Partida Rol por web

Es una buena idéa, yo debería practicar el sonitus, y sería mejor que lo haga mientras todos están despiertos.

Victor sacó la varita y miró a sus compañeros.

Bueno voy a hacerlo ahora.

Sonitus!

El silencio inundó la sala común, y Victor se agarró la cabeza con ambas manos.

Espero poder mejorar más adelante con este hechizo, sinó vamos a perder muchos puntos en artes quimericas.

Subo las escaleras y me quedo a un par de pasos de la puerta. Delante de mí había dos de los mayores intentando acertar la pregunta para poder entrar. Tras un par de segundos uno de ellos dice un par de palabras en latín y la puerta se abre. Que suerte, no tendría que responder a nada.

Entro en la sala y me quedo mirando a mis compañeros según practican. A lo mejor luego me animaba por mi parte a hacerlo, pero ahora no tenía demasiadas ganas.

Junto a la dirección de la clase de Encantamientos, que os indicaba que estaba en la primera planta. También había una nota escrita en letra extraña.

"Muy importante tener pareja en esta clase para practicar el conjuro. Por favor, entren con su pareja y sientense juntos, no es necesario perder más tiempo en la clase del que ya perderemos en que aprendáis a manejar el hechizo".

Atte: Profesora Green.

La sala común estaba completamente vacia, Perry miro a su alrededor para ver que había...

¡Madre mia, cuantos libros! Perry se lanzó hacia una inmensa estanteria peligrosamente llena de libros.

¡Hay de todo! Adivinación, cuidado de criaturas mágicas, aritmancia, encantamientos...

Miauuu...-  Perry se giró y vio como su gato se le acercaba con un bocadillo en la boca.

Hola Gladius! ¿Que tienes aquí? Al ver el bocadillo las tripas de Perry lanzarón un sonoro ruido, recordó que posiblemente llevara días sin comer y se sento en uno de los sofas para engullir el bocadillo de tortilla que le había traido Gladius.

Buen chico Gladius.¿Sabes donde esta todo el mundo? - Miauuu. Y a que estamos esperando! llevame con ellos!

Cuando Perry y Gwendoline llegan a la puerta de la Sala Común la aldaba de bronce les dice muy deprisa:

Pan y pan y medio; dos panes y medio; cinco medios panes, ¿Cuántos panes son?

Peter se queda pensando y dice: Siete panes y medio. Empuja la puerta pero esta no se mueve. Mientras se gira con cara de tristeza le viene una idea a la cabeza. La respuesta es dos panes y medio en los tres casos.

La puerta se abre de par en par. Adelante Gwendoline. Peter se aparta y deja pasar a la chica exhibiendo los perfectos modales que sus padres le habían enseñado.

La Sala Común estaba ahora más concurrida, con alumnos de último curso hablando de sus cosas. Gwen y Peter se sientan en dos sofas uno frente al otro.

Bueno.... Me he perdido las todas las clases de las dos primeras semanas, así que tu decides por donde quieres empezar.

Cuando Victor llegó cansado a la sala cumún, casi no miró al águila y la misma le largó como siempre una pregunta.

¿cuando maría preguntó a mario si quería casarse con ella, este contestó: "no estaría mintiendo si te dijera que no puedo no decirte que es imposible negarte que si creo que es verdadero que no deja de ser falso que no vayamos a casarnos". maría se mareó. ¿puede ayudarla diciéndola si mario quiere o no quiere casarse?

Victor penso para si "¿como hace para siempre complicarnos la cosa así?" pero después de pensarlo un poco respondió.

Mario se quiere casar.

Acto seguido la puerta se abrió.

Victor entró en la sala comun y se dejo caer en un sillón.

Peter vio como Victor entraba en la Sala Común y se sentaba en un sofa con cara de pocos amigos.

Hola victor. Gwendoline está ayudandome con las clases que he faltado y los conjuros que no he aprendido. ¿Te unes a nosotros?

Dijo Perry con una sonrisa.

Gwendoline sonreía ante todo aquel panorama. Parecía un mundo nuevo lleno de posibilidades, salir de su clase media-acomodada, para ir a un lugar donde el dinero no importaba, o casi.

-Eso, únete a nosotros. -Dijo con un leve bostezo, y se tapó la boca, no quería ser descortés.

 La puerta se abre y aparece Selena por ella.

Con un gesto de cabeza saluda a sus compañeros de primero, reunidos en un par de butacas.

-Hola chicos. Estoy realmente cansada hoy. Voy a dormir ya mismo. Nos vemos mañana por la mañana! Se despide efusivamente.

Desaparece escaleras arriba.

Entro detrás de la chica. Gracias a eso no había tenido ni que preocuparme de responder a la pregunta del pájaro.

Saludo a todos con los que me cruzo, aunque no me paro a hablar con nadie.

- Yo también estoy muerto. Buenas noches. - le digo a modo de despedida antes de meterme a la escalera que lleva a las habitaciones de los chicos.

El joven esbozo una sonrisa lo mejor que pudo.

Bueno me uno a ustedes, supongo que quedarme desmotivado porque no me salgan los hechizos no va a hacer que los aprenda.

Gwendoline bostezó ampliamente, estaba muy cansada ya.

-Lo siento chicos, pero mejor lo hacemos mañana, temo clavarme algo si conjuro cansada.

Dijo a modo de excusa, pues se tenía que marchar ya a dormir.

Bueno entonces lo podriamos practicar mañana, si quieren podemos ir a practicar a los jardines que es más divertido al aire libre.

Luego empezo a subir las escaleras al dormitorio de chicos.

Vamos Perry mejor vamos a dormir

Vale, te sigo.

Entró a toda prisa por a la sala común, vio que no había nadie y dio media vuelta. No podía perder el tiempo con sandeces.

Perry bajo del dormitorio con la esperanza de ver a algún compañero que le ayudara con las clases perdidas antes de ir a clase, pero como no había nadie decidió que lo mejor era ir a la lechucería a enviar una carta a sus padres diciéndoles que ya estaba bien y que no se preocuparan.

Al final lo de quedar todos para bajar a desayunar e ir juntos a las clases parecía haber quedado en el olvido. Pienso mientras bajo las escaleras del dormitorio. Bueno, si no había nadie allí iría al baño a ducharme y luego bajaría a desayunar.