Partida Rol por web

-¡Fulminis Finite! -exclamó Kendra, con un ágil y gracil gesto de varita, ante el ataque "sorpresa" de Ithan, demostrando no solo que estaba alerta a cualquier posible gesto sino que, además, podia defenderse sin problemas. Dedicó al chico una mirada complice, acompañada de un gesto divertido ante aquel ataque sin previo aviso.  Y, acto seguido, con la misma naturalidad y comodidad, volvio a atacar al Gryffindor, sin borrar aquella sonrisa de sus labios, uniendose a aquella ultima ronda de ataques sorpresa - ¡Crystallus Fulminis! - exclamó, con un gesto astuto, disfrutando de aquel momento.

Definitivamente no. Ithan no era como los demas. En esto tampoco.

Ithan asintió ante aquella defensa de la chica, ante aquellos reflejos y aquella gracia para resolver su ataque. Ithan hizo una pequeña reverencia con la cabeza, dando su visto bueno a la ejecución. Amplió la sonrisa ante su gesto cómplice, y apenas tuvo tiempo cuando ella le apuntó con la varita, y lanzó aquel rayo de escarcha.

Ithan no ejecutó su defensa clásica, si no que cambió la estrategia, dando un paso hacia atrás, girando sobre si mismo con rapidez y elegancia. Cuando acabó de dar la vuelta, había retrocedido un paso, y trazó un amplio arco con el brazo, mientras hacia el contrahechizo. ¡Fulminis Finite! Alzó la voz, momento en el que el rayo que Kendra había lanzado, simplemente, se desvaneció.

Y tras unos segundos en guardia, relajo su posición, haciendo una reverencia a Kendra. Ha sido un placer. Afirmó, con una sonrisilla, mientras se acercaba a ella.

La sonrisa de Kendra se ensancho, al ver que Ithan tambien habia superado su ultimo ataque, a pesar de todo. Asintió de nuevo, en un claro gesto de aprobación, siguiendo a Ithan con la mirada.

Lo miró con curiosidad mientras caminaba hacia ella, como si fuera a lanzarle un nuevo conjuro en cualquier momento. Sin embargo, cuando acabó por reverenciar ante ella, la expresion de alerta de Kendra dio paso a una de sorpresa.

Mantuvo su mirada clavada en él, y una sonrisa aparecio en sus labios, sincera, satisfecha- El placer ha sido mio. - le respondio, devolviendo la reverencia, acabando por enfundar de nuevo su varita, mientras el Gryffindor se acercaba a ella.

Aquel empate le habia sabido a gloria y le habia mostrado algo más: que, aparte de todo, acababa de encontrar una magnífica pareja para practicar.

Knower se quedó estupefacto tras la resolución de aquella clase. El año pasado hubo un encuentro entre leones y serpientes que acabó mucho peor que aquel. Desde luego, aquellos alumnos de cursos más avanzados tenían mucho que aprender de la deportividad y el trabajo en equipo de esos recién llegados. Pero cuando vio que había tanto buen rollo, Knower se pensó que aquellos alumnos se estaban tomando muchas confianzas y decidió lanzar un par de Crystallus Fulminis muy potentes sobre el techo para llamar la atención.

¡Jovencitos! Me parece estupendo que por primera vez en décadas los leones y las serpientes se lleven estupendamente. Pero he de recordaros de que no estais en el patio, ni que tampoco es la hora del recreo. Aquí se viene a practicar conjuros, a practicar duelo mágico. No se viene a tomar el té, ni a contaros las cosas que habéis hecho el fin de semana. ¿Me habéis entendido?

Entonces se cruzó de brazos y como vio que todos los alumnos lo estaban mirando continuó hablando. Este es el primer aviso que os doy, y aunque mis clases sean más relajadas y más prácticas, no quiere decir que ésta no sea más importante que otras. Es más, esta quizá sea la más importante, y la próxima vez que vea una situación como la de hoy, en lugar de premiaros con puntos os los restaré. Espero que seais suficientemente maduros ya como para comprenderlo.

