Partida Rol por web

No podía entender con Daniel hace unos momentos era bastante amigable conmigo ahora simplemente me estaba amenazando no creí que fuera justo que me tratara de tal forma pensé en enojarme e intentar que se disculpara pero en vez de me desanime pensando que quizás La Dama Gris tenía razón y yo no merecía estar aquí junto aun asi no queria aguantar eso ,mire a Daniel y quite sus manos de mis hombros.

Cuando Ginevra hablo enojada me sacó de mis pensamiento a parecer ella me consideraba su amigo aunque parecía no estar bastante cómoda con lo que decía era obvio no quería ir junto a Alen o Victoria y ahora mucho menos con Daniel y los profesores ya estaban en su propio mundo -Ya deberían dejar de pelear La Dama Gris ya dijo cómo debíamos irnos y si no les gusta vuelvan por donde vinieron- debía ayudar a mi amiga de alguna forma -Claro que es seguro Dumbledore jamás nos haría nada peligroso ven subamos al bote- le extendí la mano a Ginevra esperando que aceptara ir conmigo en ves de ir sola.

Victoria fue todo el camino en silencio con Alen, siguiendo y escuchando al fantasma y algunos retazos de las conversaciones que junto a ellos mantenían, no dio importancia a ninguna de ellas puesto que ya estaba cansada de tanta estupidez, se había apuntado a la prueba para pasar un buen rato y no iban a fastidiárselo.

Mientras caminaban en dirección a su destino, el fantasma dedicó unas duras palabras al grupo que no fueron del agrado para ninguno, o eso suponía, ya que al menos para ella no lo fueron, aunque intuía que la Dama no se equivocaba, a nadie le hubiera gustado escucharla, sin embargo era un fantasma triste e inteligente, como buena ravenclaw, por lo que Victoria la escuchó sin decir una sola palabra quizás en otro momento podría conversar más extendido con el ente que tan interesante le parecía.

Al llegar al final de su camino, la Dama Gris les indicó que debían subir a unos botes que los llevarían a algún lugar y así continuar la prueba. La pequeña ravenclaw se sintió algo incómoda puesto que le había asignado un bote con Daniel de compañero, y no porque a ella le molestara ir con el gryffindor, a quien consideraba un buen chico sino porque no se le había escapado que él no quería estar cerca ni de ella ni de Alen, además de que lo había visto bailar con Carrow, tan felices que Victoria pensaba que no era una situación cómoda para ninguno de los dos. Sin embargo, aquello era un juego, y ella se había apuntado para jugar y divertirse, pasar una emocionante aventura junto a sus compañeros y si la Dama había indicado aquello ella seguiría las instrucciones.

La niña fue a soltar la mano de Alen para dirigirse hacia el bote sin rechistar, pero él la apretó en aquel instante y la pequeña paró confusa. Él dejó suficientemente claro que no se iban a separar, lo que a Victoria le agradó puesto que era lo que le había prometido en el baile hacía apenas unos minutos y le sonrió con afecto, pero aquello era un juego, y aunque no les agradaba a ninguno debían seguir las instrucciones, aunque ella no quería dejar a Alen sólo…  no porque no lo considerara capaz sino porque quería ir con él simplemente.

Después todos comenzaron a manifestar sus opiniones y Victoria los miró con una mueca de incredulidad. ¿Estaban discutiendo por quien iría con quién? No se le escapó que Daniel prefería ir con Alen y dejarla a ella misma sola, no le importaba, ella no tenía miedo, podía ser pequeña pero no era una cobarde después de todo lo que había visto en esos meses en Hogwarts, pero le pareció un acto muy despreciativo hacia su persona y como, después trataba a la otra chica cual perrillo indefenso de su propiedad. Victoria escuchó sin intervenir y cuando todos hubieron hablado lo hizo ella misma.

- Se que hemos prometido no separarnos Alen, pero esto es un juego al que nos hemos apuntado y debemos seguir, todos, las reglas – dice volviéndose al resto – evidentemente como Francis dice, Dumbledore no dejaría que nos pasara nada, sin embargo no me gusta que a él – señala a Alen - le hallan asignado ir solo, se que puede cuidarse bien, todos y todas podemos – matizó el todas, ya estaba cansada de que las consideraran menos capaces a las dos niñas por ser justo eso, niñas – aquí todos tenemos los mismos conocimientos mágicos y somos igual de capaces, pero ninguno quiere dejar a nadie solo... aunque me ha quedado lo suficientemente claro que Anderson no me quiere en su bote. - dice tranquilamente dejando claro que esto no le quita el sueño pero refiriéndose a él por su apellido cosa que nunca antes había hecho con él - Señorita Foxier, - alza la voz llamando la atención de los dos profesores que con su coqueteo parecían no haber advertido el “problema”, puesto que sino aquella discusión no acabaría nunca ya que la Dama había dejado claro que no le importaba lo que hicieran y ya se había marchado - ¿Podemos ir los 5 en dos botes? 2 y 3, así ninguno iría sólo y todos estaremos conformes.

No sabía porque ninguno de ellos había valorado aquella simple y lógica opción. Victoria espera que alguno de los profesores responda, aún agarrada a la mano de Alen olvidando por un instante sus problemas y acariciando el dorso de la mano de él con su dedo pulgar para transmitirle serenidad.

El fantasma no solo escuchó los comentarios de queja de Alen sino que Anderson se sumó a la negativa de ir en la barca con quien no deseaba, no se resistió a decir unas palabras a todos aquellos que aún no se habían subido a los botes.

