Partida Rol por web

El Cisma

Interludio II: Interceptado

Cargando editor
29/11/2018, 00:51
Narración

Instituto O'Leary de Investigación Médica, Londres. 11 pm

Estabas absolutamente seguro de que allí tenían la sustancia. La que había comenzado todo esto. Un laboratorio tecnocrático usando de tapadera un laboratorio médico, porque claramente los sombreros negros eran todo, menos creativos. Habías pasado la última semana tratando de coordinar con tu cábala el asalto. El tiempo era limitado y cada día que dejabas pasar, era un día en que el peligro aumentaba de manera exponencial.

Y precisamente esta semana era la única semana en que había hecho calor en todo el verano. Una gruesa gota de sudor se resbala por tu frente mientras admiras el edificio. A esta hora la actividad del personal habitual bajaba, lo que hacía más fácil la infiltración. Curry (maldito sea por elegir un nombre clave tan ridículo) había dado con los planos con suerte y había insistido en asistir, pero tenías que ser tú. Samedi (vaya que tenía un sentido extraño del humor) estaba siempre ultimando detalles, y Cazadora (hablando de gente "creativa") pensaba que la mejor manera era un asalto frontal. Gracias a los dioses que todos acordaron en que era simplemente estúpido. 

Pero ahora todos sabían sus funciones, dejándose guiar por tus planes. Curry estaba a algunas calles del lugar, listo a provocar una distracción si las autoridades apareciesen, para retrasarles. Samedi estaba en la cafetería del sitio, vigilando, para cubrirte el trasero en caso de que las cosas salieran mal. Cazadora tenía un coche aparcado muy cerca, lista para usar la artillería pesada en caso de que las cosas se fueran al demonio. La muy jodida no necesitaba excusas con su temperamento, pero confiabas en que fuese al menos infímamente más prudente esa noche. Habíais acordado comunicaros usando sólo los nombres claves, en caso de que las comunicaciones estuviesen interceptadas. Y a tí te habían bautizado "Gato" irónicamente.

-Vaya, este cheesecake se ve...- la voz de Samedi en el comunicador interrumpió tus pensamientos. Esa era su manera de avisar que estaba todo en orden.

-Leñes, Sam, deja la comida. Acá todo en orden, ni un alma a la vista- Era el "ok" de Curry.

-Cuando queráis. Gato, pártete una pierna- confirma Cazadora.

Y ahora estabas tú, frente a la mole de cristal y ladrillo que parecía estar imposiblemente limpia y reluciente, como si hasta las putas bacterias le tuviesen miedo a los secretos que albergaba aquel laboratorio. Según habías deducido, tendrías que llegar a tres niveles subterráneos, justo al ala de análisis virales. La seguridad iba a ser apretada, pero nada que no pudieses sobrepasar. Y dudabas que nadie se esperase algo como lo que estabas a punto de hacer.

Una sensación desagradable comienza a removerse en tu interior: duda. El revolver en el cinto en tu pecho se sentía extrañamente reconfortante. Había mucho en juego y no podías fallar. No podías fallar o ibas a lamentar las consecuencias. Y no ibas a ser el único.

Notas de juego

Hola, hola :D. 

Te presento a Richard "Ratón" Pérez. O "Ratón Pérez", por la versión latinoamericana del "hada de los dientes". Estás afuera del edificio principal comunicándote con otros miembros de tu cábala vía un comunicador simple (de ahí los nombres claves). Lo que quieres es infiltrarte para llegar hasta un "algo" que está allí adentro. El qué, lo iré revelando en las respuestas sucesivas.

En tu ficha hay algo más de información de tus habilidades, incluida la clase de Magia que eres capaz de hacer. Asume que cualquier elemento razonable lo tienes contigo.

Cargando editor
05/12/2018, 00:37
Richard "Ratón" Pérez

—Pártetela tú, ¿no te jode? Yo prefiero conservar la mía. —Una sonrisa cínica se ladeó en mi cara al responder.

Estaba justo delante del conducto de ventilación por el que pensaba colarme en el edificio, vestido enteramente de negro con el material flexible de mi traje silencioso y deportivas también negras. No iba a ser precisamente discreto vestido así en un maldito centro médico, pero si aquello era lo que creíamos, y estaba jodidamente seguro de que lo era, mejor sería que nadie llegase a verme.

