Partida Rol por web

Finales y principios

[Capítulo 3.3] La cocina

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07/02/2020, 02:16
Narradora

Nueva York, lunes 16 de noviembre de 2037, 17.30.

Lo que los habitantes de Major Morris llamaban con cierto optimismo «la cocina» había sido tiempo atrás una sala para el descanso de los trabajadores del centro de salud. Los que habían tenido la suerte o la desgracia de haber vivido los tiempos antes de que el mundo se degradase podrían imaginar con cierta facilidad a médicos y enfermeros tomando allí un café o masticando barritas energéticas antes de continuar pasando las consultas. 

En el momento que nos atañe, la sala había sido acomodada de la mejor manera para poder preparar allí comida para once personas varias veces al día. Dos de las paredes estaban vestidas con encimeras, incrustadas en la pared. Incluso había un frigorífico, que hacía años que no funcionaba, pero que al menos mantenía los alimentos almacenados con oscuridad y ligeramente más frescos que fuera de él. En otra de las paredes había un gran ventanal por el que entraba la luz de la mañana y en la última, además de la puerta, alguien había colgado un mueble estrecho de madera en el que guardar algunos botes de las especias provenientes del propio huerto. 

El hornillo eléctrico que habían encontrado y reparado estaba en el centro de la encimera, como presidiendo la repisa con su presencia. Bajo ella y encima, colgando de la pared, había algunos armarios, donde guardaban los platos y vasos que habían podido reunir a través del tiempo, sin que prácticamente ninguno de ellos perteneciese al mismo juego que los demás. Había también algunos cubiertos que usaban para comer o cocinar, aquellos de puntas romas que habían desechado como posibles armas. En uno de esos armarios había un par de cazos y una sartén que sin duda había conocido tiempos mejores, pero que todavía seguía realizando su función.

Finalmente, en el centro de la sala había una mesa alta, construida a partir de un par de camillas de metal bien atadas entre sí y coronadas por una tabla de madera, que permitía que varias personas trabajasen allí al mismo tiempo. 

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08/02/2020, 16:11
Cassandra (Cass)

Cassandra se dirigió a la cocina con un par de metas en mente, poner en orden sus pensamientos mientras sus manos trabajaban y hablar con Daniel.

Para la primera lo tuvo fácil, en cuanto llegó se puso a mirar qué es lo que había que podían preparar y no lo hubiesen acabado de comer, y echó un ojo a las especias que tenían. Si algo había sacado en claro de su anterior éxito culinario era que esas pequeñas hierbas habían tenido mucho que ver, ellas y su descubrimiento por parte de la buscadora.

El segundo tema le era más complicado. El hecho de que Clem se les hubiese unido no tenía nada que ver, pues sabía que la bardo siempre estaba dispuesta a echar una mano, pero parecía que después de la reunión había gastado toda su verborrea pública. A pesar de eso no tardó mucho cuando rompió el silencio en el que se hallaba sumida, se impuso hacerlo, se pasó la mano por la frente y se lanzó.

—Oye Dan, gracias por lo de antes. —empezó de forma un poco genérica, pero una vez que comenzó siguió mientras sus manos pelaban y cortaban —Por haber minimizado el desencuentro con Morgana y tratar de seguir adelante, no ha debido ser fácil... aunque realmente no sé que ha pasado, pero de tener un arma quizás yo misma le habría disparado ya en alguna que otra ocasión.

Una sonrisa torva adornó su semioculto rostro por un instante, estaba segura que había más de una y más de dos ocasiones, pero también lo estaba de que la ex marine no haría nada contra ellos, como ya había dicho. Lo que la lastraban eran sus formas "o a mi modo o es una mierda".

—¿Tú estás bien? Si quieres... estoy aquí para lo que necesites.

Iba a decir "hablar", pero para eso y para aconsejar no es que ella estuviese sobrada, por lo que lo dejó así y esperó que el joven entendiera que podía contar con ella.

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10/02/2020, 00:19
Clementine

Clem ayudaba a lavar y cortar las verduras, tarareando, distraída, pensando en la conversación que habían tenido todos antes. En los pasos a seguir. En lo que debería hacer los próximos días. Suspiraba, casi sin quererlo, mientras hacía cuentas de cuántas verduras debía añadir para satisfacer las necesidades de todos. 