Tras concluir aquella retaíla de amenazas se acercó a Gabriela, pues fue la única en ser herida y la dijo. No te preocupes, ahora iremos a la enfermería ¿Hay alguien que se ofrezca voluntario para acompañarla?

Cuando alguien se presentó, Knower procedió a repartir los conjuros. El más rápido y el que mejor se ha defendido ha sido el sr. Trace, por lo que le haré entrega de 20 puntos para su casa. A los demás hay que reconocer que habéis hecho un buen trabajo, especialmente Lincon y Kendra, que ambos merecen 35 puntos cada uno. Ludmila y Aiden también han hecho un buen trabajo, por lo que les entregaré 15 puntos a cada uno de ellos, y en cuanto a vosotros dos, dijo mirando a Asterope y a Anthony no habéis logrado ejecutar bien el conjuro, así que el domingo os quiero ver en mi despacho antes del anochecer.

Vosotros dos igual, dijo ahora mirando a Ithan y a Arnold, vuestro conjuro ha salido bien, pero algo en la potencia de éste no ha sido bien hecho, y hacer conjuros de duelo sin que produzcan daño alguno es como no hacerlos. Así que me temo que tendréis que presentármelo en condiciones en la tutoría del domingo. A los demás, dijo cotemplando al resto de leones. ¡10 puntos para cada uno de vosotros!

¡Y ahora vamos, Gabriela, tenemos que ir a la enfermería! Poppy me va a terminar matando...

Mierda... me lo imaginaba... no había hecho bien el gesto con la mano.- Esto se me está haciendo cuesta arriba.- Dije negando con la cabeza colorado de rabia. Miré a Linc y le hice un gesto desde lejos, señal de bien hecho. Acto seguido me dirigí hacia Asterope y le dije.- Hey Aste, ¿practicamos el conjuro para el domingo?.- Lo necesitábamos los dos. Esperé una respuesta y luego me dirigí hacia Lumidla.- Oye... ¿quieres que practiquemos el conjuro? ¿Qué conjuro era... el que teníamos que practicar...?.- No me acordaba de cuál tenía que practicar para el jueves.

Miró hacia el techo cuando el profesor lanzó el conjuro dos veces hacia arriba. Ahora se deshelará y goteará... ¿Esto no estropea la pintura? Se preguntó, cruzandose de brazos, mirando al techo mientras el profesor comenzaba a echarles la brona. Eh, yo no tomo el té, soy Irlandés. Frunció el ceño ¿Lo estaban llamando inglés? Carraspeó, aun con los brazos cruzados, mirando al profesor. Sí, profesor.

La siguiente explicación fue, desde el punto de vista de Ithan, una forma bonita de prohibirles hacerles duelos en clase. Para él, aquella era la clase de duelo, y aquello incluía... pues... incluía retarse y hacer duelos. Pero no dijo nada, se limitó a seguirle con la mirada, hasta que habló con Gabriela. Ithan apartó la mirada, sintiendose culpable, y miró hacia el profesor y hacia la chiquilla. Yo le acompañaré, profesor Knower. Por hablar, los primeros puntos fueron para él. No supo si, con la importancia de aquella clase 20 puntos era mucho o poco. Asintió con la cabeza, a modo de agradecimiento.

Menos que los conjuros más potentes, un poco más que el resto de Slytherin, y el doble que el resto de mis compañeros. Podría haber sido peor. Fue cuando el profesor lo señaló junto a Arnold, y les dijo que su conjuro no había sido lo suficientemente potente, cuando miró a Gabriela. ¿Pero que dices? ¡Pero si la envié a la enfermería! La he dejado medio congelada... ¿Qué esperaba que hiciera? La cara de Ithan era un mapa, con los ojos ligeramente abiertos, sin creerse que dijera que no había sido dañino. No entendía nada. ¿Qué espera de mí? Se preguntó, mientras seguía con la mirada al profesor.

Acabó encogiendose de hombros, sin entenderlo. Pensaría sobre ello de camino a la enfermería. Se acercó a Linc y Kendra, con una amplia sonrisa. Felicidades a los dos por esos puntos. Alzó el pulgar, con una media sonrisa, contento. Si alguien se merecía aquellos puntos, eran ellos. Además, él había sido capaz de parar los mejores hechizos. Aquello le hizo sentir cierta espinita de orgullo.

