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El baile de los pasos perdidos

Cita #13 - Luna y Chico 3

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30/06/2025, 19:37
_Narrador_

El espejo daba la bienvenida a la última cita antes de que tomaran su decisión. De un lado del espejo estaba una muchacha de cabellera rubia que caía en cascada y apariencia etérea. Del otro un caballero, elegante, bien vestido, con cierto vello facial que le daba un aspecto más maduro.

Las manos rozaron el cristal, el reflejo se formó. Solo sus palabras podrían romper el hielo, era su última oportunidad de encontrar lo que estaban buscando.

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02/07/2025, 00:03
Chica 4

Me quedé inmóvil al principio, observando a mi cita al otro lado del cristal. Era distinto a todas las anteriores, algo más maduro, y sin embargo... algo en su porte, en la forma en que se erguía, me resultaba extrañamente familiar, aunque no tenía claro en qué.

Deslicé la yema de los dedos por la superficie helada del espejo, inhalé y empecé a hablar. 

—Buenas noches —dije con voz musical y un leve acento francés—. ¿Qué tal va tu noche?

Me mordí el labio un momento antes de continuar.

—Bueno, la manera de empezar una cita con preguntas no es la más original pero creo que no me ha estado funcionando tan mal... ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?

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02/07/2025, 10:23
Chico 3

Por última vez sentí el hormigueo de la trasmutación ante el espejo. De nuevo un rostro borroso, una actitud dubitativa y una voz fácilmente reconocible. Sonreí.

—La noche no está siendo ni de lejos lo que me esperaba—cité con voz serena y marcado acento francés—. viéndote a través de este espejo pareces el reflejo de la Luna ¿Alguien te llamó alguna vez así?

Traté de mantenerme sereno pero un suspiro restalló en mi boca tras recorrer mi pecho.

—Me gusta transformar unas cosas en otras. A ser posible las malas en buenas—dejé un espacio de silencio antes de añadir—. ¿Me ayudarías a trasformar una mala noche en una agradable?

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03/07/2025, 00:25
Chica 4

Al oírle hablar, lo supe instantáneamente y sonreí, con calidez. No podía decir que me sorprendiera del todo que en algún momento hubiéramos acabado cada uno en un lado del espejo pero era curioso cómo estábamos aquí después de que usase eso como excusa en la sala común. La comparación con la luna casi me hizo reír lo curiosa de la situación, nuevamente.

—La luna, ¿eh? —repetí despacio, dejando que la ironía se dibujara sola en mi rostro, claramente divertida por la coincidencia de esas palabras—. Qué curioso... En una de estas citas me tocó ser la luna. En otra, el amanecer. Teniendo en cuenta que he sido ambas hoy... ¿te quedarías con la luna para describirme?

Le observé con más atención que antes cuando dijo lo de una mala noche y mi sonrisa titiló. Definitivamente había sido lo peor liándole en mis problemas cuando él estaba claro que no estaba bien.

—No suena mal eso de transformar una mala noche en algo mejor —dije con dulzura—. ¿Te cuento lo que hace que mis días se transformen? —no esperé respuesta antes de continuar—. La perspectiva. Un problema o una opinión parece totalmente distinto cuando lo miramos desde otro punto de vista. ¿Qué crees que habría pensado uno de los Abraxans, por ejemplo, de toda esta experiencia si lo hubiera podido ver desde fuera? De la general y la tuya, quiero decir. 

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03/07/2025, 13:12
Chico 3

—No es curioso—confesé con cierta desidia—. Me dijeron que vendrían a Beauxbatons a visitar a Luna. Entendí que esa eras tú. Para algunos tal vez seas la luna, eterna, bella e inalcanzable. Para mí eres más bien un rayo de luna, porque a pesar de lo etérea buscas dar luz a los que te rodean. ¿Y qué sería yo entonces para ti?

Al final lo curioso de todo esto era como el espejo nos había ido cruzando todo el tiempo entre nosotros y otros alumnos en una especie de interferencias que distorsionaban el ejercicio de la comunicación. 

—¿Por qué nos habrá cruzado el espejo? ¿Acaso sería capaz de no reconocerte por tus palabras, por tu voz, por cómo tomas las decisiones?—pregunté retóricamente en mi propia reflexión—. ¿Acaso voy a conocerte de una forma diferente a la que te reconozco?

