Partida Rol por web

PEC 12: Space Force

Capítulo 4. El legado de Némesis

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10/06/2022, 21:02
William P. Thompson

William se mostraba muy pensativo, albergando muchas dudas respecto a todo. La situación en cierta manera le estaba sobrepasando. De todos modos, pensando las cosas de una manera algo más clara creyó oportuno hacerle un comentario a Grey - Ten mucho cuidado. No sabemos en quién se puede confiar y en quién no - Si iba a contactar con alguien del 15, sabiendo que allí tenían infiltrados había que ser extremadamente cuidadosos. De primeras la mejor opción era pecar de precavidos antes que de confiados - Por mi parte, prefiero que todos los señalados por Nyria estén cuanto menos, bajo vigilancia extrema... - Por su parte, Thompson quería estar en todos los sitios, pero no tenía claro donde podría ser más productivo, así que decidió ir a la sala de vigilancia - Me gustaría ir a la sala de las cámaras, podré echar un vistazo general a la situación. Además, seguro que allí hay un ordenador y accediendo a las fichas de los oficiales, podría enseñárselas a Astor por si reconoce a alguien más. Pero por mi parte, pienso que los que ha nombrado Nyria tienen todas las papeletas... - Una vez que le tocara, iría a la sala de vigilancia con Nyria y Astor a solas. No querría estar con ningún otro miembro de la tripulación entre aquellos que no conocía. 

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10/06/2022, 21:12
William P. Thompson

La cabeza le seguía dando vueltas desde la conversación con la pequeña. Y si resulta que toda su vida había estado engañado. Su madre resulta que era asteriana, o al menos conocía el idioma, y el hecho de que hubiera tantos asterianos en el Domo 15 le incitaba a pensar que su padre lo sería... 

¿Su hermano lo sabría? ¿Cuánto tiempo llevarían los asterianos infiltrados para llegar a algo así? Le costaba comprender y era algo a lo que no estaba acostumbrado. Se sentía impotente, furioso y confundido. Esperaba poder encontrar una imagen de su padre para mostrársela a Astor y saber si le conocía. Eso sería esclarecedor. Descontando que al parecer sus propios padres son muy similares, otra cosa que le preocupaba en demasía. De todos modos no quería preocupar a sus acompañantes. Entraron en la sala de las cámaras y relevó a quien allí estuviera. 

- Siento que te hayas visto tan implicado de cara al resto de asterianos - Le dijo a Astor - Pretendía tratarte como prisionero, precisamente para que si salían mal las cosas, tampoco tu pagaras las consecuencias... - Le comentó mientras se dedicaba a buscar en los ordenadores datos de los oficiales del 15, en especial buscaba alguna foto de su padre, aunque sería razonable que pudiera conseguirla por otros cauces. 

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11/06/2022, 16:52
Ambientación

SF121 Airways Commander

Tras la charla en la cafetería de la nave cada uno de los soldados decidió ponerse a trabajar acorde a sus cualidades. Por un lado, West y Grey se retirarían para interrogar a Brighter en el camarote general, donde las literas de unos y otros descansaban de manera ordenada. Allí también fueron llevados los señalados por la niña, Ryan y Nala, exceptuando a Swallow que iría a la cabina de pilotaje con Einar.

Una vez el teniente estuviera fuera del restaurante, Duncan diría que no podían fiarse de nadie, ni siquiera del mismo West. Sin las pruebas de detención era una locura continuar con aquella misión, pues podía tornarse suicida hacer planes con el enemigo justo al lado. Así que la única opción que tendría el doctor sería la de tomar la sangre de sus compañeros de viaje, con el kit de primeros auxilios y el kit de toma de muestras que todas las naves de la Space Force tenían guardadas cerca de la esclusa principal, en cajas debidamente selladas.

Thompson quería mirar cámaras de vigilancia, pero la nave donde se encontraban no estaba dotada con dicha ubicación para sistemas, pues era un transporte destinado a escuadrones, un sitio donde los soldados vivían íntimamente y se conocían a fondo. Era innecesario crear un habitáculo para ver lo que unos y otros hacían a cada instante, quizás eso fuera más potestad del piloto, pues era quien comandaba todo el vehículo. Sin embargo, el joven Billy tenía la necesidad de tratar ciertas cosas en intimidad, por lo que habló con Bintel y ésta, solícita, le facilitó la tablet que había traído consigo, permaneciendo unos instantes con el soldado, dándole varias explicaciones.

Mientras tanto, Astor consideró prudente separarse de Duncan, sobre todo después de sonreír al escucharle hablar asteriano. Se situó cerca de Billy, el cual manipulaba la tablet con cierta inseguridad, justo cuando McCarthy le tendía una vacua amenaza. El joven se estaba librando por los pelos de una colleja, pero era listo, así que apartarse del camino del doctor en ese preciso momento era tener un mínimo conocimiento de supervivencia.

El doctor fue hasta la cabina de la nave y escucharía la conversación que se filtraba por la radio. Einar quedaría frío durante unos instantes y atendería el consejo de su compañero, Arinna no debía tocar los mandos de la nave, pero eso no era un problema, puesto que la susodicha estaba siendo interrogada por West y Grey.  Duncan, posteriormente, iría a por Bintel para que emulara la voz de la teniente Brighter, bajo petición de su amigo, dejando a Thompson junto con la tablet en el restaurante, tan solo acompañado por los dos niños asterianos.

Todos se habían separado. Einar en la cabina del piloto quedaría junto a Bintel, Swallow y Sue. McCarthy iría a hablar con Grey en el camarote general y Thompson permanecería en la cafetería de la Airways Commander.

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11/06/2022, 18:14
Astor Lightnor

SF121 Airways Commander. Cafetería

Tras el trasiego inicial de los soldados, los cuáles iban de un lado a otro sin darles intimidad, y las explicaciones amables de Bintel, que le preparó a Billy la tablet para poder buscar la información que le solicitaba, el joven Thompson había mantenido el estrés de no saber exactamente cuál era su verdadera naturaleza, ni la de su propia familia. Pero aquella incertidumbre quizás fuera a terminar ahora que Astor estaba a su lado, pues el muchacho conocía mucha más información y pudiera ser que le diera las respuestas que precisaba.

- Es una mierda todo esto... - Y es que el joven estaba de agua hasta el cuello, y lo sabía - Mi única opción para salir bien parado es que me deis la libertad y poder hacer mi vida en cualquiera de los planetas terrestres. Uno que no sea Natgrew. Si me pilla mi padre o sus soldados, estoy perdido... - Y es que su mayor miedo era que su propio progenitor le echara el guante encima, pues se jugaba el tipo.

Astor asintió cuando Thompson le dijo que quería tratarle como un prisionero para que no fuera un blanco para los asterianos. Él se encogió de hombros asumiendo la realidad.

- Era cuestión de tiempo que me hubiese ido. Tarde o temprano esto iba a pasar. Mejor ahora, al menos el haberme ido con vosotros puede colar inicialmente como un secuestro, pero al final, averiguarán todo... - Realidad que ya había asumido.

Billy buscó imágenes de su padre, y no le fue difícil encontrar una bastante actual, denotando que la base de datos de la Space Force estaba al día con respecto las informaciones. Le enseñó la imagen a Astor y éste miró con curiosidad al tipo que le miraba a través del dispositivo.

- ¿Quién es? - Preguntó, evidenciando que no le conocía - Si quieres que le reconozca, no le he visto en mi vida... - Luego miró a Thompson con curiosidad, como si esperase algún tipo de explicación.

A la par Nyria miró la imagen y tampoco dijo nada. El padre de Billy no era alguien significativo para ese par de asterianos.

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11/06/2022, 18:31
Sargento Dunne Grey

SF121 Airways Commander. Camarote general

Duncan, tras asegurarse de coger los kits de muestras biológicas y el de primeros auxilios llegó hasta donde estaban el teniente West y la sargento Grey, interrogando a la sospechosa. El rostro de ambos mandos era serio, por lo visto no estaba yendo demasiado bien la extracción de información.

Dunne miró a su amigo con seriedad, estaba claro que el doctor no confiaba en nadie y ella tenía claro que estaba de acuerdo con él, así que le respondió quedamente.

- Hay que abortar cualquier tipo de misión aquí, y hacernos con algún sistema de detección asteriana que se base en ciencia, no en suposiciones o en la ayuda del mismo enemigo - Fue la conclusión final que había determinado la sargento - Deberíamos regresar a Comandancia, hablar con Heather Mosley y fabricar un test rápido de detección asteriana. Sólo así podríamos hacer misiones con seguridad. Lo contrario es un jodido suicidio...Y posiblemente Duncan estuviera de acuerdo con ella.

La información de que había un mensaje de fuente asteriana en cabina hizo que la mujer suspirase y no le quedara más remedio que hacer lo propio.

- Teniente West, ha surgido un problema importante en cabina, si me permite voy a solucionarlo mientras usted continúa con la detenida... - Solicitó sin entrar en detalles, siéndole permitida la salida del camarote general. No tardando un minuto en ponerse en marcha - Vamos, no hay tiempo que perder, Brighter es una tumba, no creo que hable ni aunque se la torture... - Y para que Grey viese tan negra la situación, había que estar realmente preocupado

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11/06/2022, 19:09
Tessa Bintel

SF121 Airways Commander. Cabina

Bintel se encontraba en la cabina junto con Einar, Sue y Swallow cuando entraron Duncan y Grey en aquel habitáculo de dimensiones reducidas. La sargento se interesó por saber cuál había sido el mensaje que desde fuera había llegado, frunciendo el ceño cuando supo que el destinatario final era precisamente Louise Brighter, la teniente sometida a interrogatorio.

- Yo puedo emular perfectamente su tono, lo que no tengo claro es qué debo decir... - Miró a los presentes buscando ayuda, y es que si nadie le indicaba concretamente qué comunicar, podría decir cualquier tipo de comentario que más tarde les pasara factura.

