Partida Rol por web

Kayla y yo, afortunadamente, las cosas van muy bien entre nosotros, somos muy buenos amigos y la verdad la pasamos bien juntos.

Ven voy a presentarte a todos los chicos del grupo, quizá a alguno de ellos ya los conozcas. - digo bastante animado mientras me pongo de pie y le ofrezco la mano a Ruben.

Tras hablar con Raven miré a mi alrededor, viendo que efectivamente, cada vez estábamos más desperdigados. Pero Kayla continúa cabizbaja. Aprovechando que además Victoria se había acercado, decidí que era el mejor momento para hablar con ella.

¿Es que habéis ido a nadar sin mi?

Victoria había hecho una buena deducción... pero equivocada, así que me reí.

-Ojalá, pero creo que ha sido todo lo contrario. Victoria, Raven vendrá el próximo día con nosotras -le dije, guiñándole el ojo.

-Voy a hablar un momento con Kayla. Puedes venir, si quieres -les digo a las dos a continuación, yendo después a ver cómo estaba mi amiga.

-Hola, Kayla. ¿Cómo estás? Esto... había demasiada gente así que me he acercado hasta aquí para estar contigo. Espero que no te importe.

Cuando Melker se quedó a solas con el Profesor Rowle, aprovechó para hablar con él y buscar consejo en temas relacionados a la docencia -Necesito tu ayuda, tengo problemas con los alumnos. Ayer tuve que castigar a varios en clase y pedí a Kayla Silver y a Thad Castle que fueran a mi despacho por la tarde, pero nunca aparecieron. Dijo mientras cogía una ramita y la partia en cachos más pequeños demostrando así que sentía un poco de ansiedad -Pensé en echarles la bronca en cuanto les viera, pero hoy no quería estropear la excursión. También había pensado en quitarles muchos puntos por su desobediencia, pero nunca he creido mucho en ese sistema de castigo. ¿Qué harías tú? Tienes mucha experiencia dando clases e imagino que habrás tenido que lidiar con alumnos rebeldes anteriormente.

Cuando Kayla se acercó a su amigo, el muchacho Hufflepuff que no conocía le habla y le indica que estaba hablando con Artemis justo de ella. La pelirroja enarca una ceja intrigada, pero intuyendo que de nada malo, de lo contrario no se lo habría dicho en la cara tan felizmente.

Ella mira entonces a Artemis y le sonríe cuando se propone presentarle a sus amigos. Kayla da un paso y tiende la mano a Ruben, mostrando una educación exquisita, producto de años al amparo de unos padres estrictos en formas en cuanto a convencionalismos sociales se refiere.

- Encantada, soy Kayla Silver... - obviamente él ya sabía quien era, pero la etiqueta requería hacer el saludo formal, y más si aquel muchacho era amigo de Artemis.

Fue entonces cuando escuchó una voz a su espalda y allí estaba ella, su buena amiga Altair. La pelirroja se gira hacia ella y le sonríe levemente, parecía más animada, y es que había estado hablando un rato con Artemis y él parecía haberla animado bastante.

- Hola Altair...., estoy bien.... - baja la voz -... ando preocupada para que no se me acerque Melker.... - se muerde el labio inferior -.... ¿recuerdas que me dijo que fuera a su despacho?.... No lo hice.... - se sincera -... fue una mala decisión porque estaba enfadada y ahora no me siento muy bien por haber desobedecido...,  y asustada..., porque no sé.... no sé como va a terminar esto.... - finaliza por decir.

Kayla observa a su amiga y a los amigos de Artemis y decide hacer lo propio, quizás fuera hora de ampliar el grupo y hacer presentaciones conjuntas.

- Altair, ya conoces a Artemis.... - se pone colorada, su amiga había estado presente cuando el Hufflepuff le mandó una flor a su sala común -....y él es su amigo.... - señala a Ruben, sonriendo en todo momento, haciendo efectiva las presentaciones.

Kayla observa a lo lejos la imagen de Melker, el cual parecía estar hablando con Rowle, ¿o era con otros alumnos?.... Por suerte aún no se había fijado en ella, o al menos eso era lo que creía.