Sopesé la manera de ver las cosas del rayo de luna aquí presente. No tenía ni idea de como pensaría un Abraxans. El reino mágico animal no era mi campo de investigación. Sí que podía saber e incluso sentir como el corazón más blando podía transformarse en piedra y como las traiciones terminaban siendo la moneda de cambio de una sociedad enferma. 

—Quiero pensar en esa perspectiva. Estoy seguro de que me equivoqué con la mía. Pensé que el espejo sería un lugar mágico alejado de las intrigas y las traiciones—comenté desapasionadamente—. Incluso pensé que elegiría solo a las personas más adecuadas para cada uno, un patrón, una señal del destino. Pero al final, como detrás de tantos estudios mágicos creo que el destino no es más que un mono tirando dados.

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03/07/2025, 22:02
Chica 4

Entreabrí los labios al darme cuenta de por qué lo había dicho. ¿Brinco había hablado con él de mí? ¿Había tenido entonces una cita con él? Sonreí ante la comparativa. El nombre de luna claramente reflejaba todo lo que él había dicho pero su propia definición me hizo dedicarle una sonrisa aún más cálida. 

—¿Tú? Para mí... eres una de esas constelaciones que cuesta identificar al principio. Las ves, están ahí, brillan como todas las demás, pero nadie te enseñó a leerlas. Así que tardas más en entender qué forma tienen. Pero una vez que la ves... ya no puedes dejar de verla. Aunque el cielo esté lleno, aunque haya nubes o lo que sea... la encuentras, sabes donde está, en qué parte del cielo buscarla. 

Apoyé mi mano contra el cristal, como si quisiera responder ofrecerle respuesta a todas sus dudas con el gesto. 

—Sigo pensando que el espejo esta noche no nos está colocando por lo que somos, ni siquiera porque nos reconozcamos o no. Creo firmemente que nos está poniendo en el camino de unos o de otros por lo que necesitamos aprender. 

Guardé silencio unos segundos y luego, casi como si cambiara de tono, continué.

—Estoy segura que un Abraxans sólo vería un lugar cerrado, dos personas quietas. Se preguntaría por qué parecemos tan ocupados pensando en por qué estamos aquí en vez de hacer lo que nos apetece o disfrutar del momento. A veces, la explicación más simple es la correcta. 

»Yo, por ejemplo, me alegro de haber coincidido contigo aquí. Han pasado unas cuantas personas por el otro lado del espejo pero tú haces que parezca que estoy en casa, que esta experiencia es real más allá de todas las locuras de la noche. Al final, en un lado o en el otro del espejo estás ahí, como una bonita constelación que guía mi camino. 

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07/07/2025, 14:45
Chico 3

—Es una muy bonita comparación—comenté asintiendo con marcada reflexión—. Para que luego digan que eres superficial y arrogante.

Nada de lo que pudiera decirle al Claro de Luna pasaba por las voces populares. Desde su atril, el joven veía a la medio veela un ser extraño entres sus pares, como lo era él. A nadie le extrañaría que ambos no hubieran pasado las tardes hablando de sus parecidas circunstancias en la vida. Claro que ninguno de los dos, mucho más acusado en el aprendiz de alquimista, se dejaría ver fácilmente entre los demás de esa forma acompañado.

—¿Qué es lo que crees que vas a aprender de mí—comentó enigmático—. ¿Qué podría decirte que no pueda hacer paseando por el jardín del colegio?

Con la certeza de su intuición pero con la fortuna del anonimato que el espejo le daba, sobre todo a sus facciones, no dudó en preguntar lo que nadie se atrevería a hacer frente a los demás.

—¿Has conseguido ya a través del espejo pareja de baile?—comentó con curiosidad pues ese era, al parecer, la función de asomarse al espejo.

Tal vez debería empezar a mirar de otra forma a los animales fantásticos y dejar de ver a través de su propio prisma. Aprendería cosas sin ninguna duda, pero para ello necesitaba salir un poco más y dejar de perderse en las nieblas de su propio pensamiento.

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07/07/2025, 21:51
Chica 4

Mi sonrisa se mantuvo pero no era solo calidez. Había un destello de ironía bajo ella, como si me hiciera gracia el comentario... y a la vez no.