La sargento Grey era partidaria de buscar una ubicación específica desde donde tender una trampa a la otra nave, pues si había dos humanas dentro, lo correcto sería recuperarlas y atrapar a más asterianos. Desde luego si el plan que elaborasen salía bien, no podrían continuar su aventura espacial, lo más prudente sería regresar a Comandancia y hacer lo que le había dicho a Duncan, conseguir unos test rápidos de identificación asteriana antes de cada misión, pues estaba demostrado que viajar con infiltrados a bordo era un completo suicidio.

Tessa Bintel permanecía a la espera mientras que Grey dio su primera opinión, debían bajar hasta unas coordenadas donde hubiera monte, de manera que algunos soldados pudieran acechar desde las alturas y dar cobertura al resto. Los presentes podían emitir juicio, pero debía ser cuanto antes, pues la Airways Commander descendió, Dunne había determinado que llegar en primer lugar les daría ventaja frente al enemigo.

Todos pudieron notar que la nave regresaba a Natgrew, y tras el tiempo adecuado de atracción gravitacional, estacionarían donde los soldados de cabina hubiesen pactado, transmitiendo el mensaje al enemigo por medio de la eficiente Bintel.

Notas de juego

En la siguiente actualización hay un salto temporal. Así que es buen momento para cerrar cuestiones personales.

En este post estáis todos marcados porque los tres notáis el descenso, y os doy la opción de que participéis en la elaboración de la trampa. Aviso que si no dais ideas, los pnjs pueden equivocarse al proceder y eso puede conllevar a que los pjs mueran. Os lo digo para que tengáis cuidado y penséis bien lo que posteáis.

El fin de la partida ya casi es inminente, aviso para navegantes...^^

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12/06/2022, 21:43
William P. Thompson

William comprobó que ninguna de las imágenes que le había enseñado a Astor fueran de asterianos que al menos el reconociera, no eran muchas pero había podido enseñarle algunas fotos de miembros del 15. - Sólo son oficiales del 15, por si acaso... - Respondió a su pregunta. Después fue a buscar a los demás, aunque seguía pareciendo algo despistado, cavilando y pensando en otras cosas, casi despistado. 

Después de preguntar se enteró de que se encontraban en la cabina de pilotaje así que decidió ir allí. Por desgracia no habían optado por encerrar a todos los asterianos, sólo aquellos con los que la teniente había tenido contacto directo, un riesgo a ojos de Thompson. Comprobó la situación y al parecer Tessa esperaba unas indicaciones para ver que mensaje transmitir. Después de comprobar que el comunicador no estaba emitiendo, Billy decidió aportar su idea - Creo que lo mejor sería darles unas coordenadas distintas y tenderles una emboscada. Además Osiris es el que pedía esa cantidad de dinero en la conversación que interrumpimos... Parecía algo importante - Comentó recordando que el nombre de Osiris había salido en la conversación que habían mantenido en aquella prisión. 

En todo momento no había dejado de cubrir, aunque fuera lo más disimuladamente posible a Nyria en caso de que alguno de los asterianos presentes decidiera hacer algo, vigilando también muy de cerca a Astor. Se estaban arriesgando mucho, sobre todo dejando a una asteriana en la cabina de pilotaje. 

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13/06/2022, 00:24
Daya Banerjee

En nave asteriana.

 

Afirmó con un asentimiento de cabeza, sonriendo al ver la reacción de Tharok-Técnicamente, yo no hice trampas. Solo intenté que Lee Joe no descubriera a quien las estaba haciendo-dobló la realidad a su antojo para evadir la responsabilidad aunque, ella y él sabían que era culpable y que, si les hubieran pillado, todos hubiera pagado igual-No eran justos los resultados. Todos trabajaron muy duro, pero teníamos gente que no sabía ni escribir. ¿Cómo iban a aprobar un examen escrito y sobre legislación?. Era dejar que suspendieran y se vieran con un pie fuera de la Space Force o aprobarlos y que, de verdad, pudieran probar lo que valían en las áreas en las que tenían conocimientos. La ley se aprende de otra forma. Lee Joe me enseñó más cosas a mi que esos libros... -lo miró fijamente a los ojos, a esos ojos de color azul que la cautivaban-Para tu información, mi nota no se cambió. Lo pedí expresamente aunque hubiera suspendido, aprobé por los pelos. Solo se cambiaron las notas de los suspensos y... creo que al final no nos descubrieron, nunca nos dijeron nada y si tú no sabes nada de este tema, ahora sé que Lee Joe te lo habría dicho y lo sabrías. Y tu cara de sorpresa me dice que de verdad no tenías ni idea...

Hablaron largo y tendido de Lee Joe. Daya descubrió quien era en realidad su mando, qué escondía debajo de aquella forma de ser tan hermética y rígida que ella había conocido como recluta. Saber el cariño y el aprecio que Tharok le tenía y que Lee Joe había cuidado de él, fue una gran sorpresa, porque era todo tan diferente a cómo ella se lo había imaginado que le abría la mente a la realidad de lo que su padre le había repetido una y mil veces.

Lo que ves de los demás es lo que ellos quieren que veas. De puertas para adentro de cada casa, solo uno sabe lo que carga realmente sobre sus hombros y, solo si te permiten entrar, lo sabrás tú. 

Tharok le había abierto las puertas a su realidad, a su mundo, uno en el que la riqueza no se traducía en numerarios sino en amistad y lealtad ante un secreto que, de ser desvelado, podría atraer a la muerte o a cosas peores. 

Lealtad como la que Tharok demostraba a Townhall y, por defecto, a sus hijas, sobre todo a la pequeña sobre la que ya ambos habían hablado en el pasado.

-Las hijas de Townhall...¿qué pasará ahora con la pequeña?, ¿se consiguió localizar a su madre?. Sabes que no me gusta que esté en un internado aunque entiendo que es la mejor opción, tener esa educación desde tan joven, tener la posibilidad de pertenecer a la Space Force sin tener que pasar por las pruebas selectivas, realmente es una oportunidad que no puede desaprovechar-comentó, recordando sus exámenes-Me encanta esa pequeña...-se le pasó una idea por la cabeza y tal cual se le pasó lo dijo, era lo que daba la confianza. Frank había querido hacerse cargo de ella pero, quizás ahora, él no podría estar pendiente de la niña tanto como él hubiera querido-Si su madre no aparece...-porque siempre había planeado la duda sobre si la misión a la que había ido había tenido problemas y no volverían ninguno de sus integrantes-aparte de sus hermanas, ¿hay más familia? porque a ellas no las veo por la labor de ocuparse realmente de su hermana pequeña. Es que... no sé... ¿hay forma de que yo cuide de ella si nadie más de su familia aparece?, tu conoces más las posibilidades dentro de la Space Force y no quiero que se sienta sola y, que si necesita algo, sepa a donde acudir. No me importa hacerme cargo de ella desde la distancia pero no quiero interferir si hay familia, pueden llegar a tomárselo a mal por no entender mi preocupación y mi cariño hacia la pequeña. Es adorable y llegamos a entendernos bastante bien en el PEC... dejando a un lado sus malos modales y sus travesuras-sonrió recordando algunas de las escenitas que le había montado en los comedores de la estación espacial y la cara de los soldados presentes al verlas a ambas.

"Es posible que Joe pensara que eres atractiva. No hay nadie en el universo a quien no pudieras gustarle..."

Fue un comentario de lo más inocente pero que reactivó de nuevo recuerdos en la innumita. Bajó la mirada, momentáneamente avergonzada y turbada ante las imágenes que su cerebro volvió a mostrarle. El sentimiento de que no era atractiva y de que no valía nada, afloró a su piel con una fuerza arrebatadora. Sabía que aquellos sentimientos y reacciones eran el resultado del trabajo de Reginald sobre ella, pero eso no evitaba lo que sentía en respuesta a aquellas palabras de Tharok. Apretó la mandíbula e intentó borrar aquello de su mente centrándose en el presente, en el ahora, en lo que Tharok le transmitía, pero fue totalmente consciente de algo en lo que había pensado muchas veces durante aquellas semanas. Iba a necesitar mucho tiempo, quizás algo de ayuda, para guardar ciertos recuerdos tan profundamente que no interfirieran en los momentos de intimidad. 

-Hay que tener muchas agallas para querer entrarle a Lee Joe...-comentó, intentando alejar a su mente del recuerdo de Reginald para centrarla en la de Lee Joe. Se obligó a visualizar al brigada, a recordar lo que él le provocaba, sustituir unos recuerdos por otros más agradables o, simplemente, por otros recuerdos que la alejaran de pensar en ella y en su cuerpo-Yo no sería capaz para nada. Fue tomar ese café con él y se me hizo interminable aquellos minutos. Ahora bien, la próxima vez intentaré que sea de otra forma...-comentó dejando en el aire el deseo de que realmente aquello pudiera suceder en algún momento en el futuro cercano.

-Dejemos lo de los skulls para otro momento, no es necesario que sea ahora-asintió con rotundidad al entender que podía significar levantar sospechas entre los demás asterianos de la nave-Así que hay skulls en esta nave...-hizo una larga pausa. Alguno de aquellos seres, largamente temidos por la humanidad a lo largo y ancho del espacio, que aparecían y desaparecían después de destruir todo lo que encontraban a su paso, estaban en la misma nave que ella. A una sola orden de alguno de los asterianos, podían eliminarla sin pestañear y ella no tendría donde esconderse, era carne de cañón, alimento de skulls, cebo vivo, si se equivocaba en algún momento y sospechaban de ellos dos. Era inquietante. Sabía que quería verlos de cerca, con detalle, con la seguridad de que nadie les ordenara atacarla, pero entendía que podía comprometerlo todo, así que desistió de pedir de nuevo el verlos aunque, quizás, fuera la única oportunidad que tendría para verlos de cerca y sin peligro.

Hablar sobre los planes de futuro dejaba muchas incógnitas en la innumita que no veía claro cómo iba Tharok a despistar a los miembros de su grupo y temía porque un movimiento en falso o demasiado rápido le descubriera ante los suyos y lo catapultara a ser considerado un desertor o algo peor. 

"Fingiré mi muerte".

