Partida Rol por web

Byron llegó a la sala común justo cuando Edward hablaba sobre la enfermera. Asintió confirmando las opiniones del chico.

- Si vais a la biblioteca por la tarde yo voy con vosotros.- Aún no había ni empezado a hacer la redacción y eso no podía seguir así.

Saludo a Selena con la mano y una sonrisa. Sonrío a mi compañero y amigo cuando me hace el cumplido y, algo abrumado, bajo la cabeza.

—G- gracias... —contesto y sigo mirando libros—. E- esto... lo mismo digo, Ed, claro —comento tras un par de segundos, mortificado por no haberlo dicho cuando debía. Pero en vez de dedicarme a disculparme o mostrar que me he dado cuenta de mi error, escondo un poco la cabeza en el libro que tengo delante. Me quedo algo cohibido, dándole vueltas a si puedo haber sonado ofensivo, hasta que habla de la enfermera otra vez.

—¡Una piña con sombrero! —digo, y empiezo a reírme a carcajada limpia, olvidándome de lo abrumador que ha sido el cumplido y dando golpes sobre la mesa, rojo como un tomate—. ¡Qué bueno! Ay, ay, ay, qué bueno. ¡Es que me imagino a la enfermera con un sombrero de estos de frutas! ¡JAJAJA!

Oigo a Byron entre mis risas e intento serenarme para contestarle pero no puedo, así que simplemente le asiento mientras aún me río y se me escapa alguna lágrima, y por si no fuera claro, le levanto un pulgar.

—Ay, B- Byron perdona... es que ha sido muy bueno... s- sí que vamos a la biblioteca... ¡¡Piña con sombrero!!

Me quedo mirando a William muy sorprendido por su ataque de risa, no creía que mi broma fuese tan buena y me ha cogido desprevenido su éxito, pero eso no hace que deje de alegrarme y que sonría en respuesta.

Intento poner cara de piña, pero la falta de tener una estructura de sincarpio en la piel hace que mi gesto no se asemeje en nada al del fruto, aún así intento hacer reír un poco más a William con la broma.

Sonrío un poco acompañando el gesto con una leve risa y miro a Byron cuando llega.

— Hola, Maxwell saludo al chico según llega y hago un gesto con la mano también para darle la bienvenida a la sala común.

Aún sigo sonriendo por las risas de mi amigo.

— Entonces, decidido, esta tarde pasamos por la biblioteca.

Al ver las muecas que hace Ed me río todavía más.

—¡Has puesto la misma cara que la enfermera cuando le hablé! ¡¡JAJAJAJA!! —ahora estoy llorando y prácticamente partido de risa por la mitad, arqueado sobre la mesa. Intento respirar para que me duela menos el diafragma, porque empiezo a notarlo tenso.

—Ay, ay, ay, que me da... que me da algo... me duele... ay, para... para... —sigo riéndome, aunque un poco menos, ayudado por el dolorcillo.

Aún con la sonrisa en la cara, asiento varias veces con la cabeza.

— Jo, no creía que te fuera a hacer tanta gracia— reconozco algo cohibido pero no por ello menos alegre. Me rasco la nuca durante unos segundos y entrecierro los ojos—. Pero jo, es que la enfermera fue muy desagradable... ¡Y encima a mi me ha tocado ya ir dos días!

Al entrar en la sala común y ver a su hermano allí no pudo reprimir una sincera sonrisa.

- ¡Buenos días a todos!- Tener el sábado libre le había puesto de buen humor.

- Uhm, ahora me apetece piña. -Dijo después de haberse estado riendo un rato por lo dicho por Ed.

Acercó una silla y se sentó junto al resto mientras guardaba el diario en su mochila. Descansaría un rato hasta que se fuese a practicar Duelo.

- Yo encontré esto, -dijo tras rebuscar un momento en la mochila y poner sobre la mesa algunos pergaminos enrollados- por si queréis echarle un vistazo. Pero no lo uséis tal cual está aquí, a ver si nos van a reñir por copiar... Mañana después de las recuperaciones seguramente me pase por el lago a mirar algunos bichejos y así completar algo más. Por si os queréis venir. -Se giró al oir a alguien más entrar. Hacía días que no estaba en la Sala Común cuando había tanta gente. Era agradable.- ¡Hola Perry!