Cuando Anthony se acercó a Asterope, Ithan aprovechó para saludarlo con su habitual buen humor, y su sempiterna sonrisa amable. Hola, Soy Ithan, encantado tio. ¿Por que esta rojo? Algunas cosas de este colegio escapan a mi comprensión. Le preguntaré a Di, a Ian o a Mathew. Di mejor, que los otros son unos capullos. Y volvió a dirigirse a Kendra. En cuanto salga de la enfermería nos vemos allí ¿Vale? Le susurró con una media sonrisa, caminando de espaldas hacia las mochilas.

Fue entonces cuando recordó que solo podía practicar los conjuros de duelo en aquella clase. Puso la varita en ristre, sin preparación alguna, y apunto a uno de los muros centrales. Sin previo aviso alzó la voz. ¡Crystallus Fulminis! El rayo que salió de su varita golpeó la pared y la recubrió de una gruesa capa de escarcha. Es lo mismo que hice antes... Pensó, sin darle mas importancia.

Albo Simplemente lo llamó. El animal salió de la mochila y no tardó en escalarle hasta el hombro. Ithan tomó su mochila, llevandosela al hombro. Le dio la sensación de que pesaba más que antes, aunque lo atribuyo al cansancio. Nos vemos después. Se despidió de todos, tanto Slytherin como Gryffindor, y se acercó a Gabriela, para acompañarla a la enfermería. ¿Vamos? Lo siento, no quería hacerte daño... Comentó, con un tono más preocupado. Antes de salir, miró a Enya. Esperó a que cruzara la mirada con el, y señalo, con un gesto de la cabeza en dirección a Kendra. Esperaba que entendiera el mensaje relacionado con la conversación que tuvieron durante el desayuno.

Asterope asintió ante las palabras del profesor. Tiene razón, no deberíamos habernos parado a hablar... Al estar todos de pie corriendo por ahí y lanzándose hechizos, era difícil acordarse de que seguían estando en clase. Pues nada, el domingo toca recuperación. Sacó la agenda de su mochila, la abrió y lo escribió en el día correspondiente.

Se alegró mucho al escuchar que Linc y Kendra habían ganado 35 puntos cada uno. Eso compensaba los puntos que ni ella ni Anthony habían podido conseguir. Enhorabuena a los dos. ¡Buen trabajo! Justo entonces, el ruso se le acercó. Claro, Anthony. Bueno, iba a hacerlo con Linc, pero puedes unirte a nosotros, por supuesto. Cuanto más lo practiquemos, mejor. Era importante que ambos lo dominaran correctamente para el domingo.

Vio cómo Ithan se marchaba a acompañar a la enfermería a su compañera. Entonces recordó que a él también le habían mandado recuperarlo. Quizás estaría bien preguntarle a Ithan si quiere practicarlo con nosotros. Aunque... miró a Anthony y pensó en el cabreo que se había pillado cuando Kendra le mencionó al chico... no, me parece que no es buena idea. 

Miré a Ithan.- Encantado, soy Anthony. Por cierto, vamos a practicar el hechizo ¿te apuntas?.- Dije en tono amistoso, sin que se me notara la rabia del momento unida a otras cosas en las cuales no quería pensar ahora... Intentaba comportarme como una serpiente. Las serpientes son listas, no son impulsivas como los leones... ¿Por qué entré en Slytherin? porque tengo sangre de slytherin y lo demostraré. Acto seguido me dirigí hacia Kendra y sin mirarla le dije.- Lo siento por mi comportamiento en la comida. Una mala mañana la tiene cualquiera.- Me giré y volví al lado de Asterope.

Kendra dio un pequeño respingo cuando el profesor lanzó el rayo al techo. Sin embargo, en cuanto vio que la clase habia finalizado, esbozó una media sonrisa, con aire satisfecho. Suponía que, después de todo lo que habian practicado, el profesor estaría de lo más contento.

