Partida Rol por web

[HLdCN] - Subastas Millonarias

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23/10/2018, 01:52
Director

La última entrada con la escritura de los padres de Dorotea en Una Serie de Catastróficas Desdichas dice lo siguiente:

Como sospechamos, hemos de ser náufragos una vez
más. Los otros creen que la isla debe permanecer lejos de la
perfidia del mundo, así que este lugar seguro es demasiado
peligroso para nosotros. Nos marcharemos en una barca
que B ha construido y que a la que ha puesto mi nombre.

Tengo el corazón roto, pero ya he tenido el corazón roto
antes, y esto quizás sea lo mejor que puedo esperar. No
podemos realmente proteger a nuestros niños, aquí o en
cualquier otro lugar, y por tanto puede que sea lo mejor
para nosotros y para el bebé que nos sumerjamos en el
mundo. Por cierto, si es una niña le llamaremos Violet, y si
es un niño le llamaremos Lemony.

Los Millonarios leyeron esta entrada una noche después de una cena de ensalada de algas, pastel de cangrejo y cordero asado, y cuando Dennise terminó de leer los tres ricos se rieron. Incluso el bebé de Kit, sentado en las rodillas de Anya, emitió un chillido feliz.

-¿Lemony? -repitió Dennise-. Que nombre más feo. ¿De dónde sacarían esa idea?

-De alguien que murió, probablemente -dijo El Patrón-. ¿Recuerdas la costumbre de las familias de aquí que dijo Kit?

-Creo que debemos marcharnos, el bebé necesita medicinas y creo que ya puede soportar el viaje -dijo Anya.

-¿Dejar la isla? -dijo El Patrón-. ¿E ir a dónde?.

-A cualquier sitio -dijo Dennise-. No podemos quedarnos aquí para siempre. Hay algo que podremos necesitar, pero no es correcto estar tan lejos del mundo.

-¿Y de su perfidia? -preguntó Anya.

-Pensarás que hemos sufrido suficiente perfidia para el resto de nuestras vidas -dijo El Patrón-, pero hay algo más en la vida que la seguridad.

-Me sorprende que todavía no lo haya hecho -dijo Dennise- Muchas cosas han naufragado aquí, pero no hemos
visto un solo naufrago.

-Si nos vamos -preguntó Anya-, ¿qué encontraremos?

Los Millonarios guardaron silencio. Ya que ningún naufrago había llegado durante el año, tenían pocas noticias del mundo, aparte de unos cuantos jirones de periódico que habían sobrevivido una tormenta terrible. A juzgar por los artículos, había todavía unos cuantos villanos sueltos en el mundo, aunque unos cuantos voluntarios también parecían haber sobrevivido a todos los problemas que habían llevado a los ricos a la isla. Los artículos, sin embargo, eran de El Diario Punctilio, y por lo tanto los ricos no podían estar seguros de que fueran certeros. Por lo que sabían, los isleños podían haber expandido el Medusoid Mycelium, y el mundo entero podría estar envenenado. Esto, sin embargo, parecía improbable, ya que el mundo, sin importar lo monstruosamente que pueda ser amenazado, nunca se ha conocido que sucumba por completo. Los Millonarios también pensaron en toda la gente que esperaban volver a ver, aunque, tristemente, esto también parecía improbable, aunque no imposible.

-No lo sabremos hasta que lleguemos allí -dijo Dennise.

-Bueno, si nos vamos a marchar, más vale que nos demos prisa -dijo El Patrón. Se puso de pie y caminó hasta el banco, donde el Millonario había construido un calendario que creía que era bastante certero-. La plataforma costera se inundará pronto.

-¿Cogemos esto? -preguntó Anya, alzando el libro que había estado leyendo en voz alta.

-No creo que sea buena idea -dijo Dennise-. Quizás llegue otro naufrago, y continúe la historia.

-Así que nos vamos -dijo Anya, y realmente se iban. Después de un buen sueño nocturno, los Millonarios empezaron a preparar su viaje, y era cierto que no necesitaban mucho. La menor de los Millonarios se había sorprendido al encontrar que la barca que parecía en mejor estado para la misión era en la que habían llegado, aunque para cuando habían terminado de repararla y dejarla lista para el viaje no estaba sorprendida después de todo. Repararon el casco de la barca, y fijaron nuevas velas en los mástiles, y finalmente ella miró a la placa que ponía CONDE OLAF, y frunciendo ligeramente el ceño, rompió la cinta adhesiva y la quitó.

