTROS ME SALIS CON QUE SOIS SIERVOS DE DURIUS TRÉMERE?!

¿Qué...? ¿Qué...? Perdonad, pero no acabo de comprenderlo... ¡¿QUÉ DIANTRES PRETENDÉIS DE MÍ?! ¿Eh? ¿Queréis... un milagro, acaso? Pensáis... "oh, da igual, el bueno de Flaviu lo solucionará todo al final". "Vamos a ponérselo difícil, a reírnos de él mientras se estruja el cerebro" ¿ES ESO? ¿OS ESTÁIS RIENDO DE MÍ? Nooo... No tengo porqué aturar esto.

¿Sabéis lo que más me ofende de todo esto? ¿Lo sabéis? Lo más denigrante de todo esto es que sois gusanos... seguramente de la misma masa helmíntica que llegó arrastrandóse desde Slobozia. Sois plebeyos que debieron morir hace siete años en la guerra, pero que habéis logrado un aplazamiento. ¡UN APLAZAMIENTO!

-y suelta otra patada a los barrotes-

¡HABÉIS...-patada...-BURLADO...-patada...-A LA-dos patadas...-MISMÍSIMA...-patada...-MUERTE!

¡UUUUURGH! ¡ME DÁIS TANTO CORAJE!

Pues bien...

-No se puede esquivar a la Parca dos veces, y vosotros ya habéis tenido una segunda oportunidad en vuestras patéticas vidas. Aceptad lo que tenéis y rezad a Dios para que os acepte en su seno.

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12/09/2013, 17:40
12 - El Colgado.

Innya:

Oh, Dagu, querido...

Dagu:

Tranquila, tía-

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12/09/2013, 17:46
12 - El Colgado.

- El noble Flaviu Krevcheski abandona la zona de las mazmorras.

Notas de juego

// Sale de escena: Flaviu. - Sigue en: Patio del Castillo.

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13/09/2013, 19:00
Carcelero.

Después de un rato escucháis la voz del carcelero. Los magyares fuimos saqueando nuevos territorios hasta que cambiamos los saqueos por conquistas aceptando la rendición de las ciudades sin destruirlas, ni pasar a todos sus habitantes a cuchillo.

Ahora también las mazmorras cambian antes nos daban asesinos y violadores los cuales había que ajusticiar , más ahora veis como vienen a nuestro calabozo mujer y niño cuyos actos delictivos no tienen cabida aquí , más si mi señor quiere éste cambio, tendremos que aceptarlo se acabó el perder más prisioneros a causa de la enfermedad. De hecho unas ordenanzas deberán cumplirse, no vigiléis la mazmorra todos empezaréis a trabajar en las ordenanzas desde ahora. Venid a mi dormitorio y os lo explicaré.

Al cabo de un rato escucháis el sonido de los guardias junto con el sonido de objetos , empiezan a limpiar las celdas vacías, introducen barriles en cada una y van llevando agua para llenarlas depositando objetos a su alrededor. Sacan en algunas celdas los camastros y los cambian por catres nuevos.

Escucháis como las celdas de alrededor vuestra se van abriendo por turnos para cambiar a los prisioneros hacia las celdas remodeladas, y éstas antiguas siguen las mismas pautas de acción que las vacías.

El tintineo de llaves acercándose os dice que el carcelero viene. Veis a un hombre bastante fornido de unos 35 años, es alto aunque parece ir encorvado como si hubiera estado en ayunas, su cara demacrada así lo atestigua a pesar de ser feo , su ropa es corriente posee en su cinturón una daga enfundada.

Miro a la mujer bienvenidos, estoy haciendo unas reformas en la mazmorra para que vuestra estancia sea lo más grata posible, hasta ayer los presos que recibíamos eran bandidos, asesinos y violadores no debéis alarmaros si escucháis sus gritos , deben ser torturados para que expíen sus crímenes con la verdad de su testimonio. Pero todo ha dado un vuelco con vuestra llegada y acomodamos las celdas conforme a vosotros veréis que los cambios hechos son de limpieza e higiene. Así no tenéis que temer por vuestra salud, si el señor os quiere él os puede dar la felicidad verdadera.