Fue por ello por lo que le sorprendio que les riñera por duelar. ¿Qué se supone que tenemos que hacer entonces? Miró a Ithan de reojo un instante y se encogio de hombros, sin llegar a entenderlo del todo.

Entonces vino el reparto de puntos y aquella media sonrisa se convirtio en una sonrisa radiante al ver que los primeros puntos era para Ithan y que Linc y ella se habian llevado la puntuacion máxima. Miro a los dos chicos, alzando tambien su pulgar, con aquella sonrisa aun en los labios. Parecia que, efectivamente, todo aquel trabajo habia tenido su recompensa.

Sin embargo, de repente, la sonrisa se quedó congelada, cuando escuchó que Ithan tendria que ir a recuperar el conjuro - ¿Qué? - se le escapó, atónita, negando, sin comprender. No solo habia enviado a Gabriela a la enfermeria sino que, además, habia sido, con diferencia, quien más habia practicado el conjuro de todos. ¿Como era posible que aquello no fuera suficiente para el profesor?

Dejo escapar un pequeño suspiro de resignacion, dedicando a Ithan una mirada de apoyo -Lo has hecho mejor que nadie.. - le susurró, en voz baja, con una diminuta sonrisa.

Sin embargo, el siguiente gesto de Ithan hizo que Kendra llegara a contener la respiracion. Sin previo aviso, se acercó a Anthony, dispuesto a saludarlo. Kendra no sabia si Anthony sabia o no quien era aquel chico, pero la posibilidad de volver a tener un episodio como el del gran comedor hizo que se tensara por completo. Afortunadamente, parecia que Anthony habia recapacitado, lo que hizo que respirando, aliviada, al comprobar que le devolvia el saludo de forma cordial.

Menos mal. Lo ultimo que quiero son malos rollos.

Fue entonces cuando el rubio la avisó de que iria a acompañar a su compañera a la enfermería, gesto que entendió perfectamente -Tranquilo, alli te espero. - le dijo, asintiendo, dedicandole una mirada comprensiva y una media sonrisa, dejandole via libre para que se marchara con su compañera. 

Y casi no le habia dado tiempo a despedirse del Gryffindor cuando Anthony se acercó, sorprendiendola con una disculpa. Clavó su mirada en el, intentando que no se le notara aquella sorpresa en mi gesto. Nego, ladeando sus labios en una media sonrisa - No te preocupes. Tú lo has dicho. Una mala mañana la tiene cualquiera. - le dijo, más cordial que antes, aceptando sus disculpas. - Pero no vuelvas a faltar a clase, ¿si? - le advirtió, alzando un dedo en direccion a él, entornando la mirada ligeramente. Bastante dificiles estaban ya las cosas como para que además el ruso se dedicara a perder clases porque si. Eso solo le supondria tener que recuperar muchas mas asignaturas a final del trimestre.

E iba a decirle algo más cuando, de repente, vio cómo Ithan salia de la clase, con Gabriela, en direccion a la enfermeria. Y todo habria sido normal de no ser porque, de repente, vio que en su mochila no habia un Albo, sino dos.  ¡Socrates se habia metido en su mochila al principio de la clase y no habia salido de ella!

-¡Esp..! - se interrumpio entonces, con un gesto de sorpresa. Sin embargo, ya era demasiado tarde: Socrates se habia marchado, felizmente, en la mochila del rubio, camino a la enfermeria.

Lincoln sonrió con aires de superioridad, sin duda le había alegrado conseguir esos puntos, se giró a su compañera y dijo -Felicidades Kendra "Pero yo debería haber sido el único en conseguirlos", vamos a continuar así- Sonrió a Kendra y se giró a Asterope -Grac...- Decía sonriendo, pero le interrumpió la felicitación de Anthony, estaba enfadado, Linc lo sabía, pero se estaba intentando integrar en el grupo -Merci- Dijo a su compañero de casa -Sí, por mi podemos practicar ahora un rato hasta que os salga el hechizo pero luego me gustaría hablar contigo Anthony y con Aiden, los tres a solas- Se paró un segundo, recordó que Asterope no había pasado una buena tarde y se giró a ella susurrándole -¿Porque no nos reunimos los dos después? ¿Te parece bien las lindes del bosque?- No había disfrutado allí, Linc se encargaría de solucionar eso.

