Partida Rol por web

Me agarro a la pierna de Lissey sin dejar que se vayan sin mi.

-¡No os vayáis sin mi! :(

Danny tomó el brazo que Lissey tendía dispuesto a guiarla como un lazarillo, pero el aturdimiento de la propia chica y el lastre de Jack impedían que el grupo se moviese.

- Vamos, Jack, que no te dejamos solo.

Cuando puedo convencerle de que así era, fueron hasta el refugio donde se instaló un incómodo silencio.

Finalmente, Danny dijo:

- Paul antes de morir dibujó en el suelo una torre acabada en un pico. Supongo que quería indicarnos algo importante... ¿se os ocurre qué sitio querría decirnos?

Aun con los ojos rojos y escocidos, me los continuaba rascando mientras estaba de cuclillas y sontesté:

-Igual es una pirámide y les atacó una momia.

Me limpié la nariz con la camiseta, mientras seguía soltando sollozos. Me esocían los ojos de tanto llorar, seguramente los tenía más rojos que un tomate, pero qué más daba. Cuándo Danny dijo la palabra "morir", me puse tensa.

- ¡No digas esa palabra!¡No la digas! - le grité de manera automática. - No la digas...

Me acurruqué en el suelo y escuché a JAck, siempre diciendo tonterías.

- Una pirámide n es una torre acabada en pico. Un campanario, o a veces las torres de agua tienen tejados en pico...

- Sí, a mí tambien me vino a la cabeza el depósito de agua...

De pronto todos recordaron el deposito de agua municipal. Si, tenía un tejado en pico y podría coincidir con el dibujo que había hecho el niño, aunque la torre que había dibujado Paul era muy alta y estrecha y el deposito era ancho. En todo caso nada perdían por ir allí. Y aquello les alejaría de los policías y del levantamiento de cadáveres... Pero ir por los Barrens en aquel momento....

¿Cómo? Los policías inmediatamente  se pusieron en marcha llevando a los dos niños con ellos para que les indicasen el sitio donde estaban los cadáveres. Por el camino les fueron haciendo algunas preguntas rutinarias como si habían visto a alguien mas o si habían tocado los cuerpos de los niños. No tardaron en llegar a los Barrens, donde pidieron a los niños que les guiasen.

-Vayamos entonces -dije medio triste y apenado- ya no quiero estar mas tiempo aquí, todo se hace tan extraño.

Me sentía incómodo, no sólo por lo que había pasado con los dos chicos, sino por quién había muerto, y mi reacción. Siempre pensé que con tantas pelis de terror estaría preparado para algo de ese estilo, pero no.

Me levanté y sacudí la ropa para ver si nos íbamos ya.
 

Negué fervientemente con la cabeza, a pesar de que había sido yo la que había mencionado la torre de agua.

- Es peligroso ir a los Barrens.... - sobretodo si quien ha hecho eso a Emily y Paul sigue ahí afuera.

Tragué saliva para no ponerme a llorar otra vez y dejé pasar un par de segundos para recobrar el control sobre mi voz.

- Y solo somos tres... Y Chester y Martin se preguntarán dónde estamos. Y no quiero que me encuentren en los Barrens - Phil se enfadará - ¿No podemos investigar otro sitio? Hay otras cosas con esa forma... O se lo podemos dejar a a policía. Estoy cansada, triste y asustada...

- A mí tampoco me parece prudente salir nosotros tres solos. Esperemos a que vengan con la policía.

Allí estaban, Danny, Jack y Lissey. Tal vez el momento no fuese el más apropiado pero quizás serviria para distraer momentaneamente sus pensamientos. El caso es que quizás no tuviese otra oportunidad antes de que volviese a su casa, y tenía que decirselo. Si no, podía ser peor.

- Lissey... tengo que decirte una cosa... bueno, te la tendría que decir Jack pero mejor te la explico yo...

Tragó notablemente saliva, y se puso como un tomate.

Respiré tranquila cuándo dijo que esperarían a los chicos aunque, a decir verdad, quería irme del parque. Había tenido suficiente "aventura" por hoy. Miré a Danny confundida cuándo dijo que quería decirme algo pero que Jack debía decirlo... No le entendía.

- ¿No me irás a hacer alguna broma o algo así no? - si se suponía que Jack era el que tenía que hacerlo, tenía sentido. - Por que ahora no voy a reírme de nada, y menos si es una jugarreta...

