Partida Rol por web

Tras la actuación que había creído que sería un ridículo total Árpád miró con sorpresa a Max después de su agradecimiento. - De... De nada. - Musitó sin tener muy claro cómo sentirse. Luego, cuando las gemelas se fueron, se mantuvo un poco al margen, retomando su redacción. De vez en cuando echaba un ojo adonde se encontraban los otros, pero por lo general continuaba escribiendo con tiento y calma.

Luego, cuando Max volvió a dirigirse a ellos, Árpád levantó la vista de su escritura y tardó un segundo en ubicarle.

- Yo voy. - Respondió más animado, mientras comenzaba a recoger. - Un segundo y estoy listo.

Árpád venía, y Matt parecía estar pensándoselo todavía. Pero el hambre no esperaba, y la ascensión al castillo no iba a hacer que mejorara, así que Maxwell comenzó a caminar hacia Hogwarts.

Matt estaba sumido en sus pensamientos cuando oyó a Maxwell que les preguntaba si se quedaban o se iban.

-Ahora voy- dijo, aunque siguió mirando el lago un rato. Cuando se cansó de admirar la naturaleza decidió ir al comedor. la clase empezaría pronto, y él estaba allí perdiendo el tiempo.

Sara llegó frotándose los ojos al lago. Dejó la mochila a su lado. Estaba rota, la cremallera se había desgarrado. Sacó su varita con desilusión y apuntó a ese trasto que ya parecía inútil.

Re... Reparo musitó, todavía llorando. Pero el poder del hechizo fue mayor de lo que la muchacha esperaba. Un poderoso rayo se desprendió de la varita y se estrelló con la mochila. Ella esperaba que se hubiera hecho cenizas, pero se sorprendió cuando vio que la mochila parecía más nueva que nunca.

¡Aaaaah! empezó a llorar con más ganas todavía. Había hecho el ridículo en clase, dejando que un alumno de primero la deslumbrara. ¡Y ahora conseguía hacer un conjuro a la perfección!

Sara había estado abrazada a su mochila un buen rato. Las lágrimas habían pasado, y ahora estaba hablando con su amigo Dios. Eso siempre la serenaba, y esta vez no iba a ser menos. La reconfortó escuchar que no era mala, pero que siempre hay gente mejor en diferentes artes. Y, en ese colegio, ella era especial. ¡Era bruja y católica! Nadi había allí que la ganase en eso.
Se levantó e inspiró hondo. Ya estaba tranquila, pero aún así, seguía intranquila y con un nudo en la garganta. No tenía hambre, así que decidió aprovechar el tiempo de la cena en otra cosa. Estudiar.

Oliver fue el primero en llegar al lago, con los ojos rojos y humedos por las lagrimas. Miró a su alrededor. Ni siquiera los de primero parecian haber tenido tiempo aun de llegar aun, lo cual Oli incluso agradecio. Seria mucho mejor asi. Si algo no quería, era que lo vieran en aquel estado.

El tejón dejó las cosas que habia cogido en el comedor en el suelo y se dejó caer junto a ellas, con un suspiro. La verdad es que segundo estaba siendo un año muy diferente a su primer año en Hogwarts y ahora casi miraba con envidia la relacion y los tejemanejes que se traian los de primero entre manos.

Cerro los ojos, tumbandose por completo sobre la hierba, y cogio aire, con cierta resignacion.

Tenia que volver a reestructurar su vida, estaba claro.

Tras unas cuantas vueltas por el colegio, transportar paquetes, ir a recoger a las chicas de Slytherin, volver a su sala común, reunirse con sus compañeros, volver al Gran Comedor, recoger algunas cosas para comer y volver a encaminarse hacia el Lago... Ithan llegó a su objetivo final. Llevaba la mochila al hombro, y entre los brazos llevaba varios platos con comida.

