Partida Rol por web

Sí, supongo que estaréis cansadas de tantas emociones.- me tumbé en mi cama y dí varias vueltas en la cama hasta que pude dormirme.

Amanecer del Día 9

Martes

Primera Semana de Noviembre

Daphne se levantó y le dolía todo el cuerpo como si le hubieran aplastado mientras dormía.

-Uaahhhhhh-bostezó sonoramente desperezándose- arriba-le dijo a las chicas mientras se levantaba y, arrastrando los pies se metía en el cuarto de baño, lavándose y arreglándose para ir a clase. Al salir estaba apretándose el nudo de la corbata con los colores de Hufflepuff- que sueñazo....-gruñó por lo bajo tirando de las mantas de sus amigas para marchar al comedor con ellas.

Abrí los ojos y grité

¡Aaaaah, Oliver, déjame en paz, no me pegues, aaaaah!

Al ver que el chico no estaba allí, empecé a respirar con mas tranquilidad, pero todavía asustada. Las sábanas se habían liado entre mis piernas y tenía los brazos con arañazos. Y seguramente la cara, porque me escocía.

Me incorporé nerviosa, mirando a mi alrededor. Efectivamente, Oliver no estaba allí. ¿Había sido una pesadilla? Pero había sido tan real...

Daphne se apresuró a acercarse a Sara,calmándola después de ese susto.
-Tranquila...shhhh-le apartó el cabello rubio del rostro qu[B[/B]e estaba lleno de arañazos.-¡Cielos Sara!Hay que limpiarte esas heridas

Daphne corrió al baño para regresar con una toalla húmeda, con la que atendió las marcas de Sara que surcaban su cara a la espera de que su amiga dijera que le había pasado.

¡Daphne! dije mientras me lanzaba a sus brazos cuando volvió del baño con una toalla húmeda y empezaba a llorar. ¡Qué mal lo he pasado! ¡Ha sido Oliver! Me ha pegado. Quería que le diera un beso como hice con Cassius en el baile, pero como yo no quise, me pego. ¡Daphne, me ha pegado! ¡Aaaaah!

-¿Oliver ha estado aqui?-preguntó algo atolondrada mientras estrechaba a Sara contra ella.

Daphne siempre había creído que eso no era posible. Los chicos no podían... ¿o si? Consternada consoló a su amiga. Las señales de la agresión eran e identes y con lo maja que era Sara no le extrañaba que dos chicos estuvieran peleados por ella.

No lo se, ¡no lo se! dije mientras las lágrimas empapaban a Daphne. Todo ha sido muy raro, pero cuando he abierto los ojos ya no estaba aquí. ¡Las monjas dijeron que si un niño te daba un beso sin que tu no quisieras te estaban violado! ¡Oooh, casi me violan! Buaaaaaaah

Me desperté con los gritos de Sara y en cuanto me espabilé corrí a su cama. Allí estaban Sara y Daphne abrazadas. Me acerqué a ellas y acaracié la cabeza de Sara con dulzura.- Tranquila, no dejaremos que se te vuelva a acercar.

Daphne asintió a las palabras de Ardeen y se separó un poquito de Sara dejando las manos en sus hombros.
-No te preocupes, todo va a ir bien-intercambió con Ardeen una mirada de sombría preocupación.
-Vamos a desayunar y no nos acercaremos a Oliver para que no ocurra nada.

S-sí dije secándome las lágrimas con el dorso de la mano. Se sentó en la cama tanteando con los pies sus zapatillas y se levantó.

Rezaré a la Virgen María para que me proteja y después me daré una ducha para limpiarme todas las heridas musité mientras me arrodillaba a los pies de mi cama y lanzaba una plegaria.

Tras unos minutos, me levanté y me fui al baño. Volví más relajada, pero aún temerosa de encontrarme a Oliver en cualquier sitio. Me vestí y me colgué la mochila.

Gracias chicas dije con una pequeña sonrisa. ¿Vamos al Gran Comedor?

Asentí con timidez a lo que dijeron y aproveché para arreglarme cuando Ardeen se fue al baño.

Cuando salió yo ya estaba lista.

- Sí, me muero de hambre- dije tocándome el estómago. No había comido en mucho tiempo a pesar de que hubiera sido por el hechizo de sueño

Daphne asintió a sus amigas y, cuando éstas estuvieron listas entrelazó los brazos con ellas y marcharon en amor y compañía al Gran Comedor.

Ardeen fue directa al baño según llegó, se lavó los dientes y se preparó para irse a la cama. Ya con el pijama puesto se metió en la cama y les deseó las buenas noches con una sonrisa.

Mañana volverá a ser un día muy largo si deseo ponerme al día con las asignaturas, voy a necesitar toda la ayuda que me sea posible.

Llegué destrozada a la habitación. Había perdido la noción del tiempo y,cuando me quise dar cuenta, estaba tirada en la cama. Me puse de rodillas a los pies para rezar, pero la cabeza se me caía del cansancio. Sin cambiarme, me metí en la cama, quedándome dormida al instante.

Amanecer del Día 10

Miércoles

Segunda Semana de Noviembre

Daphne abrió los ojos alarmada, el cansancio casi había conseguido derrotarla pero no, en algún momento su instinto había hecho su aparición y, como un resorte, Se levantó a toda prisa, haciendo bastante ruido para despertar a sus compañeras.

-¡¡ARRIIIIBAA!!-canturreó dando palmas- no podemos quedarnos dormidas, ¡chicas!

Abrí los ojos cuando Daphne gritó y me llevé un susto.

¿Está Oliver? pregunté asustada mirando a todos sitios mientras me cubría con la sábana. Pero descubrí que allí no había nadie, sólo mis amigas. Miré mis brazos arañados por el niño, pero estaban mejorando. Claramente, gracias al Señor Dios.

Con un suspiro, dejé que la sábana se deslizara hacia un lado de la cama. Me bajé y me puse de rodillas.

Gracias Dios mío por ofrecernos una mañana más, por ofrecernos aprender estos conocimientos tan maravillosos. Amén

Dicho esto, me puse en pie, me metí en el baño y me vestí. Después, salí del cuarto hacia el Gran Comedor.

Buenos días- dije con una amplia sonrisa. Me levanté llena de energía, me vestí y me preparé lo más rápido que pude y salí con mis compañeras al gran comedor

La apetecía quedarse en la sala común pero estaba realmente agotada, había hecho trabajos y había repasado mucho y ahora debía descansar, su cuerpo se lo pedía a gritos. Llegó arrastrando los zapatos al dormitorio, fue al baño, se puso el pijama con parsimonia y se puso a ojear un periódico de ayer que le habían mandado sus padres. Aunque alguna noticia la inquietó no tardó mucho en ceder al sueño y quedarse dormida.  Mañana volvería a ser un día duro y necesitaba estar descansada.