Partida Rol por web

junto con mi colega llevabamos a la doctora, cuando vimos al boxeador abalanzarse contra philip... y un minuto mas tarde el lider de los terroristas caia junto el hombre nervioso en una situacion confusa desde donde nos encontrabamos

pero que fue eso?

Mientras asciende, arriba no escucha ningún grito de júbilo que confirme que hay alguna salida. De ser así, solo habrán ganado tiempo.

Sin embargo, bajo él parece seguirse desatando el infierno. La escalera de metal se desagarra con un desagradable sonido. El sonido que hacen los huesos de los que caen al partirse es aun peor.

la cadena humana...arnés...la pierna... - las frases entrecortadas que apenas alcanza a escuchar le provocan una punzada de culpabilidad.

Apretando los dientes y preguntándose cuanto más aguantarán su peso la escalera o sus fofos brazos, se obliga a mirar hacia abajo.

-¡DA-DADME LA CUERDA DE SABANAS Y LA PASARE HACIA ARRIBA! - grita mientras una de sus sudorosas manos se exiende hacia el acceso al hueco. - ¡Espera un momento! - le ruega después a la mujer que le precede en la escalerilla.

quien tiene la cuerda?

jeje... creo que la terrorista... jejeje despues de que se le desato un nudo y callo... jeje....

el medico hablaba bajo solo para sus colegas

son las 9:06am...

se oye una gran explosion y el barco tiembla....
las pocas luces de emergencia parpadean y amenazan con apagarse...

Vuelvo rapido junto a Gerard y apoyandole contra mi cuerpo...- cariño tenemos que abanzar si queremos que te saquen ya de aquí, mi sujerencia no le a gustado al tal Lazaro y al querer subir el se a caido al fondo, ahora no se que va a pasar, pero te sacaré de aquí con o sin ayuda.
Una terrible esplosion sacude el barco cuando ya casi estamos llegando al hueco del ascensor, doy gracias al cielo por tener que apoyarme en la pared para poder sujetar y hacer abanzar a Gerard, ya que si no tubiese la pared contra mi no abria podido escurrirme por ella para evitar el batacazo y ahora Gerard podria estar mas dolorido.

Una cadena humana... parecía buena idea... Y yo entralazaba los brazos en aquellos hierros mientras el verde de los ojos aún se perdía en las sombras de aquel pozo... en sus formas oscuras y retorcidas, formas que yo sabían que eran cuerpos...

Cerré los ojos... y fue peor... Los gritos y los lamentos aún se hicieron más presentes... Y el grito de un hombre arrastrando a otro me petrifico la sangre... El desgarrado chillido de una niña que se veía arrastrada a la muerte.. el de aquellos otros.. que intentado pisar dónde yo antes había pisado se condenaban ahora a aquel pozo negro..

No saldrían de allí.. no saldrían...

Una nueva convulsión del barco azotó mi cuerpo.. y sentí cada musculo de mi ser tensarse bajo el quejido del Neptuno... Mierda.. mierda!!... Tenía que salir de allí... y tenía que hacerlo ya...

Desoyendo la petición de Trebor, la mujer de ojos verdes sigue su ascenso. Cuando las luces fallan, la oscuridad parece devorarla.

-¡EH! ¡ESPERA...! - la violenta explosión interrumpe sus quejas, sacudiendo la escalerilla como un junco al viento.

Un pie le falla, pero sus gruesos dedos se aferran al metal con una fuerza que solo el miedo puede otorgar. Agotado y desmoralizado, los accesos de actividad frenética que se alternan con los cada vez más frecuentes periodos apáticos, derrotistas y depresivos, se alimentan a base de pura adrenalina. Y quizá también por el miedo a la culpabilidad que sentiría si alguien muriese pudiendo él haber hecho algo por evitarlo.

-¡LAS SABANAS! ¡LAS SABANAS! ¡NO SE CUANTO MAS AGUANTARE!- grita para hacerse oir en medio del estruendo.

esperenme aca.. voy a volver al ducto por la cuerda de sabanas...

el doctor sale corriendo en busca de la sabana

Apoyaba la espalda en la pared... con la respiración exhausta por un dolor que no pronunciaría... con los ojos negros perdidos en un brazo que temía ya no recuperaria... Y sentía la voz de Lázaro organizando... la voz de mi amor tomando el mando...

El grito salvaje de aquel extrañó me aterró el gesto.. la mirada... que también se convulsionó bajo el relámpago del dolor cuando en el gesto instintivo el bazo derecho quiso buscar la pistola para protegerle... sólo el dolor terrible... la sensación de desamparo... pero ni un milimetro de movimiento...

La mirada agitada buscó la suya... y el castaño de Lázaro fue caricia sobre mí... y su sonrisa dibujo otra en mis labios... demasiado tímida... cansada... mientras volvía a apoyarme en la pared observando en silencio a todos los que allí se congregaban... pensando que tenía frío... que necesitaba su piel de nuevo... su aliento... pensando que no debimos bajar... Echandole de menos... incluso estando con él...

Me apoyaba en la pared...sujetando un brazo muerto con otro que sentía demasiado torpe... y los dientes me sujetaban el labio mientras el corazón se me aceleraba... mientras la mirada se me preocupaba al verles desaparecer en aquella escalera que había de darnos otra oportunidad... y que yo no sabía aún... que había de negarnosla..