Saqué la herramienta multiusos y desatornillé la trampilla. Tomé aire, me concentré en activar mi traje, y lo solté despacio por la nariz. Estaba listo. Más que listo. Sentía la magia crepitar a mi alrededor, cubriendo mi cuerpo. Tenía la adrenalina a tope y eso esparcía una curiosa sensación de calma por mi pecho. Había nacido para esto, joder. 

Me encaramé y me deslicé en el conducto. Antes de avanzar coloqué la tapa de la trampilla en su lugar. A la vista parecería que no había nada fuera de lo normal, pero en realidad estaba sólo pegada con cinta de doble cara en las esquinas. Siempre hay que dejar disponible la puerta de salida, ¿no?

—Voy a entrar. Comeos un pastelito por mí.

- Tiradas (2)

Motivo: Traje silencioso

Tirada: 3d10

Dificultad: 5+

Resultado: 8, 1, 3 (Suma: 12)

Exitos: 1

Motivo: Des+Sigilo

Tirada: 7d10

Dificultad: 6+

Resultado: 1, 5, 4, 6, 6, 6, 1 (Suma: 29)

Exitos: 3

Cargando editor
06/12/2018, 02:53
Narración

El interior de la ventilación olía a metal y a polvo, haciendo que respirar fuese un ejercicio levemente desagradable. Una corriente de aire fría deja su aroma con rapidez, mientras los sonidos atenuados de cada uno de tus movimientos lentos y medidos parecían mezclarse con los ruidos propios de la circulación del aire. Al menos respondías a la eterna pregunta ¿A qué huele un laboratorio tecnocrático? la respuesta era, a casi nada.

-Un par de pastelillos- Sam indicaba que dos investigadores habían entrado a la cafetería.

Según el mapa, necesitabas llegar tres niveles bajo tierra, hacia una de las alas de análisis más aisladas. El tipo de lugar para hacer pruebas sensibles y experimentos que no eran publicitados en ninguna parte. Seguro sería el área de mayor seguridad de todo el complejo.

Mientras caminas te encuentras frente al primer obstáculo. Estabas en la rama central del canal de ventilación, que desciende verticalmente. Lo que significaba que tenías que tener cuidado para no caer y desplomarte tres pisos hacia el suelo y estamparte ruidosamente, para fracaso de la misión. Dada la circulación del aire, las condiciones eran menos que ideales para sostenerse con total firmeza, y la iluminación era más bien pobre, salvo por los escapes de luz desde los otros lugares del laboratorio que eran alcanzados por todo el complejo metálico.

-Veo la seguridad externa haciendo la ronda habitual- informa Cazadora desde su posición. -2 minutos de retraso. ¿De dónde es este tío? ¿Gales?- pregunta sardónica.

Notas de juego

Una cosita: Para ti, la "magia" no es más que tecnología extraña que vas improvisando. Todo funciona bajo ciertos principios científicos, aunque no los conozcas en teoría y sean mas intuitivos. Es decir, hay una lógica y un sentido, aunque te cueste decirlo. :P No es magia en tu traje, es como funciona para quien está entrenado en su uso.

Puedes usar Fuerzas para ver en la oscuridad también.

Descender es una tirada de Destreza+Atletismo a dificultad 8. Pero tienes varios efectos para ayudarte también. Puedes incorporar elementos a todo que le añadan color a la escena si lo prefieres, diviérte. Si algo no encaja, te lo avisaré. 

Cargando editor
12/12/2018, 02:16
Richard "Ratón" Pérez

Una vez estuve dentro, con la trampilla en su lugar, llevé un par de dedos al visor y activé la visión nocturna. Serían muy modernos los jodidos sombreros negros pero no se les había ocurrido poner unos LED en los conductos de ventilación. No contaban con que un ratón pudiera colarse por ahí, seguro. Y no estaban tan limpios, que ahí había polvo acumulado. «Qué decepción, señores», dediqué ese pensamiento con ironía a todos los malditos tecnócratas del edificio.

En cuanto empecé a arrastrarme por el conducto tuve que rebajar mi respiración, respirar ahí dentro era una putada. Al menos me sentía acompañado por las voces que me llegaban al pinganillo de la oreja. 

Tsk. Guardadme la merienda para cuando salga, cabrones —susurré, tan tenue que ya podían estar atentos si querían enterarse—. Tanto polvo me está abriendo el apetito. 