- ...que mi familia llame a las lechuzas practicamente iguales es normal. Además... así son más fáciles de recordar. - Explicaba mientras daba alcance a la parte superior de la última colina, y marchaba hacia la orilla. - Me muero de ganas de ver lo que me enviaron mis hermanos y mis padres. ¿Cómo que te olvidaste enviarle la carta a tus padres, Kendra? - No, ella no tenía pinta de olvidarse de aquel tipo de cosas, y le extrañaba.

- Oye... Asterope... ¿Tu con quien irás al baile? - Acabó por preguntarle, mirandola con una amplia sonrisa, esperando escuchar el nombre que tenía en mente.

Kendra llegó al lago junto a Asterope e Ithan, cargada hasta arriba de cosas. Habian pasado por las salas comunes de Slytherin y de Gryffindor antes de llegar hasta alli, y se habian dado la suficiente prisa como para ser los primeros en llegar. ¿O no? En realidad, uno de los chicos de segundo, el recogeflores, estaba alli ya, aunque tenia pinta de estar... ¿Dormido?

La chica miró con curiosidad al tejón pero, sin embargo, siguió centrada en la conversacion que estaba teniendo lugar entre ellos- Nuestra lechuza se llama Minerva. Aunque claro, si tuvieramos tantas como vosotros... Supongo que si, es mucho mas dificil meter la pata cuando casi todos los nombres son iguales... - dijo, sonriendo. Sin embargo, la pregunta de Ithan vino tan de sopeton que no estaba tan atenta como para evitarla-¿Yo? Eh... Bueno, la escribi el primer dia que te vi en el patio... Estaba escribiendola cuando llegaste... Y entonces la guardé en mi cuaderno, y la tarde se me pasó tan volando que se me olvidó echarla... Y ya no se por qué, pensaba que lo habia hecho y se me olvido ir a la lechuceria... Y no me di cuenta hasta hoy... - le explico, tan solo porque estaban solo Asterope y ella, y tenia suficiente confianza con los dos. Aun asi, acabo sonrojandose ligeramente, al pensar en la vergüenza de reconocer que no habia echado la carta porque la presencia del chico hizo que se olvidara.

Kendra alzó la mano entonces en direccion al Huffie de segundo, sonriendole. Al menos habia traido un paquete y varios platos de comida, no estaba mal- ¡Hola! ¿Vienes a la fiesta? Yo soy Kendra, y ellos son Ithan y Asterope... Gracias por venir... Ahora mismo lo montamos todo... - dijo al chico, mientras comenzaba a sacar cosas de la mochila, llenandolo todo poco a poco de manteles, cubiertos y platos del Gran Comedor, ademas de golosinas y chocolates, entre otras.

Entonces Ithan preguntó a Asterope que con quien iria al baile. Y, aunque Kendra notó un gusanillo en el estomago, lo cierto es que acabo por sonreir, mirando a Asterope- Yo iba a preguntarle antes exactamente lo mismo... Aste... ¿Con quien iras? Si Linc no te lo pide, es que es mas idiota de lo que pensaba, que ya es mucho... - dije, sin pelos en la lengua, riendo, mientras la miraba para ver su reaccion.

Enya llegó casi a la par que Ithan, Kendra y Asterope. Había estado merodeando un poco por el castillo y cogiendo algo de comida. Además, pasó un momento por el dormitorio para coger algo de abrigo. El frío iba llegando poco a poco a Hogwarts, aunque el día había salido bueno. Mira qué dos. Se les ve bien. Por un momento se le pasó por la cabeza ser tan amiga de Arnold como Kendra e Ithan lo eran entre sí y soltó una pequeña risa interna.

Cuando le preguntaron a Asterope con quién iría al baile, pensó que todos eran unos cotillas, pero el caso es que se quedó con la oreja medio pegada a la conversación. Al fin y al cabo todas las personas tenían un pequeño cotilla en su interior. Parecía que Linc tenía papeletas. Hombre, la verdad es que es guapete.