Calló cuando escuchó hablar a Cass. Negó, con una media sonrisa- Será mejor que no tengamos muchas armas para que algo así pueda pasar. A las pistolas las carga el diablo.-dijo, aunque no parecía que hablase con absoluta seriedad. Entonces miró a Daniel, apartando un momento el cuchillo de su mano- Oye, Dan, ¿qué fue lo que pasó exactamente? - preguntó, a falta de una pregunta específica por parte de Cass. 

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10/02/2020, 10:19
Daniel Green

-No hay nada que agradecer. Tras lo ocurrido y mientras estuvisteis en la cripta, hablé con Robin. Verbalizarlo me sirvió para tener cierta perspectiva. En caliente se dicen demasiadas cosas y no todas oportunas. O no se dicen, que a veces es peor. Pero bueno, la cosa es que me relajé bastante, el miedo se calmó y el orgullo bajó algunos escalones -dijo-. La nuestra es una convivencia no siempre fácil. Dudo que con Morgana llegue a estar del todo bien, pero mientras nos respetemos, la cosa funcionará y tal vez sea cosa de tiempo que lleguemos a entendernos. De momento, estamos dando los primeros pasos, que son los más fáciles. Pero esto va a ser un día a día -afirmó mientras ayudaba a Cassandra pelando y picando algunas cebollas-. Y sí, estoy bien -miró a Cassandra-. La verdad es que me siento muy bien. No sé, parece estúpido con todo lo que ha pasado -dijo encogiéndose de hombros-, pero... Sí, estoy guay. Y la venda en la frente me queda que te cagas -se echó a reír con ganas. Cuando se calmó, guiñó un ojo a Cassandra-. Sé que estás ahí y te lo agradezco -se inclinó sobre la mujer y le dio un cariñoso beso en la mejilla-. No dudes que te buscaré si te necesito.

Entonces llegó la voz de Clem.

-Te equivocas, Clem. Esa arma la cargué yo y la disparé yo. El diablo no tiene nada que ver. De hecho, nunca tiene que ver salvo que consideres que los hombres somos el diablo -dijo seriamente-. En cuanto a lo que pasó, no sé si mefrece la pena repetir demasiadasveces lo mismo. Tuvimos un desencuentro verbal, me cogió del cuello y me levantó del suelo golpeándome contra una pared, pensé que iba a matarme y disparé -había obviado el pánico sentido, el terrible dolor en las pelotas que también había estrangulado Morgana, lo inesperado de su ataque. No merecía la pena hablar de aquello.

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14/02/2020, 10:39
Cassandra (Cass)

Las palabras de Daniel hicieron que la buscadora fuera asintiendo, cuando dijo aquello de que la venda le daba un aire malote la joven negó con la cabeza mientras acompañaba la risa del chico con su propia sonrisa, pero cuando sintió el beso en la mejilla su cejas se elevaron. No es que no estuviese acostumbrada a las muestras de afecto, es que éstas solían ser únicamente entre su hermana y ella, que alguien "ajeno" lo hiciera siempre era motivo de sorpresa, aunque viniendo de Dan no pudo más que sonreír y asentir.

La explicación de lo sucedido fue como la vez anterior, hablando de generalidades sin especificar cuál había sido ese desencuentro y eso era lo que a Cassandra le hubiese gustado saber, no por cotilleo si no por saber cuáles eran las diferencias que habían llevado a esa situación. Esperaba que sabiéndolas podría hacer algo para limar asperezas, pero estaba visto que ninguno de los dos iba a soltar prenda. Suspiró.

—Ningún desencuentro entre nosotros debería acabar en violencia, —dijo englobando tanto los golpes de Morgana como el disparo del joven, pues ambos habían sido culpables del desenlace —para eso ya está el exterior.

Puso su mano por un instante en el antebrazo de él en un gesto de comprensión, no creía que hiciese falta que dijera que esperaba que algo así no volviera a suceder entre nadie del Morris, y luego la retiró. Continuó preparando las verduras, metiéndolas en la olla llena de agua, y se dirigió a la sección de las especias dispuesta a encontrar una buena combinación.