Aquellas tres palabras flotaron en el ambiente durante unos instantes en los cuales Daya intentó hacerse cargo de la situación. Su pareja iba a intentar, quizás, la única opción que realmente le permitiría vivir en paz, la única con la que nadie se plantearía el buscarlo o perseguirlo. Su propia muerte.

-Se que encontrarás el momento oportuno para hacerlo. No te apresures...

"Quizás incluso necesites espacio y tiempo para rehacer tu vida... "

¿Le estaba diciendo que lo olvidara?. ¿Que rehiciera su vida lejos de él?. El no era el problema, ¿es que no lo veía?. El problema era ella.

Se levantó y se dirigió al ventanal e intentó ordenar sus sentimientos. Fue entonces cuando le dijo lo que realmente pensaba de la situación, que el problema era ella. Si no fuera por ella quizás él no tendría que planificar su muerte a ojos del resto, quizás solo le valdría coger una nave y perderse en el espacio para volver a empezar. Sintió como él se aproximaba a su espalda y como, tras dudar un instante, la abrazó cálidamente para decirle lo que él sentía y pensaba sobre ella. Sus palabras fueron tan diferentes a todo lo que llevaba semanas escuchando y sufriendo que tuvo que procesarlas e interiorizarlas en un alarde de fuerza de voluntad tan enorme que en varios momentos pensó que no sería capaz de hacerlo. Delante de ella solo estaba la nada y la oscuridad más absoluta, del frio eterno del espacio, pero a sus espaldas estaba la calidez y el amor más incondicional que nunca había imaginado tener. El término humano o asteriano no tenían cabida en aquella habitación, solo existían Tharok y ella, sin más.

Quizás si la realidad fuera otra, si las circunstancias fueran un poco diferentes, todo sería más fácil para ambos. Daya sopesó todo lo que sabía de Tharok y lo visualizó en Innum con su familia, los visualizó a ambos en un sistema estelar desconocido para ella, variables indeterminadas en el futuro que estarían condicionadas por tantas circunstancias y situaciones que cambiarían cada instante dando lugar a más y más líneas de futuro diferentes. Quizás nunca volvieran a reencontrarse pues algo se torciera en el camino simplemente. Quizás tuvieran la oportunidad de tener ese futuro con el que soñaba él y que compartía con ella más pronto de lo que ambos podían imaginar en aquel momento.

-Antes dijiste que, si lo hubieras sabido, hubieras venido a Innum a conocerme y nuestra historia hubiera sido muy diferente a lo que tenemos ahora-se volvió hacia él para mirarlo directamente, sus ojos húmedos de lágrimas emocionadas-Nunca me he planteado si creo o no en el destino, no me ha hecho falta. ¿Hubiera sido diferente todo ahora en ese caso?, no lo sé. Quizás, simplemente, no nos hubiéramos gustado de la misma forma. No sé si esto lo ha escrito nuestro destino, pero es nuestra historia. Y acepto nuestra historia tal cual es-le sonrió dulcemente-por que conocerte es lo más bonito que me ha pasado-dejó que él le acariciara la mejilla mientras que ella no separaba su mirada de su rostro-Quiero intentarlo, Tharok. Elijo quererte.

Se puso de puntillas y buscó los labios de él, sobre los que posó los suyos propios tan suavemente como el aleteo de una mariposa.

-¿Como se dice te amo en asteriano?-le susurró, separando apenas los labios y apretándose a él, sintiendo que, realmente allí era especial y que ningún tratante de esclavos podría borrar de su mente la seguridad que le daba aquel abrazo, ni el amor incondicional que le trasmitía Tharok. 

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13/06/2022, 20:31
Duncan "Duke" McCarthy

Las cautas sugerencias de Thompson fueron ignoradas y los asterianos no fueron detenidos, custodiados sí, pero no detenidos, haciendo que en cualquier momento las posibilidades de un motín a bordo se cristalizaran. Estaba de acuerdo de que los señalados por Nyria tenían todas las papeletas, porque era muy complicado no pensar en tu propia lengua materna, aun así, podía haber gente entrenada que eludiera su escrutinio, aunque era cristalino que ningún humano era capaz de pensar en el idioma de una especie a la cual no se conocía hasta hacía relativamente poco.

No, podían haber más y no podían confiar, ni siquiera en Sue, algo que le avergonzaba. Ponía la mano en el fuego por Einar y Grey, incluso por Billy, la pequeña Townhall, y tal vez Malbone por su exuberancia física, pero más allá de eso no podía estar seguro. Miró a Astor, que le estaba buscando como haría cualquier adolescente, y vio como se apartaba de él. Era listo el joven, intuitivo, aun así no le había pillado del todo. No pensaba hacerle daño a no ser que le obligara, pero que pensara que iba a ser así no le haría daño. Se dirigió a la esclusa a tomar muestras, y de hacerlo lo haría sin muchos artefactos. Pistola en una mano, aguja en la otra, pinchazo en un dedo y meter la aguja directamente en el tubo de muestras. Después de eso una sonrisa corta y un

- Gracias por la colaboración - Acompañada de una sonrisa un poco más ácida cuando le tocara a los asterianos. Fue a la cabina para tomar las últimas muestras y entonces escuchó lo que no tenía que haber oído nadie, una transmisión directa en la cabina que podía hacer sospechosa a toda la nave. Aquel sitio no estaba cerrado, no había sido una comunicación en clave, si no abierta, abierta a cualquiera, en un lugar donde cualquiera podía entrar. Se olvidó de hacer las pruebas a Einar y a su copiloto, que estaba haciéndole el interrogatorio el piloto y fue corriendo a avisar a Bintel para que fuera a la cabina. Tenía que avisar a la sargento de lo que había pasado, solo esperaba que el truco funcionara una segunda vez, aunque para ser sincero, no sabía que les convenía más. Lo mejor era que volvieran a su base, porque, de atender la llamada, el objetivo de rescate de la pequeña Townhall se desvanecía. Osiris era una presa importante, las dos mujeres humanas una intriga, pero la pequeña Townhall era una certeza, y había jurado que no la abandonaría.

Fue a buscar a Grey y la llevó a la cabina para que se diera cuenta de la situación. Ella era de la opinión de tender una trampa, pero veía el problema de ir con infiltrados. Tessa hizo lo que pidieron Dunne y Billy, con intención de proponer una emboscada. Duke se calló, esperó a que acabaran y miró a Einar antes de decir

- ¿Einar, puedes pilotar la nave solo? - apuntó a Swallow y le dijo - y ahora, despacito y sin tocar los controles vas a acompañarme para jugar un rato con el sargento Malbone. Tenemos que hablar de los planes sin que nos oigan....

Se la llevó ante Malbone y le dijo
-Sargento, cuide de la prisionera....es sospechosa de ser asteriana.

En cuanto quedara a buen recaudo volvería a la cabina y les diría

- Creo que si intentamos apresar a Osiris perderemos la oportunidad de rescatar a la pequeña Townhall, y,  sinceramente, no creo que podamos confiar en nadie de la nave, tal vez en Malbone, pero la infiltración ha llegado muy lejos y no podemos dar pasos teniendo a asterianos en la nave. Un error, una esclusa abierta y moriremos todos. Si decidís ir a por Osiris...tal vez deberíamos dividirnos.... no podemos abandonar a la pequeña, no podemos castigarla a una vida así.... entiendo que es importante atrapar a Osiris, y no quiero que ninguna humana sufra, pero la pequeña es de los nuestros, es familia.... y cuanto más tiempo pase desde que nos escapamos más posibilidades tenemos de que desaparezca para siempre.

 

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13/06/2022, 22:30
Einar Andersen

Si algo había demostrado el enemigo hasta ahora era su capacidad por mantenerse impávido bajo cualquier circunstancia. Aquello sin duda había sido uno de los motivos del éxito de su infiltración completa y absoluta en todos los estamentos humanos. Eso y por su absoluta supremacía tecnólógica, claro.

Los Asterianos parecían capaces de mantener una pantomima bajo cualquier circunstancia y que Swallos se comportase como si aquello no fuese con ella no era realmente ninguna novedad a ojos del piloto, si bien el aparente aislamiento de la mujer con el resto del comando de a bordo le escamaba.

A las preguntas a cerca de lo ocurrido pronunciadas por la supuesta asteriana, Einar respondió juiciosamente con monosílabos y de forma bastante esquiva, si bien llegado a un punto, consideró apropiado ser él quien llevase la voz en aquella cabina.

-¿Sabes, Marzzia? hsace rato que le doy vueltas a algo...-preguntó de forma casual, mientras se dedicaba a seguir pilotando.

-Es con respecto a todo esto de los asterianos infiltrados en la Spaceforce. Por lo que sabemos, la facción beligerante en contra de nosotros es una minoría de la sociedad de Aster, la cual debemos suponer más avanzada social y tecnológicamente que nosotros a tenor de los hechos, ¿No es así?- Preguntó retóricamente

-Me parece difícil de creer que el mando legítimo asteriano esté dejando operar libremente a una escisión violenta de los suyos en contra de otra civilización de nivel militar avanzado como es la humana, con el evidente riesgo de que eso desencadene una guera interplanetária. Eso nos dejaría dos opciones O bien son unos necios, o bien están alineados con la facción violenta que nos está atacando, o bien están practicando tareas de contraiteligencia....-dejó caer como si estuviese soltndo ideas al viento.

-Ya sabes, como por ejemplo los falsos partisanos que infiltraba el ejército nacional socialista en los grupos de la resistencia durante  la segunda gran guerra del siglo XX, para mantener a esos grupos hostiles controlados en las zonas ocupadas- En ese momento desvió la mirada de los mandos para mandar una significativa mirada a su copiloto, para simplemente preguntarle- ¿Tú que opinas?

La respuesta y reacción de Swallow iban a ser tenidas muy en cuenta por el piloto, quien sabiéndose respaldado tanto por Sue como por el resto de presentes en la cabina se sabía lo suficientemente seguro como para poder sacar un tema como aquel con las garantías suficientes de no poner en peligro el pilotaje.