Todo estaba siendo bastante fácil, pero me había estudiado el mapa hasta ser capaz de visualizarlo a la perfección en mi mente y sabía que tenía justo delante una caída de tres pisos de altura. Me senté en el borde y me tomé un momento para preparar mi equipo. Activé los guantes de alta fricción que me permitirían bajar como si fuese uno de esos lagartos que se pegan a los cristales y ajusté la energía antigravitatoria de mi traje. Una corriente me recorrió la espalda al hacerlo y apreté los dientes, pero era una pega ínfima para las ventajas que aportaba. Tenía que darle un buen vistazo a eso algún día. 

Empiezo a bajar —musité cuando el latigazo de dolor desapareció. 

Me giré y bajé a pulso sin mucha dificultad una vez que el suelo no me atraía con la fuerza normal. Y ya desde ahí me fui deslizando, asegurando las manos a cada paso. Al llegar al final me hice una bola y giré sobre mí mismo para quedar con las manos por delante y poder ver el túnel que se abriría ante mí. Hasta el momento todo estaba yendo como la seda, pero estaba seguro de que el asunto se iba a complicar una vez en la planta de destino. Notaba la sangre latiendo con fuerza en mis sienes y las comisuras de mis labios se curvaban ligeramente. Pero sabía que debería extremar las precauciones a partir de ahí.

- Tiradas (5)

Motivo: Visión nocturna

Tirada: 3d10

Dificultad: 4+

Resultado: 9, 8, 5 (Suma: 22)

Exitos: 3

Motivo: Visión nocturna

Tirada: 3d10

Dificultad: 5+

Resultado: 2, 1, 7 (Suma: 10)

Exitos: 1

Motivo: Visión nocturna

Tirada: 3d10

Dificultad: 6+

Resultado: 1, 6, 3 (Suma: 10)

Exitos: 1

Motivo: Traje

Tirada: 3d10

Dificultad: 6+

Resultado: 9, 9, 8 (Suma: 26)

Exitos: 3

Motivo: Destreza+Atletismo

Tirada: 5d10

Dificultad: 4+

Resultado: 2, 8, 2, 9, 10 (Suma: 31)

Exitos: 3

Cargando editor
13/12/2018, 01:43
Narración

Puedes sentir el mordisco de la corriente a través de tu traje, a medida que aumenta tu certeza en que, tarde que temprano, alguno de tus instrumentos revelaría su condición de prototipo. Era un juego de números, después de todo, y sólo era cuestión de esperar, en especial, cuando manejabas tecnología que, según la mayoría de científicos, ingenieros y mecánicos, era todavía imposible. No tenían ni idea. Escalar por la ventilación fue demasiado sencillo, incluso sabías que podías dejarte caer y que tu caída sería amortiguada gracias a tus herramientas. Estabas en la planta indicada, aparentemente.

-Pues date prisa, y vamos a celebrar.- dice Samedi divertida.

-Conozco un sitio...- replica Curry, y las demás responden al unísono con un "uuuugh". -Vale, vosotras os lo perdéis-

La verdad era que había pasado algunas semanas desde que te habías encontrado con Sam. Después de todo, era ella la que había descubierto el objetivo de tu búsqueda: la droga que en los bajos fondos llamaban Luciferium. Tuvo que encerrarse un día entero en su piso debido a las visiones y delirios, la mayoría de naturaleza demoníaca, como si pudiese ver el infierno mismo con sus ojos, según te contó luego Curry. Todo aquello por haber querido llevar a cabo un estudio práctico de sus efectos. Y había sido ella quién había descubierto la pista del laboratorio tecnocrático que contenía suficiente cantidad de esa sustancia para que se convirtiese en un riesgo demasiado grande como para ser ignorado. Todos estuvisteis de acuerdo en que debíais haceros con la muestra cuanto antes. Y tú habías preferido alejarte de Sam, temeroso de los efectos a largo plazo que la droga pudiese haber dejado en su organismo aún cuando el subidón hubiese pasado.

Escuchas pasos y observas a través de la rejilla. Un hombre en un traje oscuro está en la máquina de café. El sonido mecánico del líquido cayendo en un vaso de plástico retumba a través del metal. Un sombrero negro, en medio del complejo, te hacía temer que pudiéseis haber subestimado el grado de seguridad de la instalación. Te quedaban ahora unos 20 metros de desplazamiento lateral hasta el área en donde debía estar el objetivo contenido. Si la información que tenías estaba al día (y esa era siempre una pregunta constante), el túnel de ventilación debía tener materiales diferentes y herméticos en las salas blancas, por lo que tendrías que tener cuidado especial. 

Notas de juego

Debes volver a activar el efecto para poder moverte silenciosamente, o arriesgarte a llamar la atención del hombre. Asumo que desactivas los otros efectos o tendrías que aumentar la dificultad de sucesivos efectos activos simultáneamente.