—Supongo que es más fácil quedarse con lo que uno cree ver que molestarse en mirar bien —dije con un rastro de pena, sobre todo tras lo ocurrido en la sala común—. Y yo he aprendido a no dar explicaciones a quien no quiere escucharlas.

Ladeé la cabeza y me apoyé con el hombro en el espejo sin dejar de tocarlo con la mano. 

—¿Qué pensaste de mí la primera vez que me viste?

Cuando me preguntó qué creía que iba a aprender de él me reí al principio y luego lo medité unos segundos. 

—Creo que a ver las partes de ti que solo se muestran cuando nadie las está buscando y pareces querer estar ahora unos minutos con otra persona, que es más de lo que haces fuera —admití, mirándole con curiosidad—. Pero... quizá esto vaya más allá —mi expresión se volvió más suave, más reflexiva-. Quizá el que tenga que aprender que no hay respuestas para todo, que no hace falta entenderlo todo, y que algunas cosas simplemente son... seas tú.

Y entonces llegó la pregunta del baile.

—No —respondí, con sinceridad—. No he elegido a nadie aún. No es tan fácil que ponga mis ilusiones en manos de otra persona. Me basto sola para destrozarlas —añadí con una risa que tenía un matiz de tristeza en su sonido. 

Luego le dediqué una media sonrisa pícara.

—¿Y tú? ¿Vas a esconderte toda la noche en el otro lado del espejo? ¿O me vas a sorprender y vas a ir con la arpía mayor?

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08/07/2025, 16:49
Chico 3

Detecté pena en sus palabras y no obstante no me pronuncié sobre ellas dejando que volaran en ausencia de contestación y con ello mostrando que no darles más importancia de la necesaria era el mejor camino para que esas actitudes quedaran en el olvido. Lo que no dejé pasar fue la pregunta inesperada que escapó tras el espejo, muy cercana, como si su cabeza estuviera justo al otro lado.

—Pues pensé que te parecías demasiado a una foto de mi madre cuando entró en Bauxbatons—dije reflexivo—. Luego me sorprendió saber que tanto nuestras madres como nuestros padres se dedicaran a lo mismo.

Sopesé las palabras de la veela y añadí algo a modo de réplica.

—No es fácil ver de forma diferente las partes de una persona cuando han estado viéndose de una determinada forma durante años—correspondí sin añadir conflicto a mi tono sino simple resolución—. Sin embargo... creo que sí, que todo tiene respuesta, aunque esa respuesta no sea igual de válida para todo el mundo pues está claro que cada uno habla desde un prisma universal diferente. ¿Qué se te ha quedado sin respuesta?

La curiosidad y la resolución de problemas eran sin duda el área a la que el colegio me había empujado. Metafísica y Cuántica, a la par de alquimia, eran un campo extenso donde podía encontrar respuesta hasta de cuestiones sobre el mismo espejo que nos separaba, como la de recomponer en el espacio la imagen de Clarimonde frente a mí, cuando en realidad ambos estábamos colocados en la misma dirección frente al espejo. 

Entre esos pensamientos llegó la respuesta de la rubia que de nuevo me pilló por sorpresa. Por lo que había podido intuir, ajena como estaba a los conflictos del colegio, Clarimonde había tratado de ayudar a Armand frente a diversos subterfugios de Juliette. De hecho yo, en algún momento me había sentido objeto de un juego superfluo y trivial.

—Lo siento. Nunca he pensado que vayas por ahí destruyendo ilusiones—Me quedé pensativo un instante y luego reconvine confesar—. A no ser que te refieras a destrozar las tuyas propias. Entiendo que posees lo que tanta gente añora, y eso te convierta en objeto de envidias, pero tu gestión emocional de ello dista mucho de ser beneficiosa para ti, o eso creo ver... claro que es tan diferente ver de sentir.

Mejoró nuestra conversación cuando sentí el matiz de voz que destilaba picardía y me ayudó a soltarme más demostrando como se activaban mis dedos sobre el espejo tamborileando alegremente.

—No pensaba ir al baile. Tan solo estaba aquí para adivinar la física mágica que se esconde bajo el funcionamiento de este espejo. Lo del baile no era especialmente mi punto de interés—dije con seriedad—. Lo que sí tengo claro es que no lo haría con Juliette de ninguna de las maneras.

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10/07/2025, 02:46
Chica 4

Me quedé en silencio un segundo cuando habló de su madre. Quizá ni siquiera era solo un parecido superficial. 