Les vi caer... y las pupilas se me dilataron un segundo eterno... y falto el aire... el latido... la esperanza... Sólo rabia... solo dolor... solo el miedo atroz y profundo... visceral... terror autentico que te paraliza un segundo... que te arrecia un segundo después...

NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!.... No sabía como había llegado allí... y que mierda me importaba?....ya no sentia dolor, ni las voces a mi alrededor... ni el frío... Solo la náusea en el estómago que no me permitia pensar... solo el pánico que me bloqueaba.... LAZARO!! LAZARO!!!!!! MI VIDA CONTESTAME!!!! LAZARO!!!

Los ojos se me anegaban de lágrimas... y el negro se hundía en aquel otro negro buscándole, buscando la forma de ayudarle... Sólo él me importaba... sólo él...

Nada ni nadie... nada ni nadie...

Lázaro............... mi amor...

el doctor volvia corriendo y jadeando hasta el ascensor, trayendo con sigo una larga cuerda de sabanas

le paso la cuerda trebor?

Con mucho cuidado me acerco a Cy y acercandola suabemente a mis brazos...- ya pequeña...- y la acerco a mi pecho intentando calmarla- ahora, la histeria no te ayudará, llora si eso te hace sentir mejor pero eso no ayudará al chico, respira hondo y piensa ...luego ya tendras tiempo de llorar si no lo consigue, pero por ahora no debes perder la esperanza

el doctor hace varios nudos en la punta de la cuerda y le lanza la punta a trebor
la cuerda mide al menos unos 6 a 8 metros

toma esto!!!!

Estaba decidido y tenía las herramientas precisas... aquello supondría una maniobra muy arriesgada pero de nada servía mi vida en dónde me hallaba.

El sonoro chasquido seguido de la tenue oscuridad de nuevo, fueron heraldos de que el viejo zippo había retornado a su nido... para ser sustituido por el arma de fuego... arma de fuego que había tenido la osadía de acariciar su piel y aun conservaba su intensa esencia... esencia con la que me deleité con los ojos cerrados en una muda letanía que me sosegaba ante la posible muerte.

En cuanto abrí los ojos nuevamente, ya estaba preparado... siempre lo había estado.

Afiancé el brazo sano en uno de los cables, asegurando las piernas, en fornida presa, en el extremo inferior del mismo. El brazo herido actuaría de guía y ejecutor de mi inminente destino y del primero de los cables que cedió ante el atronador estallido... señal inequívoca allá arriba de mi supervivencia...

La estructura bajo mis pies tembló y los acrecentados lamentos desconcertados de los allí presentes no supieron a qué atenerse hasta que el segundo atronador estallido les condenó a la certeza.

Repentinamente, mi liviano cuerpo se vio alzado... catapultado por aquello a lo que se había aferrado con fuerza... ascendiendo a gran velocidad por aquella angosta e incierta oquedad... conduciéndome como un mortal proyectil a través del cañón de un arma... mortal para aquellos, allí abajo, que se vieron aplastados por el contrapeso liberado del ascensor...

Las plantas se sucedieron una tras otras a velocidad menguante hasta atravesar, durante décimas de segundo aquella de la que me había defenestrado... para poder cruzar, durante ese escaso tiempo, mi profundo castaño con el de mi amada... mi princesa... mi reina que, con pavor aun en sus preciosos ojos y con la otra mujer abrazándola, se asomaba al abismo que me había tragado y ahora yo había obligado a escupirme.

Nada ni nadie amor mío... nada ni nadie...

Y seguía ascendiendo con menor velocidad pues el contrapeso debía estar sumergiéndose en el gélido océano... sobrepasando al muchacho de camiseta verde que me miró perplejo como si hubiese visto un fantasma, y quizás si lo fuera... hasta detenerse en el último tramo a la altura de la contrapuerta abierta por el muchacho al que había creído como una inútil molestia, el plomizo lastre había llegado a su destino... y yo al mío. Mi empapado cuerpo chorreaba el mar que me había abrazado recientemente... ciñendo las ropas a la piel...

Algo parecían estar planeando el muchacho de la camiseta verde y el Dr. Crown que ahora mismo estaba pasándole la improvisada cuerda hilvanada con unas cuantas sábanas... al instante me percaté con satisfacción de lo que pretendían. -. Buena idea... muy buena idea.- Les dije colgando del cable, retornando mi arma a su sitio... y eso mismo era lo que yo preciso, en estos instantes, para alcanzar la contrapuerta desde mi comprometida posición. -. Princesa, estoy bien... estaré mejor en cuanto pueda besarte.- Pero no lo estaba, las costillas rotas se empeñan en recordarmelo y lo más que seguro dañados pulmones cada vez son más reticentes en aceptar aire.

son las 9:07am...

el lider de los terroristas habia cortado los grusos cables de acero que sostenian el contrapeso del ascensor, a 5 pisos de altura sobre ustedes....

el cual se desplomo velozmente, alzando a lazaro como si fuera un pirata que acaba de cortar las cuerdas de amarre de una vela, elevandolo hasta la planta G