— Hola, Perry— saludo a mi hermano con alegría, dedicándole una sonrisa y un movimiento con la cabeza, estoy a punto de levantarme para ir a darle un beso y un abrazo, pero luego pienso que quizás le resulte incómodo.

Todavía río un poquito por la gracia que le ha hecho a William, pero miro interesado la documentación que saca la chica de primero.

— No sé, Willow, yo creo que ayudarnos no es copiar, nos han mandado investigar, ¿no? Yo creo que un buen proceso de investigación es colaborar entre investigadores, no nos han dicho que este trabajo sea competitivo en absoluto, que sería el único motivo por el que podríamos no colaborar. Quiero decir, ¿qué diferencia hay entre buscar en un libro o preguntar al autor del libro? Si creemos que no hay gran diferencia entre esas cosas, preguntar a un compañero por lo investigado sería igualmente viable, siempre y cuando luego la redacción no la hagamos de forma conjunta sino que ya cada uno redacte por su cuenta y cada uno cite sus fuentes, creo que debería ser válido— miro a los alumnos de segundo—. No sé, vosotros sois mayores y ya habéis estado aquí un año. ¿Qué pensais al respecto?—

—¡Gracias, Will! —digo, una vez me he recompuesto y veo que nos deja unos pergaminos con información—. ¡Genial! Y no te preocupes, no nos dirán nada; pero por si acaso no copiamos. No me gusta copiar literalmente... Me gusta aprender a mí, la verdad —si hubiera acabado en otra casa que no fuera la de Ravenclaw, me daría más vergüenza decir lo que acabo de decir, pero se supone que somos los «empollones», así que ellos me entenderán mejor que nadie.

—Bueno, quizás deberíamos pasarnos por el comedor antes de ir a clase, ¿no? Se nos hace algo tarde... —digo, y me levanto para dirigirme hacia el Comedor.
 

Asiento con la cabeza hacia William.

— Exáctamente, esa es la idea, no tiene ningún sentido que copiásemos, lo importante por encima de todo es adquirir los conocimientos que se nos exigen— digo corroborando las palabras de mi amigo.

Finalmente asiento con la cabeza y me pongo también en pie, las piernas me fallan inicialmente y casi caigo al suelo, teniendo que apoyarme con las manso en el asiento quedando en una postura bastante ridícula que deja clara mi debilidad física.

— Va...— empiezo a decir avergonzado—Vamos... si no se nos va a hacer tarde— suspiro —Venga.

Selena recogió sus cosas mientras observaba a los animados alumnos de primero. -Como bien decís, está bien compartir recursos, siempre y cuando aprendáis de ello. Añadió su opinión de segundo.

Ya iba siendo hora de comer, así que decidió bajar también al comedor. -Vamos tirando, no sea que se nos eche el tiempo encima.

- Pues ya tengo hambre, vamos allá.

Cuando había tanta gente, Byron pasaba automáticamente al modo "segundo plano", asi que siguió a los demás al comedor sin decir ni pío.

- ¡Ey! ¡Esperadme! Perry, Selenaaaa.....

- Tenéis razón. No se en qué estaba pensando. -Contestó finalmente algo avergonzada por haber pensado así de ellos.

Cogió la mochila y echó a correr detrás de ellos.

Sentado en uno de los cómodos sillones de la sala común y al dulce calor del fuego de la chimenea la inspiración acudió a Colin que volcaba frenético sus conocimientos sobre los ciempiés monstruosos en un pergamino. Satisfecho con su trabajo se dispuso a irse a dormir.

Christopher llegó corriendo a la habitación. Por el camino, había retado a un fantasma a una carrera. No esperó a que el ente le dijera que sí, salió como una exhalación, gritando a pleno pulmón y haciendo un poco el cabra. Llegó y se detuvo, jadeando.

Mamá me decía que no era bueno correr después de haber comido... Cuánta razón...

Cuando consiguió recuperar un ritmo medianamente normal, se dirigió a su dormitorio.
 

Colin pasó por allí a gran velocidad. Tenía prisa y quería ir cuanto antes al Gran Comedor para poder desayunar algo.

Chris pasó por allí y se fijó en que no parecía haber nadie. Seguramente estaban durmiendo o desayunando, así que decidió darse prisa