Nada más salir al exterior, Hefesto dejó el hombro de Asterope y echó a volar, aunque siempre siguiéndolos de cerca. Habían paseado las bandejas por medio colegio, delante de sus narices todo el rato. ¡Con el hambre que tenía ella! Pero a la pequeña le gustaba pensar que lo bueno se hacía esperar.

- En mi familia solo está Hefesto, que es mío. Antes mi abuela Gemma tenía una lechuza que se llamaba Sofía, pero murió hace un par de años, poco antes de conseguir yo a mi búho. Estaba vieja ya  -Su familia no tenía contacto con nadie más que con sus miembros, así que no tenían necesidad de tener un ave mensajera. Solo sus abuelos maternos, que vivían lejos, la usaban.

Cuando llegaron al lugar de reunión, Enya se les había juntado. Ahí solo vio a un Hufflepuff. Le sonaba de haberlo visto en vuelo, hablando con Cassius. Pero, con lo despistada que era Asterope para recordar nombres y caras, no podía estar segura de que fuera el mismo. Le hizo un gesto a modo de saludo cuando Kendra los presentó, mientras ella colocaba las cosas.

Paró su tarea cuando Ithan le preguntó con quién iría al baile. Intentó hacer como que no había escuchado, pero Kendra insistió en el tema. Y no solo eso, sino que pronunció el nombre de Linc. Ya no había forma de librarse-. Eeeh... pues no sé... No había pensado en el baile. Mentirosa... Pues Linc irá con quien quiera, supongo, no tiene que pedírmelo a mí –Maldecía el momento en el que Linc se había perdido de camino. De haber estado presente, seguramente no le habrían preguntado nada de eso así de sopetón y ahora no estaría roja ni nerviosa-. Igual quiere ir solo o con otra persona -Sabía que sus amigos no pensaban igual y que estaban convencidos de que Linc quería ir con ella-. Tampoco parecía ilusionado con el tema en el comedor... No creo ni que se acuerde ya. Y yo no sé... no sé si tengo muchas ganas de ir –Terminó la frase en su cabeza y se quedó callada. Se sentó en la hierba y miró a Hefesto volar a ras del agua mientras esperaba que apareciera más gente.

Enya vio cómo Asterope estaba realmente incómoda con esa conversación y se compadeció de ella, sintiendo empatía, ya que ella en parte era igual. De hecho, aún no sabía cómo había conseguido soltarle la frase a Arnold. Así, intentó cambiar de tema para sacar a la chica del apuro.

- Oye, ¿a alguno de vosotros le gustan las estrellas? Mi padre me enseñó mucho de constelaciones y cómo leer el cielo de noche. Me gustaría pasar un rato aquí fuera esta noche observando la bóveda celeste. Si alguno de vosotros quiere, podríamos salir un rato. Además, ahora anochece muy pronto. ¿Alguno se anima?

Miró directamente a Asterope para ver si le sentaba bien el cambio de tema. Esto de los bailes revoluciona a la gente...

Arnold llegó pocos momentos después, con la mochila al hombro con algo de comida, y un pequeño pastel de chocolate en las manos. ¿de donde lo había sacado? Ha saber, solo se le veía con una amplia sonrisa en los labios. Vio que muchos ya estaban allí, Ithan, Kendra, Asterope, un chico que le parecía que era de segundo, ya que no lo conocía, Enya…que le hizo recordar lo ocurrido durante la comida, como ella le había propuesto ir al baile a el y lo incomodo que se había sentido, ahora, ante esos pensamientos, simplemente se encogió de hombros y siguió caminando.

