Partida Rol por web

Krona siente la presencia de Mudir que se acerca desde otro angulo. Eso estaba bien, ya que así era más dificil que descubrieran a los dos. El que hubiera sólo cinco guardias más dentro era una buena señal. Le preocupaba un poco más el tipo sensible a la fuerza, pero de eso ya se ocuparían luego. Ahora le tocaba el turno a los guardias.

Con el vibrocuchillo en la mano, Krona se deslizaba como una sombra pegado a la pared. Cuando escuchó el disparo se quedó quieto en el sitio sin respirar apenas. Por suerte los guardias eran aun más ineptos de lo que pensaba.

Indala será buena piloto, pero nada más. Espero que al menos haya acertado a su blanco.

Concentrado de nuevo en la tarea que tenía por delante, llegó hasta el primero de los guardias y hundió el filo en el cuello para evitar que chillara.

Después de abatir al centinela del tejado de un certero disparo y desde su posición elevada, Indala observa a través de la mirilla de su rifle la situación. De repente Krona Grend, a quien había perdido de vista, se abalanza desde su escondite sobre uno de los desprevenidos guardias... el otro mira a su desafortunado compañero... sin darse cuenta que una sombra se proyecta sobre él, Mudir no se ha quedado atrás y se encuentra situado a su espalda...

Corriendo por encima del tejadillo, Danko salta por una de las ventanas y se cuela en el segundo piso del edificio... mientras Lia se acerca ya visible hasta situarse en la puerta del edificio.

Un cántico suave en un idioma alienígena sale de la puerta.... entonado por varias gargantas en la planta baja.

Krona llega a la vez que Mudir ante los guardias. Al parecer se han sincronizado para atacar. No les habría salido mejor si lo hubieran hecho a proposito. De hehco si lo hubieran intentado hacer no lo habrían conseguido para nada.

Sin decir nada y sonriendo ante la cara de terror del centinela que le puede ver, Krona clava el vibrocuchillo la nuca del otro mientras la hoja sale por la garganta.

Ni un sonido sale de la garganta del centinela que cae muerto de la primera cuchillada... la segunda

Mudir avanza con rapidez, se sitúa detrás del Guardia desprevenido y trata de rajarle el cuello. Sin embargo, debido al filo tan corto comparado con el sable laser, falla por centímetros, asi que se revuelve para efetuar un segundo ataque hundiendo, ésta vez sí, el filo en el cuello del enemigo y haciendo que una herida mane de él.

Lia que esperaba la confirmación de sus sensores, vio como sus compañeros se avalanzaban sobre los vigilantes de la entrada. En un segundo los dos se habían hecho con uno de los guardias, causándoles grandes heridas en ambos casos.

Por si acaso se acercó, vibrofilo en mano, para rematar a cualquiera de los guardias. Confiaba en que sus dos compañeros acabasen con el trabajo de un solo golpe, pero era mejor asegurarse que no que uno pudiera fallar y darle tiempo al guardia a dar la alarma.

Con esto en la cabeza, lia salio de su escondite y tras pasar al lado de Krona y ver el "desaguisado" que había hecho en el cuello de su oponente, pasó y se centró en el de Mudir. Asestó una cuchillada más a las dos que ya hibía dado Mudir.

Luego, sonriente, mira a Mudir y le guiña un ojo.

Tras esto vuelve a mirar su sensores para ver que le dicen.

El guardia al que Mudir acaba de herir en el cuello se tambalea entre espamos hasta que Lia hunde su vibrofilo hasta la empuñadura en el corazón con tanta fuerza que le parte alguna costilla. Tras eso queda inmóvil.

Empezáis a escuchar un canto suave que proviene del interior de edificio.

Sigilosamente os asomáis por la puerta y podéis ver lo que sería un gran hall con un ascensor y escaleras a pisos superiores, en el centro del hall hay cinco alienígenas (dos rodianos, dos Weequays y un zabrak) situados en en corro cantando suavemente absortos alrededor de una macetita que está puesta en el suelo.

Uno de ellos se hace un corte en el dedo y su sangre mana sobre el árbol.

Alrededor de ellos podéis ver que han hecho del Hall su cuartel general, diez catres se encuentran situados contra la pared del fondo, a un lado hay una cocina portátil y un dispositivo de comunicación y sensores.

Tu observas como tus compañeros asesinan a los guardias.

Desde tu punto de observación también puedes cubrirles y descubrir amenazas o enemigos que se aproximen...

Despues de acabar con los dos guardias Krona los examina por si llevaran algún comunicador o algo parecido. Despues se dirige a Mudir y Lia.

Bueno, pues sólo quedan 5 tipos dentro y el que es sensible a la fuerza. Deberíamos ser capaces de eliminar a los soldados sin demasiada dificultad y luego encargarnos de otro tipo.

Cuando se asoma junto a los demás y ve el extraño ritual sonrie.

Vaya, y encima nos los han puesto a todos aquí en fila. Que bien.

Visto como estaba la situación el sigilo ya no era tan importante, con lo que guardó su vibrofilo y cogió el rifle blaster.

Los dos llevan comunicadores en el cinturón. Y rifles bláster y otras armas de cuerpo a cuerpo.

Recojo los comunicadores y escucho por uno de ellos. Por si dicen algo importante.

En cuanto a los rifles quito los cargadores de energia.

Lia asintió sonriente a las sabias palabras de Krona. El trabajo de sigiloso parecía que había finalizado. Erra hora de entrar y machacar peones. Supuestamente ninguno de ellos era al que buscaban.

Como su compañero, Lia enfundó su vibrofio, después de limpiarlo en las ropas de su víctima y cogió su blaster de bolsillo y asintió a Krona y a Mudir para que supieran que ella estaba lista.

Mudir miró a Lia un segundo y apartó rápido la vista para que ella evitara fijarse en su gesto. Después echó un vistazo al interior e inmediatamente se llevó la mano al bolsillo, sacó una foto del interior de su traje y sonrió.

Sin dejarsela ver a sus compañeros, pues no tenía interés ningúno para ellos (era un recuerdo "feliz" del minion), Mudir guardó de nuevo su cuchillo en la bota.

Viendo que sus compañeros estaban preparados, cogió un poco de impulso y saltó a través de la puerta mientras sacaba el sable. Rápido cómo era cuando estaba motivado por la sed de sangre, y con la vista ciega de ira y odio, cargó contra el grupo esgrimiendo su ya conectado sable doble.

Sonrío cuando veo como acaban con los dos guardias y poco después se adentran en el edificio, dejándome la poco agradable tarea de esperar por si deciden acercarse problemas y la terriblemente desesperante labor de cuidar del paquete.

¡Menos mal que se ha callado!

Pensé aliviada para luego decirle lo que debía hacer.

- Muy bien, ahora quedate sentadita mientras aseguran la zona.

Uso el mismo tono que se usaría con un niño pequeño al que no quieres aplastar contra el suelo para que comprenda tus intenciones y aún pierdes el tiempo con palabras bonitas para que entre en razón. Aunque no iba a perder demasiado y pronto cogí los electrobinoculares para asegurarme de que todo iba a estar muy tranquilo.

Mudir Nahya se abalanza encendiendo el sable sobre los cinco reunidos mientras Krona y Lia los acribillan desde la puerta.

Los alienígenas sorprendidos quedan paralizados durante unos segundos al ver tal tormenta de muerte que se abalanza sobre ellos.