Poco despues entró Duncan dispuesto a acabar con la falsa libertad de Swallow a golpe de acusación clara y directa. Al fin y al cabo y dadas las circunstancias, tarde o temprano se debía tomar aquella consideración por lo que al menos esperaba haber dado algo en que pensar a la rea.

En cuanto saltó el mensaje inesperado por radio, Einar se afanó en tratar de localizar su origen, así como en avisar a los mandos por mensaje directo de lo ocurrido.

Tecleando con freneśi, se afanó en buscar unas coordenadas adecuadas al propósito de la emboscada. Con un terreno propicio, alejadas de nucleos y bases terrestres y de boyas de comunicación que pudiesen ayudar al enemigo a solicitar refuerzos una vez desvelada la trampa.

Una vez encontrado un lugar idóneo, le puso la mano en el hombro a Tessa, y cabeceó en dirección a la radio, indicándole el mensaje que debía dar por radio

-Repite: Aquí Arinna, recibido. Las coordenadas para el punto de encuentro en Natgrew  son Latitud 34287 loungitud 54356. Volad con cuidado.

 

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14/06/2022, 08:18
Cabo Marzzia Swallow

SF121 Airways Commander. Cabina

Inicialmente, nadie podía haber dicho que Swallow era asteriana. La mujer manejaba la mesa de control de la nave con atención, siendo delicada y precisa con sus movimientos, para que el vuelo saliera de manera adecuada. A Einar podía recordarle a un piloto que, tras haber superado la fase de prácticas, aún no tenía mucha desenvoltura con los mandos de aquel particular vehículo.

La mujer había mostrado su preocupación con respecto a los niños asterianos, no recibiendo más que monosílabos por parte de Andersen, hasta que algo en él cambió y el hombre se mostró mucho más dominante en la conversación, dando un giro al rol que hasta el momento había mantenido en la cabina.

- ¿A qué le estás dando vueltas? - Preguntó la cabo girando el rostro durante unos instantes hacia su interlocutor, un breve lapso de tiempo que se permitió en observarle

Einar comenzó a hablar de los asterianos infiltrados en la Space Force mientras a ella se la veía callada, atenta y tensa, pero claro, siempre que cogía los mandos de la nave solía estarlo. ¿Era eso significativo de alguna manera?

Marzzia suspiró ante la pregunta dispuesta a responder a su compañero - Lo que tengo entendido es que los asterianos enemigos dan problemas, y por lógica sólo puedo decir que esto se debe a que, o bien son muchos más de lo que se piensa inicialmente, o bien su tecnología supera con creces a la humana... - Hablaba con suavidad, de manera general mientras su mirada estaba fija en el panel de información

La posibilidad de una guerra interplanetaria hizo que la cabo suspirase con cierto disgusto, manteniendo Andersen un par de supuestos que provocaron que la mujer girase el rostro hacia él.

- Nadie quiere una guerra interplanetaria. No creo que sea lo que busque el gobierno asteriano. Si no, no actuarían los rebeldes bajo subterfugios. Yo... Imagino... Que si quieren destruir la Tierra y sus colonias, no mandarían pocas naves de ataque. Para hacer daño de verdad hay que hacer ataques coordinados a varios planetas a la vez, así se elimina toda probabilidad de supervivencia de la raza humana. Por eso deduzco que su mando legítimo no apoya a esta facción... - Tenía las mejillas sonrojadas, pero hacía calor en la cabina, debían poner el aire acondicionado para refrescar la estancia - Aunque nunca hay que descartar la contrainteligencia... - Cuando Einar hizo el comentario sobre qué opinaba ella, la mujer simplemente suspiró y dejó los mandos, girando su cuerpo hacia él y mirándole fijamente - ¿Qué quiere que opine, Andersen? Me da la sensación de que quiere decirme algo con mucha más claridad, pero que no se atreve a formular las palabras precisas... ¿No? - Y clavó sus ojos azules en los claros del piloto, manteniéndolos con fijeza hasta que Duncan movió ficha.

McCarthy hacía estado tomando muestras a todos los miembros de la tripulación y, como siempre, su amiga Grey se había evadido de estar presente en el momento en el que pinchase los dedos de los demás. El doctor fue a la cabina a tomar la sangre de los demás pero no le dio tiempo a ello, puesto que escuchó una transmisión en la cabina y se movilizó acorde a lo sucedido, apuntando a Swallow.

- ¿De verdad me consideráis la más peligrosa de la nave?... - La mujer tenía las manos levantadas, no iba a ofrecer resistencia. Ni siquiera tuvo el impulso de hacer peligrar el vuelo del transporte - ¿Por qué yo? ¿En qué os basáis para señalarme? - Su rostro mostraba incredulidad y cuando mencionaron a Malbone, cierto temor.

La cabo Marzzia Swallow fue llevada hasta el pelirrojo y retenida, igual que el resto de los asterianos nombrados. Lo curioso era que Brighter se quedó mirando con intensidad a la cabo Swallow, quizás sorprendida de que Marzzia estuviera allí, justo al lado de quienes sí parecían ser su equipo de trabajo. La cabo ni siquiera la miró, fijándose en Rodrik, estaba claro que con él iba a querer hablar, pero eso sí, en privado.

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14/06/2022, 09:35
Ambientación

SF121 Airways Commander. Cabina

Una vez en la cabina, Duncan expresó sus dudas y malestar. Apresar a Osiris era abandonar a la pequeña Townhall. Y si iban a rescatar a la niña, posiblemente la infiltración siguiera extendiéndose, y quizás en el futuro, ser ellos los ratones que cayesen en la trampa, algo que pudiera costar la vida a todos los presentes o porqué no, al resto de la humanidad. ¿Cómo actuar? La lucha podía ser personal o por el contrario, buscando un bien mucho mayor.

William emitió su opinión. Darles unas coordenadas distintas para tenderles una emboscada les daría la oportunidad de capturar a Osiris, alguien que parecía ser importante entre las tropas asterianas, ya que la rebelión había desembolsado mucho dinero con tal de satisfacerle.

Andersen buscaba un lugar idóneo donde descender sobre la superficie de Natgrew. Un sitio alejado de núcleos urbanizados y donde el enemigo no pudiera encontrar demasiado apoyo, basándose en la premisa de que fuera complicado el descenso. Pronto visualizó una zona adecuada en el mapa aéreo que tenía abierto en la pantalla holográfica, eligiendo el lugar por tupida vegetación. Latitud 34287 y longitud 54356.

La voz del otro lado dio su conformidad.

Recibidas las coordenadas. Estaremos allí a media noche. Osiris dará las explicaciones oportunas y luego nos reorganizaremos. Hemos recibido una señal de emergencia. La prisión ha sido atacada y se han llevado a la niña. El hijo del comandante tampoco está. Trataremos esto en privado.

Y se cortó la comunicación, dejando en un tenso silencio a los de la cabina.

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14/06/2022, 11:57
Capitán Frank Kepborn

En nave asteriana.

Tharok se divertía ante el juego de palabras que Daya comenzó a realizar, asegurando de que ella no hacía trampas, tan sólo dificultaba que el brigada se percatase de que otros lo hacían. Y es que parecía que la innumita comenzaba a desarrollar picardía, dejando atrás a la confiada mujer que era antes de ingresar en la Space Force. Las justificaciones sobre el porqué lo hacía tenía una base moral. No todos los cadetes eran buenos en legislación. De hecho, algunos no sabían siquiera leer o escribir, así que darles una ayuda para que pudieran lucirse en sus campos de conocimiento era algo más que lícito

- Si te sirve de consuelo, yo habría hecho lo mismo - Y así lo aseguró el asteriano, alguien que actuaba conforme sus propias creencias, sin seguir estrictamente las normas establecidas. - Y no, no tenía ni idea. Supongo que me lo habrían comentado si os hubieran descubierto - Y ahí había una realidad. Lee Joe sospechó que algo no iba bien con los reclutas, pero jamás llegó a descubrir de que las notas fuesen cambiadas, aunque también pudiera ser que lo intuyese y no hiciera mención alguna al respecto. Al fin y al cabo, nadie suspendió y eso era algo relativamente raro.

Kepborn parecía realmente preocupado por las hijas de Townhall. La madre de las niñas no había sido localizada. De hecho, se suponía que estaba luchando contra alienígenas en uno de los planetas más extremos de la galaxia. Quizás hubiera recibido la misiva de que su ex marido estaba muerto, o pudiera ser que no, lo que sí estaba seguro para Tharok era que Maia se encontraba en un orfanato militar, y Eris había desaparecido, poco más podía aventurar al respecto.

- No hay más familia para los Townhall y a la par, tienen mucha familia... - Explicó Frank con un suspiro - Los soldados espaciales que viven en los PECs llevan a sus familias allí, y si los padres mueren, a veces los hijos son criados por amigos o compañeros, si juran hacerse cargo. Otras veces van con otros familiares, a cualquier planeta u otro PEC. En otras ocasiones van a internados. Las niñas han ido al orfanato por el comportamiento disruptivo de ellas. Sé que varios amigos de Townhall querrían quedárselas, pero al estar su madre viva hay que mover burocracia... - Miró a Daya y se mordió el labio - Para solicitarlas tendrías que ser soldado espacial, o un civil conviviente en un PEC o acuartelamiento de la Space Force. Si nadie más la reclamara podrían cedértela. Si varios lo hacen, estudian con quién podría estar mejor...

A Tharok le hizo reír el comentario de Daya, aquel que aseguraba de que había que tener muchas agallas para entrarle a Lee Joe, y es que conocía a su amigo, así como lo rudo que podía comportarse en determinados momentos y, tenía claro de que a su pareja le daba mucha aprensión el porte serio y formal que solía mostrar en público.

Muchas conversaciones y pensamientos se sucedieron, pero había una cuestión en concreto que era la más importante de todas. El punto de la relación donde ambos se encontraban. Tharok habría cambiado el presente por haberla conocido antes, intentando expresar que estaba convencido de su relación, y que todo lo no vivido con ella era una verdadera pérdida de tiempo. Daya, sin embargo, discernía en aquel punto, para ella su historia era perfecta tal y como se mostraba, tomando una decisión de vida, pues él así la interpretaba. Banerjee decidió quererle, juntos iban a continuar las líneas de su cuento inacabado. No hacían falta más palabras que el encuentro de los labios, así como la mirada emocionada del asteriano.

