Partida Rol por web

Me pongo a dar saltos y voces en la playa (aunque se que es poco probable que me escuchen), echo leña al fuego para tratar de avivar la fogata. Tiro en ella hojas verdes para tratar de espesar el humo. Lo que sea con tal de que me saquen de esta isla.-

- ¡¡¡Eeeeeehhh!!! ¡¡¡Aquiiiiiii!!! ¡Salvad a un pobre marinero que no ha hecho daño a nadie! ¡Por Cristo! ¡¡¡Eeeeehhh!!! -grito al viento.

Vuelve a avivar el fuego, meto más hojas verdes, cojo dos ramas para que mi movimiento de brazos sea visible a más distancia. Lo que sea.... ¡LO QUE SEA!

El barco vira en dirección a tu isla...no sabrías decir si es porque te han visto o porque siempre fue su rumbo...pero tal vez eso no importaba. De una manera o de otra ibas a salir de este paraíso infernal, ya no morirías en esta infecta isla dejada de la mano de Dios...costase lo que costase...tenías que subir a ese barco.

Salto y brinco de la alegría. Al verme liberado de la sensación de que voy a morir en esta puñetera isla casi arranco en llanto, pero consigo controlarme a duras penas. Me paro un momento mirando mi pata de palo y levanto la mirada al cielo.

- Gracias Madre y gracias Dios... os lo compensaré, lo juro. -saco una de las espadas del cinto, beso la base de la hoja y la elevo al cielo- Y si no lo consigo, con esta misma espada me cortaré la otra pierna.

Estabas bastante seguro de que ya estaban en buen camino pero lo que te confirma sus intenciones finalmente es que están plegando poco a poco las velas, a medida que se acercan, la marea está alta, te parece que se aproximan a la playa perdiendo velocidad porque tienen toda la intención de encallar el navío.

¿Encallar? ¿Quién demonios querría hacer algo así? A medida que se aproximan entiendes porqué...ese barco ha perdido el bauprés y la cebadera en el mar, no llegarían a puerto en ese estado y tenía que repararlo. Seguramente el plan sería encallar para hacer las reparaciones desde tierra y esperar a que la marea volviera a subir al día siguiente para zarpar. Así que al menos tenías todo un día para convencerles de que tenían que acogerte. Y si no...bueno aún tenías una bala ¿no?

La suerte me sonríe sin duda alguna. No solo trae un barco a mi isla sino que no tienen más remedio que parar un tiempo en ella. Sino un día entero, al menos tendría unas horas para tratar de convencerles de que me lleven a bordo, si no como tripulante, al menos hasta el puerto más cercano.

"Ahora que lo pienso... ¡tengo suministros que aportar al barco si me aceptan! ¡Esa condenada carne dura y el barril de agua! Será sin duda un buen aliciente para que me lleven con ellos" pienso mientras me voy acercando hasta el punto donde tienen pensado encallar. Si me dejaran incluso podría ayudar algo en las reparaciones, ya lo había hecho anteriormente en el barco de Sir.... -¡Ese maldito inglés sarnoso y embustero! ¡Botarate! ¡Bufón de corte! ¡Comeberzas! ¡Mugroso y piojoso! -levanto el sable al viento y juro en mi idioma materno- ¡Urtzi! ¡Zugaittik erdi ta erdi zartaukoet ingelesa!*