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14/02/2020, 12:50
Daniel Green

-No, no debería -dijo con seriedad-. Pero si sirve de escuela, aceptaré lo ocurrido. Nada peor que no saber aprender de los errores. Propios y ajenos -sentenció-. Una  cosa -señaló cambiando de tema-, la vaca. ¿Alguien la ha ordeñado? Bueno, la pregunta debería ser si alguien sabe ordeñarla, pero la cuestión es que de haberlo hecho la leche debería estar por algún sitio. Y habría que cocerla -señaló-. Creo que sería una buena sorpresa que contáramos con un vaso de leche para después de la cena. 

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16/02/2020, 15:31
Cassandra (Cass)
- Tiradas (1)

Notas de juego

P.Tirada...   ¡Ya la he liado! dos tiradas seguidas es lo que tiene, espero que en Gritos no me haya quedado ciega   XD

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16/02/2020, 22:09
Clementine

Era un dicho, Dan. Quería decir que las armas son peligrosas. Atraen la violencia. -aclaró, encogiéndose levemente, sintiéndose de pronto reprendida. Suspiró. No podía evitar preguntarse por qué no podía sentirse libre de hablar sin que casi todos en el Morris la tomasen como una fanática o mencionasen sus creencias sólo para tratar de dejarlas en evidencia. ¿Qué de malo tenía creer? En un mundo como en el que vivían, creer era bueno. Creer era sano para el alma. 

Se centró en seguir cortando la comida. De repente echaba tremendamente de menos al reverendo Steven. E incluso a Madre Laura. Alguien con quien hablar de los asuntos del alma, sin reproches. Incluso hablar con Macbeth, sin que él fuese creyente, le resultaba más sencillo.

Entiendo que tuvieras miedo. Morga se pasa. Es violenta, impulsiva e impredecible. Pero sé que nunca nos haría algo así. -dijo, encogiéndose de hombros. A pesar de sus palabras, su tono parecía ser más bien conciliador, y su expresión no pretendía sojuzgar a nadie- Y no sé si alguien ha ordeñado la vaca. La verdad es que nunca he tenido que encargarme de una. 

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17/02/2020, 10:18
Daniel Green

-No lo había oído nunca -dijo Daniel-. Un dicho extraño.

No dijo más al respecto. No tenía sentido insistir en que un arma solo era un objeto y que quizá los cargados por el diablo fueran los hombres. Igualmente no quería seguir hablando de Morgana y de lo ocurrido. Parecía que todo el mundo quería detalles pero, a un tiempo, pensaban que su reacción había sido desmedida.

-Yo tampoco he ordeñado nunca una vaca -afirmó-. Pero no tiene que ser tan difícil, ¿no?

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18/02/2020, 01:37
Narradora
- Tiradas (1)

Notas de juego

Habéis tenido un éxito para cocinar, yo en la tirada de dificultad 0, así que la comida os quedará bien. No será tampoco la megasupermaravilla, pero estará buena ;).

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20/02/2020, 00:14
Clementine

Y, ¿le pasará algo malo a la vaca, si no la ordeñamos?- preguntó, genuinamente preocupada, observando cómo iba quedando la comida- Bueno, pues... Ni tan mal, ¿no? Creo que tiene buena pinta.-comentó, notando el hambre en la boca de su estómago, aunque aún sin probar bocado. 

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20/02/2020, 09:53
Cassandra (Cass)

Después de echar un par de especias Cassandra removió la cena, al cabo probó el caldo y asintió a las palabras de Clementine.

—No está mal, ahora a ponerlo bajo y dejar que vaya despacito. —dijo haciendo lo que decía.

Se quedó un momento pensando en lo que habían dicho de la vaca, que todavía no había sido ordeñada y si eso era malo, y llegó a la conclusión de que debían liberar al animal de ese peso.

—Mejor vamos a ordeñarla ahora que parece que tenemos un rato de tranquilidad. Me suena de haber leído sobre ello en algún libro de la biblioteca, se ha de coger la tetilla con todos los dedos, apretar de forma suave y con dos a la vez.