Después del beso y del abrazo llegó un nuevo aprendizaje - Il ma cor, Daya - Dijo con un leve acento extranjero, susurradas las palabras con una suavidad y delicadeza que implicaban cariño en cada sílaba - Yo te amo, Daya. Es imposible no amarte... - Y todo quedaba dicho. Ambos lucharían por su unión, por mucho que el universo intentara separarles.

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14/06/2022, 16:21
Ambientación

SF121 Airways Commander. Natgrew

Andersen había citado a la otra nave en una ubicación muy concreta. Latitud 34287 y longitud 54356. Una zona del planeta Natgrew muy rica en vegetación que casi parecía una selva terrestre. En aquel espacio aterrizar una nave era muy complicado, puesto que los árboles y los matorrales impedían que hubiesen muchos claros donde poder posarse el vehículo aéreo y, donde uno se posicionaba, dos no podrían estar por escasez de espacio.

La SF121 Airways Commander había tomado suelo en primer lugar y, en ese contexto, tendrían tiempo para idear un plan de actuación para atrapar a los asterianos que venían a su encuentro. Lo curioso es que no sabían de cuántos se trataban, ni si irían fuertemente armados. Tan solo tuvieron constancia de las palabras que les indicó la portavoz de aquel grupo desconocido de alienígenas.

Posicionándonos a dos kilómetros de la ubicación inicial. En veinte minutos caminaré hasta la nave con tres soldados más, Arinna. Mantened las compuertas abiertas. 

Y si dicha información era cierta, miedo debían tener los soldados de la Space Force, porque sólo irían a visitarles unos pocos soldados de los que hubiera en la otra nave, estacionada no excesivamente lejos. No tenían control sobre el enemigo ni idea de a quiénes se enfrentaban. Pero eso sí, al menos iban confiados hacia la nave Airways Commander.

Cuando transcurriese el tiempo, los soldados de la Space Force verían aparecer a dos mujeres y dos hombres, uno de ellos muy conocido por los del Domo 12. Todos iban armados.

La mujer de pelo oscuro tomaba la iniciativa en la avanzadilla. Y si las compuertas estaban abiertas, entrarían en la nave sin pensar de que los de dentro, no tenían buenas intenciones para con ellos.

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14/06/2022, 16:56
Ambientación

En nave asteriana. Natgrew

Frank había salido tras haberse prometido mutuamente seguir luchando por su relación. La nave en la que viajaban descendía y por la ventanilla se observaba cómo el planeta Natgrew se veía cada vez más cerca. Daya estaba sola y tenía mucho tiempo para pensar, mientras tanto, en su futuro inmediato.

Por fin, el transporte aterrizó y se hizo el silencio. Daya podía observar que alrededor todo era vegetación. Una tan tupida e intensa que sería hasta complicado caminar por aquel sueño tan rico en biodiversidad.

Pasaron quince minutos cuando Tharok entró en el camarote con cierto grado de nerviosismo en la voz - Tienes que irte, esta es la oportunidad que esperaba para ti - Dijo con la voz cargada de emoción - Diana está en uno de los pasillos de mantenimiento con una mochila que contiene agua y frutos secos, lo justo para que podáis llegar a uno de los acuartelamientos terrestres de la Space Force... - Explicó el hombre tendiendo a Daya una tablet encendida y cargada - Con este dispositivo puedes ubicarte en la aplicación de "mapa", te he señalado la ruta que debes seguir para buscar ayuda. Ahí también tienes varias carpetas con datos de información sensible que has de entregar en Comandancia. Debes decir que se lo robaste a una asteriana que responde al nombre de Herlaz... - La miró fijamente a los ojos para ver que había comprendido todo lo que le había dicho - No olvides deshacerte del colgante. Conforme más lejos lo tengas de ti, mejor...

Y dicho esto llevó a Banerjee hasta uno de los pasillos de mantenimiento de la nave, donde Diana le esperaba. Era un momento que se sabía, conllevaba a despedida.

- Te buscaré, Daya. Confía en mí. Tarde o temprano volveremos a estar juntos. Te amo... - Y le dio un beso rápido en los labios antes de instarle a recorrer el pasillo. Había prisa, si pillaban a Tharok ayudándoles a escapar, estaría firmando su sentencia de muerte.

Fue así como ambas féminas recorrieron el espacio que les separaba hasta llegar a una esclusa cerrada que Diana no tuvo ningún problema en abrir, pues Frank se había asegurado de que la piloto tuviera la llave adecuada para eso.

Una vez ambas mujeres salieran de la nave asteriana, escucharían una conversación entre las vegetaciones. Allí estaba Frank, acompañado por dos mujeres y un hombre, caminando en una dirección. Irónicamente, el mapa les señalaba que debían ir en la dirección contraria. Ahora era Daya quien debía tomar la decisión de hacia dónde caminar. Su destino podía depender de eso.

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15/06/2022, 18:52
Einar Andersen

La suerte estaba echada y poco más cabía por hacer que tratar de planificar hasta el último movimiento a realizar y, de ser posible preparar varias contramedidas para cualquier salvedad que se pudiese presentar. Alguno podría decir de Einar que pecaba de paranóico, pero en su corta estancia en el ejército había aprendido cuan comúnmente se van los planes al garete en un abrir y cerrar de ojos, y si dependía de él, iba a poner tantas trabas como le fuese posible a aquel funesto destino.

Para empezar, debían adelantarse al enemigo y reconocer el terreno que les esperaba. Ahí es cuando e lpiloto pudo sacar a relucir su punto fuerte, o uno de los pocos que tenía junto a su capacidad analítica, cuando logró posar semejante pájaro mecánico en un terreno tan complicado sin excesivos problemas y de una forma sorprendentemente suave. No por nada se aseguró más de una vez de comprobar todos los sensores exteriores de terreno para poder planificar y ejecutar un descenso lo más controlado posible.

Una vez en tierra, se sugerió una pequeña reunión entre los que teóricamente sin ningún género de dudas eran humanos. Se debía trazar un plan razonable en base a la información de la que disponían para afrontar la situación con tantas garantías como les fuese posible. No en vano les iba la vida en ello.

-Supuestamente hemos logrado purgar a los asterianos de a bordo en base de nuestras suposiciones y de lo que nos manifestó la niña, pero aún así me parecería demasiado inconsciente el dar por hecho que tenemos ese aspecto cubierto. Un solo infiltrado más puede dar con todo al traste y lo cierto es que no tenemos manera de asegurarnos a ciencia cierta...-Einar se mesó la incipiente barba que empezaba a asomar en su quijada, la cual ya raspaba.

-Se me ha ocurrido una forma de minimizar ese riesgo, pero debería ser con el beneplácito y colaboración de los presentes- Anunció al resto, mirándoles a los ojos.

-El Teniente, aquí presente es quien tiene más información de quienes estamos a bordo. Pese a ser información no concluyente, si nos puede ayudar a realizar cierta criba entre la tripulación. Una vez realizada la clasificiación, a aquellos que aún presenten dudas razonables los asignaría al control de los prisioneros a quién previamente habría incapacitado, ya fuese con anestésico, o algún otro modo factible...-miró en dirección de Duncan, como si le preguntase si aquello era posible de lograr.

-Los prisioneros junto a los carceleros asignados los confinaría en el gimnasio o los camarotes de los pilotos, sellaría la entrada tanto mecánicamente como informáticamente y los mantendría bajo vigilancia por las cámaras. Así minimizamos el riesgo que durante la trampa que estamos planeando se nos produzca una insurrección desde dentro y acabemos entre dos fuerzas enemigas... Es la única forma que se me ocurre para ello...-confesó algo preocupado por lo enrevesado del plan, debido principalmente a la premura imperante.

-Luego se trataría de intentar sorprender al comando asteriano que acuda a nuestra nave, si de verdad se han tragado nuestro anzuelo. Lo más adecuado sería neutralizarlos de forma rápida para evitar que den la señal de alarma, pero recomendaría no abatirlos puesto que eso iría en contra de nuestros intereses... Tessa, recuerdo que en la BICOM comentastes que disponías de algún tipo de capacidad subsónica para neutralizar enemigos, ¿Sería posible utilizarlo en esta situación?-preguntó achinando los ojos, tratando de comprender realmente como funcionaba aquella capacidad de la que únicamente había escuchado una descripción general.

-De ser así creo que seria la mejor forma de emboscarlos. neutralizarlos por sorpresa e inmovilizarlos enseguida. si somos rápidos deberíamos de poder conseguirlo, siempre pensando que realmente contemos con el factor sorpresa-Apretó el puño y golpeó con el sobre la mesa.

El piloto miró al resto buscando reacciones a su propuesta. Tras unos segundos llevó su peso hacia atrás, apoyando la espalda en el respaldo de la silla y cruzando los brazos frente al pecho.

-Aunque considero que deberíamos de tener un plan de contingencia por si nuestras suposiciones son erróneas, o por si los emboscados acabamos siendo nosotros... ¿Alguna idea?

 

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15/06/2022, 23:04
Daya Banerjee

En nave asteriana. Natgrew.

El silencio en aquel dormitorio era tranquilizador y amenazante a partes iguales, pero ayudaba a la innumita a centrarse y pensar en el presente y en el futuro alejando de sus recuerdos el pasado más reciente sobre el que intentaba evitar pensar a toda costa.

Debajo de ella, haciéndose cada vez más grande, el verde Natgrew iba invadiendo el ventanal del dormitorio con lentitud. Desde que había sido visible para ella, estaba allí observándolo, sentada en la cama.

Natgrew.

Allí abajo, en algún lugar, estaba su hermano. El planeta verde. El hogar de René.