Ludmila se sorprendió al escuchar las palabras del profesor. Era increíble ver la falta de uniformidad de criterio en las distintas clases, pero no había otra alternativa que adaptarse a ello. 

Se acercó al resto de sus compañeros Slytherin. -Bien hecho chicos...dirigiendose en especial a Lincoln y Kendra. Y ustedes...mirando a Asterope y Anthony sacarán el hechizo sin dificultad. No dudaba de ello. Asterope era una niña aplicada y responsable, que gustaba del esfuerzo; y Anthony...bueno, un mal día lo tenía cualquiera, pero sabía que los rusos eran tenaces y cabezas duras. 

Escucho las palabras de Linc hacia Anthony. -Lo siento Lincoln pero tenemos que practicar el Leg Magiem de Adivinación dice haciendo una mueca de desagrado. Mañana tenemos recuperación, en la Biblioteca estaremos más cómodos...dice esperando la respuesta del ruso. 

El profesor estaba un poco enfadado con ellos por hablar demasiado, pero aun así Enya estaba contenta, había aprendido un conjuro nuevo y había sobrevivido a la primera clase de duelo. Ademas Enya podía decir que los Slytherin no eran tan malos como todos los pintaban, al menos esa fue su primera impresión.

Los puntos fueron repartidos justo después. La verdad es que a Enya le daba igual si le daban puntos o no, toda esa competición entre casas le parecía estúpida. Aun así no pudo evitar sorprenderse cuando el profesor dijo que Ithan tenía de recuperar. Siendo como es seguro que se lo toma como un desafío y se lo curra el doble. Enya buscó a Ithan cuando se dio cuenta de que este estaba intentando comunicarse con ella. Que est... , pensó Enya hasta que vio a donde apuntaba, esa debe ser la joven afortunada, pensó mientras se dibujaba una sonrisa en su cara. Es bastante mona.

Enya estuvo a punto de ir a decir algo, pero quizás Ithan se enfadaba con ella y la congelaba como a Gabriela. No me voy a arriesgar. Así que en vez de ir a saludar a los de Slytherin se dirigió junto a sus compañeros de Gryffindor. 

- Hola chicos ¿Que os ha parecido la clase? -

Asentí las palabras de Kendra y las de Linc, me alcé de hombros resguardándome en las palabras de Lumidla.- Vamos pues Lumidla.- Dije dirigiéndome a la biblioteca. Era la única compañera de la casa que había siempre intentado integrarlo. Me sentía agradecido por ello, y por prestarse a practicar el conjuro conmigo.

-Vale- Dijo Lincoln a Ludmilla, pero acto seguido miró a sus dos compañeros de casa, Anthony y Aiden -Pero ésto no ha acabado, tenemos que hablar los tres, sí o sí... no puede ser que siendo de Slytherin seamos...- Se calló un segundo, estaban rodeados de Gryffindor ahora mismo y no quería dejar en ridículo a su casa delante de ellos -Ya seguiremos en otro momento... suerte con los hechizos- 

Pensó durante un momento y levantó la mirada y varita hacia su compañera -¿Lista Aste?- Dio unos pasos para atrás y la miró... -Había pensado en atacar a una caja... ¿Prefieres que te ataque a ti?- Esperó antes de continuar con el duelo, lo que no quería era lastimarla.

Aiden estaba pensando en el conjuro, memorizando el movimiento de varita mentalmente para que no se le olvidara, cuando el Profesor Knower realizó el hechizo contra el techo con una potencia que le dejó boquiabierto Tal y cómo lo realizan los profesores parece que está chupado

Se alegró mucho de que Linc y Kendra consiguieran tantos puntos, y también se alegró de que él mismo consiguiera más que la mayoría de la clase. El punto negativo de la clase fué que ni Anthony ni Asterope consiguieron realizar el conjuro. Estaba recogiendo sus cosas cuando se acercó Linc para decirle que tenían que hablar los tres chicos Slytherin en privado ¿Qué le pasa hoy a todo el mundo que quiere hablar en privado? - Ok Linc,¿Has pensado en una hora concreta o prefieres que hablemos antes de acostarnos en la Sala Común de Slytherin?