Cargando editor
13/12/2018, 02:33
Richard "Ratón" Pérez

Iba a responder algo, sumándome a las protestas de Samedi y Cazadora cuando capté ese sonido de goteo y cualquier susurro murió sin llegar a formarse en mi garganta. Atisbé por las rendijas al tipo con la máquina de café mientras anulaba la energía antigravitatoria y la fricción de los guantes, por el momento no los iba a necesitar. Lo que sí iba a necesitar antes de dar siquiera un paso más era el traje silencioso. 

Así que me concentré en activarlo y luego empecé a moverme muy despacio por el conducto. Paso a paso, con cuidado en cada mínimo movimiento. Contenía el aliento para que mi respiración no hiciese ningún ruido y apenas pisaba el suelo de puntillas, como el ratón que era.

Pero antes de terminar ese pasillo ya se había dibujado una sonrisa satisfecha en mis labios. Notaba el palpitar pulsante de mi circulación en los oídos, el sabor de la adrenalina en el fondo de la garganta. Esa excitante sensación de peligro me recorría bajo la piel, manteniéndome alerta. Joder, en ese momento sentía que había nacido justo para ese trabajo, para ese instante, para ese lugar. Nadie podría hacer esa infiltración como yo podía, directo hacia el corazón del enemigo. 

- Tiradas (3)

Motivo: Traje silencioso

Tirada: 3d10

Dificultad: 5+

Resultado: 4, 7, 10 (Suma: 21)

Exitos: 2

Motivo: Destreza+Sigilo

Tirada: 7d10

Dificultad: 4+

Resultado: 2, 8, 4, 7, 5, 5, 1 (Suma: 32)

Exitos: 5

Motivo: Areté visor examinar trampillas

Tirada: 3d10

Dificultad: 4+

Resultado: 1, 6, 1 (Suma: 8)

Exitos: 1

Cargando editor
23/12/2018, 04:42
Narración

Estás en tu salsa, no hay obstáculo que no puedas superar y lo sabes. Es un misterio por qué otras cábalas no se habían acercado a ti para infiltrar las ridículamente inseguras instalaciones de laboratorios tecnocráticos en toda Gran Bretaña. Pero no importaba, tu traje eclipsó hasta el más mínimo ruido de tu respiración y no parecías haber atraído la atención de quien estuviese allí abajo, o alertado algún sensor. 

Unos metros más adelante te encuentras frente a la trampilla que debería estar muy cerca de tu objetivo final. Tus lentes te permiten examinar rápidamente el material: Acero reforzado en conjunción con una aleación mucho más fuerte que no puedes determinar bien. Estaba claro que no iba a ser tan fácil salir por aquí como habías salido en otras partes, pero preparando y ajustando las cargas de taladro, te daría el tiempo de bajar y buscar la muestra del Luciferium.

En ese preciso instante empiezas a escuchar barullo abajo. Ruidos de origen animal. Entonces te atravesó como una flecha el entendimiento: experimentos animales. No habías pensado que en el estado actual, estuviesen usando especímenes en su labor de investigación. Otra capa más que añadía una dificultad imprevista, sin saber la reacción que tendría la droga en aquellas criaturas... si es que habían sido inyectadas. Pero probablemente se tratase de la última barrera. Si tu información era de confiar, entonces sólo había un elemento más del que debías encargarte para solucionar tus problemas y de los tuyos de una vez por todas.

Cargando editor
26/12/2018, 15:39
Richard "Ratón" Pérez

Mis labios se torcieron en una sonrisa llena de confianza tras estudiar aquella trampilla con el visor. Estaba siendo cosa de coser y cantar y me sentía cada vez más seguro de mí mismo, sin que me cupiese duda alguna de que era el hombre idóneo para la tarea. 

Los sonidos que venían del otro lado me habían hecho fruncir un poco el ceño. Ya había visto lo que el Luciferum era capaz de hacerle a las personas, pero no tenía ni idea de cómo podía afectarle a los animales. La incertidumbre por lo que tendría que enfrentar al bajar creaba un cosquilleo eléctrico por mi nuca, manteniéndome alerta y en vilo, pero alimentando mi hambre de emociones fuertes, la misma que me había llevado a experimentar más allá de lo que los científicos consideraban posible.

