Partida Rol por web

Cuando Oliver entró en la clase, se sorpredió de ver que habia sido el primero en llegar. ¡Él, que siempre solia ser de los últimos en llegar! Bueno, quizás eso significaba que no estaba tan mal la cosa.

Dejo su mochila en el suelo y sacó su varita, escuchando atentamente al profesor Knowler. Vamos, esta vez tenía que conseguirlo. Y quizás fue aquella motivacion la que hizo que, cuando el profesor les hizo aquella pregunta, Oliver levantara la mano, con una idea cruzándole la mente:

-Profesor, usted ha dicho que cuanta mas fuerza tengamos, más lejos llegará nuestro contrincante... Quizás seria entonces una buena idea conjurar primero un Mejoratem Fortificus para incrementar nuestra fuerza antes de lanzar el conjuro, ¿no cree?  -razonó, mirándolo con aire astuto, esperando su respuesta.

Y, cuando terminó, se giró hacia Mircea, con una media sonrisa en los labios, varita en mano.- Bueno Mir, vamos a practicar... ¡Ahi voy! -añadio, alertando a Mircea de su ataque- ¡Envertestatil Mircea! - exclamó, contundente. Y, en aquella ocasión, sonrio, satisfecho, al notar la sacudida que provocaba el conjuro en su manos.

Diana entró en la clase canturreando una canción, cuando vio que en aquella ocasión coincidían con Huffelpuf los saludó a todos pero especialmente a los que mejor conocía, a Oliver y a Mircea, que no tardaron en ponerse a practicar.

- Vaya, cada vez nos enseñan conjuros más interesantes...- sacó su varita y se dirigió a Joey- Joey ¿practicamos nosotros? si quieres empiezo yo y luego tu pruebas... a ver...- repasó sus notas y tras ensayar varias veces dijo- Vamos Joey prepárate EVERTESTATIL

Tras escuchar al profesor observo a los allí presentes. Deseo medirme con el mejor de la clase pero Diana ya está con Joey y Oliver con Mircea así que decido seguir la Escalera.

- Sara, allá voy. - le digo. ¡Envertestatil Sara!

El hechizo sale a la perfección y se dirige directamente hacia mi objetivo.

- Creo que se llevará un buen piñazo. - pienso. Lástima que no sea una sierpe quien lo reciba.

Luego me vuelvo hacia el Profesor Knower.

- Se puede usar con Flamatte para poder jugar en ventaja o permitirte huir si ello fuera necesario aprovechando que no pueden verte. - le digo. O con Confundus o Agotattem para potenciar el impacto.

- También puedes lanzarlo previo a cualquiera de los hechizos de ataque que aprendimos en Duelo Mágico el año pasado para que impacten en el objetivo cuando este esté tirado en el suelo.

Una nueva clase de duelo, y Eli escuchó al profesor tan atentamente como siempre. Observó sus movimientos de muñeca y la pronunciación de las palabras. Esta vez no se limitaría a copiarlas, se había convencido de que eso no servía por las malas, así que intentó comprender los movimientos y concentrarse antes de lanzar el conjuro.

Escogió de compañero a Noah, ya que Diana ya había elegido a Joey. Le apuntó con la varita y tragó saliva antes de pronunciar las palabras.

-Envertestatil Noah- mientras, hizo el movimiento de muñecas que les habían enseñado.

Por una vez en mucho tiempo, la varita le hizo caso, lo que le demostró que su varita no estaba rota, como llegó a pensar. Luego intentó responder al profesor.

-Puede que sea una estupidez, pero si utilizamos el Asetate Grassium et Solem donde pueda caer nuestro objetivo, éste se resbalará y podrá ser empujado un poco más haciendo que sea fácil que se caiga y se dé un buen coscorrón, ¿no?

Apenas lanzo mi hechizo cuando Eli me lanza el suyo.

Consigo reponerme y evitar su ataque, por los pelos pero lo evito.

- Bien hecho Eli. - le digo. Casi me tiras.

Ardeen llegó a clase y observó con atención al profesor, no le gustaba especialmente la asignatura, pero el profesor no podía caerle mal, era tan campechano.

Empezó la explicación y al ver que se desdoblaba puso los ojos como platos, pero se decepcionó al ver que el conjuro que aprendían era distinto. ¡Cuánta violencia!