Como muchas veces la teoría no solía ser un misterio para la buscadora, siempre había sido una devoradora de "saber", pero de ahí a la práctica había todo un arduo camino, como bien estaba comprobando en las clases con Morgana.

- Tiradas (1)

Notas de juego

La comida no, pero la vaca se va a quedar a gusto   XD

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20/02/2020, 11:27
Daniel Green

-Pues vamos a por la vaca. Si es como dices, no tiene que ser tan complicado. Eso sí, habrá que llevar algún cubo para recoger la leche -dijo-. ¿Dónde esta la vaca ahora mismo?

La idea de ordeñar al animal le parecía agradable y solo pensar en un vaso de leche, un lujo casi inasequible para el común de los mortales, hacía que se le hiciera la boca agua.

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21/02/2020, 02:03
[Titans] Anastasia

Al trío de aspirantes a ordeñadores no les costó encontrar a la vaca. El animal estaba en el pasillo, atado cerca del almacén, en una zona del refugio en el que flotaba el mal olor de sus heces. En ese momento se encontraba rumiando algunas hierbas que alguien le había llevado y que parecían restos del huerto. 

Alcanzaron también a ver a Shamira, que salía del almacén con prisa y con las mejillas tan rojas que su rostro parecía una cereza madura. Les hizo un gesto con la mano, nerviosa, y se fue rápido hacia las escaleras para subir a la planta superior.

La vaca alzó la cabeza para mirarlos cuando se acercaron a ella y resopló por la nariz, sin oponerse a que la tocasen. Parecía bastante acostumbrada a tratar con gente y si encima era gente que le daba de comer, tanto mejor. 

Ahí estaban sus ubres, listas para ser ordeñadas. Mirándola bien sí que parecían estar más llenas que cuando había llegado unos días atrás. Ninguno de los tres tenía experiencia con un asunto como ese, pero tal vez entre los tres pudieran llenar el cubo que había cogido Daniel antes de salir de la cocina.

- Tiradas (1)

Notas de juego

De momento ganáis por un éxito, si lo vais a hacer ayudándoos entre los tres, faltarían los dos dados extra por la ayuda. Podéis narrar vosotros directamente y explayaros en la experiencia. 

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22/02/2020, 01:53
Daniel Green

-Buff -bufó Daniel ante el olor a excrementos y orines y sacudiendo una mano ante la nariz-. No creo que esta sea la mejor forma de tener una vaca. Vale que el huerto sea demasiado tentador para ella, pero mejor tenerla atada fuera sin opciones a que nos coma el huerto que esto. Es insoportable. No basta con ordeñarla. Luego habría que limpiar todo esto y aprovecharlo para abonar el huerto. Seguro que es una buena mejora en nuestras cosechas.

Se acercó a la vaca, quien pese a su resoplido, no parecía especialmente molesta por su presencia.

-Muy bien, bonita. Tú tranquila -dijo Daniel acariciando su testuz y sin saber muy bien qué hacer con el animal. Miró a sus dos compañeras con cara de circunstancias-. No debe ser tan difícil, ¿no? Cass, ¿qué te parece si te pones aquí delante y la sujetas para que no se mueva?

Miró a un lado y a otro y debajo de la vaca. Allí estaban sus ubres y aquellos enormes pezones que debería coger con sus manos.

-Así que le cojo una tetilla con todos los dedos y aprieto de forma suave y con dos dedos a la vez -comentó repitiendo lo que Cass decía haber leído y haciendo el gesto en el aire-. Bueno, creo que puedo hacerlo. No es tan diferente de... -y se echó a reír, más por nerviosismo que por diversión-.  Empecemos poniendo el cubo bajo esas tetas llenas de leche -cosa que hizo. Parecía que la cosa no iba tan mal hasta que Anastasia movió una pata, volcando el cubo. Volvió a colocarlo bien pero una nueva patada acabó con el cubo a unos metros-. Ehhh, suave, pequeña. Clem, ¿qué tal si te pones al otro lado y sujetas el cubo?

