Partida Rol por web

Lllegamos a la piscina y estiré mi toalla en la tumbona, sentándome en ella disfrutando de la comodidad de la tumbona. -Soy administrador de la empresa familiar. Es un trabajo un poco monótono, pero me gusta. -Sonreí. -Eso de trabajar con niños tiene pinta de ser muy divertido. A mi me gustan mucho los niños.

Te encantaría entonces, los niños de la guardería son un encanto y ¿a que se dedica tu empresa familiar?.Me tumbo en la tumbona a tomar el sol.

-Somos propietarios de una empresa de producción y distribución de Te 100% inglés. Entre nuestros clientes se encuentra la casa Real. Dicen que es uno de los mejores Tes del mundo...aunque entre tu y yo... -me acerqué a él con una mirada cómplice. -El té me gusta, pero donde esté una buena taza de café humeante... -me eché a reír tímidamente.

Con ese nivel podrías ser uno de lo ricachones, si estas interesado en Enma.

Llegan a casa, justo al anochecer Emma y Rick. Primero uno y después el otro. Vienen por separado.

Entre charlas, brindis, risas y conversaciones amenas, se pasa la noche y finalmente todos os váis a dormir. Mañana os esperaba un día largo y duro, pero esperabáis que divertido los 4 solos dónde el ricachón os dijese.

Desperté temprano casi por tradición que por otra cosa. Me pegué una buena ducha para acabar de despertar y me vestí con una americana, una camisa blanca y un pantalón negro. 

Bajé a la cocina y preparé el desayuno para todos. Un desayuno fuerte, con tostadas, zumo de naranja, café y bollería; pues el día prometía ser duro.

Bajo tras despertarme y el aseo correspondiente, con mis vaqueros, camiseta negra de manga larga. Cuando llego para desayunar solo esta Theo.

Buenos días Theo, ¿listo para otro día mas?. Me preparo un café doble mientras tanto.

Sonreí a Jordi mientras saboreaba una taza de café. -Buenos días Jordi, ¿qué tal has dormido?. -Apuré mi café y me serví un poco de bollería. -Por supuesto, pero tenemos que reponer fuerzas si queremos estar a tope.

He dormido genial, ¿que crees que nos tocara hoy?, tengo ganas de conocer mejor y en condiciones a Enma, cuando se enteren los enanos de esto bien, me van acosar a preguntas jajaja. Río divertido imaginando a mis alumnos preguntando continuamente.

Una vez que llegamos de nuevo a casa vuelvo a hablar - Contadme algo más sobre vosotros

Yo soy maestro de guardería, soy de Barcelona, tengo 25 años, me gusta hacer deporte y pasar tiempo con mis amigos y familia. Y....no soy persona sin un buen café doble por las mañanas. Sonrío especialmente con mi ultimo comentario ante todo, ¿que haces en tu tiempo libre?, cuando lo tienes claro.

-Yo administro la empresa familiar, una fábrica de producción y exportación de Té. Tengo 26 años y en mi tiempo libre me encanta hacer de todo, desde ir a visitar a mis padres como irme de escapada a conocer lugares. -sonreí terminando mi taza de café y llevándolo al lavavajillas. 

-Me gusta la hípica, la fotografía y sobre todo escuchar música. Escucho todo tipo de música, y me encanta disfrutar de la música en vivo y en directo. -concluí volviéndome a sentar.

Esto... Emma... LEETE las escenas de avisos que son clave para esta partida... porque se supone que tienes que elegir a uno de los tres para tener una cita privada.

Me encanta leer y escuchar música especialmente, aunque un buen paseo nunca viene mal y más si viene acompañado de unas compritas - respondí con una sonrisa - y bueno, como tengo que elegir la siguente cita, creo que será el turno de Jordi.

Sonrío con ilusión al escuchar que me ha elegido, llego hasta la posición de Enma y tras dos besos la miro. Gracias por elegirme, cuando quieras estoy listo. Vuelvo a mirar a los chicos después, nos vemos a ala vuelta y pasarlo bien.

Espero a que Enma añada algo mas o decida salir para la cita.

Emma y Jordi salieron por la puerta.

Los días habían pasado y Emma había tenido la oportunidad de conoceros más o menos a todos. Al menos, había conocido a los que habían tenido el interés y la motivación de conocerla a ella. No había ninguna regla en el programa, que prohibiese robar a la ricachona durante un corto período de tiempo para hacer una cita improvisada y fugaz. Por lo tanto, Emma tenía ya todas las cartas sobre la mesa. Ahora le tocaba tomar una importante decisión: de todos sus pretendientes, debería elegir sólo a uno. O bien, también existía la posibilidad, de no elegir a ninguno y seguir su búsqueda por su cuenta. Eso quedaba a decisión de la ricachona.

El programa había dispuesto un espacio precioso, en el jardín de la casa Botín. Todo el mundo estaba listo: Emma se encontraba en su pequeño altar decorado y los chicos enfrente de éste, esperando con sus mejores galas todos, y todos preparados para escuchar la decisión que ella había tomado.

Llegué nervioso a la cita pues apenas había podido entablar conversación con mi pretendida. Sabía que tenía muy pocas posibilidades de que me eligiera a mi pero rendirme nunca había formado parte de mi personalidad. 

Me había vestido con mi mejor traje tras una refrescante ducha para paliar el calor que invadía la inmensa casa de Emma. Pero pese al calor y a las negras perspectivas de victoria allí estaba, con mi mejor sonrisa.