Kayla me saludó, pero cuando me explicó que estaba preocupado por Melker... entendí su malestar. No era la primera vez que yo misma me arrepentía de haber hecho... o no haber hecho algo.

- Altair, ya conoces a Artemis.... y él es su amigo.... 

Después me presentó a Artemis, a quien ya conocía, pero no demasiado bien, y a su amigo Ruben.

-Hola -les dije, sonriéndoles, no pasándome desapercibido cómo se sonrojó Kayla al presentarme a Artemis. Era más que evidente que entre los dos había algo. Después, volví de nuevo mi atención a Kayla.

-Kay, no te preocupes. Segur que el profesor lo entendrá si vas a verle y se lo dices, y me parece que ahora sería incluso mejor que en el castillo, porque aquí es todo mucho más... relajado. ¿Por qué no vas a hablar con él ahora?

PAra asegurarme que conseguía convencerla, me giré hacia Artemis.

-Artemis, ayúdame a convencerla. Dile que es lo mejor que puede hacer. Incluso podemos acompañarte hasta donde está el profesor.

Si había algo que le encantaba de Altair, es que nunca dejaba para el día siguiente lo que podía hacer en ese preciso instante, pero nada más el hecho de pensar en acercarse a Melker de echaba a temblar y es que la pequeña Kayla no tenía precisamente alma de Gryffindor.

- Altair hay mucha gente, sí me regaña delante de todos puedo morirme de la vergüenza o puede que la líe aún más... - y es que aunque su compañera de casa no lo supiera, Kayla tenía mucho genio, y si le tocaban la fibra sensible podría hacer algo de lo que se arrepintiera posteriormente -.... quizás luego, en el castillo.... 

En ese instante Edevane pidió ayuda a Artemis, y esa guerra ya era difícil de ganar si ambos se aliaban. La pelirroja miró a su mejor amigo y luego a la insistente Altair. ¿Se iban a poner de acuerdo ambos en que diera el paso?.... Kayla se aferraría a un clavo ardiendo con tal de no acercarse al docente, pero la presión de grupo a estas edades, era sumamente importante y si ambos decidían que era lo correcto no le quedaría más remedio que ir hacia el cadalso....

Mientras hablaba con Altaïr Raven no se dio cuenta que un chico se le acercó y le hablo, no fue hasta que se acercaron al grupo que se dio cuenta, antes de acercarse Raven dice a Altaïr:

Vale... Pero voy a recoger eso un momento

Cuando llega el grupo era bastante más grande y hablaban sobre si Jaula debía ir a hablar con el profesor, ella mira a Rubén y dice en un tono de disculpa:

Esto... Perdóname por favor, creo que antes me hablaste, pero no me enteré... Acepta mis disculpas.

Se notaba que estaba realmente disculpándose y apenada, entonces mira a Kayla y dice:

Si me permites opinar... Creo que cuanto antes hables con el profesor va a ser mejor... Mis padres siempre me dicen que los problemas hay que hablarlos pronto

Hola Raven, ¿Cómo lo llevas? El ofrecimiento sigue en pie, Ruben o yo podemos prestarte la túnica mientras se seca la tuya ya luego nos las devuelves.

Espero que no te incomode llevar puesta la insignia de los tejones un rato, es sólo par que nonte enfermes, además Helga y Salazar fueron grandes amigos en el pasado, por lo que es nstural que nuestras casas se ayuden. - digo mientras insto a Ruben a ofrecerle su túnica a Raven.

¡Venga hombre! ¡Ahora es tu momento de ganarte su amistad!

Por cierto, ¿Quieres que cuelgue ese pañuelo mojado? Te aseguro que no será ninguna molestia, pues Altair y yo tenemos que acompañar a Kayla.

Después de todo, es culpa mía que no llegara al despacho de Melker, pues estuvo ayudándome con unos deberes de astronomía, ya sabeís que se me da fatal esa asignatura. - digo poniéndome de pie con una sonrisa.

Y bien Altair, ¿Nos acompañas a Kayla y a mi? Después de todo tu fuiste quien nos ayudo a conseguir los libros para la tarea para el trabajo sobre la atmósfera.