Ardeen buscó a Sara o a Daphne para practicar pero una serpiente se adelantó, y lo consiguió, como siempre. Cada día me dan más asco, pensó para sí, pero bueno, podía probar con él. Envertestatil Noah.-dijo con convicción, pero no quedó satisfecha con el resultado.

Al entrar en clase Joey se puso vizco. Quizás si te ponías vizco veías a ambas imágenes como uno sólo, como siempre había visto al profesor, pero no. Su técnica no servía.

Seguí vizco intentando demostrar que era acertaa su teoría, cuando Diana le tocó el hombro para practicar el conjuro:

-¿Eh?...¡Ah!...¡Sí!...claro, claro. Preparado.

Diana dirigió bien el conjuro, pero Joey estaba preparado. Aún seguía con los ojos vizcos mirando al profesor, pero cuando escuchó gritar a Diana, se tiró al suelo y de milagro se salvó de salir despedido.

-Muy buena Di. He notado el empujón, pero estoy muy gordo y la gravedad ha ganado a tu conjuro, jaja. Bromeó.

-Venga, reina. Me toca. Te lo pondré fácil, que no me gusta dañar a dama tan guapas, jaja. Movió la varita y gritó:

-Envertestatil Diana.

Entonces tras todo eso levantó el dedo y preguntó:

-Sé que no es para potenciar ningún conjuro. Creo que mis compañeros han dicho casi too, sobre todo Noah, pero quería preguntar si un compañero me lanza el conjuro mientras estoy saltando en la misma dirección de mi salto ¿podría saltar mucho más? Entonces dio un codazo a Noah en plan cómplice y le susurró:

-¿Te imaginas poder saltar un precipicio? Molaría un montón, ¿a qué sí, tío?

A Sara casi no le había dado tiempo a sacar la varita cuando sintió un empujón que la lanzó un metro hacia atrás

¡Aaah! gritó, moviéndose para evitar caerse que, aunque extraño, consiguió. ¡Eh, eh... Eh! empezó a decir, pues no se acordaba del nombre de ese niño. ¡NO me ha saludado nunca y ahora me ataca, que poca vergüenza!

Iba a entrenar con Ardeen, pero decidió cambiar de objetivo.

¡Envertestatil! gritó, lanzando el hechizo a Noah.

Respirando con más tranquilidad, empezó a pensar la respuesta a la pregunta del profesor, pero casi todos habían dicho algo. Pero primero se permitió corregir a Oliver.

Pero Oliver... ¿El Fortificus no es para mejorar la fortaleza? No tiene nada que ver con la fuerza... ¿No? Entonces no serviría para aumentar la fuerza... terminó encogiéndose de hombros.

Y, de pronto, se le iluminó la cara ¡Yo me se otro uso! Si le duermes con el Morfetium, ¡no habrá resistencia para tirarle al suelo!

Con paso calmado, Mircea consiguió entrar en clase antes del cierre de las puertas. Creía que se encontraría con las otras dos casas de segundo. Según había dicho Cassius, ellos habían tenido también clase de CCM por la mañana, así que seguramente también tendrían Duelo a la misma hora que ellos. Realmente esperaba poder coincidir por una vez todos los alumnos de segundo en una misma asignatura, pero teniendo Karl un hermano que también daba Duelo, lo más probable es que los Slytherin y los Ravenclaw estuvieran con él.

El Envertestatil no resultaba demasiado complicado, sobre todo comparado con los últimos conjuros que habían aprendido.

¿Podría usarse como defensa para el Terrum fulminis?, preguntó. Había tratado anteriormente de defenderse de aquel conjuro de tierra con otro idéntico y de sentido contrario, pero la física no siempre parecía cumplirse cuando la magia entraba en juego.

Estuvo practicando el movimiento de varita, la entonación y la vocalización correcta del hechizo. Aunque había conseguido eliminar su acento en una especie de inglés neutro, en las palabras complejas como aquel Envertestatil, el seseo se le escapaba.

Sacó la varita de un bolsillo de la manga de su túnica cuando Oliver le propuso practicar. Adelante, afirmó con la cabeza.