Ludmila asintió a las palabras de Anthony -Adios chicos...nos vemos luego. Salió de la estancia con Anthony mientras saludó con un movimiento de cabeza hacia los Gryffindors.

Kendra esbozó una media sonrisa, ante la felicitacion de Lincoln- Lo mismo digo. - dijo, cabeceando lentamente, en un gesto educado.

Y escuchó entonces los planes de todos y cada uno de ellos, mientras acababa por coger sus cosas. Ella, por su parte, se mantuvo en silencio, sumida en sus pensamientos y en las palabras del resto, hasta que Ludmila anunció que se marchaba junto a Anthony- Adios chicos, os veo luego. -dijo, alzando una mano , a modo de depedida.

Ella misma se giró entonces en direccion a Asterope, Lincoln y Aiden, con una media sonrisa en los labios- Yo tambien me voy, chicos. He quedado con Ithan ahora... - les dijo, señalando en direccion a la puerta. - Os veo en la cena.

Caminó entonces en direccion a la salida, con su mochila, pero sin Sócrates. Y, antes de salir, se giró hacia los Gryffindor, alzando una mano, acompañando el gesto de una encantadora sonrisa- Hasta luego chicos. Un placer. - se despidió de ellos tambien, en una muestra de amable educación.

Y, acto seguido, acabó por salir del aula, dirigiéndose hacia el lugar en el que habia acordado encontrarse con el Gryffindor el dia anterior.

Linc nos quería echar la bronca por lo que se le metiera en la cabeza. No sé qué manía tenía con regañar a todo, ni que él fuera el más responsable... seguí a Lumilda y alcé una mano a todos para despedirme, no sin antes fijarme en que Kendra iba a quedar con Ithan... interesante... 

Asterope se ató fuerte los cordones de los zapatos. No quería que sus pies volvieran a ser los causantes de otro hechizo mal realizado. Cuando se levantó, la mitad de los Slytherin ya se habían marchado.

Bueno, pues ya practicaré con Anthony en otro momento, le dijo a Linc cuando vio que el ruso se marchaba con Ludmila a preparar otro hechizo. Por lo que había podido escuchar, los chicos de su clase tenían que hablar en privado. Algo ocultaban, no era normal que hablaran todos juntos. Esperaba que no quisieran liarla.

Se arremangó y agarró bien su varita. ¡Sí, lista!, le dijo a su amigo. Ataca a la caja, si quieres. Así veo mejor tus movimientos de varita y puedo aprender mejor. 

A Kelly le sorprendió un poco que Lincoln le preguntara si estaba bien –Si, estoy bien, andaba un poco preocupada- lamentó entonces no haber estado más habladora en el Lago- Siento si no estuve demasiado sociable –sonrió con algo de pesar- Además soy un poco despistada y me entretuve en nuestra Sala Común. Por cierto -dijo acordándose de la fiesta-, anímate a venir a la fiesta, seguro que lo pasamos muy bien.

Se despedía de Lincoln justo al tiempo que escuchaba un par de sonidos muy fuertes provenientes de la zona en la que estaba situado el profesor, se sintió un poco culpable por el toque de atención pero ella había intentado poner todo el empeño en aprender en aquella clase independientemente de que se hubiese puesto a hablar con una alumno de Slytherin,  y aunque no le gustaba mucho tener que enfrentarse a sus compañeros  había ejecutado bien el hechizo.

No se dio cuenta de que Gaby había resultado herida hasta que lo dijo el profesor, caminó hasta situarse más cerca de Selena –Espero que no sea grave –la dijo preocupada- Podriamos ir a verla a la enfermería después. Por cierto ¡felicidades por el hechizo! –la dijo al tiempo que vio como Enya se acercaba a ellas y las preguntaba.

-Pues nos ha salido muy bien a las dos, ¿y a ti? También bien ¿no?.