¿Desde cuanto tiempo no veía ni hablaba con su hermano?. Conociéndolo como lo conocía, a aquellas alturas estaría preguntándose por qué la había dejado unirse a la Space Force, por qué no le había insistido más en que fuera con él y comenzarán una nueva vida juntos en aquel planeta. Quizás estaría intentando mover a alguien en la Space Force para que le dieran más información sobre su paradero, sin éxito alguno. Tan lejos y tan cerca ahora de él. ¿Dónde estaría?. Desde allí, a aquella distancia, todo el planeta era una enorme bola verde brillante que auguraba vida por doquier.

Daya lo conocía, conocía cómo era aunque nunca hubiera estado. Conocía alguno de los animales que podría ver correr por su superficie si tuviera la oportunidad de caminar con tranquilidad, quedarse quieta un buen rato y dejar que los animales le perdieran el miedo. Aquello no era posible hacerlo en Innum, no había animales tan grandes como le había mostrado la proyección del PEC, así como, desde las alturas, era totalmente diferente a su planeta de origen, azul y verde, quizás más parecido a la Tierra pero a la vez muy diferente a ella. 

Natgrew. René nunca tuvo la oportunidad de volver allí.

Sintió pena al recordar a su compañero y volvió a escuchar el disparo que le sesgó la vida a manos de Lee Joe. Lealtad. Tharok le había dicho que Lee era leal hasta el final pero, ¿era necesario matar a René en aquel momento?. ¿Era él la persona adecuada para impartir esa justicia sin vuelta atrás?. Se dio cuenta de que, desde ese momento, todo se había acelerado a su alrededor, no había tenido oportunidad de preguntarle a Eylo y a Billy, que estaban con él, qué había ocurrido exactamente en las celdas. No había tenido tiempo ni oportunidad, no había sido dueña de su tiempo. Solo ahora, en aquella habitación silenciosa, las preguntas comenzaban a formarse en su cabeza y le hacían ver aquel planeta desde otra perspectiva. Allí abajo, entre vegetación, animales y humanos, había asterianos dispuestos a eliminarlos como se eliminaba a una mala plaga. Y nadie lo sabía salvo ellos, la Space Force.

Pensó en aquello largo rato y sobre el resto de secretos que la Space Force atesoraría para defender a la humanidad porque, ahora lo tenía claro, los asterianos no serían el único secreto que guardaban. Había más, muchos más. 

Levantó la mirada hacia el universo oscuro que envolvía al planeta. Allí, en algún lugar en la distancia, una nueva sociedad se desarrollaba. Los asterianos. ¿Que secretos tendrían?, ¿qué adelantos podrían compartir con la humanidad para mejorar ambas sociedades?. No todos querían matar humanos, era esa facción a la que ambas sociedades tenían que combatir para mejorar en conjunto. Pero el símil que Tharok le había hecho al comparar la Rebelión con los piratas espaciales, había hecho ver a Daya que era una situación demasiado grande y compleja como para poder ser erradicada limpiamente y de cuajo. Pero habría que luchar por ello. Daya estaba convencida de que la paz era posible.

Se tumbó en la cama, cómoda y mullida, y se permitió cerrar los ojos y relajarse como hacia tiempo que no podía. Sabía que allí no vendría nadie a por ella, que la dejarían en paz. Estaba bajo el paraguas de protección de Tharok y nadie osaría intentar hacerle daño allí.

-¿Hay que pertenecer a la Space Force o convivir en el PEC para poder tener opción de pedir a Maia en adopción?-había sonado desilusionada ahora que recordaba aquel trozo de conversación mantenido con Tharok minutos antes, pero era así como se sintió al escuchar aquello-Tiene lógica lo que dices, y me alegra saber que ya hay gente que estaría dispuesta a llevarla a su casa. Yo no cumplo con ninguno de esos dos requisitos así que queda fuera de mi alcance...-no dijo en voz alta que había una alta probabilidad de que no llegará a entrar siquiera en la Space Force. No lo había comentado ni en ese momento, ni en el posterior, cuando Tharok había asegurado que ella estaría a salvo en el ejército en breve, no tenía ganas ni tenían tiempo de hablar de aquel tema, pero Daya tenía muy presente ciertas cosas. Había perdido una valiosísima nave llena de material de valor incalculable para ella, había perdido a todos sus compañeros y temía que una evaluación psicológica la considerase como no apta. Si Tharok conseguía devolverla a la Space Force, cosa que él no dudaba y ella tampoco por extensión, se tendría que enfrentar a esas tres cosas. Cada vez que lo pensaba, simplemente, se desanimaba, porque veía lejos de sus posibilidades el volver a ser recluta, cosa que ya no se consideraba realmente. Parecía que todo aquello había sucedido casi en otra vida. Y aquello le llevaba a otro punto.

Se acomodó en la cama y se puso de lado, abrazada a la almohada.

Il ma cor...

Si aquello sucedía así, Tharok no podría encontrarla en la Space Force. Tenía que darle otra opción, una evidente y sencilla por si sus miedos se hacían realidad y no era admitida para continuar con su formación y la posibilidad de llegar a ser soldado espacial. Su apellido, su planeta. Y así se lo había comentado, como una opción a tener en cuenta por si lo demás fallaba.

-La Space Force y el Universo son muy extensos, no sabemos donde podré estar yo cuando puedas buscarme. Siempre puedes usar un puente para llegar a mi y dejar un mensaje. El negocio de mi familia es sencillo de localizar, mi apellido te llevará hasta ellos y ellos me transmitirán tu mensaje... -le había dicho con una sonrisa dándole la posibilidad de localizarla a través de ellos. Era una opción válida y confiaba en él, sabía que si tenía que usar esa opción iría con cuidado para no poner a ninguno de sus familiares en riesgo.

Il ma cor...

Suspiró. Cada minuto que pasaba desde que había prometido seguir unida a Tharok le iba pesando solo sabiendo que la separación sería en breve y quizás por muchísimo tiempo. No temía a los días, a los meses o a los años. Lo que temía era la incertidumbre. Si a él le pasaba algo, nadie la buscaría para informarla, nunca lo sabría y, simplemente, algún día llegaría a la conclusión de que él no volvería y las dudas la consumirían. ¿Había muerto?. ¿Había decidido continuar en la Rebelión?. ¿Habría conocido a otra persona y habría decidido que ya había pasado mucho tiempo desde que se separaron y que no valía la pena volver a buscarla sino empezar una nueva vida con la persona que ahora tenía a su lado?. Y si volvía, ¿cómo conjugarían Space Force y su vida personal si él no podía estar en un PEC?, ¿y si fueran a Innum no sería peligroso para su familia?, si ella fuera retirada de la Space Force las cosas podrían ser más fáciles, ¿y si?, ¿y si?, ¿y si?.

Se sentó de nuevo en la cama. No quería pensar en las posibles ramas de su futuro pues eran muchas, inciertas e improbables ahora mismo. Solo quería pensar en lo que ahora tenía, en lo que ahora mismo podía acariciar y besar a su antojo. Pensar más allá era, sencillamente, improductivo en todos los sentidos.

Il ma cor, Tharok.

Solo con decir, con pensar esa frase, una sonrisa tonta se formaba en sus labios. Era una sensación que la colmaba como mujer y que la tranquilizaba, apartando a todos sus miedos y centrándola en el presente, lo único que tenía en su poder y, aún así, no era suyo del todo, pues su tiempo y su presencia en aquella nave eran prestados. La visión de Natgrew, cada vez más grande en el ventanal, le informaba que la cuenta atrás estaba en funcionamiento desde hacía ya el tiempo suficiente como para estar llegando a su final. Quedaba poco tiempo para separarse.

El reloj se paró cuando sintió aterrizar a la nave en la superficie del planeta y el ventanal de la habitación quedó cubierto de hojas verdes de diferentes tamaños y tonos brillantes. Allí cerca, en algún lugar, estaba la base asteriana a la que la iban a conducir. Debía ser una construcción subterránea porque, de otra forma, alguien la habría detectado con anterioridad o tenían una coartada perfecta.

Tharok entró entonces en el dormitorio informando que era el momento propicio para huir y Daya sintió como un vacío insondable se formaba en su estómago. No había pensado que fuera justo en aquel momento, sin posibilidad de una despedida tranquila. Escuchó lo que él le decía con voz nerviosa por la premura con la que debían actuar, sujetando la tablet que él le había traído y las carpeta con información comprometida a entregar a la Space Force-Entendido, es simple... Tharok, escucha ahora tú. Es la versión que daré a la Space Force cuando me pregunten. La última vez que te vi fue cuando los piratas espaciales me dejaron en Coltanium y tu partiste en la Nightingale custodiado por ellos-había pensado en ello, había tenido tiempo, porque sabía que tendría que pasar por un interrogatorio al menos al volver a la Space Force-No nombraré para nada que solo era yo la que podía beneficiarse de ese pago ni nada que nos relacione sentimentalmente. Unas naves asterianas atacaron Casiopea, mataron a todos los que pudieron y a Diana y a mi nos retuvieron con alguna finalidad que desconozco para traernos aquí a Natgrew donde pude escuchar que tenían una base. Escuchamos hablar también de que había un puesto de la Space Force cerca y conseguimos huir en un despiste. Cogí esto por si podía ser de ayuda para el ejercito, y solo lo entregaré en Comandancia-señaló las carpetas con información que él le había dado-¿A algún mando en particular?. Si algún asteriano escucha mi relato o lo transmite, pensarán que estoy ocultando ciertas cosas para protegerte y, al fin y al cabo, tengo un hijo al que mantener al margen y puedo temer por él. ¿Quieres que sea así o prefieres que la versión sea otra?, ¿alguna que te proteja más a ojos de la Space Force?. La hablaré con Diana para intentar dar las dos la misma, a ella también la interrogarán aunque sea civil.

Ambos salieron del dormitorio atravesando pasillos desiertos hasta encontrarse con Diana. Un fuerte y rápido abrazó selló el reencuentro entre ambas. Y el tiempo se detuvo y el aire se volvió pesado cuando Daya se volvió hacia Tharok, aceptando su fugaz y apremiado beso de despedida sin tener apenas tiempo de responderle con el suyo-Confío en ti. Cuídate y búscame, te estaré esperando. Vuelve a mi-se inclinó hacia él y le dejó el que sería su último beso, el último roce de labios que ambos se darían en mucho tiempo.