—Eso explica cosas —respondí con calidez—. Explica que no me trates como si fuera una criatura exótica que deba manejarse con guantes. A veces tengo la sensación de que la mitad de las personas que me rodean no saben si quieren mirarme o protegerse de lo que creen que puedo hacerles sentir pero contigo no me ha pasado nunca. 

»A mí también me sorprendió lo de nuestros padres pero pensé que, como yo, tampoco querrías ser una extensión de ellos. Por eso nunca me había planteado sacarte esa conversación —continué con sinceridad. 

Cuando empezó a hablar sobre respuestas y prismas y su certeza de que todo podía entenderse si se formulaba bien, me limité a escucharlo con atención. No estaba de acuerdo pero había belleza en su forma de intentar darle sentido a lo que no lo tenía.

—No estoy segura de que todo tenga respuesta —dije al fin—. Pero sí creo que hay personas que necesitan buscarlas para poder seguir adelante. 

»¿Sin respuesta sobre ti? Mil cosas que probablemente me responderías de manera racional ahí fuera pero a las que querría una respuesta impulsiva, con lo primero que se te pasase por la mente. ¿Qué elegirías comer durante toda tu vida? ¿Qué música podría hacer que cantases o bailases en un impulso? ¿Qué te hace llorar? ¿Qué olor te recuerda a casa? ¿Qué harías si no sintieras miedo a equivocarte? ¿Qué querías ser de pequeño antes de intentar entenderlo todo?

Me detuve un segundo, observándole con la cabeza ligeramente ladeada y una media sonrisa.

—No tienes que responderlas todas, claro. Pero sería bonito que al menos una no fuera analizada por tu cabeza antes de salir de tu boca.

Su comentario me sorprendió, quizá porque fue de los más personales que había hecho desde que empezó la noche. Sonaba a observación... de alguien que había estado mirando más de lo que yo pensaba. Asentí cuando dijo que me refería a destrozar las mías propias.

—Quizá tengas razón pero no sabes lo difícil que es distinguir entre lo que te dan porque te ven, y lo que te dan porque solo quieren algo de ti. ¿Mi gestión emocional no es beneficiosa? Puede. Pero ha sido lo que he podido hacer con lo que tenía —confesé en voz baja con tristeza. 

No quise discutirle lo de ir al baile y que solo quisiera venir a investigar al espejo para no convertir esto en una sesión de psicología de ida y vuelta. Pero cuando dijo que no iría con Juliette de ninguna de las maneras, se me escapó una risa leve, como un suspiro entre dientes. 

—Menos mal —dije, con una mezcla de alivio y picardía—. Hubiera sido una pena ver una mente brillante... distraída por un buen par de... pestañas.

Le lancé una mirada breve, casi como si no hubiera dicho nada, pero la curva en mis labios decía otra cosa.

—Me tranquiliza saber que no eres tan fácil de hechizar.

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10/07/2025, 17:01
Chico 3

Las palabras melifluas de mi interlocutora se filtraban suavemente a través del espejo. Aunque no pudieran verla dudaba que nadie pudiera haberse resistido al encanto de su tono cristalino. No solo tomaba sus palabras con naturalidad sino como cierta confesión.

—Me he criado bajo esa cascada cristalina de palabras etéreas— dije con tranquilidad—. No podría sentirme compungido por una sensación que me ha mecido desde la cuna. Aunque no pretenda ser como mis padres no puedo obviar de donde vengo.

Sonreí con la respuesta a que no haya respuesta para todo. Una paradoja al fin y al cabo porque la misma explicación de algo que no la tiene ya genera una respuesta. Pero si había que responder respuestas sin pensarlas era lícito más allá de que por muy impulsivo que se fuera era el sistema límbico el que las regulaba. No obstante trató de seguir el juego a Rayo de luna y contestó inmediatamente en cuanto esta efectuó sus preguntas.

—Ranas de chocolate y sopa de calabaza. Un vals, me encanta el vals, es como mecerse en compañía. Lloro poco, pero lloro cuando estoy demasiado frustrado por no conseguir algo. Es un poco rabia en el fondo—respiré profundamente—.La lavanda. Mi madre siempre ha usado en su pelo el aroma de lavanda recién cortada. No siento miedo a equivocarme, de hecho siento que me equivoco cada día y aprendo de ello. 

