Partida Rol por web

Aunque a priori parece que tienes razón, y de hecho te la iba a dar, al verlo sobre tablero, verás que nunca puedes atacar con Reach y Hendedura a dos enemigos que han conseguido pegarse a ti, flanqueándote. En este caso, gracias a tu "warcry", te dije que no conseguían el bono de Flanqueo hasta el turno siguiente, aunque su movimiento les dejaba en esa posición (a tus "3" y a tus "9". Tu paso de 5', te aleja 5' de ellos, pero, como verás, no hay ninguna posición a la que puedas moverte, sin generar AdO, que te permita utilizar Hendedura contra ambos (de hecho, hay algunas posiciones, que no te permitirían ni atacar!!). Pero, vamos a verlo sobre el tablero, que es donde se ve claro ;)

INICIO DE TU TURNO

 El inicio de tu turno es este: ambos flanqueándote.

TRAS TU MOVIMIENTO DE 5':

 Como puedes ver, solo los movimientos de 5' en diagonal te permitirían atacar a uno de los enemigos (el contrario del lado al que te muevas) pero sin posibilidad de Hendedura al que te queda al lado, porque está a 5'.

 La premisa del Hendedura con Reach es que todos los enemigos estén a 10'. Despues, que entre ellos estén a 5' o 10', a ti te da igual ;)

De todas formas, en este caso da igual, pues ya te he dicho que se acepta de cualquier modo, pero para que lo tengas en cuenta para el futuro!! ;) Por eso te dije en su momento si querías o no Reach, aunque he recibido críticas en contra, diciendo que manejar un arma grande no te permite atacar a 10', si no el tamaño del PNJ/PJ ( de hecho, es así, porque un Ogro (Tamaño grande) tiene alcance 10' aunque ataque con un arma pequeña, o sin arma, incluso. Pero bueno, como a ti te lo ofrecí, no me parecía justo quitartelo despues ;)

El ver a Desdemona trastocó todo el plan que tenía Tarben en mente. De hecho apunto estuvo de salir tras ella y hacer que se metiera en la torre también. Pero desapareció antes de que pudiera hacer nada.

Centrate. Sigue el plan. Que nos sigan a la torre y allí acabamos con ellos. Poco a poco.

Anubis se movió y el clérigo le siguió escaleras abajo. Al pasar al lado de Zoak le tocó el hombro.

Vamos.  

Una última mirada para confirmar que no veía a la tiefling y bajó por las escaleras.

Leviathan se mira las flechas clavadas en el cuerpo y gruñe, le duele pero no son mortales, mira hacia abajo, ya no hay nada que hacer, estas criaturas son débiles y cobardes y sentirán toda la furia de Solmamnia. Entonando alguna viejo cántico de guerra que ya sólo se repiten en tabernas por los viejos del lugar, los va susurrando en voz grave mientras avanza hacia abajo, para reunirse con sus compañeros.

Nadie ha visto un ataque de pinza que lo haga una sola persona. Pues Akromm lo va ver ahora mismo.
 

En cuanto enfilaron la escalera de caracol de la torre, con los gritos de los trasgoides que venían a la carrera, vieron que no tendrían problema en llegar al punto en el que planeaban iniciar la defensa, guardándose la baza de la trampa que sellaba el tunel, si la cosa pintaba mal. Cuando llegaron al tunel, Tarben y Baigron se colocaron hombro con hombro, espadas y escudos en posición, justo con la losa que activaba la trampa a su espalda, mientras Desdemona, Anubis y Zoak se retrasaban algo mas, con el minotauro, con semblante ceñudo, un poco por delante de los otros dos, mas que dispuesto a entrar en combate, y sin duda molesto por tener que hacer de niñera del humano mago, aunque no dijo nada.

El tunel de 3 metros de ancho les permitiría limitar a dos los enemigos que se enfrentaran a ellos, evitando que les rodearan. No era una gran ventaja, pero tendría que valer...

Escucharon gritos y amenazas desde arriba, pero los trasgoides no bajaron con la celeridad que hubiera podido esperar el grupo de heroes, si no que parecieron esperar, y solo iniciaron la bajada de la escalera cuando a ellos se unió un cuerpo embutido en metal, a juzgar por el tintineo que el eco llevaba a sus oidos. No les costó adivinar que, al menos uno de los Orog guardaespaldas de Akromm había acudido hacia la torre:

— No escucho a Akromm... — masculló Desdemona — Hubiera jurado que cargaría sobre nosotros sin pensarselo dos veces... — elucubró, extrañada.

Pero no dió tiempo a mas pensamientos, enseguida aparecieron cuatro enemigos bajando las escaleras, los dos mas débiles, el goblin y el hobgoblin , en primera linea, con armas de distancia preparadas, mientras Pulgas, el bugbear que ya conocía Desdemona, y uno de los Orogs de Akromm detrás, ambos con sus armas de cuerpo a cuerpo preparadas:

— ^** Ahí están!! FUEGOOO!!! ^** — tronó la ronca voz del Orog en un idioma goblin que a Desdemona, que lo tradujo al instante para sus compañeros, le costó entender. Pero enseguida comprendió por qué, y un escalofrío le recorrió la espalda, y un fulgor rojo acudió a sus ojos: esa criatura era nativa del underdark, donde ella y Baigron habían sufrido un largo cautiverio...