Confiaba plenamente en que Altair me ayudaría a darle una excusa a Kayla por no presentarse ante Melker.

Cuando Artemis hizo aquella sugerencia, se me iluminó la cara. Una excusa... ¡qué buena idea! Lo que fuese con tal de quitarle de encima a Kayla el problema, y si el profesor Melker era lo suficientemente inteligente, sabría de todas maneras leer entre líneas y todo iría bien, así que...

-Claro, vamos. De ninguna manera pensaba dejar que Kayla cargase ella con toda la culpa. Después de todo, fue por nosotros por lo que se agobió tanto que al final no fue a ver al profesor -dije, guiñándole un ojo y a continuación, mirando a Kayla.

-Venga, vamos. Artemis y yo hablaremos por ti.

Raven niega con una sonrisa y dice:

No te preocupes, a mí ser de una casa u otra no me importa, lo que importa es que somos completos ¿No? Los colores dan igual... Pero si me la das se mojada y no quiero que se moje además ya se está secando

Termina con una amplia sonrisa amable para añadir:

Claro seguro que el profesor lo comprende que y gracias por ofrecerte con el pañuelo

Dice mientras con cuidado se lo entrega para añadir:

Esto...si es necesario yo también estaba cuando fue lo del hechizo si queréis puedo acompañarlos y contarle al profesor lo que vi con el hechizo petrificador si creéis que puede ayudar

Ruben acerca su cabeza a la de Artemis.

Esta es otra de tus bromas ¿No? Porque no llevo nada debajo de la túnica y sería embarazoso quedarme desnudo delante de tu chica.

Al ver la cara ojiplática de Artemis sonrío y con un rápido movimiento me quito la túnica y se la doy a Raven, será un auténtico placer que una chica hermosa como tu lleve mi túnica hasta que la suya se seque por completo, encantado Raven. Obviamente era una broma, debajo de la túnica llevo la ropa del colegio.

Cuando estaban juntos varios alumnos Raven da su opinión tras mirar a la pelirroja, y parecía que todo el mundo estaba dispuesto a que ella se enfrentase justo hoy con el profesor de DCAO. Kayla asintió a la rubita muchacha, la verdad es que su opinión también era valorada. Todo el mundo opinando lo mismo no podía estar equivocado y probablemente, ella sí.

- Gracias por tu opinión Raven... tus padres dicen como los míos..., aunque mi abuela siempre mantiene que es mejor mantenerse al margen de los problemas..., aunque éstos los busco bastante bien yo solita... - indica la cría mirando a Artemis y es que de todos, su opinión era la que más le valía.

El Hufflepuff iba a acompañarle, pero no solo eso, sino que además inventaría una excusa para intentar librarle de la bronca que pudiera darle Melker, añadiendo a Altair a la cocktelera, aquellos amigos suyos tenían mucho peligro pero eran amigos de verdad y así los sintió Kayla hasta el punto de no poder permitir que ellos se vieran involucrados en aquello.

- No podéis mentir por mi..., no está bien, si Melker se entera o lo intuye os castigará y eso no es justo... - comienza ella a decirles -...me sentiría peor si os regañaran por mi causa....

Seguía argumentando ella mientras era, literalmente arrastrada por Altair, la niña más insistente del mundo, y para que negarlo, una de las mejores amigas que se podía tener. Y con Artemis al otro lado, casi era imposible librarse de aquel encuentro.

Raven se ofreció también a ir con ellos y la Slytherin apenas pudo responderle, pero en su mirada casi había una súplica escrita en ella. Se sentía como oveja llevada al matadero.

Y así fue como Kayla Silver, acompañada, o mejor dicho escoltada por sus amigos, se presentó delante del profesor Melker y Rowle, pues estaban juntos. Al inicio la Slytherin sentía tanto pudor que no podía ni mirarle a los ojos, su comportamiento era inaceptable y lo sabía. Pero al notar el incómodo silencio decidió levantar la barbilla de manera orgullosa, aceptando lo que en definitivamente estaba deseando alargar, enfrentarse al problema....

