Partida Rol por web

Después del discurso de Rowle, parece que cambia mi percepción en cuanto al club, parece que no se dedicarán solo a cambiar cromos sino que harán excursiones y actividades, puede estar bien.

-Tengo a Salazar Slytherin, a Merton Graves, Berttie Bott,Elladora Ketteridge,  Cassandra Vablatsky, quieres cambiar  alguno Kayka- estaba emocionado los cromos que me había eran buenos y la colección crecía -mmmm la próxima vez pediré 100 cajas- dije emocionado, la verdad es que el club de coleccionistas estaba resultando mejor de lo que creí.

- Si mis padres se enteran de que he gastado 9 galeones en cromos me matan.... - dice la niña sonriendo mostrando un carácter alegre y dulce -... ¡No tengo el de Berttie Bott!...., te lo cambio por el de Paracelso... ¿te parece bien?

Kayla se fija en Thad, el cual estaba apartado de los demás, así que decide hablarle, dedicándole su mejor sonrisa

- ¡Hola Thad!... ¿quieres ranas de chocolate?..., tengo un montón para comer..., ven con nosotros..., ¿tienes un álbum mágico? ¿y cromos?....

Ahora que Kayla se había fijado yo también veo al pequeño huraño rubio, disculpad un momento, me levanto y voy al encuentro de Thad.

Oye men, ¿Por qué pasas de todos? Espero unos segundos a ver si hay respuesta por parte del rubio. 

Venga tio, estamos a cuatro metros de ti, siéntate con nosotros y come una rana de chocolate, nos están invitando Kayla y Daniel, incluso me han dado una para que se la pueda regalar a Maxine.

Ruben, tu no lo entenderías, tu sabes cómo llevarte bien con los demás, yo siempre que lo intento acabo mordiendo el polvo, tan sólo me he rendido. Suspiro.

Por fin me he dado cuenta de que no encajo, soy diferente, y eso es bueno. Jamás seré como los demás, y eso no es malo. No hay nadie que quiera ser, aparte de mi, se que no lo entenderás pero para mi eso es liberador, no tengo presión de nadie que no sea yo mismo.

Aprieto mi puño con todas mis fuerzas. Bajo la cabeza para no mirar su cara de estúpido.

Eres un zopenco men, ¿Crees que no me cuesta relacionarme con ustedes? Me cuesta hasta comerme una rana de chocolate, yo soy hijo de dos muggles, no conocía nada de este mundo hasta llegar aquí, quizás todos estéis acostumbrados a todo esto de la magia pero hay alumnos como yo que no sabemos NADA. Contengo mi puño.

Decir que quieres estar sólo para no llevarte decepciones es absurdo porque eso en si mismo ya es una decepción. ¿Acaso vas a decirme que te has metido en el equipo de Quidditch para estar sólo? O ¿Que te has apuntado a los clubs para estar sólo?

Si quisieras estar solo lo estarías, no estarías aquí. Deja de querer dar pena a todos y compórtate como un hombre.

No quiero dar pena, me he apuntado a los clubs para poder aprender más cosas que las que enseñan en clases. Si pudiera aprender solo lo haría, pero la única vez que lo he intentado han quitado cinco puntos a Slytherin. No estoy en los clubs para relacionarme, estoy para aprender hechizos y contra-hechizos. Y en cuanto al quidditch, me gusta volar, mi película favorita es "Merlín el encantador" así que siempre he querido volar, cuando he visto que se podía no lo he dudado ni un segundo.

No quiero dar pena simplemente quiero que me dejéis en paz, ¿Tan difícil es de entender? No quiero amigos ni enemigos, quiero que no me molestéis, nada más. Métete tus consejos por donde te quepan. 

Me voy de allí en dirección a la biblioteca.