Se acuclilló junto a la vaca y luego se puso de rodillas. De cualquiera de las dos formas, estaba incómodo y no tenía visual de aquello que debía manejar. Alargó una mano y cogió, no sin cierta aprensión, uno de los pezones. Era inusualmente suave pero el mugido de la vaca, que sonaba a que no le había hecho mucha gracia aquel contacto, hizo que Daniel se echara para atrás sorprendido por la reacción y acabara sentado en el suelo.

-¡Joder! -exclamó. Volvió a mirar a las dos mujeres, con la expresión de un adolescente a reventar por sus hormonas que fuera a tocar por primera vez el pecho de una mujer-. ¿Habrá sido que tengo las manos frías? Lo cierto es que no es muy agradable que nadie te los toque con las manos heladas -declaró estúpidamente. Sin esperar respuesta, comenzó a frotarse ambas manos hasta que tomaron un decidido color rojo-. Vamos allá

Volvió a arrodillarse ante la vaca y acabó apoyando la cara en su costado. El olor a mierda se intensificó y Daniel acabó respirando por la boca, a punto de tener una arcada.  Estiró las manos y tomó dos de las tetillas.

-Apretar con dos dedos -dijo para sí. La mecánica parecía sencilla, pero tras apretar era más que consciente que de allí no salía nada. Apretó algo más fuerte y un nuevo mugido acompañado de un rápido movimiento de cola que le cruzó la cara volvió a tirar hacia atrás a Daniel-. Hostia, vaya rabazo me ha metido -se frotó la mejilla, mirando desde aquella posición la ubre y el enigma de su manipulación-. Vamos a llevarnos bien, ¿eh? O votaré por que hagan filetes contigo -dijo a la vaca.

Era evidente que algo fallaba. Lo aparentemente sencillo del proceso, se complicaba a la hora de la verdad. Era el momento de plantearse una nueva estrategia. Miró con ojo crítico aquella ubre, los cuatro pezones, sus dos manos.

-A tomar por culo. A grandes males, grandes remedios. Aquí hay que valerse de la experiencia -dijo sin dirigirse a nadie en particular-. Esto es como un tío con cuatro pollas al que hay que cascárselas para sacarle la leche. Y tú, Anastasia, estate quieta y nos llevaremos bien. Cass, si te parece le cantas algo a ver si así se relaja. Clem, cubo listo y reza para que esto vaya bien.

Se puso en posición, estiró las manos agarrando dos de los pezones, cerró los ojos y empezó a trabajar aquello, mientras su mente volaba.

Daniel, piensa en un trío. Tienes dos rabos entre manos. Vale, un poco flácidos pero a esto hay que sacarle todo el jugo. Así, suave pero con firmeza, de arriba a abajo. Una y otra vez. Una y otra vez. Da igual que no se pongan duros. Lo importante es que terminen. Venga. Arriba, abajo. Arriba, abajo.

Plinck, plinck, plinck.

Los chorros de leche fueron cayendo en el cubo y un mugido más que placentero inundó el lugar.

-Joder, quién me iba a decir que iba a acabar siendo un mamporrero de vacas -dijo mientras seguía dándole-. Y de esto, ni una palabra a nadie, ¿oído cocina?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Se me ha pasado desglosar los dos dados de ayuda, pero ya se ve que son dos 5.

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23/02/2020, 19:03
Clementine

Clementine se quedó de pie, mirando a Daniel, y a la vaca, alternativamente, sin saber muy bien qué hacer. La vaca estaba flaca, pero seguía siendo un animal grande. Oírla mugir de aquella manera cuando Daniel hizo su primer intento, provocó que retrocediese un paso- ¿Le estará doliendo? Los pezones son muy sensibles. Digo... Los de las mujeres. Y los de las vacas. Eso me han dicho... -se corrigió, absolutamente sonrojada, mientras se colocaba para sostener el cubo, temerosa de que la vaca moviera una pata y le diese, de alguna manera. 

Pero aquella también era una criatura del Señor, se dijo. Si tenían que ayudarla a que aliviase el peso de sus ubres, la ayudarían. Aunque no sabía muy bien si necesitaba esa ayuda. Pero ya estaban en ello, y Daniel parecía decidido a intentarlo- ¿Estás bien, Dan?- dijo, al ver que le daba con el rabo en la cara, siendo su duda respondida con el siguiente intento de su compañero, que parecía concentrado imaginándose que las ubres eran... Eran... Eso. 