La amenaza de Lissey hizo que aún se le atomatara más la cara, muerto de vergüenza. Cogió aire y fuerzas y lo soltó de sopetón:

- Verás esta mañana estábamos en casa de Jack y como no sabíamos donde estábais y queríamos contaros una cosa que nos había pasado con una foto vieja cogimos la guía de teléfono para llamar a alguno de vosotros para ver si habíais quedado y como sólo nos acordábamos de tu apellido llamamos a tu casa. -casi se quedó sin respiración.

Lo malo es que llamó Jack y...

Ahora venía lo difícil. Miró a Jack de refilón, aunque si éste intervenía en la explicación, seguro que la liaba más de lo que ya lo había hecho.

Me costó entender a Danny mientras soltaba la frase toda de golpe y sin respirar, pero al final un temor inexplicable se apoderó de mí.

- Oh no... - me giré cogiendo a Jack por los hombros - ¿Con quién hablaste Jack? ¿Qué dijiste? ¿Qué dijiste? - dije mientras elevaba la voz nerviosa.

No, no, no... Phil había cogido el teléfono, no había nadie más en casa... Y oh no, sabría que le había mentido. Me iba a... Me iba a... ¿Qué iba a hacer ahora?

- ¡Ay mi madre! -parecía que las consecuencias iban a ser peor de lo que ya intuía que iban a ser. Y todo por culpa del imbécil de su... ¿amigo? Notó que la rabia se apoderaba de él otra vez, junto con una terrible impotencia por verse incapaz de hacer nada para solucionarlo.

Miraba a uno y a otro como si fuese un partido de tenias, hasta que me obligaron a  confesar.

-Pues que voy a hacer, pregunté si ahí estaba el señor Empel de apellido Lotas, pffffff -sólo de recordarlo me meaba de risa...- lo cual no se lo tomó muy bien el que cogió el teléfono, pero luego me disculpé y le dije que era Danny y que te buscaba.

La mirada de horror que le dirigí a Jack era imposible de describir con palabras. Quería pegarle y llamarle idiota. Quería llorar pensando en lo que Phil haría cuándo volviese a casa. Quería que el tiempo volviese a hacía unas semanas y que nunca me hubiese peleado con Brandy, que aunque era tonta nunca me había metido en problemas con Phil. 

Pero en lugar de todo eso solté a Jack y me dejé caer en el suelo. 

- Me va a matar... - susurre sin darme cuenta de que estaba pensando en voz alta - Tengo que irme con Ryan, Ryan me protegerá...

Pero Ryan estaba muy lejos y estaba enfermo. 

- ¿Qué te dijo él, Jack? - pregunté con voz monótona esperando que debido a algun milagro la respuesta no supusiese que me iban a dar una paliza al volver a casa.

-Lo que dijo no fue muy malo realmente, sólo te llamó para que bajases y le prohibió a Danny que te vea. -me encogí de hombros- he escuchado cosas peores en la tele.

Luego le pregunté:

-¿quién es Ryan?

¿Me llamó para que bajase? ¿Esta mañana? No, espera...No podía ser. Esta mañana Phil estaba de buen humor y me había dicho el nombre de los abuelos cuándo le pregunté. Luego yo había subido a hacer el árbol y no recordaba que me llamase a bajar... Y para cuándo me fui estaba durmiendo de nuevo. ¿Estaría borracho cuándo cogió el teléfono? Tal vez si era así no se acordaría. Sí, sería algo así... si no, habría subido al no bajar yo cuándo me llamó y me habría pegado por desobediente. Aún había esperanza.

- ¿Seguro que ha sido esta mañana? ¿Seguro seguro? - pregunté nerviosa, levantando la mirada y saliendo de mi estado de medio-trance. Mi tono se tornó más triste cuándo mencionó a Ryan - Mi hermano mayor...

Chester respondió a las preguntas lo mejor que pudo, bastante nervioso por haber encontrado a sus amigos muertos, sabiendo que aquello iba totalmente en serio. Debían acabar con esa cosa, antes de que les matara a ellos. Pero, ¿cómo hacerlo? Tendrían que buscar esas respuestas cuando se llevaran a los pobres Paul y Emily. Una vez llegaron a los Barrens, el muchacho les guió hasta el lugar donde habían encontrado los cuerpos. 

De camino a los Barrens a Martín se le pasó varias veces por la cabeza la idea de acusar a Vincent.

El abusón les había amenazado varias veces con rajarlos con su navaja. Pero el niño tenía claro que él no había sido, así que seguro que tendría eso que en las series de detectives llamaban coartada y ni siquiera pasaría unos días en el calabozo.

Así que desechó la idea y siguió a Chester en silencio mientras les guiaban a donde estaban los cuerpos de Paul y Emily.