-Vale Kayla Berttie Bott por  Paracelso- le dije a la chica intercambiando los cromos, esto me gustaba mucho  y la verdad que me divertía mucho, se podría decir que era algo mas tranquilo a los duelos, el Quidditch, entre otras cosas, por eso escuche la conversación de Ruben y Thad.

Tome una rana de chocolate y me acerque al chico rubio de Slytherin -Gustas, si quieres estar solo esta bien, pero la verdad yo prefiero estar entre amigos, no importa si eres un asco o eres bueno, no importa  si solo quieres volar o si prefieres coleccionar cromos, lo importante es tener amigos, mi madre siempre me contó que un mago solo por muy bueno y hábil no siempre logra todo, es como las pajas una se rompe fácil pero  1000 no se romperán, vamos deja ya esa actitud ven y come unas ranas con nosotros- sugerí entregando la rana de chocolate en la mano de Thad.

-¿A que le tienes miedo a los amigos?-  dije mientras regresaba alegremente a la mesa donde intercambiaba cromos con Kayla - Hey Ruben quieres un cromo, te obsequió uno de mis repetidos.

- Oh me encanta el de Bertie Bott... - dice Kayla sonriendo a Dani, el muchacho era muy agradable y encantador, tanto que cuando escuchó la conversación entre Rubén y Thad, no pudo menos que sonreír. Y es que en esta vida había buenas y malas personas, pues el Gryffyndor pertenecía al grupo de las "especiales", una categoría superior dentro del grupo de las buenas personas.

Thad había ignorado sus palabras, pero ella elevó la voz para que la oyese antes de irse.

- ¡Por favor Thaddy!.... ¡si te quedas te regalo un cromo!....¿te quedarás?.... - ella miraba su espalda alejarse, ¿se quedaría?..., ¿o le importaría un escreguto lo que la pelirroja le decía?....

Miro a Daniel,

Yo... La verdad es que no tengo ningún cromo y bueno... Tampoco tengo el álbum, lo siento pero no puedo permitírmelo ya que no tengo posibilidad de comprarlo con la paga, estoy ahorrando para una poción que vale 1000 galeones.

Pero eh, seguro que podemos hacer otras cosas en este club, Rowle ha dicho que va a haber excursiones y otras actividades digo sonriendo falsamente. Me encantaría poder integrarme en aquello de los cromos pero realmente necesitaba ahorrar.

Kayla, si me lo pides tu me quedaré pero por favor, no me lo pidas. Espero unos segundos, si me dice que me quede me quedo, si no me dice nada me voy a la biblioteca.

- ¡Quédate Thaddy Thad!!... - le dice levantándose de la silla y yendo hacia él para tomarle de la mano y darle un tironcito hacia donde estaba su álbum de cromos -....no es bueno que estés siempre tan solo...., de verdad..., anda ven... ¿qué cromo te gusta?..., mira estos son los repetidos, te regalo uno.... el que quieras.... ¿Qué te parecería el de Salazar Slytherin?..., es algo que nos une... su número el 48... - indica ella con simpatía, intentando que el muchacho sonriera, tendiéndole el cromo de aquel que dio nombre a la distinguida casa de las serpientes

Antes de que pueda reaccionar, Thad se inclina hacia kayla y la besa durante unos instantes, al ser su primer beso no sabe como darlo así que puede que sea horrible, pero para Thad es lo más maravilloso del mundo.

Lo siento, ahora entenderás por qué no puedo quedarme. Te quiero Kayla Silver, desde el primer momento que te vi. 

Dos lágrimas caen por mis mejillas, me giro rápidamente y me voy corriendo antes de que nadie pueda hacer nada para impedírmelo.

Kayla se quedó ojiplática. Ella hablando de cromos y de Salazar Slytherin, y Thad..., bueno..., Thad buscando la manera de... ¿de verdad lo había hecho?.... ¿o estaba alucinando?....