La joven predicadora observaba, ruborizada. Hubiese querido decir que no entendía la mitad de las cosas que decía Daniel, pero las entendía. Y verlo apretar de aquella manera, y con esa habilidad, la hizo recordar cómo se había ganado la vida el muchacho. La imagen de Daniel haciendo precísamente lo que había expuesto se le había metido en la cabeza, provocando que la agitase, contrariada, diciéndose a si misma que debía centrarse en la vaca, y que aquellos pensamientos no eran adecuados ni oportunos

¡Ah! ¡Está saliendo, la leche!- dijo, de pronto, emocionada, al darse cuenta de que el animal mugía y el cubo empezaba a llenarse- ¡Eres un mamporrero magnífico, Dan!- comentó, con entusiasmo, aunque acto seguido torció el gesto, confusa- Oye, ¿qué es un mamporrero? ¿Es alguien que ordeña vacas?- preguntó, un tanto avergonzada aún. 

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24/02/2020, 15:05
Cassandra (Cass)
- Tiradas (1)
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24/02/2020, 15:10
Cassandra (Cass)

La buscadora siguió al joven que avanzaba todo resuelto con el cubo en una mano y la determinación en la otra, ella no las tenía todas consigo así que cuando él dijo que se ponía a hacerlo no le llevó la contraria. La salida de la benjamina del grupo del almacén llamó su atención, no tanto por el hecho en sí si no por el color de su rostro, como si hubiese sido pillada haciendo algo indebido, pero en ese momento no se detuvo ya que no quería dejar a sus acompañantes solos frente a la tarea que se habían autoimpuesto. 

Al oír que Dan le proponía que ella aguantase la cabeza del animal, las cejas se le alzaron, si con los humanos no se comunicaba muy bien cómo lo iba a hacer mejor con una vaca. Pero no dijo nada, mejor aguantarle la cabeza que ordeñarla, y ese pensamiento se intensificó cuando fue testigo de los intentos infructuosos que llevó a cabo. Los comentarios tanto del chico como de la otra mujer no ayudaban a mantener la compostura, pero Cassandra siguió en su labor de acariciar la testuz del bicho manteniendo su fachada de seriedad, hasta que un ruido diferente llamó su atención.

—Muy bien Dan, acabas de conseguir el puesto oficial de ordeñador de la vaca. —dijo con una sonrisa torcida en el rostro, gesto que fue cortado cuando tuvo que ahogar una carcajada para que el animal no se asustase —No Clem, mamporrero es el que ayuda a los animales a copular...

Acabó apretando los labios de nuevo, no queriendo estropear el momento y que dejasen de conseguir leche. Definitivamente esa noche iba a ser especial, parecía que a pesar de todos los roces que había entre los habitantes del Morris las cosas estaban bien y tendrían leche de vaca de verdad para acompañar el guiso, quizás hubiese sido mejor para desayunar pero los tiempos en los que se podía elegir qué se quería y cuándo habían quedado muy atrás.

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24/02/2020, 23:23
Narradora

Era imposible saber qué era lo que había hecho que Shamira saliese corriendo así del almacén. Cass apenas la había visto un instante fugaz. Lo que sí había podido notar era que la chiquilla llevaba las mejillas totalmente encendidas y estaba muy nerviosa. Pero no alcanzaba a aventurar el motivo.

- Tiradas (1)
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24/02/2020, 23:35
[Titans] Anastasia

A la vaca todo aquel invento al principio no parecía que le estuviese haciendo mucha gracia. Se revolvía y daba coletazos. Pero una vez que entre todos le fueron pillando el punto y empezó a salir la leche se quedó mucho más tranquila. Parecía incluso que estaba aliviada, tal vez le estaban pesando ya mucho las ubres. 

Poco a poco el cubo se fue llenando y Anastasia ya sólo parecía concentrada en seguir rumiando. Estaba flaca, no iba a darles leche suficiente como para comerciar con ella, pero al menos sí que tendrían bastante para tomar un vasito cada uno esa noche.