Con calma empecé a colocar las cargas de taladro en los puntos débiles de la estructura. Estaba excitado por toda la situación, pero mis movimientos eran lentos y seguros, comprobando cada electrodo antes de pasar al siguiente. Todos debían estar perfectamente colocados, con el gel que los mantendría fijos en su lugar y que vibraría con una frecuencia de onda contraria al sonido de la carga, entrando así en fase y anulando el ruido. Todo calculado, todo silencioso. 

Me tomé un instante para observar que todo estaba en su sitio antes de activar las cargas, pero finalmente me concentré y lo hice. Estaba a un paso de conseguir mi objetivo, sólo un obstáculo más y tendría lo que había venido a buscar. Prácticamente estaba crepitando de pura expectación.

- Tiradas (1)

Motivo: Cargas de taladro silenciosas+FdV

Tirada: 3d10

Dificultad: 5+

Resultado: 8, 2, 8 (Suma: 18)

Exitos: 2

Cargando editor
10/01/2019, 04:27
Narración

Tomó unos instantes, pero la nueva configuración de las cargas parecía responder bien. La activación emitió el mismo sonido que haría probablemente una puerta sellada al abrirse, dejando escapar algo de aire, mientras un siseo del material debilitó los marcos y te permitió retirar la rejilla con agilidad. Das un vistazo y te das cuenta de que el mapa que posees no es 100% exacto, y que aunque deberías estar justo en el laboratorio indicado, estás a unos metros.

Allí abajo, en lugar de las mesas de análisis y del equipo de alta tecnología que podrías esperar, en su lugar hay varias jaulas con animales: un par de chimpancés, un perro de aspecto algo joven, varios pequeños ratones y un cerdo. El único que te puede ver directamente es uno de los monos, quien inmediatamente comienza a saltar con gran ahínco, chillando y haciendo un estruendo. Si supieras algo más de comportamiento animal, quizás podrías entender mejor su reacción, pero por ahora parecía que estuviese dando la alarma.

Y estabas tan cerca. No había otra entrada al laboratorio que veías contiguo, sólo una puerta de aislamiento y estarías en el lugar. Según tus cálculos, el sitio podría no estar solo, pero incluso eso estaba contemplado y para bien o para mal, quien supiese demasiado del Luciferium sólo iba a ser un problema. Había conocimiento que no debía existir, pues en las manos equivocadas, en especial, en las manos de los tecnócratas equivocados, las consecuencias podían ser desastrosas. Y más específicamente, fallar en la misión justo ahora, podría ser desastroso para ti en el corto plazo.

Cargando editor
17/01/2019, 00:58
Richard "Ratón" Pérez

Me sentía seguro de mí mismo mientras esperaba a que las cargas hicieran su trabajo. Y el fastidio por aquel pequeño error en el mapa fue leve en un primer momento. Eran apenas unos metros, estaba al alcance de mi mano y la misión se completaría con éxito... Pero aquel maldito mono tuvo que ponerse a gritar y eso me obligaba a pensar a toda prisa.

¿Cuánto tardarían en venir a ver qué le pasaba al animal? Estaba preparado para acabar con quien se pusiera en mi camino, era algo que ya habíamos contemplado al hacer el plan, pero una cosa era encargarme de una persona o dos y otra de un grupo de guardias. ¿Habría cámaras allí? Mis ojos se movieron rápido, revisando el techo con el visor activado, un instante antes de que emitiese un leve resoplido. Tampoco es que fuesen a necesitarlas, seguro que había mil y un artilugios de seguridad allí, cosas que me habría encantado analizar con tiempo y paciencia... pero no tenía de ninguna de esas dos cosas.

Tocaba moverse rápido, no había otra. Notaba la adrenalina latiendo bajo mi piel, impulsándome en cada pulso para que me pusiera en movimiento. Si me hacía con el Luciferum y conseguía entrar de nuevo en el conducto antes de que irrumpiesen en la sala todavía tendría una posibilidad de salir. Mi mente ya iba buscando posibles recorridos en el mapa cuando mis pies se pusieron en marcha. 

Saqué el arma con silenciador que llevaba preparada en el cinturón mientras recorría esos metros y me lancé hacia la puerta de aislamiento. Entrar, coger la muestra, salir. Ese era ahora todo mi objetivo y tenía la mente centrada en ello. Y si para ello tenía que disparar a quien intentase frenarme... no me iba a temblar la mano al hacerlo.

