No quiero que finjas, quiero que seas tu, susurro en su oído mientras con mis manos acaricio, juego con sus pechos por completo, sus pezones. Después separando ligeramente sus piernas las acaricio, beso y mordisqueo con suavidad su muslos por la parte interior y exterior, sus gemelos e incluso su sexo cuando paso por el.
Vicky se muerde el labio y se estremece ante su paso por su cuerpo. Se deja hacer pero llega el momento en el que no puede contenerse y con algo de fuerza pero sin llegar a hacer daño, lo empuja contra una pared, buscando su lengua con ansia, mientras friega su cuerpo contra él.
Sin separarme de ella mi lengua se encuentra con la suya y alterno la posición dejando a Vicky con la espalda contra la pared, con mi mano derecha estimulo su sexo y su clítoris, con la izquierda sus pechos al completo inclusive sus pezones.
Vicky se deja hacer y parece disfrutarlo. ¿Finalmente había perdido y había acabado cediendo? Puede, pero era lo que más deseaba en ese momento. A él.
La gatita parecía ahora indefensa entre sus brazos y bajo sus caricias.
Sujeto de las muñecas a Vicky con mis manos y se las sujeto a la pared en alto, beso con suavidad su cuello llegando a sus labios, una vez en sus labios disfruto de ellos un rato para terminar mirándola a los ojos. Le uno las manos en alto junto a la pared con una mía por sus muñecas mientras la otra va a su sexo donde un dedo poco a poco va penetrándolo y otro dedo juga por er resto de su sexo y su clítoris.
Sentirse así de impotente, sin hacer nada, la excita aún más. Su cuerpo se arquea, ya que es una de las pocas cosas que puede hacer. Sus gemidos aumentan y se muerde el labio de pura excitación. Con las manos intenta hacer fuerza para dejarse ir, aunque Andrei es mucho más fuerte y no es tarea fácil.
Con el dedo que esta penetrando juego y hurgo en la parte interna del pubis tratando de buscar el placer de Vicky. Después la libero un momento para coger una corbata y atar sus manos a la espalda sin llegar hacerla daño pero lo suficiente para que no se libere.
Vicky poco podía hacer.
Vaya... estás lleno de sorpresas... Dijo pícara, murmurando entre gemidos. Tal y como estaba, atada e impotente, no podía hacer nada más que dejarse llevar. Aunque en su cara se podía leer que no le desagradaba.
Con el jacuzzi listo cierro lo dejo listo para ser usado en cualquier momento, después separo sus piernas ligeramente ademas de sus nalgas para con una mano penetrarla con dos dedos sin dejar de jugar con su sexo mientras con la masajeo sus glúteos y un par de palmadas no muy fuertes en ellos. En todo el proceso voy besando su cuello, pechos, labios y mordiendo sus pezones.....
¿Qué vas a hacer? ¿Te quedas con Vicky? ¿Decides que entre alguna pretendienta más?
Me quedo con vicky.