Partida Rol por web

Yo también empiezo a tener hambrecilla... - dije siguiendo a Amon.

Yo también voy a comer, que luego se nos hace tarde.

Mientras mi mente vagaba por los recuerdos de la noche de Halloween, me dirigí hacia el linde del Bosque prohibido, pues tenía que empezar a hacer frente al terror a esas criaturas.

tras pasear un rato y viendo que se me iba a hacer tarde, opté por volver al comedor, que ya era hora de comer.

Lincoln llegó a los jardines, no se había perdido esta vez y al ver el amplio campo que se abría ante él casi llora recordándo su jardín, caminó hasta alejarse lo suficiente y ponerse bajo un árbol mientras pensaba "Por fin... hierba, un arbol, sombra y la brisa... bufff esto me recuerda a mis días en casa, tengo un sueño... tengo tiempo para echarme una siesta antes de la hora de comer" se estiró bajo la sombra de dicho árbol y se colocó boca arriba, poniendose los brazos bajo su cabeza y con una sonrisa de oreja a oreja "Dios... solo... un... sueñecito..."

Mientras se adormecía estuvo pensando en su padre, si disfrutó de ese cesped antes que él, si estaría orgulloso de que hubiera entrado en Slytherin, si algún día podría ser tan poderoso como él... o como su abuelo... "¿Cómo debía haber sido estar junto a Voldemort? Habría sido increible poder ver aquella varita de Sauco" Sacó su varita de su túnica y la miró con una sonrisa... "Estremádamente flexible... ¿Que habrá querido decir con eso? Puede que le pregunte a Cassius luego..." la volvió a guardar y finalmente en cuestión de segundos Lincoln se quedó dormido con una cara de niño bueno que no había mostrado en ningún momento, se sentía en paz... en calma.

Asterope fue hasta los jardines, siguiendo a Linc desde la distancia. No quería que pensara que estaba acosándolo. Aunque, antes de buscar a su compañero, se quedó mirando maravillada el paisaje que tenía delante. Cuando llegó el día anterior a Hogwarts no puedo ver nada, entre que era de noche y los nervios que tenía. Miró en todas direcciones, no quería que se le escapara ni un solo detalle. ¿El bosque prohibido estará por aquí cerca? Dicen que hay criaturas y animales fascinantes...

Cuando hubo disfrutado del paisaje un rato, buscó a Linc. En cuanto lo divisó, se acercó a él. El chico se había alejado bastante del castillo, como si quisiera estar solo. Quizás le molesto. Nadie como yo entiende la necesidad de estar a solas. Aun así, decidió seguir adelante.

Asterope se acercó a Linc y vio... que estaba dormido. ¿Otra vez? ¿Pero este chico solo sabe dormir o qué? Fíjate, si hasta tiene cara de bueno y todo. Pues no sé si despertarle, a ver si se va a enfadar conmigo.

Se sentó apoyada en un árbol a poca distancia de él y sacó el libro de clase de Adivinación. Luego pensó que si se quedaba ahí sin decir nada, cuando se despertara Linc iba a ser mucho más rara la situación. Así que se aclaró la garganta y le habló, esperando que no estuviera en un sueño muy profundo y esperando no despertar también a la bestia que llevaba dentro.

¡Hola! ¿Estás dormido? Perdón si te despierto. Es que... A ver qué me invento yo ahora. Quería sentarme aquí, es una buena zona para leer. En realidad, todo el jardín era perfecto para leer, pero no quería decirle que le había seguido a propósito. Esperaba que Linc no prestara mucha atención a ese detalle.

Linc se asustó al escuchar el saludo de alguien -¡¿Pero que?!- Pegó un bote, no se esperaba que nadie se alejara tanto de la entrada como para encontrarle, se giró para gritarle y decirle de todo pero vio que era Asterope, sin duda la única persona a la que no le iba a chillar por despertarle, pero tampoco le había sentado bien "Joder ¿No hay jardín de sobras para leer?" -Tranquila- Mientras decía esas palabras se estiró y la miró, la chica estaba atenta a ese libro, era aplicada, de eso no había duda alguna y atenta, pues siempre estaba preocupada por él... sonrió y decidió gastar su tiempo con Asterope en vez de solo y dormido -Dime, ¿Te gusta el colegio?¿Y la casa que te ha tocado?- "Vaya pregunta mas estúpida... ¿A quien no le gustaría Slytherin, es la mejor casa de todas..."