- Profesor... Melker..., yo..., quería...., quería disculparme con usted....., por..., no asistir a su despacho.... - y ahora venían las explicaciones o los gritos, no sabía qué llegaría antes, viendo lo visto en su última clase.

- Ojalá, pero creo que ha sido todo lo contrario. Victoria, Raven vendrá el próximo día con nosotras.. Voy a hablar un momento con Kayla. Puedes venir, si quieres - le dijo Altair

La niña le sonrió a su amiga contenta de contar con otra chica más y de que ella fuera Raven, ya había coincidido alguna vez con ella en clases y le parecía una niña encantadora seguro que también podían ser buenas amigas. Iba a acompañarla pero le sabía mal dejar a Alen solo.

- Raven y yo nos caímos al río mientras intentamos coger agua, aunque eso de nadar suena muy bien. Una pena que el lago no sea un lugar muy recomendable para hacerlo tal vez... - intentó explicar Alen

Pero entonces Ruben se acerco y Victoria no supo reaccionar ante el "enfrentamiento" entre ambos, no se esperaba algo así, ¿apenas llevaban unos días allí y ya se estaban buscando líos? Sin embargo, Alen la agarró de la mano y la arrastró alejándose de Ruben. 

- Alen no te preocupes, es muy fácil juzgar a las personas sin conocerlas - intentó calmarlo, ella tampoco les conocía mucho a ambos pero prácticamente le era imposible pensar mal de los demás - Dale tiempo, de todas formas, deberías relajarte un poco... ya se que no es tu mejor momento pero... ten paciencia con la gente, yo siempre intento ver el lado bueno de las personas - le sonrió, miró a su alrededor y pensó que podían hacer, vio como Francis, su compañero de Ravenclaw examinaba el viejo Nogal quizás podían acercarse y charlar con él, eran de la misma casa y apenas se conocían, también vio otros grupos pero pensó que Alen no querría volver con Ruben, ¿o si? y finalmente divisó como Thad se alejaba un poco del claro - Bueno, ¿ya cogiste los ingredientes que buscabas? ¿Qué quieres hacer? yo ya terminé, no me quedan frascos asi que.... me da igual - se encogió de hombros.

Harold se alegró de ver a sus alumnos entretenidos recogiendo ingredientes e interaccionando entre ellos, y aunque se preocupó momentáneamente cuando dos de ellos resbalaron cayendo al agua, comprobó rápidamente que no se habían hecho nada y se relajó de inmediato. Hacía demasiado buen día para que aquello fuese una preocupación, e incluso puede que estuviesen mucho mejor que el resto de sus compañeros tras aquel chapuzón refrescante, en unas aguas tan puras y nítidas.

Rowle sacó las cochinillas y sus tres Bowtrukle no tardaron en acudir para tomar una buena porción, pero a ellos se unió un cuarto Bowtrukle, que hasta entonces había pasado desapercibido, y que era el guardián del nogal milenario.

- Este es Sphagnum, el Bowtrukle guardián del Nogal milenario. Ha diferencia de estos tres pilluelos que tengo como mascotas, está mucho más unido a su árbol y no le gusta separarse de él. No obstante, estos tres tampoco pueden permanecer más de dos días sin regresar a su árbol madre, forma parte de su esencia. Muchos Bowtrukle acaban durmiéndose eternamente si el árbol que custodiaban es arrancado, quemado o simplemente muere por vejez... les comentó tratándoles de explicar algo nuevo que saciase su curiosidad innata a esas edades. Cuentan las leyendas que antaño existieron unos ancestros primitivos de estas criaturas, de muchísimo más tamaño y envergadura, que también se les conocía como pastores de árboles, o "ents", pero se extinguieron pasada la segunda edad de los hombres, y hasta ahora no se ha vuelto a saber de ellos. Y os preguntaréis...¿Hasta ahora? ¿Es que han regresado? Y la respuesta es no, que sepamos. Pero muchísimos expertos vaticinaban el regreso de alguna de estas criaturas una vez se diese el Eclipse total de Sol más importante del siglo XX, que como algunos recordaréis, se produjo el 11 de julio de este año. Aunque de momento, no dejan de ser suposiciones...