Cuando llego a la altura de los demás, Enya estaba comentando lo de las estrellas, no le pareció mala idea. –hola chicos!- Saludó, mientras se detenía, con el pastel aun en las manos. –todo puede ser que nos quedemos todos aquí hasta la noche si lo pasamos bien, Enya.- dijo, dedicándole una sonrisa a la chica, al tiempo que se sentaba en el suelo, dejando el pastel frente a el y quitándose la mochila, después, se tumbó, estirándose y mirando al cielo. –por las barbas de Merlín…que a gusto se esta aquí…- exclamo al terminar de estirarse, llevándose las manos al pecho, mientras esperaba a que los demás también se acomodaran.

Gabi llegó un par de minutos después que Arnold.

-Hola chicos y chicas ¿Qué tal?- Saludó contenta. Al recorrer con la mirada el grupo se dio cuenta de que había un alumno que no conocía y era de segundo, por lo que procedió a presentarse.

-Mucho gusto, me llamo Gabriela y soy de Gryffindor- Dijo tendiéndole una mano y señalando su bufanda oro con escarlata.

Una vez el chico respondió, ella se acercó a Kendra para ayudarla a poner las cosas en su sitio: -¿Puedo ayudarte?- Y, tras la respuesta de la otra chica, se puso a acomodar algunas cosas antes de sentarse finalmente en el césped.

Relajó los hombros y respró profundo, era domingo por fin y podía olvidarse de tantas asignaturas. Al menos mientras durara el picnic.

Oliver abrio los ojos de golpe, al verse sorprendido por todos aquellos alumnos de primero. Se levantó de sopetón, en un gesto bastante comico, antes de darse cuenta de que, con tanto pensar, casi se queda dormido.

Una chica morena, la novia del Gryffindor del que habian estado hablando en clase de vuelo Cassius y él, se acercó para presentarse y para presentar a algunos de los que iba llegando. Oliver olvido momentaneamente sus preocupaciones, y dibujo una enorme sonrisa en su rostro, alzando una mano para saludarlos a todos- ¡Hola chicos! Yo soy Oliver, pero podeis llamarme Oli. Soy de Hufflepuff, de segundo... Encantado de conoceros... - dijo, prestando especial atencion al chico rubio de Gryffindor.- Cassius me hablo de algunos de vosotros... - añadio, mirandolo a el en concreto, antes de girarse para coger lo que habia traido.

-He traido algunas cosas del comedor y... - de repente recordó el paquete que habia llegado aquella mañana y que reposaba en el cesped, junto al resto de cosas. Se agachó, echando un vistazo al contenido de la carta, lo que le arranco una sonrisa y, abriendo el paquete, aquella sonrisa se torno radiante- Mi madre ha enviado un pastel de chocolate. Tomad, podemos compartirlo todos. Le salen genial.

Aquel chaval era paradigma de la alegria, el buen rollo y la amabilidad. Costaba pensar que pudiera enfadarse en ningun momento o que alguien como el pudiera tener un mal dia.

-¿Necesitais ayuda? Esperad, le pondré a esto un poco de ambiente... Sonitus. -dijo, sacando su varita, moviendola con agilidad y destreza. Al final le estaba pillando el gusto a eso de organizar eventos y la muestra fue que, de repente, comenzó a sonar una musica bastante moderna y animada, que se oia fuerte y con claridad, capaz de amenizar todo aquel picnic.

-¡Hola chicos! - saludó Kendra, mucho mas animada, a Arnold, Gabi y Enya, alegrandose de que hubieran llegado- Dejad las cosas por ahi, no os preocupeis. Me alegro de veros... - se acercó en especial a Enya, de quien Ithan le habia hablado- ¿Como estas? Ithan me dijo que habias estado un poco enferma... Seguro que el picnic te sienta bien. -lo cierto era que, para ser octubre, incluso estaba haciendoles un buen dia y, con algo que les ayudara a mantenerse algo abrigados, la cosa pintaba bien.