Podéis llamarme con mi sobrenombre el carcelero, ahora disponed a cambiar de celda como una señora sin llantos ni malas acciones así nos llevaremos bien. Te hago una señal hacia una celda intermedia del pasillo, los guardias se hallan bloqueando la parte de arriba que suponéis que es la salida, el carcelero se mete entre los soldados mientras uno de ellos avanza y abre vuestra puerta, tres soldados se encuentran taponando el pasillo de arriba y el carcelero detrás de ellos.

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16/09/2013, 10:53
[RIP] Innya.

Esto era increíble. No entendía nada. ¿Estaba soñando o es que me había vuelto loca? ¿O era tal vez el resto del mundo el que había caído en la locura? Primero el señor y ahora el carcelero, ambos actuando de una manera extrañísima, cada uno a su manera, y al parecer Dagu y yo éramos el centro de atención.

"O tal has muerto y esta frustrante e incomprensible situación es tu castigo."

¿Era eso posible? Tal vez no había sido una buena cristiana y el Señor estaba castigándome dejándome aquí en lugar de abrirme las puertas del paraíso.

No. De ningún modo. Nada de eso podía ser. Dagu estaba aquí y yo había estado en alerta ante cualquier cambio. No entendía lo que ocurría, pero no era yo la que estaba presa de la locura.

Seguí las instrucciones del carcelero con la cabeza baja, esperando cambiar de celda a una más acomodada, mirando de reojo a mi sobrino en todo momento. ¿Debería arriesgarme a pedir una celda para los dos?

"No, no lo hagas. Tu lengua te metió aquí. Deja las cosas cómo están."

Por mucho que desease abrazar y proteger a Dagu no podía arriesgarme a empeorar la situación. Esperaría, esperaría para que todo se solucionase. Debía confiar.

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16/09/2013, 11:33
Dagu el Lisiado.

¿Le habría pillado el carcelero en sus cuchicheos con su tía? no podía saberlo con seguridad. El carcelero podría tener mil motivaciones para cambiar a Innya de su celda, y ella solo podía hacer mas que obedecer. Dagu maldijo en silencio. Odiaba estar allí encerrado sin hacer nada mas que esperar la resolución de su destino.

Dagu se pegó todo lo posible a los barrotes para intentar ver donde iba a ir su tía. No le hizo ningún gesto, simplemente miraba. 

Saldremos de esta- era lo único que podía pensar, pero ni él mismo tenía confianza que eso ocurriera.

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18/09/2013, 19:06
Mazmorrero Wojek.

Me acerco a las celdas donde se hallan mis nuevos invitados , la luz no es luz es una penumbra, más se deja ver en ella  a un hombre bastante fornido de unos treinta y cinco años, es alto aunque parece ir encorvado como si soportase una carga mayor que su cuerpo, su cara demacrada y fea produce cierta reticencia a los ojos , su ropa es corriente poseyendo en su cinturón una daga enfundada.

Os miro con mirada lasciva , ¿qué hacéis aquí ? ¿por qué - subo el tono de voz - mi señor os quiere aquí? , ¿a qué se debe este encarcelamiento decidme y no os haré tanto de sufrir - en cuanto digo esta última palabra , relamo mi boca por dentro, como si el sólo hecho de decirla provocase una cierta complacencia. Una campesina aquí si hubieseis hecho algo que no es del agrado de mi Señor bastaría con que os hubiese ajusticiado , pero haceros sufrir de esta forma es para mi el honor más grande que se le puede conceder a un carcelero una risa contenida va saliendo de mi ser llevándome una mano a la boca para no dejar ver mis dientes.

Ahora miro a la celda de al lado y tú mocoso dime ¿qué fechorías has hecho para estar aquí? hablo con una voz de odio hacia el pequeño.

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18/09/2013, 20:43
12 - El Colgado.