En este punto me quedé un instante en silencio. Negué con la cabeza y confirmé.

—Siempre desde que tengo uso de razón he querido ser alquimista y he tenido que pararme un segundo a pensar para comprobar que eso siempre fue así. La trasmutación siempre ha sido mi pasión, la búsqueda de imposibles, poder encerrar un trozo de cielo en una piedra, o tal vez convertir mi corazón en piedra para que nadie pueda modificarlo con el uso de hechizos. No lo sé, una profesión sin límites.

Noté el tono de tristeza de mi interlocutora y traté de alegrarla con un tono ufano.

—Solo trato de decirte que no necesitas ver para sentir y que te dejes llevar por lo que sientes tú, y no los demás—a veces el espejo no servía para remarcar algunas palabras con un gesto claro pero mi tono era suave y empático—. Al fin encontrarás el principio de la vibración universal, de aquella manera que vibres recibirás y te encontrarás con los objetos que vibran a la par de tu ritmo y entonces comprenderás cuál es tu lugar aunque sepas que nada es eterno e inmutable.

Tal la última diatriba dejé escapar una suave carcajada.

—Hacen falta un par de buenas... razones para convencerme de ir al baile acompañado.

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11/07/2025, 03:28
Chica 4

Me sorprendió que respondiera a todas las preguntas sin apenas pensarlas y sonreí cálidamente por el intento de soltarse. Escuché cada palabra con atención, y hubo algo especialmente tierno en su forma de recordar el aroma a lavanda, o en ese deseo tan infantil —y a la vez tan ambicioso— de encerrar el cielo en una piedra. Lo imaginé de niño, serio y curioso, tratando de encontrar lógica a todo lo que le rodeaba. Y, por un momento, me pareció que ese niño seguía hablándome desde el otro lado.

—Lo de convertir tu corazón en piedra... espero que no lo consigas del todo —dije en voz baja, pero con honestidad—. Me daría pena pensar que alguien como tú, con esa forma de mirar el mundo, dejara de dejarse tocar por él.

Su tono cambió entonces, y sentí ese esfuerzo por devolverme algo de luz. Le agradecí el intento, aunque no se lo dije en voz alta.

Me reí bajito, apenas un suspiro que vibró entre mis labios cuando habló de razones para dejarse convencer.

—Vaya... y yo que pensaba que los alquimistas solo se dejaban seducir por fórmulas imposibles y no por pares de buenas... razones —le guiñé el ojo con picardía, en actitud divertida y juguetona. 

Luego me puse algo más seria.

—Quizá el experimento que estás buscando no esté en el funcionamiento del espejo... sino en lo que pasaría si te atrevieras a salir de detrás de él. ¿Lo has pensado?

Le dediqué una media sonrisa y le solté otra pregunta, para no tensar mucho el ambiente entre ambos. 

—Si pudieras ver solo una cosa de tu vida, de cualquier momento, futuro o pasado. ¿Qué querrías mirar?

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11/07/2025, 16:18
Chico 3

Contestar de aquella manera tan impulsiva me había hecho desbordar hasta tal punto mi emoción que en estos momentos me costaba contenerla. Es por ello que reaccioné igual de rápido a su consejo.

—Y yo espero conseguirlo siempre y cuando tenga otro remedio para un instante después convertirlo en fuego para fusionarse con el mismo calor del centro de la tierra.

Seguiría siempre persiguiendo cada uno de mis sueños porque no conocía otra manera de enfrentarme al mundo. Era intenso, tal vez demasiado pero el tintineo casi líquido de su sonrisa devolvió mi atención al otro lado del espejo.

—Esas razones deberían desentrañar un buen enigma—asentí con fascinación.

Tal vez la misma fascinación que me provocaba el espejo en sí y por la cuál quizás se me estuviera pasando algo por alto. Escudriñé sus gestos, intentando definir también el motivo de aquellas palabras.

—¿Salir? —pregunté extrañado—. ¿A través de él?

Me imaginé aporreando el espejo para ver qué ocurría a través de él, aunque no me pareció la más adecuada de las posibilidades.