Corrió tras Diana sin mirar atrás hasta que llegaron a una exclusa determinada que su compañera manipuló, abriéndola y dejándoles paso al exterior. Ambas saltaron a la tierra húmeda y mullida de vegetación de Natgrew, abandonando la nave asteriana y cerrando la compuerta tras ellas. Daya miró la pantalla de la tablet, situándose y buscando la dirección que debían tomar-Hacia allí...-indicó, segura de la dirección correcta. Un sonido entre la vegetación alertó a Daya de que alguien andaba cerca-Shhhhhh-le hizo una señal a Diana para que se agachara y no se moviera, se escuchaban voces cerca, entre ellas y reconocible sin duda alguna, la de Tharok. El corazón de Daya se aceleró, aguantando casi la respiración y percibiendo hacia donde se movía las voces y los pasos del grupo ocultos a su visión. Le hizo una indicación a Diana señalando esa dirección y negando lentamente, instando a su compañera para que comprobara la ruta marcada en la tablet, y solo se permitió hablar en voz baja, casi un susurro, cuando las voces asterianas se alejaron y dejaron de escucharse-Los lleva en dirección contraría a donde nos ha dicho que debemos ir, los aleja de nosotras. Creo que ya están lo suficientemente lejos como para que no nos escuchen movernos entre tanta vegetación, ¡vamos!.

La instó a avanzar la primera solo porque no quería que viera como ella se permitía mirar unos segundos en la dirección en la que la voz de su pareja había resonado por última vez, aún habiendo pensado que no la escucharía durante mucho tiempo. Se sintió tentada de darle la tablet y los documentos a Diana y volver ella al interior de la nave, ¿sería posible que llevaran una vida normal en aquella nave o en donde fuera que Tharok fuera a vivir a partir de ahora?. La respuesta acudió rápida a su mente, de hecho siempre la había sabido desde que supo todo sobre él. No. No entre quienes querían matarla. No dejando atrás a Alvin. No abandonando a su familia. No había otra opción que correr hacia adelante y esperar que el destino escribiera la página de su reencuentro más adelante. Ambos tenían que cuidar ahora de sus vidas más que nunca si querían tener una oportunidad juntos en el futuro y eso lo haría Daya por ambos si se ponía a salvo y estaba donde Tharok esperaba que estuviera. Confiaba en él, quizás era la única persona en la que confiaba en aquel momento exceptuando a Diana, Alvin y su familia.

Cuídate. Suerte, Tharok. La vas a necesitar...

Apretó fuertemente la tablet y las carpetas entre sus manos y se lanzó a correr tras Diana como si la persiguieran todos los skulls que estaban en la nave. Pronto comenzaron a sudar gracias a la humedad del planeta, las manos recibieron cortes de las hojas más afiladas y más de una vez tropezaron. Daya no estaba acostumbrada a caminar por un planeta con tanto relieve y obstáculos naturales, ella estaba acostumbrada a vérselas con el agua y los terrenos pantanosos, y eso se notaba. Se había cansado rápido pero la adrenalina la empujaba a seguir. Cada segundo que pasaba se imaginaba escuchando acercarse a un skull tras ellas. ¿Estarían entrenados para seguir rastros de humanos?. ¿Cuanto tiempo tardarían los asterianos en descubrir que Diana no estaba en su dormitorio o Mind en intuir que ella ya no estaba en la nave?. ¿Sería capaz de percibir que ella se estaba alejando de la nave?. Esas eran las variables que iban a definir el tiempo que tenían para poner tierra de por medio.

Después de un buen rato de carrera, Daya se detuvo en seco en un momento dado y Diana casi se dio de bruces con ella. Delante de ambas, un rio de poca profundidad discurría tranquilo y con aguas claras entre la vegetación, apenas sin hacer ruido-Vayamos por el rio un buen rato, no nos desviamos demasiado. Hay skulls en la nave, si los lanzan a por nosotras quizás el agua borre nuestro rastro, ¿te parece?-le propuso después de consultar el mapa y situar su posición y su destino-Ojalá supiera más de esas bestias, pero no descartes que nos sigan. Aunque vamos a intentar que Mind solo pueda seguirnos hasta aquí.

Se quitó entonces el colgante y se agachó. Lo dejó en el suelo y echó tierra y hojas encima, no quería que nadie encontrase ese colgante. Y no pensaba solo en su potencial perseguidora sino en cualquier habitante de Natgrew.

-Listo, sigamos. Nos queda un largo camino...-miró la tablet un instante más para asegurarse de la dirección más correcta a tomar señalándosela a Diana-Por ahí. Sigamos por el rio todo lo que podamos, intenta pisar sobre las piedras, no dejemos huellas en la arena. Qué agua más clara... si fuera turbia nos beneficiaría pero así si dejamos huellas se ven si se presta un poco de atención a lo que se está buscando, el agua discurre lentamente, no las borrará en poco tiempo.

Le había costado separarse de la nave asteriana pero ahora, caminando por la fresca agua del rio, se dio cuenta de que cada paso hacia adelante la liberaba un poco del peso que portaba en su alma que era saber a Tharok lejos de ella. La decisión estaba tomada y consumada, no había vuelta atrás de ninguna de las maneras. Andar por aquella selva le hizo más patente la sensación de que tenían que llegar fuera como fuera a la base de Space Force antes de que los asterianos dieran con ellas. Si eso sucedía, Tharok no podría protegerlas, estaba casi segura de eso.

-¿Cómo estas?-le preguntó a su amiga mientras avanzaban-Lo que tenemos indicado en el mapa es un puesto de la Space Force. Diana, sabes lo que me une a Frank aunque él sea un asteriano, él es diferente, puedo asegurártelo. Cuando lleguemos es muy probable que nos interroguen... 

Daya le comentaría a Diana la versión que Tharok y ella habían consensuado. Le daría total libertad a Diana de seguir esa versión o bien de comentar lo que ella considerase oportuno, no la obligaría en absoluto. Si las versiones no coincidían, Daya tendría que explicar sobre la marcha las incongruencias, intentaría salir como fuera de la situación. Ahora mismo no podía pensar demasiado en los detalles, solo esperaba que la piloto empatizara con ellos dos en aquel aspecto.

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16/06/2022, 10:18
Ambientación

En nave asteriana. Natgrew.

Las cuestiones que Daya había planteado a Tharok tuvieron su respuesta. Maia sólo podría ser adoptada si alguien de la Space Force se hacía cargo, y según sus argumentos, era mucho mejor si en un PEC se decidía que la niña fuera educada por los adultos de algún escuadrón. El caso era que la menor de los Townhall tenía opciones, siempre y cuando alguien se moviera por ella y, hasta la fecha, eso no había sucedido. Aunque claro, en esos últimos meses el problema mayor de las gentes del 12 era sobrevivir y atrapar al enemigo. Comprensible no haber comenzado a mover la documentación de adopción.

Daya en esos instantes no tenía posibilidades de quedarse con Maia, pero Tharok le había hecho un regalo con la tablet que le entregaba, especialmente por el contenido. Si la usaba bien, la mujer podría acabar finalmente con la niña, tan sólo debía darse cuenta de los hilos invisibles que, el inteligente médico, había tejido para favorecerla.

No sabían cuando iban a volver a verse, pero algo estaba claro, a pesar de la amplitud del universo, ambos deseaban amarse y continuar juntos, así que él la localizaría, si no era por medio de la Space force, sería a través del negocio que los Banerjee tenían en Innum. Fuera como fuese, ya había una forma de conectar, pero eso sí, rodeada de incertidumbre. La vida era compleja, pero en aquel instante sólo una expresión servía para calmar. "Il ma cor"

Daya había estado pensando cuál iba a ser la coartada que daría a la Space Force cuando fuera recogida por ellos. Indicaría que Frank fue llevado por los piratas espaciales, al igual que otros muchos de sus compañeros, como Alvin, Brezos y Brinstom, aunque éste último en calidad de traidor. Además de ello, Banerjee indicaría que los asterianos atacaron Casiopea, algo que realmente ocurrió, y posteriormente, conseguiría escapar de ellos tras robarles la información de la tablet. Esa historia podía venderse, omitiendo realidades que podían poner a Tharok en serios aprietos.

La duda de Daya sobre a quién entregarle el material tuvo una rápida respuesta por parte de su pareja. Siempre debía dársela a su mando de mayor rango, en el caso de Banerjee era a Thyndall y si no pudiera dar con ella, a West. Tharok no parecía estar preocupado por el relato que su pareja transmitiría a sus superiores pues, según él, Thyndall y West eran humanos y no todos los asterianos se conocían entre sí, debido a la organización piramidal que habían formado, de manera que era complicado que su presencia fuera asociada a la de la innumita.

La despedida entre Kepborn y ella fue fugaz, así como el abrazo de reencuentro con Diana. Ambas tenían ahora un camino que recorrer juntas y, si no actuaban como binomio, el resultado podía ser catastrófico para las muchachas. Jamás en la vida el tiempo había sido tan apremiante.

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16/06/2022, 12:15
Diana Makri

Natgrew

Diana ofreció una mirada de gratitud a Frank. Su aspecto era saludable y, aunque se le veía seria debido a las circunstancias, no dudaba Daya de que en la nave la habían cuidado y alimentado bien. Tal y como se esperaba de una hembra preñada, pensamiento muy asteriano.

Makri corrió junto con su compañero por el pasillo de mantenimiento, un espacio por donde solían moverse los mecánicos de las naves. Los conocimientos de la piloto de la Rust debían ser amplios porque la joven se movía por allí con soltura. Seguramente en las naves comerciales quienes movían el transporte también sabían de reparaciones.

- Jamás pensé que iba a estar libre - susurró Diana tras haber abierto la esclusa y salido al exterior, donde la fragancia fresca de la naturaleza imperaba.

