Partida Rol por web

Cervantes parecía ensimismado todo lo que duró el corto concierto de aquella joven, a la par, para cuando quiso darse cuenta Heins había entrado y estaba hablandole sobre algo acerca de la misión ¿Se había cancelado? La cara de Cervantes no pareció mostrar ningún signo de preocupación o consternación ante aquella noticia, más bien parecía estar tornándose alegre y vivaz por momento. 

Cervantes comenzó a moverse mientras realizaba algunas de sus florituras típicas hasta estar a la altura de su acompañante y su nueva conocida, con su voz melódica como pocas narró;-¡Oh Mary...! ¡¿Quién pudiera disfrutar de tu compañía nuevamente para gozar de esta magnífica muestra de talento y pasión?! ¿Pues no es la música si no las palabras del alma? ¡Oh Mary...!- Cervantes colocó un brazo por encima de los hombros de Heins en un abrir y cerrar de ojos y vociferó;- ¡Mi nombre es Cervantes Manuel Leonardo de la Gracia Mercedes Azora! ¡Buscador de la Belleza! ¡Adalid del Deseo! ¡Bardo errante! Y de vez en cuando...Cuentacuentos..- Cervantes esbozaba una amplia sonrisa mientras se inclinaba en una majestuosa reverencia frente a su recién conocida amiga.

-Cuan talentosas manos posees, nuestra recién adquirida amiga. ¡Oh Mary...! ¿Podría ser esto amor a primer oído?- Cervantes parecía hablar para toda la muchedumbre mientras vociferaba todo aquel discurso, que de alguna manera se tornaba cada vez más melodioso.- ¡Parece ser que nuestro primer objetivo en este lugar ha sido cumplido de una forma u otra! ¿Qué más da si nuestra talentosa amiga ha intervenido o no? ¡Disfrutemos de estos instantes que se nos han brindado en pos de la confraternización y la amistad!- Y nuevamente, moviéndose todo lo rápido que pudo se colocó entre los dos jóvenes y apoyó una mano en el hombro de cada uno a la par que alzaba la voz dirigiéndose esta vez, a toda la gente que rondaba la entrada de la taberna, a la vez.- ¡¿Les gustaría mi estimado público disfrutar nuevamente del talento de esta joven dama?! ¡Quizás si atentamos a su corazón con una canción nos brinde ese placer nuevamente!- Y mientras todo el público le prestaba atención, con una gran sonrisa en el rostro comenzó a entonar una canción no muy complicada y con un ritmo sencillo. ¿Sería una canción local? El caso es la voz de Cervantes parecía incitar a la comunión musical.

Cervantes cantaba mientras seguía el ritmo de su canción con ligeros golpes de su pie izquierdo contra el suelo. ¿Sería posible que desde que viera a aquella chica tocar el violín de aquella forma tuviera aquello en mente? Solo Cervantes lo sabía.

Esta cría nunca cambiaría, se había emocionado tanto que había olvidado su objetivo aquí, frente a ella había parecido su oportunidad de seguir su cometido e iba a dejarlo pasar por culpa de alguna de sus pataletas de niña pequeña -Déjame el control un poco, te aseguro que me lo agradecerás- Le dije con una voz dulce a Allegretta ante la cual se paró en seco, *Si me lo dices con esa voz no me puedo resistir, pero no hagas nada raro o te castigo* Me contesto en forma de pensamiento,tras eso puede ejercer algo de control sobre Allegretta, me gire para darle la cara al chico, olía a magia y eso no me gustaba.

-Borra esa sonrisa de tu cara, hechicero- dije con un tono serio mientras guardaba la partitura en el bolsillo y el violín en su funda sin perder ojo del chico - Sueltas demasiada información a la ligera, con esa facilidad de acercamiento ante un desconocido, como sé que lo que sale de tu boca no son más que falacias, yo soy tu depredador y aun así te atreves a acercarte de esa manera tan desconsiderada- le dije con un tono enfadado y una mirada directa a sus ojos -Si es cierto lo que dices dime el santo y seña, si no puedes más vale que tengas buenas piernas- dije con un resoplido al final.

-Y tu el de la tuba- dije echándole una mirada asesina -No te me acerques, no me fio de tus intenciones, pareces demasiado extraño y adulador-.

