Partida Rol por web

Kranjstar se despidió muy cordialmente del servidor del templo de Kord Son tiempos dificiles para la fe, pero si en mis manos esta desentrañar que pasa con los fieles, tanto de su templo y los de los de Pelor, tenga seguro que no descansaré hasta lograr algo.

El clérigo miró a todos los presentes y la determinación que tenían. Sin duda no sabían en lo que se estaban metiendo, pero sin embargo continuaban con la locura propuesta por Zarus. Bien, pero ya saben que no pienso involucrarme demasiado. al igual que con Lictea, Kranjstar se sentía en la obligación moral de evitar las imprudencias que el resto podían cometer. Ahora solo restaba hacer entrar en razón a todos si aquello resultaba ser demasiado peligroso.

Un muro de piedra de casi dos metros y media de altura rodea este edificio de piedra. Los tejados están cubiertos de tejas de color sangre, y los laterales de la elevada estructura consisten en enormes pilares tallados para representar a diversos hombres y mujeres luchando, cada uno armado con un arma diferente o realizando alguna proeza de fuerza. Como si estas esculturas no bastasen para definir la función del edificio, un gigantesco disco de piedra con el símbolo de Kord pende sobre las puertas gemelas de roble de su fachada.

Karna avanzó por las calles de Tormentos le costó un tiempo llegar a la catedral, aunque no estaba muy segura de que era una catedral, ni de quién era Kord como para tener semejante edificio, quizás un mago, no le gustaba la idea, pero en el medio de la ciudad no creía que pasaran cosas demasiado malas. Las estatuas le gustaban, y le decían que estaba en el lugar correcto. 

Karna tomó valor, respiró hondo y decidió entrar en la catedral fuera lo que fuera.

Un gran hombre embutido en una armadura completa se acerca a ti y te hace una reverencia.

Mi nombre es Nestor, soy el sumo sacerdote de la catedral del dios Kord. ¿En qué puedo ayudarla?

Nestor, ¿ es verdad que aquí hay una arena de combate? ¿Pagan? Te aviso que no pelearé con otras mujeres- se limitó a gruñir la semiorca creyendo que estaba siendo de lo más amable que se puede ser.

Un muro de piedra de casi dos metros y media de altura rodea este edificio de piedra. Los tejados están cubiertos de tejas de color sangre, y los laterales de la elevada estructura consisten en enormes pilares tallados para representar a diversos hombres y mujeres luchando, cada uno armado con un arma diferente o realizando alguna proeza de fuerza. Como si estas esculturas no bastasen para definir la función del edificio, un gigantesco disco de piedra con el símbolo de Kord pende sobre las puertas gemelas de roble de su fachada

Efectivamente, aquí se organizan las arenas de combate justo al ponerse el sol. Cuando llegue el ocaso comenzarán. Los enfrentamientos son uno contra uno y en principio, si se presentase mucha gente, se harían de forma aleatoria, así que si te niegas a luchar contra una mujer, se te daría por perdido. Dijo encogiéndose de hombros puesto que no le importaba realmente sus decisiones.

Si quieres apuntarte, tienes que ir a esa capilla de allí y poner tu nombre. El premio es de 10 piezas de oro por combate ganado, pero es importante que sepas que no hay curaciones, o al menos no las hay de forma gratuita. Dijo haciendo referencia que era costumbre pagar por los lanzamientos de conjuros.

Buenos días, dijo al recién llegado, y al mirar a la mascota dijo, y tampoco se admiten en los combates compañeros animales, ni familiares que interactúen directamente.

Falta mucho tiempo para que se ponga el sol, maldita sea, tendré que ver que más hacer hoy.- Karna avanza hasta la capilla y escribe su nombre con una letras horrible KARNA ZALAK,.

¿Entonces me voy ahora y vuelvo al atardecer Nestor, o hay algo más que hacer por aquí? Preguntó la semiorca mientras se encontraba consternada ante el enigma de que continuar haciendo el resto del día.

-¿Contra cuántos participantes se combatirá? ¿El arena de combate cómo es?- Pregunto a Nestor Purilltan, quien se encuentra explicando los métodos de combate a otro posible participante, es una guerrera orca que parece temible en el combate cuerpo a cuerpo, pienso mientras veo cómo se apunta sin pensárselo dos veces.

-Si los combates van a celebrarse al ocaso es muy probable que no pueda participar, ni tan siquiera ver el combate, pues tengo que estar a mediodía en otro sitio- Pienso mientras por mi mente voy descartando participar en el combate, mi mayor virtud es el ataque a distancia y frente a un guerrero cuerpo a cuerpo no tengo ninguna posibilidad.

No, mi señora. Al atardecer no, en el ocaso. Justo antes de que se haga de noche. Y sí, todavía queda un buen rato, así que es mejor que aproveche el día, y recuerde que cuando el sol se ponga, debe pasarse por aquí, aprovechó que había escrito su nombre para leerlo, Karna.

Después se dirigió hacia el recién llegado, se luchará uno contra uno, señor, aquí mismo, dijo señalando una estancia habilitada para combatir, pero estaba completamente vacía y el suelo era completamente liso, no había nada que destacar sobre él.