Con un ágil salto, Mircea consiguió evitar el empujón mágico de su amigo. Notó como el aire hizo que su túnica aleteara y su gorro estuvo a punto de salir disparado.

Mi turno, anunció. Envertestatil, susurró.

Oliver sonrio, satisfecho, al ver que aquella vez el conjuro habia salido bien. Y no solo eso: además Mircea se habia defendido perfectamente de él.

- ¡Genial! Te toca. - dijo, preparándose para defenderse de su ataque. Por desgracia, el rumano fue tan rápido y preciso que Oliver ni siquiera tuvo tiempo para parar el golpe o moverse de aquel sitio. El conjuro impactó completamente en él, empujándolo hacia atrás.

Oliver salio despedido por los aires, chocando de lleno con uno de aquellos muñecos de entrenamiento, que estaba unos cuatro o cinco metro más allá de ellos- ¡Au! Buen conjuro... - dijo, después del enorme estropicio de su caida, sonriendole desde el suelo, a pesar de la mueca dolorida por el golpe.

El profesor Knower se quedó mirando a Oliver cuando alzó la mano para contestar. La verdad que no, Blackwood. Tal y como ha dicho Lago, el conjuro que mencionas nos serviría para ayudar a contrarrestar algunos hechizos. Ten en cuenta que ese hechizo nos mejora nuestra fortaleza, o lo que es lo mismo, nuestra habilidad para resistir los cambios que nos rodean. Así que me temo que por ahí no vas muy acertado. Eso sí, el conjuro, perfecto: ¡10 puntos! Dijo dedicándole una sonrisa orgullosa por haber contestado.

Luego miró a Diana y a Ardeen, y al ver como el conjuro lo pronunciaban de forma incorrecta se acercó para susurrarles el nombre más de cerca: Mirad, es eNVertestatil, no eVertestatil. ¿Comprendeis la sutil diferencia?

Después vio a Sara dar voces hacia Noah y comprobar que el chico había logrado realizar el conjuro y además hacer efecto. ¡Buen trabajo, Noah! ¡Eso que has hecho merece una recompensa de 50 puntos! ¡Más 10 puntos más por lograr lo que pretendías, un extra de 10 más por una respuesta interesante! Aunque ten en cuenta una cosa, como le ha pasado a Sara, este conjuro no tiene porqué tirar al suelo a tu enemigo. Así que, si lo combinas con otros ataques de duelo, realmente no obtendrías ninguna diferencia. Aunque lo dicho sobre el Flámatte me parece interesante. ¡Ah! ¡Y 10 puntos extras también para ti Sara y 10 más por haber logrado tu objetivo! ¡Buen trabajo, aunque no tan buenos reflejos! Dijo sonriendo a la muchacha. Y esa respuesta que me ha dado... dijo tratando de procesarla. ¿No te das cuenta que cuando a alguien le lanzas el Morfettium, esa persona automáticamente cae al suelo? No necesitas empujarle para eso... Dijo torciendo la sonrisa.

De nuevo otro rayo fue dirigido hacia Noah, era Eli quien lo había lanzado. ¡Genial, Henman! ¡10 puntos para ti también! ¡Y 10 puntos por esa respuesta tan buena!. Efectivamente, si lanzas primero el conjuro que comentas y luego lanzas éste a alguien y no consigue evitarlo, podrías mandarlo hacia la superficie resbaladiza y hacerle que cayera al suelo. Luego soltó una risita y continuó con la clase. Al escuchar la trastada que Joey estaba planeando, Knower se llevó las manos a su rostro un poco desconcertado. Para hacer lo que dices, tu amigo tendría que colocarse debajo de ti justo en el momento en el que dieras el salto, te impulsaría unos metros hacia arriba, pero no serían muchos debido a la gravedad, y además tu amigo correría el peligro de que te calleras encima de él. No lo veo... De todas maneras, ¡10 puntos por el buen trabajo!

Finalmente miró a Mircea y observó como su conjuro afectaba a Oliver. ¡Buen trabajo, Mircea! ¡10 puntos para tí también! Y no, contra el terrum ya expliqué como defenderse, es lo único posible, al menos con el nivel de magia conocido hasta ahora.

Y tras esas últimas palabras, el profesor, como siempre, se marchó de allí, tras despedirse de todos.