- Pero... - y en el pero se quedó Kayla, completamente alucinada, no le dio tiempo a decir nada más, ni enfadarse, ni sacar la varita, ni gritarle, ni.... ni nada.... La niña se mordió el labio inferior sintiendo que aquel acto por parte de Thad le iba a provocar problemas... ¿cómo le explicaba eso a su novio? Iba a enfadarse de verdad y ella no había tenido culpa de nada..., no lo había tenido... ¿no?... ¡si solo le había ofrecido un cromo!

Ahora era Kayla quien sentía ganas de llorar. Aquel gesto hacía su situación muy complicada. Perdía un amigo en Slytherin y solo rezaba porque las consecuencias no llegaran a oídos de Artemis..., mala cosa teniendo en cuenta de que Ruben y Dani estaban allí y eran los mejores amigos de su novio. Y ella debería ser la primera en contarlo, pero no quería pelear con el Hufflepuff.....

De la rabia que sintió aplastó en su mano el cromo de Salazar Slytherin, arrugándolo y dejándolo inservible. El día había comenzado muy bien y ahora se sentía sucia y mala persona. La pequeña no sabía cómo dominar sus emociones en ese preciso instante

Creo que por un momento todos los miembros del club que presenciaron el acto de sinceridad de Thad, mantuvieron la respiración unos segundos, ¿De verdad aquello acababa de pasar? Me sentía como en un charco de brea en ese momento, todo ocurría a cámara lenta y me costaba decidir que hacer a continuación, así que esperando que todo el mundo se fijara en otra cosa saqué la varita e hice una estupidez.

Chispas rojas hacia la ventana. La varita comenzó a escupir chispas rojas a toda velocidad haciendo bastante ruido al chocar contra la ventana. espero que haya servido para que mucha gente no haya visto lo que ha pasado.

Perdón, a veces no puedo controlarla, Profesor Rowle, Dani, quien sea, ayuda por favor...

-Aguamenti- apunte a Ruben para apagar las chispas rojas - Perdón, es lo que se me ocurrió para apagarlas, de verdad lo siento- le dije al Hufflepuff ofreciendo mi capa, no entendía que había pasado la situación estaba rara, a Thad le gustaba Kayla, pero Kayla estaba con Artemis, las relaciones no se me daban y la única chica que me importaba quería mantener distancia de mí.

Kayla se había quedado muda y perpleja ante la acción de Thad, el silencio que por un momento reinó en la sala, fue interrumpido por Ruben, y seguidamente de Dani, Alex echó una mirada de complicidad a la chica, que vino a decir Lo que ocurra en el club, se queda en el club. Advirtiendo que no sería el quien le diera la noticia a Artemis, y que si ninguno de la sala hablaba, este hecho quedaría enterrado para siempre.

No te preocupes Dani, no hace falta que me des tu túnica, iré a cambiarme y vuelvo más rápido que una centella a por una rana de chocolate, jajajajaja

Se sentía como si fuera un insecto en observación. Todos los miembros del club callados de repente dejando un hueco silencio particularmente incómodo, al menos hasta que uno lanza chispas rojas, otro un chorro de agua de su varita y al final solo quedaba la mirada de Lowell, una forma de expresarle tranquilidad... ¿Pero cómo estar tranquila cuándo Ruben acababa de salir a cambiarse?... Si se encontraba con Artemis se lo diría..., es más, debiera ser ella mismo quien lo dijera..., callarse eso iba a ser muy feo...

Suspira fastidiada, tenía claro que iba a decírselo, ahora la pregunta del millón era cuándo..., y..., cómo.....

- ¿Nadie más tiene cromos para intercambiar?...- preguntó levantando el semblante, serio y rojo por la vergüenza.

-Creo que ya tienes los míos Kayla- le sonreí a la chica, si no hacia mención  de lo ocurrido es por que era algo que no me incumbía y no tenía por que inmiscuirme así que continué  organizando los cromos en el álbum y agregaba a Paracelso en su lugar correspondiente.