*¿No te pasas un poco?* Me dijo Allegretta, aunque no parecía muy preocupada, -No te preocupes solo les estoy probando, quizás se me ha pegado algo de tu entusiasmo- Le conteste con un pensamiento, tras eso adopte una posición ligeramente ofensiva, no me fio de nadie este mundo siempre ha sido muy caótico, protegeré a Allegretta por su bien.

De hecho me sorprendia un poco que Cervantes no se molestara, o al menos mostrara una pizca de inconformidad. Pero no. ¡Incluso parece mas alegre ahora! Este tipo... Enserio me agrada, si solo fuera mas normal estoy seguro de que nos llevariamos mas que bien, de maravilla diria yo. Pero no habia pasado mucho tiempo cuando pude sentir el brazo de Cervantes sobre mi cuello mientras empezaba a hablar, ¿¡Es que acaso se habia enamorado Cervantes?! ¡No puede ser!

No podia creer lo absurda que podia ser esta situacion, mi rostro simplemente mantenia un semblante neutro al ver como Cervantes una vez mas llamaba la atencion de cualquier persona que estuviera alrededor, ¿Quizas tiene una habilidad que le permita ser tan llamativo, o simplemente es Cervantes siendo su mas Cervantes? Ya ni se lo que digo, maldicion...

Su forma de hablarme no me sorprendia sinceramente, somos enemigos naturales al fin y al cabo, ¿O ella sera una posible aliada pero su Arcano no deja de ser mi enemigo? Tsk. A pesar de todo aun asi no deja de molestarme un poco, pero simplemente suspiro y desecho ese sentimiento inutil.

-No hay necesidad de ser tan hostil, ¿No crees? -Mi mirada era tranquila, aun cuando tengo enfrente a algo que podria causar mi muerte de manera rapida, dolorosa y sencilla. -¿Asi es como saludan por aqui a la gente que solo tienes dudas? Yo hice las preguntas primero, saber... -Dije simplemente para dar un suspiro, mientras me rascaba un poco mi cabellera. -¿Santo y seña? ¿De que me hablas? ¡Oh, creo que ya se, la frase! -Dije mientras que con mi puño simulaba un martillo de juez y golpeaba mi otra mano. -"Muerte al Alba".

Akai pudo revelar la carta con facilidad. Ciertamente parecía algo mágico ¿Quizás sea tinta mágica? Puede ser, pero no importaba mucho en lo referente al contenido. A través de la lente que tenia el emblema, como si fuera una navaja suiza, se podían ver perfectamente como si estuvieran escritas normal. Milagros de la tecnomagia.

Informe urgente para, ABCH:

Recoged a la nueva miembro y partid rápidamente a a la situación del grupo ADGEA, Saint Dominica.

Se ha revisado la misión asignada y se piensa que la misión puede ser de mayor dificultad de la establecida. Necesitaran apoyo y cuento con vosotros para cumplirlo.

Muerte al Alba

Att. Stake.

La carta tiene el mismo icono que el emblema ¿Que sera lo que sucede en Saint Dominica? 

Mire al chico contestarme con el saludo que ponía en la carta y tras eso esboce una pequeña sonrisa y cambie el tono a uno neutro -Lo que tú llamas hostil yo lo llamo ser precavida, nunca sabes lo que puede pasar en un mundo tan caótico como este- suspiro levemente y me tranquilizo un poco relajando mi posición -La curiosidad mató al gato dicen, quizás me lo tomo muy a pecho pero soy así-.

Spoiler (marca el texto para leerlo):

- Jeté ,me podéis llamar así, desde este momento seremos compañeros si no pasa nada extraño supongo- Digo mientras le hago una pequeña reverencia al chico y  mi cara a una bastante neutra y mi voz a una con apenas fuerza que cuesta oír -No me gusta mucho la gente, pero me gusta la música así que preferiría evitar momentos embarazosos innecesarios, así que ¿A donde vamos? -.

Mientras espero la respuesta me paso la mano por la garganta frotándola ligeramente y ajusto mi voz ligeramente.

-Te doy la razon en eso, señorita. -Le dije con un tono amable y gentil a la muchacha, parece que finalmente he encontrado a quien habia masacrado a esa bestia, lo cual me quita un peso de encima. Akai estara feliz de saber que he encontrado a la persona responsable de eso. Ojala me de un elogio por eso... No estaria mal escuchar eso a estas alturas, sinceramente.

