Partida Rol por web

[DM08/20] La Telaraña

⋩ Capítulo 4: Cacería ⋨

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19/08/2020, 18:00
Valder Haffer

Le devolvió el beso, con sus manos sujetándola con firmeza contra él, y las lágrimas de la joven se mezclaron entre sus labios, dándole un sabor salado y húmedo. Cuando se separó para hablar, Valder pasó los pulgares por sus mejillas. Intentaba mantenerse fuerte, estoico, por ella. Pero sus ojos también estaban húmedos y su voz salió algo tomada cuando respondió. 

—Iremos paso a paso —pidió—. Puede que Urthen no cambie de idea, no por mí, sino por nuestro padre, por nuestra Casa. Es muy responsable, Lisette. Él ya había decidido sacrificarse, no por mí, sino porque es lo que cree mejor. Porque lleva toda la vida preparándose para ser Lord, es lo que desea. Así que vamos a aplazar nuestra boda de momento, por si acaso. Pero no creo que tengamos que cancelarla —Poco a poco, a medida que hablaba, iba recuperando su optimismo natural—. Seguro que todo sale bien, verás. Urthen es muy responsable, ya verás —No estaba muy claro si trataba de convencerla a ella o a sí mismo—. Mañana a estas horas como muy tarde, ya serás Lisette Haffer.

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19/08/2020, 17:56
Mawney Cleve

La gran sonrisa que había traído iluminando su rostro se diluyó ante lo que empezó a escuchar a unos y otros. Decidió que no iba a quedarse con rumores u opiniones, sino que buscaría la fuente de todos ellos. 

Así llegó hasta donde estaba Guileon con lord Urther. 

-No, todo ha ido como una seda, lo que no parece que sea lo que ha ocurrido aquí. ¿Qué diablos ha sucedido? No he querido atender a lo que se decía, antes prefiero saberlo de primera mano, en tus propias palabras amigo mío.

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19/08/2020, 18:08
Urthen Haffer

Desconcertado por la repentina distracción de Ser Guileon, que le hizo alzar una ceja en extrañeza, se volteó hacia el consejero de los Vance.

Me alegro de escuchar que vuestra cacería fuera fructífera - sonrió con amabilidad, antes que nada, para luego dirigirse al tema que Mawney bien apuntaba - Esperaba yo también obtener la versión de Ser Guileon al respecto, pues me temo llegué un poco tarde para observar lo que había ocurrido con mis propios ojos. - volvió la mirada hacia el caballero, esperando respuesta.

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19/08/2020, 18:05
Thaena Blanetree

Aquel optimismo, inocente, ingenuo, era una de las cosas que enamoraban a la doncella. Ver como intentaba buscar el lado amable y triunfante de las intrigas que comenzaban a darse a su alrededor. Lisette sabía que no iba a ser tan sencillo, sabía que Valder se estaba engañando y queriendo cegarse de lo que ambos habían visto: a lord Urthen besando a Ser Guileon sin importarle si más ojos los veían. Tantos detalles, pequeños, que para los ojos de la doncella no habían pasado desapercibidos. La manera en que los ojos del primogénito Haffer se humedecieron al ver la felicidad de Valder y ella, la manera en que se expresaba respecto a la libertad que él no podía alcanzar, y que él había deseado para Lisette porque, ahora ella lo entendía, no la veía para si mismo.

Pero Guileon le había correspondido. Si no hubiera sido así, la doncella se sentiría más confiada. Pero había correspondido, y estaba segura que eso cambiaría muchas cosas, incluso si Urthen no era alguien que se dejara llevar por la pasión, como hacía su hermano. Lisette se mordió la lengua, pues veía con arrepentimiento como había contagiado su miedo en quien amaba, y le dolía en el corazón verlo así. Verlo dudar. No dijo más, de momento, pero esperaba que cuando todas las circunstancias se dieran, cuando se supiera el rumbo que tomaría todo, él haría lo correcto.

-Confío en ti, mi amor.- Le susurró. -Quiero poder ver el mundo a través de tus ojos... Es un mundo más hermoso, sin duda.- Suspiró. -Te amo. Eso no va a cambiar, pase lo que pase. Y juro, ante ti, ante los Siete, ante los Dioses Antiguos, que mi vida y mi corazón son sólo tuyos, hasta el día de mi muerte.- Un juramento, un voto, una promesa. Y que los Dioses decidieran su voluntad sobre los hombres...

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19/08/2020, 19:22
Guileon Vance

Guileon desvió la mirada ante la insistencia de los caballeros.