Al poco, los manteles y la comida estuvieron dispuestos. Incluso Kendra habia traido su caja de ranas de chocolate, dejandola en medio de uno de los manteles, para que los chicos cogieran a su antojo. Le extraño que Ludmila no estuviera alli. Despues de todo tambien habia sido idea suya lo de montar el picnic, pero supuso que, o bien se habria retrasado, o quizas estaba algo desanimada por la marcha de Anthony. Quizás seria cuestion de hablar con ella despues.- Estabamos hablando del baile de Halloween... ¿Sabeis ya con quien vais a ir? - dijo, mientras se dedicaba a recoger entonces algunas flores, que comenzó a trenzar para decorar aquel lugar minimamente. Estaba claro que la decoracion alli y las atracciones no serian tan buenas como las de la fiesta de las gemelas, pero teniendo en cuenta que no le habian pedido ayuda a nadie, intentaria hacer todo lo que estuviera en su mano para que el lugar fuera agradable.

Cuando Matt llegó ya habían unos cuantos niños en el lugar. Pero no conocía a muchos de los presentes, básicamente solo conocía, y no demasiado, al alumno de segundo de su misma casa, Oliver. Así que se centró en la comida, como hubieran hecho las gemelas.

-Gracias- dijo cogiendo un trozo del pastel que Oliver les ofrecía. Cuando lo probó habló con la boca llena- Effta muy bfueno.

Y siguió allí, escuchando a los demás mientras comía de todo un poco de las cosas que él mismo había traído del comedor. Lo normal era no mezclar el dulce con lo salado, pero cuando las cosas estaban buenas a Matt le daba igual alternarlas.

- ¿Te olvidaste de escribir a tus padres por mi culpa? - Preguntó, algo sorprendido por la revelación, alzando ambas cejas con sorpresa. La sonrisa se amplió, y acabó dejando paso a la risa. - ¡Pues espero que no le digas a tus padres que fue por mi culpa! - Bromeó, mientras seguía andando junto al grupo de chavales de primero. No hizo más mención al nombre de las lechuzas de Kendra y Asterope. A él le sonaban aquellos nombres de los Dioses Romanos, o Griegos. Y le pareció raro ponerle a una lechuza, el nombre de una divinidad.

Miró entonces al Huffie de segundo, a Oliver. Lo había visto en la clase de vuelo, pero no le había dado tiempo a saludarlo entre unas cosas y otras. - ¡Hola! ¡Encantado, Oli! Yo soy Ithan, como ha dicho Kendra. Te daría la mano, pero voy un poco... cargado. - Afirmó, mientras buscaba un buen lugar para dejar las cosas que traía consigo.

- Bueno, tu no te preocupes por el tema del Baile, Asterope. Si Linc no te lo pide será idiota. - Repitió las palabras de Kendra, afirmando con la cabeza. cuando vio a Kendra comenzar a montar las cosas, se sintió en la obligación de ayudarla. Él no había organizado nada, pero le sabía mal ver a la chiquilla haciendo todo el trabajo. - Déjame que te ayude a poner esto... - Murmuró, mientras comenzaba a ayudar a Kendra a poner las cosas en su sitio. El sacó algunas golosinas de su mochila, varias grajeas Bertie Bott en algunos cuencos, galletas en otras, algunos chocolates en otras. Cuando se incorporó, miró a Arnold tumbado panza arriba.

Entrecerró los ojos, mirandolo. - Eh, tío, venga, ayudame a colocar cosas, no me seas perro muerto... - Comentó, mientras lo miraba estando de pie. Acto seguido, volvió al tema de poner las cosas en su sitio. - Pues... a mi nunca me dio por la astronomía. - Acabó por confesarse sobre ese asunto en particular. - Y nada de quedarse aquí hasta tarde, estas dos señoritas - Miró a Enya y Gabi. - Aun tienen una clase pendiente conmigo de duelo. Pero mañana si podríamos venir a ver las estrellas si quereis, y de paso me enseñais ¿Si? - Preguntó, incorporandose y estirandose un poco.