La chica comenzó a saltar de alegría, de un lado para otro de la sala. No es que su situación fuera para tirar cohetes, pero llevaba tanto tiempo fallando que hacer un conjuro y además llevarse 10 puntos de propina era motivo de celebración.

Pero paró cuando vio como su amiga Diana había fallado.

-No te preocupes, Di, si te hace falta, te enseño, no tendrás ningún problema en hacerlo- la niña bizqueó un poco los ojos y siguió- hablando de ayudar, yo sí que necesito ayuda en unas cuantas asignaturas, ¿me echarías una mano?

- Genial. - digo al recibir la noticia de los 70 puntos que me otorga el profesor. Gracias Profesor Knower.

Luego me giro hacia Sara.

- No quería golpearte tan fuerte. - le digo. Sabía que tenías buenos reflejos y confiaba en que consiguieras esquivar mi ataque.

Tras ver el conjuro de Noah impactar sobre Sara, Mircea se sorprendió al ver a Oliver salir disparado por el aire. Miró con extrañeza primero su varita y después al profesor. Parecía comosi la idea de Elisabeth de usar el Asetate hubiera sido llevada a la práctica. No, no tenía mucho sentido. Se fijó entonces en un ligero brillo, como si algo que antes estuviera allí acabase de desaparecer. Peeves, murmuró el chico. Por supuesto. Su hechizo solo debía haberle empujado un poco, pero lo ocurrido había sido seguramente por culpa de alguna travesura del poltergeist.

Se acercó a él para ayudarle a levantarse, casi en el mismo momento que la clase se daba por concluida.

Ardeen había sido la única de la casa que había fallado el hechizo y Daphne seguía sin aparecer...

Volvió a molestarle la actitud del profesor. Ya lo hizo la semana pasada cuando fue a hablar con él a su despacho y ahora otra vez. No le había dicho como defenderse del Terrum, tan solo que esquivasen. Aprender ataques antes que las defensas era un gran fallo de aquella escuela.

Se acercó a los Gryffindor para felicitar a Noah por su hechizo. Aunque en todo el curso pasado no había hablado con él ni con ningún otro de esa casa salvo con Diana, la verdad era que el conjuro del cercetasi había sido sublime. -Buen ataque, enhorabuena por los puntos-

Después se dirigió a Elisabeth -Me ha gustado mucho tu contestación. La verdad que tenía esa misma idea en la punta de la lengua, pero te adelantaste- Sonrió ligeramente a la chica. Durante el curso pasado había sido una sombra, al igual que él, yendo de clase en clase sin que nadie se fijara en ella.

Ardeen, la recuperación será el domingo de dentro de tres semanas, así que aún hay tiempo. Si quieres, puedo ayudarte, se ofreció el chico.

Cuando ya acabó con ellos, fue en busca de Oliver, para obligarle a cumplir su promesa. Vamos, a la biblioteca, le urgió, calándose el sombrero y pasándole la mochila que ya había recogido del rincón donde su amigo la había tirado.

- Gracias. - respondo a Mircea. Tú también lo hiciste bien.

Ardeen se sintió decepcionada consigo misma, hubiera deseado empujar a aquél chico pero no lo logró, y se cabreó consigo misma, al menos Sara sí le había empujado.

Muy bien chicos.-dijo dirigiéndose a los Huffies. Me gustaría mucho- contestó a Mir- no quiero que me pase como el año pasado. ¿Alguno se quedaría ahora para explicármelo?- les dijo a sus compañeros de casa, ya que Mir y Oli tenían prisa por ir a la biblioteca y no quería que perdieran tiempo por ella, confiaba en que quizás Sara podría.

Antes de marcharse con Oliver, Mircea se acercó a Ardeen y trató de explicarle lo mejor que pudo como corregir los fallos que le había visto cometer durante la clase.

¿Ves?, este es el movimento de varita correcto. Y si Peeves no hacía alguna de sus barrabasadas, el conjuro debería empujar en vez de lanzar por los aires. Repitió las veces que hizo falta la pronunciación correcta: Envertestatil, que aún seguía resultándole compleja.

¿Quieres probar ahora?, se ofreció volviendo a guardarse la varita en un bolsillo interior de su túnica.

Cuando acabaran, se iría con Oliver.