—Otra barda insolente —explicó encogiéndose de hombros— Me encontraba del otro lado de la carpa cuando escuche las risas... y la nueva tonada —arrugó el entrecejo, antes de añadir— Así que cuando interrumpí la alegre reunión, y la barda ofreció que acompañara en el estribillo, incliné mi copa de vino sobre su cabeza —sonrió como un chiquillo al que le descubren una travesura— Después le estampé una botella en el rostro a uno de los idiotas que se estaba riendo. Entonces llegaron los guardias y al poco tiempo lord Urthen.

Les dirigió una mirada desafiante, antes de añadir.

—¿Qué se suponía que hiciera? Insultaban mi honor, y el de lady Bessa.

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19/08/2020, 19:57
Mawney Cleve

Le escuchaba con los labios apretados, pensativo, evaluando.

- Guileon, he oído que has hecho apresar a la barda. ¿Es así? ¿La has hecho prender por esos versos? Si es así, quisiera escucharlos, y si prefieres que lord Urthen no los oiga, por no herir los sentimientos como novio de la implicada que es, te sigo a un rincón más apartado. 

Mawney sacudió la cabeza en señal de descontento. 

-¿Quiénes eran os que se reían? ¿Nobles invitados, o sirvientes? ¿Y la barda? ¿participó en el Concurso del Torneo? 

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19/08/2020, 20:08
Althea Mallister

Así se encontraba lady Bessa, evitando las miradas de la gente escondida en su capucha tras destensar su arco, cuando sintió unos pasos silenciosos detrás de sí. Aunque podría ser alguien simplemente pasando por cerca de donde se encontraba un momento después notó un movimiento a su lado: alguien extendía el brazo para tomar una de sus flechas.

Era una una muchacha de unos doce años, noble, que vestía con los colores de los Mallister. A lady Bessa le sonaba haberla visto en varias ocasiones durante la celebración. Por cómo tomaba aquella flecha parecía acostumbrada a coger todo lo que le interesase y estuviera a su alcance.

—La competición de arco fue la mejor —comentó entonces—. Porque en la de justas y en la de combate pueden hacerse trampas, y en la de bardos nunca está muy claro quién gana —aseguró—. Pero vos ganasteis limpiamente. Si hubierais ganado cualquier otra competición estaría segura de que había trampa, pero vos lo hicisteis con todas las de la ley. Felicidades.

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19/08/2020, 20:20
Urthen Haffer

Lejos de reírse por las gracias del caballero con el vino sobre la cabeza de la barda, o de su acción contra aquel que había cantado, lord Urthen se mantuvo serio y atento a la historia, especialmente a la mención de una nueva tonada, que le hizo fruncir el ceño con intriga y desagrado.

Era una situación difícil de abarcar, sin duda - contestó al caballero asintiendo con solemnidad. Acto seguido, se dirigió al consejero de los Vance - Lord Mawney, apreciaría enormemente que no hablara de mí como si no estuviera aquí presente. - tomó una breve pausa mirándolo a los ojos - Si es por ser el novio de estos festejos, y el prometido de lady Bessa, no deberiáis preocuparos de herir mis sentimientos, sino entender justamente por qué este tema me atañe directamente.

Mirando entonces a Ser Guileon, continuó.

Por favor, Ser Guileon. Preferiría tener su versión que no tenerla del todo. - insistió.

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19/08/2020, 21:00
Bessa Hawick

Bessa se sobresaltó al ver la mano que con confianza tomaba la flecha. Pasó su mano por sus ojos, por si alguna lágrima se había escapado de ellos sin su permiso, y se volvió hacia la joven. Le sorprendió su comentario, como si diera por sentado que no hubiera merecido ningún premio por ser quien era, y debido a que había participado en aquella que ella consideraba que no se podían hacer trampas, pues sí merecía ese reconocimiento.

Gracias, os agradezco vuestras sinceras palabras, pues a veces escasean dijo, sin mirarla demasiado, pues no deseaba que ella se fijara en su rostro―. Pero también podría haber hecho trampas en esta, pues mi padre podría haberme dejado ganar. ―Esbozó una pequeña sonrisa―. No fue así, podéis confiar en que no hice trampa alguna. Ni siquiera deseaba ese reconocimiento. 

Guardó silencio, pensando si debería o no preguntarle a ella. No fue demasiado, pues deseaba saber lo que había ocurrido.