Cargando editor
17/01/2019, 02:39
Narración

Una cámara observa desde lo alto de la entrada que te separa del lugar indicado. Nada que hacer, seguro tenías algunos segundos de reacción. ¿Verían algo tus compañeros? Probablemente no tardarían en avisar la movilización de los equipos de seguridad. En tu mente corre el tiempo, y ahora mismo te jugabas el todo por el todo, obtener rápidamente el Luciferium, y salir de allí tan rápido como te fuese posible.

La puerta no tenía mayor seguridad, se abrió con un pequeño silbido, mientras los animales a tu alrededor empezaban a gruñir, a ladrar o a chillar a mayor volumen, todos alterados por tu presencia. No había tiempo para intentar nada, y tampoco podías decir que poseías las habilidades para afectarlos de alguna manera. Si fuesen máquinas o sistemas de seguridad, aquello habría sido coser y cantar.

El laboratorio es blanco, muy blanco, y todo da en él una sensación de asepsia, desde la arquitectura exageradamente recta, con ángulos redondeados, hasta la carencia de colores fuertes. Los reflejos de vidrios, los monitores con visualizaciones microscópicas, los espacios con luces azuladas, los experimentos, las lámparas de neón bastante brillantes, parecía sacado de alguna película de ciencia ficción. Incluso la ausencia de olor tenía cierto peso en sí misma, dejando un extraño vacío alejado del polvoso aroma de la ventilación o incluso del persistente sabor a sudor y a nervios que empezabas a notar proviniendo de ti mismo.

Cargando editor
17/01/2019, 03:11
Doctora

Lo único disonante, en medio de aquel cuarto y dándote la espalda, era una figura humana. Una mujer, casi de tu misma altura, de cabello negro corto, liso y mal arreglado, usando lentes protectores y un traje azulado. Si te había escuchado (y con el ruido de la puerta, era imposible que no), no parecía reaccionar de inmediato.

-¿Archer? No vas a creer lo que he...- dice girándose, revelando un rostro juvenil, de no más de 30 años y rasgos asiáticos. Sus ojos son oscuros y su boca pequeña, aunque sus labios parecen más bien carnosos. No lleva maquillaje, y tiene una expresión inteligente difícil de ignorar. Te observa y le toma unos instantes reaccionar. -Tú no eres...- dice y parece registrar tu presencia con veloz minuciosidad. De inmediato se mueve, en dirección hacia algún lugar en la mesa, llevando consigo todavía unas pinzas en la mano que no tiene tiempo de soltar.

- Tiradas (1)

Motivo: Iniciativa

Tirada: 1d10

Resultado: 8(+7)=15

Notas de juego

Lanza por iniciativa (Dado+Des+Astucia). Si sacas más de 15 en total, actúa antes que la doctora. Si sacas menos, declara tu acción solamente.

Cargando editor
17/01/2019, 10:36
Richard "Ratón" Pérez

Puta mierda. Tenía que ser una mujer. Al final iba a ser cierto que cuando las cosas se empezaban a torcer lo hacían una detrás de otra. Por un instante fugaz me pasó por la mente un cambio de planes, llevármela de rehén o simplemente intimidarla. De estar allí conmigo Cazadora me habría dado un buen golpe mientras me llamaba machista de mierda, sólo por dudar. Pero aquel segundo se esfumó en cuanto vi que la tipa reaccionaba. No podía jugarme la misión sólo porque mi difunta mamá me decía que no debía pegarle a las mujeres. Tenía que mantener la mente fría y moverme rápido. 

Mi mano alzó la pistola y ni lo pensé antes de apretar el gatillo. Sabía que estaba apostando a una sola carta y no podía fallar, no me lo podía permitir. En cuanto el olor fuerte de la pólvora empezó a invadir mis fosas nasales ya estaba moviendo los ojos rápido, en busca del objetivo, la muestra de Luciferum, pero sin dejar de vigilar a la doctora o lo que fuese por el rabillo del ojo, preparado para disparar de nuevo hasta que dejase de ser un peligro.

- Tiradas (5)

Motivo: Ini

Tirada: 1d10

Dificultad: 16+

Resultado: 7(+6)=13 (Fracaso)

Motivo: Destreza+Armas Fuego+FdV

Tirada: 5d10

Dificultad: 6+

Resultado: 30 (Exito)

Motivo: Destreza+Armas Fuego+FdV

Tirada: 5d10

Dificultad: 6+

Resultado: 3, 7, 3, 5, 4 (Suma: 22)

Exitos: 1

Motivo: Daño disparo

Tirada: 6d10

Dificultad: 6+

Resultado: 6, 6, 10, 3, 4, 7 (Suma: 36)

Exitos: 4

Motivo: Ini

Tirada: 1d10

Resultado: 7(+7)=14

Notas de juego

Declaración de intenciones: Disparar.