¡¡¡ Turno de Desdemona !!! 

Tuvo que hacer  esfuerzo enorme para no salir de donde estaba y ponerse a disparar con la ballesta, a riesgo seguro de dar a sus compañeros, contra aquella criatura que le recordaba al cautiverio que sufrieron ella y Baigron. Pero no se movió, se quedo donde estaba junto la mago, luego se acordó de Leviathan, sin duda necesitarían al giganton, miro a Zoak -quedaos aquí, ahora vuelvo, voy por Leviathan- y salió corriendo hacia el agujero por el que subieron, dirección a Leviathan.

En el segundo en el que ambos bandos se midieron, antes de que se desataran las hostilidades, se produjo un breve silencio, en el que incluso el goblin, dado a chillar en cualquier situación, cesó sus alaridos. Desde los últimos escalones, los goblinoides clavaban sus pupilas en sus enemigos, imaginando mil formas de desgarrarlos y reducirlos a una masa informe que después asarían en espeto, al fuego.

Desdemona fue la primera en reaccionar, y tras avisar a sus compañeros, salió disparada en dirección contraria, en busca de Leviathan.

El Orog soltó una carcajada que sonó ligeramente distorsionada debido al yelmo que portaba, mientras sus ojos amarillos, mas acostumbrados a la oscuridad del Submundo, centelleaban:

— ^** Veis?? Huye incluso antes de entrar en combate!! ^** — zahirió en aquel rasposo dialecto goblin, el orog a la planar, , mientras esta se iba. Dado que era la única en aquel grupo que entendía el idioma goblin, el resto no se enteraron mas de nada mas allá de que el gran orco les dedicaba una chanza. Por lo demás, volvió a rugir:

— DISPARAAADD!!!! — mientras colocaba el hacha en posición, y esperaba paciente su momento...

¡¡¡ Turno de Baigron !!! 

Baigron recolocó el escudo en posición de defensa, y basculó el brazo de la espada, mientras esperaba un momento para atacar. Echó un vistazo a Tarben, tras lo que volvió a mirar a sus enemigos. Esperaría el momento oportuno para avanzar junto con el solámnico, de cara a que no pudiesen rodearlos.

¡¡¡ Turno del Goblin, Hobgoblin y el Bugbear !!! 

Parecían haber llegado a un punto en el que ninguno de los dos grupos parecía ser el primero en iniciar las hostilidades, como si se estuvieran midiendo. Pero entonces, tras el imperativo del Orog, el goblin descargó su flecha contra Tarben, y el hobgoblin su jabalina contra Baigron. Sin embargo, ambos clerigos estaban preparados, y apenas les costó colocar el escudo en posición para detener ambos proyectiles. En ese momento, tronó de nuevo la voz del Orog:

— ^** Ujj etht ösk!! Trrutk ost it Mekkô!! ^** 

Lamentablemente, Desdemona era la única allí que conocía el idioma goblin, así que ninguno de los cuatro heroes entendió nada de lo que dijo, pero no les costó sobreentenderlo, pues ambos dos, goblin y hobgoblin se pegaron a la pared, dejando avanzar al bugbear y al orog.

Aunque ellos no lo sabían, Pulgas, que así se llamaba el bugbear, ardía de cólera por haber sido obligado a huir, casi al borde de la muerte, por el ataque combinado de Desdemona, Kartag y Leviathan. Ahora, apenas quince minutos después, esas heridas estaban cerradas (su oro le había costado), pero la herida en el orgullo seguía bien abierta, y dolía como si le hubiesen echado sal. Estaba mas que dispuesto a cerrarla aplastando al rubio solámnico que le había tocado en suerte.Con el escudo de madera bajo, dispuesto a interceptar la espada del humano, amagó un par de veces con su morning star, antes de lanzar un contundente golpe de arriba a abajo. El dolor en el brazo que agarraba el escudo (y la figurita del Tablero de Khas) hizo apretar los dientes de Tarben, cuando desvió con el escudo el poderoso golpe del enorme goblinoide, pero al menos le permitió abrir la guardia del guerrero orco.

El guardespaldas de Akromm gruño una ultima vez, esbozando una cara de malicia brutal, y avanzó balanceando el enorme hacha hacia Baigron. El primer golpe del orog, sin siquiera fintar se encontró con la defensa ferrea del draconiano, cuyo escudo lo desvió también, provocando que una chispa saltase del lance entre aceros.

A pesar de que Tarben estaba esperando el golpe, éste fue más potente de lo que pensaba. Al parecer la criatura pegaba con todas sus ganas, junto a una furia que debía de venir de algo anterior.

Como fuere, Tarben se había quedado desequilibrado y su golpe no podía ser más errado. El bugbear  fintó tan bien que el caballero golpeó la pared rebotando la hoja contra él mismo y haciéndole un pequeño corte.

Menos mal que Levi no está aquí, o tendría que escuchar sus pullas durante mucho tiempo.