Harold tenía conocimiento de que antaño hubo registros de que en el bosque prohibido existieron ents, y desde que ocurrió el eclipse, le gustaba explorar y merodear la zona. Era altamente improbable que encontrase alguno de aquellos seres que antaño poblaron y caminaron por los bosques, al igual que los ucornos, que eran muy similares en aspecto a los ents, pero que habian perdido la facultad de moverse, pero no por ello dejaría de intentarlo.

- Sea como sea, aprovechad para ver a un Bowtrukle cuidando a su árbol, es algo que muy pocos tienen la posibilidad de ver. Y nosotros, los artesanos de varitas, solo tenemos la posibilidad de extraer un poco de su madera si lo hacemos con respeto, ofreciéndole cochinillas o huevos de hada a su protector, y cerrando rápidamente la herida...

Y entonces visteis al profesor Rowle en toda su majestuosidad, como realizaba un corte exacto cerca del corazón del nogal, y extraía madera viva, que incluso brillaba por su pureza. Sin duda alguna, contenía muchísima energía mágica. Y tras aquello, cerraba la abertura con un hechizo, y vertía unas gotas de algún tipo de elixir restaurativo, ante la atenta mirada de Sphagnum, quién realizó un gesto de asentimiento y rápidamente se acercó a la zona, depositando sus múltiples dedos arbóreos.

- No miento al decir que unen bowtrukle puede arrancarte los ojos si maltratas a su árbol madre, así que siempre procurad el bien de todas los seres del bosque, ya sean criaturas mágicas o no... ¿Habéis apreciado lo hermoso que es Sphagnum? Está completammente recubierto de musgo, en concreto del género Sphagnum, de ahí que le diésemos ese nombre Ollivander y yo...

Tras aquello se sentó al lado de Melker y escuchó lo que le decía, eran comprensibles las dudas que le sobrevenian y que le había comentado, pero solo le aconsejo. 

- A veces, lo mejor que puede hacer uno es dejar correr el agua... Las respuestas suelen llegar solas, y creo que tu respuesta viene hacia tí... Solo se comprensivo, compañero. Y se levantó para beber un poco de agua y pasear. 

Entonces, cuando apenas había dado tres o cuatro pasos, advirtió algo que le puso sobre aviso...

Escuchar al profesor Rowle siempre era muy interesante, después de recoger las hierbas me senté con la piernas cruzadas cerca del arroyo para oír toda la explicación además era interesante en especial el apartado de los ents, jamás había escuchado de ellos, así que puse especial atención a ello, me pregunto si serían igual que los Bowtrukle, o tendrían una apariencia más espectacular, aun así  me moría de curiosidad por saber más del tema,

Tire de Victoria en una dirección aleatoria hasta que ella misma hablo, momento en el cual me pare pero sin soltarle la mano.

- No ha sido para tanto solo le he dicho en que estaba equivocado, el problema es suyo. Ni siquiera entiendo a que ha venido eso, es decir ni siquiera le conozco supongo que estará resentido por algo -mire alrededor sin saber que hacer hasta que vi a otro Ravenclaw que no conocía- Ese chico de allí, no le conozco aún tu lo conoceras ¿no? ¿Nos presentas? 

Pero en ese momento empezó a hablar Rowle y atendí a todo lo que dijo, la herbología no es que fuera de mis asignaturas favoritas pero se notaba que el profesor hablaba con pasión así que lo mínimo que podía hacer era atender a lo que explicaba, además ¿quien sabe? A lo mejor algo de todo esto era útil para un futuro, además ya había sido suficiente con no entender nada de lo que dijo justo al final de la clase como para encima no escucharle ahora. Ya luego Vic me presentaría a ese Ravenclaw. Me acerque mas cuando extrajo la madera del Nogal, era mas que evidente la magia que desprendía, no por nada era material básico para muchas varitas. Pero luego empezó a divagar y a hablar sobre cosas de poco interés por lo que ya no valía la pena seguir prestando tanta atención.