En realidad sería +7, le había sumado destreza y alerta, no astucia y ahí tengo uno más. Tengo especialidad Reaccionar, ¿no me quieres dar un +1 más por ello ;P?

Dejo tirada de Iniciativa para el siguiente turno, por si hace falta.

Cargando editor
31/01/2019, 16:36
Narración

La mujer se lanzó hacia un costado, sobre una mesa, donde varios papeles y documentos y carpetas están. No parece que esté armada, pero tus reflejos son más rápidos que tu análisis. Parece tomar su cuaderno, cuando un disparo la atraviesa en medio de la espalda. El ensordecedor ruido parece sacarte de tus propias cavilaciones. Su cuerpo cae hacia adelante, inmediatamente debilitado, aunque la herida se demora un poco en sangrar. No te está mirando, sino que se inclina sobre aquella mesa, dejando ver un tablero en donde hay varias anotaciones. El olor a pólvora te llena la nariz y una leve molestia en tu mano como cada vez que disparas.

El tablero del fondo llama tu atención unos instantes: Es una tabla que codifica la "Sustancia 563D", y varios numerales romanos contra abreviaturas tipo "Exp. 1", con anotaciones en chulo en su mayoría. La mujer respira con debilidad, escuchas como tose un poco, tras no haber pasado más de unos segundos desde tu disparo.

En donde estaba ella, puedes ver un microscopio, una caja con varias muestras en laminillas de vidrio. No muy lejos hay un frasco alargado dentro de lo que parece ser una caja con aspecto de microondas. En su interior, un líquido rojizo. Más al fondo hay varios tubos de ensayo con líquidos de colores similares dispuestos en fila. Eso tendría que ser lo que buscas, finalmente. Era el momento de deshacerse de todo, era el momento de acabar con el Luciferium. Si tu información era correcta, habían sido los tecnócratas quienes habían acabado por recoger las muestras que existían en la calle. No había forma de saber cuántos laboratorios tendrían más de la sustancia, pero ese ya no sería tu problema, sería el de otros, desconocidos, pero con tu mismo objetivo en mente. Y si algo tenían los otros, era recursos a su disposición. Como tú.

El ansía por destruír la sustancia empieza a aumentar, como si tus sentimientos se vieran avivados por la adrenalina y la cercanía del éxito. Te habías infiltrado allí, nada ni nadie iba a interponerse entre ti y un "misión cumplida".

Notas de juego

Penúltimo post, Morg :O.

Cargando editor
12/02/2019, 12:56
Richard "Ratón" Pérez

El pulso me golpeaba en las sienes con fuertes latidos. Había llegado mi momento, lo sabía. Esa certeza se iba extendiendo bajo mi piel al mismo ritmo que lo hacía la adrenalina, espabilándome, haciéndome más fuerte, más decidido. Imparable. No tenía que haber salido así, tendría que haber destruido las muestras en silencio y salir por dónde había entrado. El plan era impecable, pero nunca se pueden controlar todas las variables y esa vez me había tocado a mí la pajita más corta.

Chasqueé la lengua y afilé mi mirada. Todavía notaba en mi mente los últimos resquicios de razón coleteando, en busca de alguna solución menos suicida que la que estaba asentándose. Sacudí la cabeza y traté de fijar en mi memoria el tablero del fondo, por si acaso. También eché un vistazo fugaz hacia el papel sobre la mesa. Maldita sea, si sólo tuviera algo más de tiempo para hacérselo llegar a los otros...

Nota mental —dije en voz alta, mientras movía la mano con el arma para dejar de apuntar a la mujer y apuntar a un recipiente que parecía volátil. Mi pulgar acarició una muesca en la culata, activando una bala incendiaria—: para la siguiente incursión incluir una cámara de vídeo.

Y disparé. 

Aspiré el aroma de la pólvora, aderezada con ese compuesto químico que provocaría la primera chispa, la que iniciaría el fuego. Una sonrisa se torció en mis labios. Notaba la sangre galopar por mi interior, todos mis sentidos amplificándose por pura biología. Mi mente evadiéndose en una nube, como si hubiese tomado la jodida pastillita azul. Mi pulgar se movió de nuevo, cambiando la muesca de posición para pasar al disparador una bala más contundente, la que expandiría el fuego creado por la primera, la que me pondría la medalla de «Misión cumplida», aunque lo más seguro era que no llegase a poder lucirla. Pero aquello era más grande que yo mismo, más grande que esa mujer, más grande que todos. Había visto lo que podía hacer el Luciferum y no iba a permitir que corriese por las calles adulterado por los jodidos hombres de negro y sus doctoras de bata blanca. Y una mierda.