Tras el grandullón aparece de repente otra figura, también encorvada y correosa. Quizás llega tarde por su lento caminar, aunque como las Delicias, no es su justicia famosa por su velocidad sino por su lenta implacabilidad.

A escasos metros podéis ver que porta en su hombro a otro personaje, un pequeño amigo, una rata a la que parece sentarle bien la compañía del bulto que poco a poco deja mostrar sus rasgos...

Y son unos rasgos que podría provocar pesadillas.

Con la cara cortada y enferma, el pequeño y gordo bulto muesta una mirada seria, pequeña en el carisma y profunda en la tristeza. Mira a los dos pequeños como si de otras dos ratas se tratasen. Como animalitos perdidos en las garras del depredador... el carcelero... maldito depredador...

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18/09/2013, 20:47
Mazmorrero Unk.

- Disculp-pad señor... tarde llego...

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18/09/2013, 20:48
Mazmorrero Wojek.

- Cállate, idiota... -dijo el otro hombre encorvado en un fuerte acento eslavo y evitando la mirada del adefesio.

Extrañas conductas, extraños mensajes.

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18/09/2013, 20:50
Mazmorrero Wojek.

- He hecho una pregunta -dijo el mazmorrero apretando el puño-. Juro por el frío del crepúsculo que si no me la dáis me la haré a base de piel y llantos...

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20/09/2013, 11:32
[RIP] Innya.

Agaché la cabeza con temor y servidumbre, dando además un par de pasitos lentos y cautelosos hacía el interior de la celda, para alejarme de ese hombre.

¿Es que los horrores se sucedían sin detenerse, en este lugar? ¿O era la locura la que había empujado a todos contra DAgu y contra mí?

- Se...señor, estamos aquí bajo las órdenes del Secretario Ducal. Un incidente descortés contra los invitados de la boda... Olvidamos nuestra simple posición y causamos una falta de respeto. - Dije mesurando las palabras, pues el hombre parecía dispuesto torturarnos utilizando la mínima excusa que encontrase. Sin embargo, se había pedido que no nos causasen ningún daño hasta que se decidiese nuestro destino. ¿Estaban todos enterados en las mazmorras? Temía decirlo, pues un comentario semejante era lo que me había metido aquí. Un comentario que en mi posición se tomaba como arrogancia.

"Por favor Señor, sálvanos. Sácanos de aquí. No puedo aguantarlo más..."

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20/09/2013, 12:04
Mazmorrero Wojek.

- Por órdenes del Secretario Ducal... -dice el mazmorrero con duda en sus labios-. ¿Me vais a decir que estáis en el mismo lugar que asesinos y violadores por una simple ausencia de maldita cortesía? Niña, estás tensand...

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20/09/2013, 12:08
Mazmorrero Ondrej Hrudka.

- Déjalo ya, Wojek -dice desde lejos otro de los mazmorreros, con voz grave y potente. Casi no podéis verle bien la cara debido a la penumbra.

- Saberlo no es nuestro deber. Si te vas a follar a la niña, hazlo -arrojó las palabras maleducadamente a oídos públicos-. Y si no, no la molestes. Tenemos cosas que hacer.

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20/09/2013, 12:11
Mazmorrero Wojek.

- ¡Silencio!

Escucháis el sonido de una hoja siendo desenvainada. Pero por la lejanía del sonido intuís que no es la daga del larguirucho.

Hay un momento de pausa y silencio, y luego de esos segundos el larguirucho lanza una mirada asesina, fría como el hielo, a Innya y se marcha en un raro ademán que levanta una ligerísima brisa.

Atrás queda el lisiado que entra en la celda.

Escucháis al fondo algunos cuchicheos entre los mazmorreros y Carcelero, pero ahora os quedáis solos con el lisiado.

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20/09/2013, 12:17
Carcelero.

- Tú... euh... Unk. Acaba rápido y sal, necesito que vayas arriba a por más lumbre.

Tras sus palabras, escucháis los pasos de carcelero entre el barullo de otros tantos marcharse de allí. Os quedáis con Unk, el lisiado acompañado de una rata en su hombro.