Partida Rol por web

- Un hombre se cubre cuando otro tiene una pistola y la está disparando, un hombre sabe cuando luchar y cuando no, lo que no hace un hombre es patalear como un bebé malcriado cuando alguien le pregunta algo, deja de tirar piedras zumbado, no quiero que nos expulsen de Hogwarts y menos mi primer día.

Veo que es imposible razonar con él así que paso al plan "B", me acerco poniendo de escudo la silla e intento apartarle con ella, sin darle, sólo para no dejarle coger más piedras, (como los domadores a los leones).

Puedo reconocer que tenía algo de razón así que arroje al piso los últimos guijarros al piso – Bien entonces enfréntame como hombre -me cuadre torpemente, así como papá había querido que practicara algo de boxeo sin mucho resultado esperando que el enfrentamiento tuviera algo de igualdad – vamos o tienes miedo nenaza- fue el primer insulto que se me ocurrió en casa tenía prohibido usar esas palabras.

- ¿Pero de qué hablas garrulo? Mira chaval, no tengo ganas de problemas, madura un poco y cuando seas un "hombre" llámame y nos pegamos de verdad. ¿Sólo sabes sacar tus puños cuando "te insultan"? Le miro con la confianza de saber que si le pego un puñetazo me expulsan seguro. - Mira, si quieres te dejo pegarme un puñetazo, así tu te sientes mejor y a mi no me expulsan de otro colegio ¿Te parece bien? Dejo la silla en el suelo y me acerco. - Vamos chaval dame.

Pero es que de verdad quería que le pegara, preparé mi mejor derechazo, tome aire lo suficiente, hasta ahora nunca le había pegado a nadie en el colegio, trataba de ser buena persona y tener amigos, pero entre este tipejo y el profesor Von Vianden parecían quererme sacar de mis casillas.

-Solo discúlpate por lo que has dicho- lo mire con el rostro enrojecido y algo lloroso, mas por la rabia, además no quería que el profesor me reprendiera – retracte de lo que dijiste y no hay necesidad de que te golpee- dije manteniendo el puño firme.

- Jajajajaja, vale tio, lo que tu digas, ¿De que quieres que me retracte? Algún día tendrás que asumir que nacer en una buena familia no te da derecho a nada, solamente el trabajo duro puede darte las cosas que tanto ansías, que me imagino que serán las típicas de un niño rico y malcriado. A ver si te suena algo de esto: <<Quiero ser un buen mago o un gran empresario para que mi papá y mi mamá estén orgullosos>>... Sois todos iguales.

Si quieres pegarme pega fuerte, ¡Vamos niñato! Si no vas a pegarme por lo menos no llores que me siento incómodo. Pero... Adecir verdad, también tenemos una tercera opción, ¿Te invito a una rana de chocolate y nos damos la mano? ¿Qué te parece niño rico?

¿Rico? ¿Enserio pensaba que yo era rico?

Este tipo de verdad que estaba de joda, - No soy un niño rico, ni mucho menos eso, pero insultaste a mis parientes, al menos discúlpate por eso- baje los puños – Y mi papá no es un don nadie, que sea un muggle ingeniero no te da derecho a ofenderlo- baje los puños un poco más calmado.

-Además tu comenzaste no soy un inútil, también deberías disculparte por ello- escondí parte del rostro en la túnica, ahora estaba confundido debería pegarle y seguir enojado o aceptar la rana de chocolate, me rasque la cabeza infantilmente esto no me parecía ya como al principio – si te disculpas sinceramente por eso podemos comer una rana de chocolate juntos- me atreví a decir.

No me fastidies, ¿No eres mago puro? No me jorobes, yo soy muggle también. Pensaba que eras uno de esos estirados niños ricos que van mirando por encima del hombro, ¿Por qué has dicho eso de tus ancestros en plan capullo? De hecho tu actitud me decía eso mismo, lo siento chaval, mea culpa, si quieres nos tomamos la rana de chocolate a la salud de tu padre el ingeniero y el mio el taxista...

¿Qué te parece?

-Soy mestizo- reconocí -por el lado de mi madre son magos y brujas, pero todos mis parientes por parte de mi padre son muggles- me senté algo más calmado – de esta lado del mundo casi no tengo familia, todos mis familiares están en USA- suspire aceptando la rana, busque en mis bolsillos y saque otra rana de chocolate – para ti- dije compartiendo una de las mías.

- Jajajajaja, vamos tipo duro, aquí hay un montón de chicas preciosas, yo ya tengo a una echada el ojo y eso que llevo un día aquí, estás rodeado de magia por todos lados, eres mago tio, igual eso no es nada nuevo para ti pero imagínate vivir como yo, en un barrio de mierda, rodeado de gentuza y de repente, ¡BABOOUM! Eres mago y todo lo que creías de la ciencia y del mundo se evapora. Cojo la rana de chocolate y le digo, por cierto, ¿Si te toca el cromo número uno me le guardas?

Y no te preocupes, si tienes algún problema aquí que requiera puñetazos me dices, creo que puedo ayudarte con eso...