Linc la miró con una mezcla de susto y enfado. Pero en seguida cambió su mirada a otra más amable y empezó a conversar con ella.

Claro que me gusta el colegio. Tenía muchísimas ganas de venir y aprender cosas. Bueno, solo llevamos un día aquí, pero sé que los años que vivamos en Hogwarts serán provechosos y me ayudarán a labrarme un buen futuro. Y claro que me gusta Slytherin. Es la casa de casi toda mi familia. Menos de mi madre, que era Hufflepuff. Y un tío segundo fue a Ravenclaw. Pero mi padre y todos mis abuelos fueron a Slytherin. Aunque temía que no fuera a entrar en ella. Soy... bueno, distinta a mi familia. Así que pensé que podía acabar en Ravenclaw. No me hubiera importado, pero aquí estoy muy bien.

Le soltó casi el mismo sermón que les soltó a sus compañeros de vagón. La única diferencia es que, en esta ocasión, no estaba tan incómoda ni tan nerviosa como entonces. Miró a Linc y, con una sonrisa, le preguntó también.

¿Tú qué tal aquí?

Linc sonreía mientras la escuchaba hablar de su familia y con todo lo que le había dicho "jaja, está nerviosa, se le nota, ha hablado por los codos" -Tranquilizate, no te voy a hacer nada jajaja- No pudo evitar decirlo para que se riera un poco y así se calmara -Yo... bueno, mi padre y mi madre siempre estuvieron en Slytherin pero... de maneras distintas, ¿Cómo te lo diría? Él fue como yo y mi madre era como tu, intentando ser amiga de todos y de apoyarse en los compañeros...- "No es mi estilo, sin duda" pero a pesar de no gustarle esa forma de ser Linc veía en Asterope algo que le impedía echarla de su lado o de volver a cerrar los ojos y dormirse -Pero eso, a lo demás... Slytherin es la mejor de las casas y a pesar de que no las tengo todas con mis compañeros, se que ganaremos la copa, sin duda, pronto seré el mago mas poderoso de todos... -Ésta última frase la dijo con una sonrisa en la cara que aún no había mostrado, susurrándola, como si en ese momento estuviera solo, él soñaba con ese día mas que con ningún otro, pero se dió cuenta de que no lo estaba, que Asterope seguía a su lado, la miró y volvió a sonreir "Es sangre pura, como me imaginaba y muy aplicada... me recuerda a mi madre jaja" volvió a dirigir su mirada al cielo -Cómo decía, ejem, el colegio me gusta, pero ya veo que algunos profesores tienen preferéncias por ciertas casas... ¡BAH! Olvidemos eso, "pronto lamentará habernos hecho ese desprecio la maldita cuatro ojos..." Una pregunta ¿Cuál es tu punto fuerte en la mágia?- Quería saber si Quidditch o la mágia de ataque o defensa... algo que le pudiera ser útil en un combate o... en caso de no lo fuera... saberlo

Sonrió cuando Linc le dijo que no iba a hacerle nada. Como para fiarse de él, pensó divertida. Aunque ahora parecía más dócil que otras veces. Estoy tranquila... ¡De verdad! Jo, yo creía que estaba controlando bien mis nervios. Aun así, se sentía cómoda. No parecía tan difícil hablar con él.

Pronto seré el mago más poderoso de todos.

Eso le sonaba. Y la sonrisa que mostró cuando lo dijo le asustaba un poco. Su abuelo siempre hablaba de Voldemort como "el mago más poderoso de todos". Solo los magos más tenebrosos se definían a sí mismo de esa forma. A Asterope no le hacía gracia que un compañero suyo tuviera esas aspiraciones. Pensó entonces en el acuerdo que tenía con Kendra y Ludmila. Esperaba poder calmar a ese chico de alguna forma. Bueno, solo tiene 11 años. Quizá sea una tontería pasajera.