-¿Jeté? -Pregunte algo impresionado por "su nombre"... Aunque seguramente sea un apodo, dudo que algunos padres decidan ponerle asi a una chica tan atractiva, lo dudo mucho. Aunque eso me deja algo molesto... Pero no se puede evitar, simplemente no se siente aun en la confianza para decirnos su nombre, tsk. -¿No... te gusta la gente? ¿Momentos embarazosos...? -De cierta manera, no podia comprender de que estaba hablando, o como es que tenia la habilidad para ser tan sincera consigo misma. Me sorprende. -Ehhh... Esta bien... Tenemos que ir a donde esta nuestro jefecito, se encuentra en nuestro Speedwagon esperando por nosotros sinceramente, asi que mejor demonos prisa, no parece ser muy paciente supongo... -Dije rascandome la cabeza, mientras decidia caminar hacia donde estaba Akai.

El grupo, una vez reunido y "arregladas" sus diferencias, ya podían tomar rumbo al Bardo Errante. La gente no se paro a mirar el espectáculo que habían montado, ya que en la ciudad había ya bastante ajetreo y se podía escuchar que muchos aun temían sobre el Leshen.

El camino hacia el Speedwagon fue bastante tranquilo y una vez pasaron el umbral de la puerta se encontraron a Akai esperándoles.

Había pasado un buen rato desde que Heins había salido a buscar a Cervantes pero a Akai no advirtió el paso de las horas ya que estaba sumergido en la lectura de uno de sus libros...cómo no.
Cuando todos se habían subido y alzó la vista de su preciado libro, se dio cuenta que había una chica a la que no conocía de nada pero tampoco se sobresaltó. Si estaba ahí es porque era la nueva miembro a la que se refería Stake en la carta. Con suma tranquilidad pero sin parecer lento, cerró su libro y se levantó para dirigirse hacia sus camaradas.

-Como ya sabe Heins, nos ha llegado una carta de Stake y hemos sido informados de que el trabajo que nos ocupaba aquí ha sido completado por alguien. -Hizo una ligera pausa y continuó hablando. -En la carta de Stake se nos ordena partir rápidamente hacía Saint Dominica donde nos reuniremos con el grupo ADGEA. Parece que van a necesitar apoyo para cumplir la misión así que... Heins, cuando estés listo -Con esto concluyó Akai. Bastante rápido y conciso en la explicación de lo que sucedía.

Justo antes de acomodarse de nuevo, dirigió su mirada hacía la nueva incorporación y con una ligera sonrisa le dijo. -Dejaremos las presentaciones para más tarde. Por ahora bienvenida al grupo.
Tomo su libro y pasó las páginas hasta llegar al punto donde se había quedado. -Ah, por cierto, para llegar a tu habitación tan solo guíate por esos ronquidos que tienen que estar haciendo temblar hasta los mismísimos cimientos del mundo...- Dijo refiriéndose a Balgala que AÚN seguía dormido.

Ya habiendo llegado al Speedwagon, Akai parecia estar muy tranquilo. De hecho al parecer el libro lo distrajo todo este tiempo y no se percato mucho del tiempo en el cual yo estaba fuera trayendo a Cervantes. -¿Hacia Saint Dominica? Que extraño que ellos necesiten apoyo... -Comento con cierta sorpresa al escuchar a Akai, ¿Que habra sucedido para que nosotros tengamos que ir hacia alla? Entonces mejor no me detengo, es hora de avanzar. -Bueno, en todo caso si necesitan mucha ayuda yo les recomiendo que se sujeten bien... Que vamos a ir algo rapido. -Dije con una sonrisa de emocion, la misma que habia tenido la primera vez que conduci un Speedwagon. Una sonrisa de adrenalina pura. Me dirijo tranquilamente hacia el asiento del piloto, doy un laaaaargo suspiro.

Agarro la palanca central, mientras giro el tirador que estaba a un lado, en direccion hacia la derecha. Finalmente habian aparecido las pantallas holograficas, asi que empiezo a marcar mi destino hacia Saint Dominica, con una velocidad de... Hmmm... Veamos... ¡75 Kilometros por hora, eso esta bien! Espero que todos se preparen, porque llegaremos muy rapido...