¿Sabríais decirme que ha sucedido exactamente? preguntó mientras volvía su cuerpo hacia ella―. Lo que ha ocurrido con la barda y el sirviente al que han agredido, me han comentado algo, pero la versión de alguien tan sincera como vos creo que me resultaría más creíble que algunas habladurías.

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19/08/2020, 20:56
Mawney Cleve

Mawney devolvió la mirada al Haffer, y la dejó allí clavada mientras el joven le espetaba su recriminación. Luego respondió con voz gélida, empezaba a estar harto del trato que estaba recibiendo por parte de algunos. 

- Lord Urthen, no he hablado como si no estuviérais presente, al contrario, he tenido en cuenta que lo estáis, y que lo que se haya podido decir de vuestra prometida os podía ofender. No mi intento de ahorraros la ofensa, precisamente. Pero si preferís escuchar la burla, no seré yo quien os lo impida.

Se giró de nuevo hacia Guileon.

- No voy a forzar una explicación de lo sucedido, esa es tu decisión.

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19/08/2020, 21:44
Althea Mallister

La muchacha frunció el ceño cuando lady Bessa dijo que podría haber hecho trampas, como si no le pareciera que aquello fuese una opción. De hecho, dijera lo que dijera la chica, negó con la cabeza.

—Vaya una tontería —enunció con sinceridad—. Vuestras flechas alcanzaban sus objetivos más lejos de lo que los demás eran capaces de disparar. Los blancos no pueden tirarse al suelo fingiendo una derrota.

Luego cambió el peso de pierna. Parecía estar pensando si responder o no a la pregunta de la novia. La observó un instante antes de volver a hablar.

—Algunos nos estábamos divirtiendo cantando canciones con una de las bardas del torneo —comentó—. Estábamos con la de Ser Cantamañas cuando él apareció y nos callamos todos, pero nos pidió que continuásemos. —Parecía observar la reacción de lady Bessa con atención—. Cuando la barda retomó, le derramó una copa de vino sobre la cabeza, cogió una botella y empezó a golpear a un sirviente en la cara mientras él estaba hecho un ovillo en el suelo. Cuando vinieron los guardias ordenó que llevasen a la barda a las mazmorras. Luego se me quedó mirando mientras yo le silbaba la canción —expuso—, pero conmigo no se atrevió.

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19/08/2020, 21:48
Valder Haffer

El susurro de Lisette arrancó una sonrisa en la boca de Valder. La miró varios segundos mientras ella hablaba, y le brillaron especialmente los ojos al oír que ella le amaba. Y poco después, con aquel juramento, su pecho y su sonrisa se hincharon. Toda la atención del chico pasó a estar en su prometida y tomó sus manos. A pesar de todos los contratiempos en ese momento parecía genuinamente feliz.

—Yo también te amo. Te lo juro ante ti, te lo juro ante los Siete y ante los Dioses Nuevos y los Antiguos. Te juro que siempre te amaré, Lisette, mi cuerpo, mi alma y mi mente son tuyos —aseguró antes de acercarse muy lentamente para besar a Lisette. Un beso lento, tierno y cálido a partes iguales.

Al volver a mirarla a los ojos su rostro reflejó que estaba teniendo una idea y tomó aire.

—Con este beso —dijo, y Lisette tuvo claro lo que estaba haciendo— te entrego en prenda mi amor y te acepto como mi señora y esposa. Y si tú me aceptas aquí, ante los dioses y los hombres, me declararé tu esposo, Lisette. De ahora en adelante Lisette Haffer. Una sola carne, un solo corazón, una sola alma, ahora y por siempre. Y maldito aquel que se interponga entre nosotros. —La sonrisa del chico se ladeó—. Al menos hasta que un septón pueda hacer su parte.

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19/08/2020, 22:30
Bessa Hawick

La novia sonrío ante la seguridad que mostraba la joven noble. No quería explicarle que podrían fallar a propósito, tampoco creía que aquello hubiera sucedido pues la realidad era que la competición había sido totalmente justa, al menos, ante sus ojos.

Es difícil engañaros ―concedió, quizás más contenta que hacía unos minutos.

Bessa se mostró agradecida cuando decidió contarle lo que había sucedido, sabía que no iba a gustarle, pero ahora prefería saber las cosas por la boca de otros puesto que ya no confiaba en Ser Guileon, no todo lo que le hubiera gustado. Negó con la cabeza decepcionada, y al terminar la joven la historia, suspiró resignada.