¿Mi punto fuerte? Pues... no lo sé, la verdad. No había hecho magia hasta venir aquí. Estoy interesada sobre todo en la magia curativa. Por supuesto, quiero aprender todo tipo de hechizos, pero esa rama siempre me ha atraído. Espero que se me dé bien. Lo miró. Estaba claro qué quería aprender él. A ti supongo que te interesarán más los hechizos para atacar a los demás, ¿no? Y añadió con una sonrisa. Mira, tenemos algo en común: tú mandarás a la gente a la enfermería y yo los sacaré de ahí.

-Jajaja, la primera broma desde que estamos aquí Asterope- Lincoln se incorpora y le sonríe mientras se sienta apoyado en el árbol justo a su lado -Parece que te vas soltando, me alegro- "¿Así que curativas eh?... También podría contar con ella para mágia defensiva..." -Sí, quiero aprender hechizos de ataque... sobretodo hechizos poderosos, pero toda persona que ataque necesita a alguien al lado que le defienda ¿No? me gustaría que... a ver, ¿Cómo te lo digo?... osea... quiero decir que, joder...- Se empieza a rascar al cabeza poniéndose nervioso -Que bueno, que estaría bien que fueras tu la que me defendiera con esos hechizos- Asterope le caía bien, podría haber una buena amistad ahí, pero como no, a Linc nunca se le dió especialmente bien pedir nada a nadie así que tuvo que soltar una última cosa -Serías útil, sí- "El resto de compañeros parecen idiotas y de las chicas la que mejor le cae es ella... creo que es lo mas inteligente..." Se volvió a girar para sentarse mirándo hacia el bosque -Bueno, eso...- Se calmó un poco y continuó hablando -también me gusta mucho el Quidditch y quiero ver si puedo o no entrar en el equipo, como guardián, jeje, en los duelos iré al ataque sin dudarlo, pero en el Quidditch defenderé al equipo jajaja-

¿Útil? No sé si tomarme eso como un cumplido o no. Y quiere que lo defienda en las peleas... Pobre, no sabe que habla con una persona pacífica. Aún así, asintió a sus palabras. Bueno, yo intentaré ayudarte en lo que sea. Para eso somos compañeros. Sí, sobre todo intentaré ayudarte a controlar esos arrebatos de violencia que tienes.

Creo que ya te lo dije. Mi abuelo fue guardián de Slytherin en su época. Cuando era pequeña, me compró un bate y una bludger y jugábamos juntos. Se pasó un montón de tiempo entrenándome. Pero hace casi dos años, me di cuenta de que no era lo que yo quería y desde entonces he usado la escoba un par de veces. Miró al infinito y pensó en su abuelo. ¿Estaría decepcionado con ella? Aunque sabía poco de Linc, estaba segura de que su familia hubiera preferido que ella fuera como él.

Lincoln se sorprendió al escucharle hablar de su abuelo -¡¿Guardián de Slytherin?!¿Enserio?... guau, tu abuelo debió ser increíble... debe, debe ser increíble jeje...- No quiso dar por sentado que estaba muerto, pero podía aprender mucho de él -Un día me gustaría conocerle, si no tienes ningún inconveniente- Dice sonriendo -Puede enseñarme muchas cosas...- La mira atentamente -Bueno, en clase de vuelo mantente cerca mío ¿Vale? Entre tu y yo demostraremos a la casa contraria como se las gasta un Slytherin - "Cuándo no miren me encargaré de que alguno no vuele bien" seguía sonriendo y acto seguido volvió a mirar a la nada, como perdiéndose  en el horizonte -Me encanta estar aquí... no se como explicarlo, me siento bien... mi madre siempre me decía que estar estirado en el jardín sin hacer nada no me ayudaría y mi padre... bueno, mi padre puedes imaginártelo jajaja, pero no se, el estar aquí sentado, tan lejos de casa y del idiota de Adolf jaja... me siento bien- Cierra los ojos y nuevamente se vuelve a estirar sintiendo la brisa.