Apenas tuvo tiempo para disfrutar el ambiente porque Banerjee miró el dispositivo que portaba entre las manos y señaló una dirección. Makri no dudó ni por un instante de ella, la siguió con rapidez y agilidad, salvando algunas de las raíces que salían del suelo y podían hacerles tropezar. Finalmente, una señal le hizo agazaparse tras unos helechos de gran tamaño, ocultándose de las personas que caminaban en una determinada dirección

- La ruta del navegador dice claramente que es hacia allí... - efectivamente la piloto coincidió con Daya, señalando el lado contrario de donde iba Tharok con sus acompañantes - Debemos movernos despacio para que no nos escuchen, al menos en esta región. Luego lo que procede es correr...

Y estaban de acuerdo, al menos de palabra, pues el alma de la innumita estaba dividida. Amaba a Tharok y quizás no fuera mal destino vivir en la nave asteriana a su lado, pero él se había movido para darle la libertad. No quería aquel futuro para ella, y eso sin contar con que la familia de Banerjee, así como sus amigos esclavizados dependían de sus acciones.

Y corrieron. Y se alejaron mientras el sudor les perlaba la piel. Se arañaron con la vegetación y en algún que otro momento cayeron, pero seguían levantándose, luchando, buscando una civilización que se les antojaba lejana. Otro obstáculo más, un río, pero consiguieron hacer del cauce un aliado natural, caminando por él como medio para que se perdiera la pista.

- De acuerdo, es buena idea - Makri no ponía dificultades, a pesar de que se le veía cansada. No estaba acostumbrada a tanto exceso deportivo - ¿Estás segura de que los skulls perderán nuestra pista al pasar por aquí? - Diana parecía dudarlo, tenía una imagen mental atroz sobre esas bestias, casi las consideraba indestructibles, y su compañera tampoco parecía tenerlo claro del todo.

La innumita comenzó a cavar en el suelo un hoyo donde enterrar el colgante y, una vez lo hiciera, continuarían su deambular nocturno por aquella tupida selva que les daba la cobertura perfecta para escapar. Eso sí, cruzando el río de aguas claras y surcadas por piedras de mediano tamaño que les daba más opciones a pasar desapercibidas.

- Estoy reventada - fue la sincera respuesta de Diana ante la pregunta de Daya, parando momentáneamente  sobre una de las piedras, agachándose y enjuagándose la cara para refrescarse - ¿Será potable? - Tenía sed, pero no se atrevía a reponer el agua de su botella de allí, más que nada por prudencia

Banerjee comenzó a tratar con Makri el tema de Frank, y la joven piloto de la Rust lo tenía claro - Cuando Lord nos atrapó y convirtió en sus esclavas, fueron los asterianos quienes me liberaron. Concretamente Frank - Miró a Daya a los ojos con intensidad - Le estoy agradecida y vuestro secreto está a salvo conmigo - y así de leal era ella - tan sólo dime qué tengo que decir y así lo haré. Pero sigamos avanzando. No quiero parar así caiga extenuada. Sólo quiero llegar a un cuartel donde puedan ayudarnos. Quiero regresar a casa - era irónico, su casa era la Rust Walker. Diana Makri en realidad no tenía donde ir.

Y continuaron su camino sin encontrar ningún tipo de enemigo o peligro que pudiera dañarles. La ruta que Tharok había elegido, era la más segura de cuantas pudiera marcar. No cabía la menor duda de que la amaba.

Notas de juego

En el siguiente post hay salto temporal. Recomendable cerrar todas estas conversaciones porque saldrás de la selva sin conflicto alguno. Buena elección no ir en sentido contrario....XD

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16/06/2022, 21:51
Duncan "Duke" McCarthy

 Un pequeño movimiento, una acción malintencionada y la nave se estrellaría. No se podía dudar y andar con remilgos, habían demasiadas vidas en juego. Podían equivocarse, podían ser injustos pero no se arriesgaría, no, ya habían muerto demasiadas personas por su inacción, no lo consentiría. Le apuntó con su arma sin ningún tipo de remordimiento mientras le decía que se retirara de los mandos. La mujer protestó, no ofrecía resistencia pero protestó. Duncan se encogió levemente de hombros antes de decirle

 - Tampoco te consideramos la más inocente de la nave, digamos que es una medida de seguridad - Frunció el ceño - Preguntas demasiado y de manera demasiado casual.... Cuando tengamos las pruebas serás la primera, y si nos hemos equivocado te dejaré que me patees el culo.... En marcha.

Llevó a Swallow ante Malbone mientras Einar peleaba con los mandos. No sabía que buscaba o hacía, pero parecía tener prisa, así que lo dejó tranquilo mientras custodiaba la prisionera e iba en busca de Tessa Bintel, pues su colaboración iba a ser fundamental para poder lidiar con el mensaje de la radio sin que fueran descubiertos. Einar le dio un consejo sobre lo que debía decir y Bintel cumplió con su parte, parecía que se habían tragado el anzuelo, pero que se lo tragaran suponía con total seguridad abandonar a la pequeña Townhall. Aquella era otra de las contradicciones del ejército. Se hartaban de hablar de familia, de grupo, pero cuando llegaba el momento, a la familia que le dieran y se lanzaban sobre el objetivo militar, aunque no podía contradecirles, parecía que era el jackpott. Osiris, osiris y las dos mujeres que eran tan importantes como para sacrificar la financiación de la rebelión asteriana. Sentía cierta curiosidad, pero el sabor amargo del abandono de la pequeña se le clavaba en el almaa. William parecía también decidido en ir tras el premio gordo, también Andersen... Duke siempre iba a la contra. Se quedó en silencio y apretó los dientes mientras se intercambiaban coordenadas en un lugar óptimo para reorganizarse. La comunicación se cortó y reveló lo que ya se temía, sabían que habían huido, así que rescatar a la niña se complicaría, si no era imposible ya. Abandonó la cabina en silencio, arrastrando los pies y apretando los dientes como si los pies le pesaran una tonelada. Se dirigiría a un sitio, tenía que hacer algo y busco a alguien, Astor. El chico había huido estratégicamente e igual todavía estaba tenso, así que se acercó a él, se metió la mano en el bolsillo y sacó el viejo mechero de su padre.

- Las cosas se van a poner feas chaval, así que, si caigo, quiero que tengas esto. Esta bandera - dijo señalando la cruz de San Jorge - representa a Escocia, tal vez sea lo más cerca que te pueda llevar.... Guardámelo, por si acaso, y recuerda, fumar es malo.

Nada le dijo del valor sentimental que tenía para él. No valía la pena, no lo entendería, o lo entendería demasiado bien y lo estropearía todo. Se marchó a la cabina de nuevo para planificar el siguiente movimiento. Se iban a colocar en una zona bastante tupida, y sus enemigos iban a estar a 20 minutos de distancia, suficiente para tener la emboscada. Primero había que hacer su parte. En el botiquín había antestésicos. Cogió una jeringuilla y sin mucho preámbulo comenzó a inyectarlo en los sospechosos de ser asterianos mientras le decía a Malbone

- Hay que atarlos y amordazarlos, pero si además están fuera de combate será mucho mejor. Mejor llevémoslos a alguna sala donde no estén visibles. - Ayudaría a llevarlos y arrastrarlos para volver a la cabina cuando Einar había tomado tierra magistralmente. Suspiró antes de decir

- No podemos saberlo, estamos jugando a un juego muy peligroso a ciegas. - Pero Einar tenía una idea, así que le dijo - Adelante, nunca una idea sería más bienvenida que ahora. - Cuando habló del analgésico sonrió y dijo - Eso ya está hecho, pero solo ha pasado a los sospechosos de ser asterianos. Si hay alguien más se moverán para liberarlos... eso les moverá mucho más que la sangre, creo.

Estaban atados, pero Einar sugería ser más cauto y sellar las puertas.  Se encogió de hombros - No sé si nos dará tiempo de sellar las puertas mecánicamente, pero informáticamente sí, igual quitando parte del mecanismo de la puerta para evitar que se abra si no se vuelve a meter, como si fuera un fusible..... No es mi fuerte, la tecnología no es lo mío, pero es lo que yo haría si supiera.

Einar pidió a Tessa que usara su arma sónica, pero sabía de las reticencias de la mujer de hacer daño. Duke la miró y le dijo

- Sé que no quieres hacer daño Tessa, pero recurrimos a ti porque no tenemos otra forma de neutralizarlos sin dañarlos. Si nos ayudas los podremos capturar y nadie morirá, sino, tal vez se organice un tiroteo y cualquiera puede morir... Es la mejor manera...y no te lo pediría si no fuera importante y sirviera para salvar vidas. Queremos solo que queden incapacitados para disparar, no que sufran un daño permanente....Si nos ayudas necesitaré algodón, gasas, tapones para los oídos y cualquier cosa que mitigue el ataque para no dañarnos. Nyria debe estar lo más lejos posible, los oídos de los niños son más sensibles.... - Y si Bintel se prestaba a ayudar empezaría a improvisar tapones.

La referencia al plan b le hizo pensar

- Creo que la mejor manera de sorprenderlos es a través del sigilo. 2 personas pueden quedarse fuera de la nave, y cuando vayan a entrar atacarles por detrás, si se sienten acorralados lo más probable es que no disparen, siempre que no nos superen en número...Grey y yo podemos esperar fuera, y el resto los emboscáis desde dentro...Otra cosa que podríamos hacer sería encerrarles en la nave, en la sección de carga. Cuando entren se cierran todas las puertas... Acabarían escapando, pero tendríamos cierto tiempo antes de que lo hicieran y podríamos robar su nave.... Yo creo que lo mejor es el plan A, y si no, hacer una maniobra en pinza para rodearlos y no darle otra opción que rendirse. - Sonrió - Si tuviera un laboratorio de química podría hacer algún tipo de gas paralizante, pero no lo tenemos....

Suspiró

- Nyria podría ayudarnos también, por ejemplo haciendo ver que sus armas son serpientes o algo así.... algo que les asuste y les impida atacarnos. Lo importante es conseguir solucionar el problema sin disparar si es posible, parece ser que el tal Osiris es importante.... y sabe donde hay dos humanas.