- Muchas gracias por el pastel Oliver, ahora lo probaré. - Agradeció al chico, mientras Kendra preguntaba con quien irían al baile. - Pues yo iba a pedirselo a Enya, pero escogió caballero antes... así que... - Se encogió de hombros, bromeando. - Tendré que darme prisa en buscar compañera... - volvió a bromear, mirando de reojo a Kendra, con una pequeña sonrisilla.

Entonces, Oliver puso música con aquel conjuro. Se giro hacia él, levantando el pulgar con una amplia sonrisa. - ¡Muchas gracias tío! Bueno... ¡y ahora a disfrutar! - Dijo, dando una palmada y sentandose en el suelo, quitandose la palestina roja que llevaba alrededor del cuello, y sentandose sobre ella.

Diana llegó al lago de un humor excelente, tenía que ir a recuperar algunas clases de Duelo, pero aún tendría tiempo de hacerlo más adelante, aquello no se lo podía perder.

- Pues si te ha parecido divertido todo el ulular que han organizado las lechuzas de mis primos en el comedor, tendrías que ver la que se monta cuando nos reunimos por Navidad, nuestra familia es bastante numerosa ¿sabes?... Oh vaya Ithan vas cargado- observó- ¿Te hecho una mano con algo?- se ofreció.

Después al ver que había más chicos de primer curso se presentó por si había alguien con quien no hubiera hablado aún.

- Hola chicos, yo soy Diana de Gryffindor este es mi segundo año ¿Qué tal?- al ver a Oliver se acercó a él y lo saludó- Ey Oli, ¿cómo te va?- le sonrio con calidez.

Gwendolin llegó al lago en silencio, había aceptado ir a aquella fiesta de novatos porque tenía la esperanza de ver a alguien. Se echó el pelo hacia atrás con elegancia, se alisó la túnica y tras una rápida mirada se acercó al grupo andando con tranquilidad.

- Hola novatos- saludó por mera cortesía- ¿Qué tal chicos?- les dijo a los alumnos de segundo que ya conocía del año pasado- Vaya, en organizar cenas y comidas sois todos unos expertos- miró con una ligera sonrisa de complicidad a Oliver- creo que a alguno de vosotros os deberían de dar el EXTASIS por ello.

Se había alejado por un momento de sus amigos mientras se dirigía al lago, ya que se encontró con unos amigos con lo que había tenido buen trato en la temporada que estaba enfadado con Asterope, después de unas cuantas risas y de meterse con algún que otro niño de otra casa, se giró y se dió cuenta de que Aste, Ithan y Kendra no estaban "Mierda..." se despidió de los demás y salió dirección al lago.

Linc apareció por el lago con la mochila en el hombro, estiró los brazos mientra caminaba hacia sus amigos y los demás -Ey, estaba hablando y os habéis largado ¿Ya estás haciendo de nuestro padre?- Bromeó con Ithan por las últimas palabras que había dicho sobre Enya y Gabi, pues llegó al lago en ese momento.

Lincoln saludó a todos por igual pero centró la mirada en una persona en particular, tenía en su cabeza muchas cosas sobre la charla del director, pero en cuestión de segundos negó con la cabeza y la bajó dejando la mochila en el suelo -Lástima que es Octubre, habría estado genial un baño- Dijo mirando hacia el lago, se calló de golpe al mirar a Ithan de nuevo tras el comentario de su prima -Hasta yo he visto tus lechuzas, que estaba pensando en otras cosa, manda huevos tío- Dijo sonriendo -Va, yo también te ayudo anda...- Linc había recuperado la asignatura de la gata y estaba bastante contento, sino jamás habría extendido el brazo para ayudar a nadie y menos para poner unos platos.

Linc miró a Gwendoline y decidió decir lo que pensábamos todos en la mesa Slytherin -Buenas Gwendoline, Cassius aún no ha llegado- dijo mientras iba colocando los platos, miró por un momento a Gwen y continuó.