Asterope no sabía cómo reaccionar ante tanta exaltación. Hablaba casi a trompicones. Bueno... increíble... sí, supongo. Aunque creo que no llegaron a ganar nunca la copa de Quidditch. Se sorprendió cuando Linc mostró interés en conocer a su abuelo. No sabía ni qué responder. ¿Conocerlo? Pues... supongo que sí... claro. Algún día ¿Lo dice en serio? Tal vez... no sé... en la estación de Kings Cross, cuando vengan a recogerme. Sonaba tan ilusionado que no parecía el mismo chico de antes. Bueno, si quieres vuelo a tu lado en clase, pero te advierto que hace mucho que no monto. No prometo ser la misma que era antes.

Cada vez que hablaba, le gustaba más escucharle. Quizá eran muy diferentes en algunos aspectos, pero a la vez tenían cosas en común. Y aunque ella no exteriorizara tanta emoción por estar en Hogwarts, dentro de ella estaba dando saltos de alegría por estar ahí. Sí, yo también estoy genial aquí. Y tu madre tiene razón. Hay que sacar provecho a la vida a base de esfuerzo. Si no, no se consigue nada. ¿Y quién es Adolf? Asterope pensó que pobre el tal Adolf, a quien había llamado idiota. ¿Es tu hermano o algo? Yo soy hija única.

-¿Adolf? ¿Mi hermano? Jajajajajajajajajajaja- Lincoln se retorcía en el suelo de la risa "¿¡¿¡¿Adolf mi hermano?!?!? jajajajajaja" Hasta en sus pensamientos se reía... unos segundos después se volvió a poner boca arriba y con los brazos bajo la cabeza se dispuso a contestarle -Buff... que risa, no, tengo un hermano, pero no es Adolf, él es mi guardaespaldas, un poco inútil, pero buen tío, como explicarlo, siempre intento fastidiarle de mil maneras distintas, pero aguanta, me desahogo con él y eso, pero estoy contento de tenerle a mi lado jaja aunque jamás se lo diré- Dice sonriendo -Y si me entero que le dices algo, lo negaré rotundamente- Tenía una amplia sonrisa en su cara mientras pensaba en lo que Asterope le había dicho

Linc se desternillaba en el suelo mientras Asterope lo miraba anonadada. ¿Se está riendo de mí? Es una confusión lógica. ¿Cómo iba a saber yo que tenía un guardaespaldas? Por suerte, no se tomaba a mal las cosas. Así que, aunque su cara mostraba una clara confusión, sonrió cuando Linc dejó de reírse y le explicó todo.

¿Tienes guardaespaldas? Vaya... Tu familia debe de tener mucho dinero. Si tan contento estás de estar a su lado, no deberías llamarle inútil. Solo con la educación se consigue el respeto. Era la primera lección que tenía para enderezarlo.

Y, hablando de lecciones, Asterope miró a su libro de Adivinación, que había dejado apartado en la hierba cuando empezó a hablar con Linc. Me pregunto cómo será la siguiente clase. La Adivinación es una magia tan imprecisa que a muchos de los mejores magos les cuesta dominarla. Dicen que la mayoría no lo consigue nunca.

-Sí, tengo un guardaespaldas y no, de respeto nada, sino no aprende a quien debe obedecer... los amigos están bien "supongo" pero él no es mi amigo, es el empleado de mi padre y sí, mis padres trabajan en el ministerio y en los juzgados... no los veo nunca, pero tenemos dinero, mucho dinero jajaja- No iba a reconocer que a veces les echaba de menos, pero se le notaba un poco en la cara que aquella risa era falsa -La clase de adivinación es una perdida de tiempo, todo mago que se precie se labra su futuro y yo ya se como será el mío- Esta vez la sonrisa de la cara no era de alegría ni nada por el estilo, estava avido de poder y tenía muy claro que su futuro iba a ser conseguir ese poder que anhelaba, "seré el mago mas poderoso de todos los tiempo" -Superior a Voldemort...- Dijo susurrándo, cuando se dió cuenta que lo había dicho en voz alta reaccionó rápidamente -¿Tu ves mucho a tus padres?- Le preguntó mirando al cielo