No es un comportamiento apropiado y más cuando pidió que continuaran ―comentó, mirando esta vez a la chica―. Aunque os diré que no está bien reírse de la gente, ni siquiera de alguien como Ser Guileon. No sabéis por lo que puede estar pasando y la forma en que esa canción le puede estar afectando.

»De todas formas, os agradezco vuestra sinceridad. Es un detalle por vuestra parte haberme contado esta historia ―concluyó, dirigiendo su vista hacia la flecha que había tomado―. ¿Vos sabéis tirar con arco? ―preguntó para cambiar de tema. Ya conocía una de las historias que se contarían sobre lo que había pasado y ahora prefería hablar de algo que realmente le gustara. 

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19/08/2020, 22:36
Thaena Blanetree

Con oír sus palabras y ver que la sonrisa volvía a los labios de Valder, Lisette sintió que el aire le regresaba poco a poco a su cuerpo. Aún no ha terminado. Su corazón latía con un nuevo ritmo a cada palabra que pronunciaba aquel a quien se había prometido, a quien se había entregado en cuerpo y alma. Cuando sus labios se unieron, por primera vez sintió que no era un beso de amantes insaciables, besos de fuego; sino un beso de amor sincero, beso de novios, beso de marido y mujer.

Lo escuchó entonces llevar a cabo el ritual que habían esperado realizar esa tarde, y la sonrisa también se dibujó en los labios de la doncella. -Tendrá que valer hasta entonces...- Murmuró, antes de inhalar suavemente, para poder recuperar el control de su voz, temblorosa aún. -Con este beso, te entrego en prenda mi amor, y te acepto como mi señor y esposo, Valder de la Casa Haffer. Una sola carne, un solo corazón, una sola alma, ahora y por siempre. Tuya.- Y cerrando los ojos, sus labios se unieron una vez más a los de él.

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19/08/2020, 22:49
Althea Mallister

La chica asintió a la primera respuesta de lady Bessa, como si estuviera conforme y convencida de esa afirmación. Luego, cuando ella siguió hablando, se encogió de hombros.

—Alguien como él se lo merece —aseguró—. Si por una simple cancioncilla se pone así, se merece esa y otras veinte, día y noche. —La muchacha alzó entonces la barbilla—. Si alguien del pueblo hace eso, irá al calabozo. Si lo hace un noble, quien va al calabozo es otro. —Hizo una pausa y al seguir hablando lo hizo casi como si estuviera recitando una lección enseñada por su maestre—. La nobleza tiene que ser un ejemplo para el pueblo. No podemos dejarnos llevar así por nuestras pasiones. Lo que pasemos, debemos pasarlo por dentro. Y lo que nos afecte, debe afectarnos en nuestros aposentos, lejos de la vista de todos.

Después de aquella exposición por la que parecía esperar algún tipo de felicitación, o premio, volvió a mirar la flecha.

—No sé tirar, mi lady —aseguró—. Tampoco sé combatir cono Ser Clarinthe. Mis padres creen que no son unas actividades adecuadas para mí. Creen que debo centrarme en mis estudios, y que algo así me distraerá.

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19/08/2020, 22:46
Guileon Vance

Si Ser Guileon se había preparado para recibir una reprimenda por parte de los hombres, desde luego que no había esperado que el rechazo se instalara entre ambos. Alzando las manos un tanto, con las palmas extendidas, pidió amablemente.

—Mis señores, mis señores. ¿Por qué os agitáis? Es contra la barda que deberíamos concentrar nuestro desagrado.

Arrugó el entrecejo, intentando recordar las partes nuevas de la canción, aunque al final acabó por recitarla al completo.

La quiere como su hermana,

la quiere como su hermana,

nadie sabe si es un Vance

o sólo un cantamañanas.

El pobre toda su infancia

por ella pierde la baba, 

ahora sólo espera

ver en cueros a su hermana.

Cuando ella esté casada

y con marido en la cama,

¿sabéis donde estará él?

Mirando por la ventana.

La quiere como su hermana,

la quiere como su hermana,

nadie sabe si es un Vance

o sólo un cantamañanas.

—¿Estáis ahora satisfechos? —preguntó masticando cada palabra, para concluir con un sonoro bufido.

El color había vuelto a subir a las mejillas del caballero.

—Congregados entorno a la barda habían dos nobles, entre ellos una chiquilla de los Mallister, dos sirvientes y unos guardias. La barda fue la que cantó acerca de la Maestre Hazzea en el torneo de bardos. Y sí, la mandé apresar —replicó recuperando una sonrisa— Le dije que si tanto deseaba acompañar al bardo deslenguado, no sería yo quien se lo impidiera.