A tomar por culo. 

Mis ojos se entrecerraron, como preparándome para lo que iba a venir, y pulsé el gatillo por segunda vez en dirección al fuego. 

- Tiradas (4)

Motivo: Destreza+Armas fuego

Tirada: 5d10

Dificultad: 4+

Resultado: 10, 1, 9, 9, 6 (Suma: 35)

Exitos: 4

Motivo: Bala que prende

Tirada: 3d10

Dificultad: 5+

Resultado: 7, 8, 1 (Suma: 16)

Exitos: 2

Motivo: Destreza+Armas fuego 2

Tirada: 5d10

Dificultad: 4+

Resultado: 10, 4, 7, 9, 7 (Suma: 37)

Exitos: 5

Motivo: Bala expansiva + Quintaesencia

Tirada: 3d10

Dificultad: 5+

Resultado: 6, 7, 5 (Suma: 18)

Exitos: 3

Cargando editor
06/03/2019, 15:08
Narración

-Algo pasa, se mueven los guardias- había dicho Samedi. Pero los ecos de sus palabras se perdieron en el retumbar de la llamarada que se generó luego de que las balas golpearan el contenedor y provocaran un rápido incendio.

-Gato, ¿qué coño ha pasado?- Cazadora había replicado tras unos instantes.

Una alarma comenzó a sonar, y de repente sintió como su piel se humedecía y como las llamas que habían empezado con agresividad empezaban a caer sobre todos los papeles y elementos del laboratorio. Los aspersores, habías olvidado por completo los aspersores. Pero para cuando estabas a punto de solucionar ese problema, dos punzadas en tu espalda te hicieron arquear. Sentiste como tu abdomen iba humedeciéndose también, pero esta vez el líquido era cálido.

No habías escuchado la puerta. Allí, había un hombre alto, con un sombrero negro, con ojos claros y una impecable presentación. Puedes ver por el rabillo de tu ojo que sostiene un arma en la mano y que te mira con una expresión de alarma que deforma curiosamente lo que seguramente era un rostro acostumbrado a una constante mueca flemática e indiferente.

-¿Tíos, reporte? ¿Gato?- Curry. El jodido había elegido el mote más absurdo del mundo, pero al menos era mejor que llamarle Merodach. Nunca habías sabido pronunciarlo bien.

Estás de rodillas. El líquido que surge de ti es negro, como tu avatar corrupto, como la maldad que corre por tus venas desde que habías vendido tu alma a los oscuros poderes del abismo. El Luciferium había sido un peligro y la voluntad de tus amos en la sombra te había implantado la urgencia de acabar con aquella sustancia. Si Madeleine te hubiese visto bajo su influencia... habría descubierto tu verdadera naturaleza. Tu sangre, negra y espesa, parece regarse con vida propia, creando putrefactas burbujas que explotan en carcajadas malignas desde algún lugar. 

-Abortad. Salgo de aquí- había dicho Maddie desde la comunicación que aún sonaba en tus oídos. Te sentías frío. -Cazadora...-

-Acomodo el coche. Gato, si estás vivo, este es el puto momento en que tienes que decir algo...- amenazó Artemis entre dientes. 

Pasos cerca de ti. El hombre de negro se inclina y te revisa. -Joder...- dijo únicamente, como si aquella palabra englobara todas las sensaciones que hasta su rostro era incapaz de expresar, mientras te quitaba con suavidad el arma de la mano y caminaba hacia la doctora. No te quedan fuerzas, y te queda muy poca vida.

-Laura. Lo lamento tanto, no pensé...- se acomodaba, mirando la herida. La mujer apenas si tenía aire en sus pulmones.

-Ar... cher...- dijo mientras miraba hacia la mesa.

-Puedes decirme Archie- respondió el hombre y asintió. Caminó hacia donde estaban las muestras, la mayoría arruinadas. El oscuro icor que parece tu sangre quema. Puedes sentir como humea y como te hundes en un abismo de desesperación. Estás a contados instantes de rendirle cuenta a las entidades con las que habías pactado.

-Maldito seas- murmuró Archer, mientras tu consciencia te abandonaba definitivamente. Ya no volverías a despertarte más.