—Me encantaría conocer el momento exacto de mi muerte—dije con tono tranquilizador y una gran risotada a continuación—. Eso me ayudaría a darle más valor a cada segundo que me quedara de vida. ¿Qué te gustaría ver a ti? ¿A cambio de que cederías tú belleza? ¿Cuál es tu flor favorita? ¿Que te gusta hacer cuando nadie te ve? ¿Cual ha sido el regalo que más te ha gustado?

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11/07/2025, 19:11
_Narrador_

La imagen del espejo empezó a oscilar lentamente anunciado el final inminente de su cita. En esta ocasión, ninguno de los dos volverían a sus respectivas escuelas. El espejo se transformaría en un portal, que al cruzarlo les llevaría al baile, o a casa, si así lo deseaban. En caso de elegir y ser elegidos, aparecerían con sus parejas. En cualquier otro caso, entrarían con el resto de estudiantes de su escuela. 

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12/07/2025, 23:37
Chica 4

Me quedé observándole mientras respondía, entre divertida y fascinada por la intensidad con la que vivía cada pensamiento. Su forma de hablar, de irse por ramas imposibles me resultaba desconcertante y extrañamente poética. 

Cuando se rio por lo de las razones, me limité a mantener la mirada en él. Una chispa juguetona me cruzó los ojos mientras me llevaba una mano al pecho con dramatismo fingido.

—Qué enigma tan complicado. Puede que incluso haya que investigarlo con... calma, paciencia, y una buena cantidad de observación directa.

Le guiñé un ojo, pero no tardé en volver a una expresión más pensativa, sobre todo cuando se mostró tan desconcertado por la idea de salir del espejo. Me hizo gracia que se lo tomara tan literalmente, aunque había algo también... entrañable en eso.

—No —negué con suavidad—, no me refería a cruzarlo físicamente. Me refería a salir de donde sea que estés escondido, sea un espejo, libros o una fórmula. No todo se comprende desde detrás de un cristal. A veces hay que arriesgarse a sentir de verdad, más allá de solo analizarlo todo. Aunque no encaje en ningún esquema —añadí con una sonrisa más suave. 

Ladeé la cabeza con curiosidad cuando dijo que quería saber el momento de su muerte. 

—Yo... no querría ver eso. No querría saberlo, porque entonces cada paso hacia allí me parecería más corto. Prefiero pensar que tengo todo el tiempo del mundo, aunque no lo tenga. Además, no necesitas saber cuándo acaba tu vida para empezar a vivirla —le dije dando un par de toquecitos con la punta del dedo índice en el espejo, casi como si le chinchase.

Sus siguientes preguntas me hicieron sonreír con más sinceridad, aunque también me desconcertaron un poco. 

—Probablemente escogería cualquier momento con mi abuela, en el pasado, claro —respondí con un tono melancólico antes de continuar con las respuestas—. La cedería a cambio de cualquier cosa, me encantaría librarme de ella. El jazmín. Adoro meterme en el bosque y poder observar criaturas mágicas aunque también me encanta volar a solas. 

Lo del regalo me sacó una sonrisa más tierna. 

—Una cucharilla de plata —respondí, aunque sentí que debía darle una explicación al respecto, así que continué—. Fue el primer objeto del que quiso desprenderse Éclair, mi cría de escarbato, para intentar animarme una vez que tuve un mal día. Era su tesoro y me lo ofreció sin que nadie se lo pidiera.

Entonces noté cómo la superficie del espejo comenzaba a ondular. El final se acercaba, lo sabíamos ambos.

—Supongo que el experimento termina aquí... o empieza, según se mire.

Me incliné apenas hacia delante, apoyando la punta de los dedos en la superficie, justo donde imaginaba que él estaba al otro lado.

—Espero que te animes a asistir al baile y disfrutes aunque no hayas conseguido entender el funcionamiento del espejo —añadí con cariño.

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13/07/2025, 21:36
_Narrador_

La imagen se desvaneció y al intentar separar la mano del espejo vieron que no era posible. El espejo les preguntó por su elección con una canción ridícula, al uso del sombrero seleccionador de Hogwarts. Cada uno hizo su elección. Algunas basadas en el amor, la atracción o el miedo, miedo al rechazo, miedo a no ser elegido.

Una vez hecha la elección el espejo brilló. Lo que antes era el espejo era un portal, y al fondo del mismo, se oía la música. El baile de los pasos perdidos estaba listo para empezar.

Notas de juego

- Fin de la cita -