Notas de juego

Edito para responder completamente a Mawney.

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19/08/2020, 23:39
Mawney Cleve

Mawney escuchó muy serio toda la canción. Y aún unos segundos después, pensativo. Pero, finalmente, cuando Guileon dijo que la había mandado a hacer compañía al deslenguado, soltó una carcajada explosiva, una que aliviaba la tensión que había estado conteniendo. 

-¡Bueno! Está bien, no hay para tanto. -Se dirigió entonces a Urthen.- Lord Haffer, siento si he sido brusco, estoy muy... nervioso, imagino que comprendéis por qué. Cualquier cosa que pueda convertirse en un problema para la Casa Vance, es mi propio problema. Soy el consejero de Lady Gianna, no puedo permitir que nada empañe esta invitación a vuestro enlace, después de tantos años de permanecer Ser Guileon aquí, como rehén. Por eso cualquier cosa me altera, siento mis palabras, y aún más me alegro de que la burla no haya sido más que una pobre continuación de la que hiciera el deslenguado. 

Miró a su amigo, divertido.

-Me hubiera gustado verte verter el vino en su cabeza, y entiendo tu actitud, aunque las rimas no son más que una repetición de las otras. Tendrás que soportar esas chanzas, me temo, la gente siempre está buscando mentiras para esparcir, y ahora que han hallado unas que hieren, no las dejarán a un lado.

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19/08/2020, 23:52
Mawney Cleve
Sólo para el director

Desde luego Mawney temía que la barda apresada fuera Areesa. Y hubiera hecho cualquier cosa para liberarla. Pero no, era la otra. Ella se lo había buscado...

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19/08/2020, 23:57
Urthen Haffer

Si bien no le había gustado demasiado el tono inicial de lord Mawney, tras escuchar su argumento y sus siguientes disculpas, no tardó en ceder. Más aún, Ser Guileon intercedía a favor de la paz entre ambos. - Si esa era vuestra intención, me disculpo por el malentendido. Agradezco vuestra preocupación, por supuesto, y lamento no haber notado el origen de vuestras palabras a tiempo. Sin embargo, sí os pediría que, en futuras conversaciones, no me ahorréis nada de lo que yo mismo no intente excusarme -dijo en un tono amable al consejero, sonriendo incluso con la comisura de los labios en buena disposición, mientras esperaba a que Ser Guileon recordara los versos. Quería creer que si era un malentendido podría arreglarse fácilmente mientras ambos pusieran de su parte para que la situación no se repitiera. - De todas formas, entiendo la presión que debéis sentir, y no resiento en absoluto vuestra reacción. Todos tenemos malos momentos. - le ofreció una sonrisa sincera.

Las rimas, por supuesto, solo lograron fruncir su ceño en disgusto. Molesto, resopló mientras miraba hacia un lado.

Es comprensible vuestra molestia Ser Guileon, no hay duda. Pero, con el respeto de vuestro consejero, me tomaré la libertad de añadir algo a sus ya sabias palabras. - respiró profundo - No reaccionéis a estas tonterías. Las canciones vienen y pasan, y las que se escriben hoy ya no serán noticia mañana, pero al enfadaros solo provocáis más estrofas y más atracción para el público. Entre más importancia les déis vos, más tardaran en desaparecer del todo. - apretó los labios, sabiendo que no era tarea fácil - Si no pueden provocaros, dejarán de cantarla. Ese es todo el objetivo de la canción, y hasta ahora lo están logrando.

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20/08/2020, 00:04
Narración

Al final todos los cazadores terminaron por regresar a la carpa, algunos con piezas cobradas, otros con las manos vacías. Allí se extendieron largas mesas para que todos pudieran almorzar y recuperar fuerzas después de una mañana de ejercicio. Había un buen jolgorio en el lugar y el vino corría como si fuese agua. Piezas gruesas de carne y verduras cocinadas sobre carbón, distintos quesos y lonjas de pescado ahumado, todo salpicado con uvas y otras frutas. 

Tras la comida la comitiva de jóvenes nobles puso camino de regreso al castillo, una marcha más tranquila que la de la ida pues no en vano todos llevaban el estómago lleno. Allí la gente se dispersó, unos se fueron hacia sus aposentos, otros a disfrutar de los jardines de Fuerte Floresta y otros prefirieron continuar la fiesta en los salones de los Hawick. 

Notas de juego

Aquí se acaban las conversaciones. 

Pasamos a: Capítulo 5: Festejos II.