Pues entonces nos veremos cuando salga el sol Nestor,- y con una sonrisa pícara mirando al elfo que tenía al lado- y tu me gustaría que te inscribas, sería divertido elfito jajajaja.

Dicho esto la semiorca salió, y deambulo por las calles de tormentos cristalinos unas horas sin rumbo fijo, hasta llegar a un parque por algún motivo le gustó y se detuvo allí un rato pensando que hacer durante el día.

-Sintiéndolo mucho Karna, dudo que pueda hacer nada en un combate cuerpo a cuerpo contra vos, mi estilo es más... sutil- respondo ante la invitación de la semiorca, viendo como ésta se aleja del arena de combate. Echo un último vistazo a la catedral de Kord me parece tan artificial este templo.

-Os doy las gracias por la información Nestor- Digo al anfitrión mientras salgo en dirección al Bote del Lagarto, si al anochecer aún no tengo nada que hacer estoy seguro que vendré a ver como pelea esta semiorca, desprende una fiereza natural increíble.

Un muro de piedra de casi dos metros y media de altura rodea este edificio de piedra. Los tejados están cubiertos de tejas de color sangre, y los laterales de la elevada estructura consisten en enormes pilares tallados para representar a diversos hombres y mujeres luchando, cada uno armado con un arma diferente o realizando alguna proeza de fuerza. Como si estas esculturas no bastasen para definir la función del edificio, un gigantesco disco de piedra con el símbolo de Kord pende sobre las puertas gemelas de roble de su fachada

El Kraken sonrio al llegar a la catedral. Con los brazos en jarra y las piernas bien abiertas, hablo con su acompañante invisble.

-QUE TE PARECE, PAULEY? POR FIN ESTAMOS AQUI! UNA AUTENTICA CATEDRAL DE KORD! QUIEN NOS IBA A DECIR CUANDO SALIMOS DE LAS MONTAÑAS QUE LLEGARIAMOS A ESTE NIVEL? TU SIEMPRE HAS CREIDO EN MI, PAULEY. YA VA SIENDO HORA DE GANAR EL TORNEO MUNDIAL DE LOS PESOS PESADOS Y CONVERTIRNOS EN EL ROSTRO DE LA LUCHA PROFESIONAL!

​El Kraken entro en la catedral, dispuesto a preguntar a cualquiera por el proximo torneo de lucha.

Kraken miró a Néstor, como extrañado porque no lo reconociera, así que  usó su arenga al público más conocida, puso los brazos  en alto, como si estuviera sosteniendo a un rival en al aire, extendido, y empezó a bombear hacia arriba y hacia abajo.

-EL KRAKEN ESTÁ AQUÍ PARA LUCHAR, NÉSTOR! HA LLEGADO DE LAS NEVADAS MONTAÑAS DISPUESTO A DEMOSTRAR SU FUERZA EN EL MUNDO DE LA LUCHA Y A CONVERTIRSE EN CAMPEÓN DEL MUNDO DE LOS PESOS PESADOS! INFÓRMALE DE CUALQUIER DESAFÍO DE FUERZA O DE COMPETICIÓN, PUES EL KRAKEN TAMBIÉN ES SEGUIDOR DE KORD Y QUIERE HACERLE SENTIR ORGULLOSO!!

Nestor asintió y sonrió al recién llegado fingiendo que lo conocía. Después le señaló una zona de la catedral y le dijo:

Si quieres apuntarte, tienes que ir a esa capilla de allí y poner tu nombre. El premio es de 10 piezas de oro por combate ganado, pero es importante que sepas que no hay curaciones, o al menos no las hay de forma gratuita. Dijo haciendo referencia que era costumbre pagar por los lanzamientos de conjuros.

Los combates se disputarán al caer el sol, es decir, durante el ocaso. Así que aún le quedaría esperar, señor.

Un muro de piedra de casi dos metros y media de altura rodea este edificio de piedra. Los tejados están cubiertos de tejas de color sangre, y los laterales de la elevada estructura consisten en enormes pilares tallados para representar a diversos hombres y mujeres luchando, cada uno armado con un arma diferente o realizando alguna proeza de fuerza. Como si estas esculturas no bastasen para definir la función del edificio, un gigantesco disco de piedra con el símbolo de Kord pende sobre las puertas gemelas de roble de su fachada

El Kraken asintió, con los brazos en jarra.

EL KRAKEN NO NECESITA CURACIONES, AMIGO NÉSTOR! LAS CURACIONES LAS NECESITARÁ SU RIVAL! ESTA TARDE, AL OCASO...EL KRAKEN SE ALZARÁ BAJO LAS AGUAS Y SUS TENTÁCULOS APLASTARÁN A QUIEN SE CRUCE EN SU CAMINO!!

AMIGO nÉSTOR, EL KRAKEN ACABA DE LLEGAR A LA CIUDAD Y NO TIENE DONDE DESCANSAR SUS PODEROSOS MÚSUCLOS -dijo flexionandolos. ¿ES POSIBLE ECHAR UNA SIESTA AQUÍ EN LA CATEDRAL?