Tal y como los ricos habían advertido durante su viaje hacia la isla, había otra placa debajo, y cuando Anya leyó lo que ponía, y llamó a sus compañeros Millonarios y a su hija adoptiva para que lo vieran, otro interrogante de sus vidas fue respondido, y otro misterio comenzó.

Finalmente, llegó el día de salida, y mientras la plataforma costera empezaba a inundarse los Millonarios bajaron la barca -o, como el Dr. Montgomery Montgomery habría dicho, el "vaporetto"- hasta la playa y empezaron a cargarla con todas las provisiones.Se quedaron mirando a las blancas arenas de la playa, donde empezaban a crecer nuevos manzanos. Los ricos pasaban casi todo su tiempo en el arboreto, así que ahora el lado de la isla donde la colonia había estado parecía ahora el lado más lejano de la isla, en vez del sitio donde habían vivido.

-¿Estamos listos para sumergirnos en el mundo? -preguntó Dennise.

-Yo sólo espero que no nos sumerjamos en el mar -dijo El Patrón, con una pequeña sonrisa.

-Yo también -dijo Anya, y le devolvió la sonrisa.

-¿Dónde está el bebé? -dijo Dennise-. Quiero asegurarme de que estos salvavidas le quedan bien.

-Quería decirle adiós a su madre -dijo Anya-. Llegará pronto.

Efectivamente, la pequeña figura de la hija de Kit se pudo ver gateando sobre el montículo, hacia los ricos y su bote. Los Millonarios la vieron acercarse, preguntándose cuál sería el siguiente capítulo en la vida de la niña, y desde luego era difícil de decir. Hay quien dice que los ricos volvieron a unirse a V.F.D. y están comprometidos con valientes misiones hasta el día de hoy, quizás bajo nombres diferentes para evitar ser capturados. Hay otros que dicen que murieron en el mar, aunque los rumores de la muerte de uno surgen muy a menudo, y muy a menudo se revela que son falsos.

Pero en cualquier caso, al tiempo que mi investigación termina, hemos alcanzado el último capítulo de la historia de los Millonarios, aun cuando no la han alcanzado los Millonarios. Los tres ricos subieron al bote, y esperaron a que el bebé gateara hasta el borde del agua, donde podía ponerse ella misma de pie agarrándose a la parte de atrás de la barca. Pronto se inundaría la plataforma costera, y los Millonarios estarían en camino, sumergiéndose en el mundo y dejando esta historia para siempre. Incluso el bebé que se agarraba a la barca, cuya historia acababa de empezar, pronto desaparecería de esta crónica, después de pronunciar unas pocas palabras.

-¡Nya! -gritó, que era su modo de saludar a Anya-. ¡Pato! ¡Niss!

-No nos marcharíamos sin ti -dijo El Patrón, sonriendo al bebé.

-Sube a bordo -dijo Dennise.

-Cosita -dijo Anya, usando un término cariñoso que se había inventado, mientras acariciaba a Cookie.

La bebé se quedó quieta, y miró a la parte de atrás de la barca, donde estaba fijada la placa. No tenía manera de saberlo, por supuesto, pero la placa había sido clavada a la parte de atrás de la barca por una persona que estaba en el mismo sitio donde ella estaba... al menos, hasta lo que ha mostrado mi investigación. La niña estaba en un sitio de la historia de otra persona, durante su propio momento, pero ella no estaba pensando ni en la historia lejana en el tiempo ni en la suya propia, que se extendía en el futuro como el mar abierto. Estaba mirando fijamente a la placa, y su frente  estaba arrugada por la concentración. Finalmente, pronunció una palabra.

Los Millonarios ahogaron un grito cuando la escucharon, pero no podían decir con seguridad si estaba leyendo en voz alta la palabra o estaba simplemente afirmando su nombre, y desde luego nunca lo averiguaron. Quizás esta última palabra era el primer secreto del bebé, uniéndose a los secretos que los Millonarios estaban guardando del bebé, y a todos los otros secretos sumergidos en el mundo.

Quizás sea mejor no saber exactamente qué quería decir con esta palabra, tal y como algunas cosas es mejor dejarlas en lo gran desconocido. Hay algunas palabras, por supuesto, que es mejor que no se digan -pero no es el caso, creo, de la palabra pronunciada por mi sobrina, una palabra que aquí significa que la historia se ha acabado.

 

Beatrice.