- Desdichados sois, pues fracasáis en la prueba de valor tan solo en el primer paso, sentaros al lado del compañero que puede distorsionar vuestra visión. En todo siempre hay un porqué y los sitios han sido dados, mi permiso no tenéis pero cambiad las posiciones si lo deseáis, no está en mi mano impedirlo, como ya he comentado..., pero no lo apruebo, y acorde a ello os enfrentaréis con vuestro destino.... Nada de lo de aquí es negociable..., participad o marchaos ahora que estáis a tiempo.

Y por más que los alumnos le hablasen, llorasen o se precipitasen al lago... El fantasma no les diría absolutamente nada más.

La bonita docente estaba tan absorta en los ojos de Melker que no se percató del problema de los botes con los alumnos. La llamada de Sinclair hizo que girase el rostro hacia los niños y suspirase como sin creerse lo difícil que hacían todo. Sacó la varita y se apuntó a la garganta para transmitirles su opinión en un tono de voz elevado, ya que la distancia podía dificultar la audición, y ella no era una ordinaria, no chillaba nunca.

- Ya sé por mis clases de pociones que les cuesta seguir los pasos que se les marcan..., pero al igual que ni el profesor Westerberg y ni yo hemos cuestionado absolutamente nada y obedecemos, no entiendo que vosotros llevéis la contraria... No obstante ya habéis escuchado a la dama gris, haced lo que consideréis, el perjuicio será para vosotros si no seguís las normas... Esta no es una clase mía, no pienso obligaros a que os pongáis con uno u otro compañero, actuad como adultos y elegid.

Mira a Melker negando con la cabeza.

- Lo que me molesta de verdad es que me llamen a mi y no a ti..., si tu eres el simpático... - bromea Cyllene marcando unos graciosos hoyuelos en las mejillas -... mucho me temo que van a tardar siglos estos niños en decidirse a qué barca subirse... - indica la mujer encogiéndose de hombros -... bueno, más tiempo para nosotros....

Como es que algo que empezó también termina terriblemente mal, de ser una prueba de valor esto se había convertido en una prueba de resistencia y la cual la había perdido, Ginevra tenía razón me había pasado con los comentarios, de hecho no debí decir tan rudas palabras a Francis, el chico no se había comportado agresivo y al contrario me había animado a decir mis sentimientos a Gin, pero al final el monstruo de los celos había actuado y me había comportado como un patán.

Las palabras de Gin fueron rudas pero precisamente era las que necesitaba para  seguir cometiendo errores, aun así estaba molesto  - No es necesario yo iré solo, no tengo problema en ello- conteste con las mejillas  rojas - creo que los novios merecen ir juntos como dijo Gin...Ginevra, no creo que afecte mucho si voy solo de todas maneras da  igual esto es un juego- de verdad que hacía el esfuerzo por evitar una discusión.

La dama Gris y la profesora Foxier explicaron por que debíamos ir juntos, sin embargo no le daba mucha importancia, me arriesgaría mejor a ir solo y lo que pasara, que al juego, esto había dejado de ser agradable, - Esta bien, subiré al bote- dije algo molesto mientras  seguía las indicaciones del fantasma.

-Victoria no tienes que subir conmigo si no lo deseas ve con Ryder, la verdad es que me da igual ir solo- le dije a la chica antes de abordar.

Puede que ahora había sido impulsivo y dicho lo primero que se me paso por la cabeza pero como buen Ravenclaw escuche lo que todos tenían que decir y sopese todos sus comentarios pensando detenidamente la situación aunque no daba la impresión al resto de estar haciéndolo, todos tenían sus opiniones diferentes, todos sus formas de pensar y todos sus razones pero al final mi decisión se baso principalmente en una sola cosa y eso fue lo que dijo la Dama de Lago sobre que sentarnos en otro lugar afectaría a lo que viéramos durante el viaje y aunque seguía sin creer que ella supiera nada sobre nuestras situaciones personales tenía curiosidad por saber si había preparado cada viaje para cada persona según sus miedos o según sus problemas. Suspire me pase la mano por la frente y finalmente de un salto subí al bote que me fue indicado para viajar solo, entonces mire a Victoria y a Dani.

- Yo voy solo, como dijo Vic esto es un juego y fue pensado para que fuéramos en el orden que nos ha sido indicado así que debemos respetarlo ya que supongo que todo lo que pase a continuación a sido pensado para que viajemos así... nos vemos al otro lado -me agache y empuje un poco para despegar el bote de la costa, era hora de ver que me tenían preparado

- Bien, considero que es lo más lógico hacer caso a la Dama. Anderson nunca he dicho que no quiera ir contigo, has sido tú quien no quería, a mi no me importa, así que subiré al bote que nos han asignado. Alen... ten cuidado - dice y le guiña un ojo mientras se encamina a subir al bote que la Dama Gris le indicó en un inicio y espera a ver que hace Daniel.

-Como gustes- Aborde el bote esta vez ya no comenté nada, solo quería que esto terminará e ir a los dormitorios, como algo que había empezado tan bien, se había convertido en esto era algo que no comprendía, decidí volverme a colocar la mascara de lobo, después de todo era mucho mejor, así nadie sabría si lloraba, sonreía o estaba asustado, aunque ya poco me importaba lo que pensaran los demás, la única opinión que me importaba ya la había escuchado.

La Profesora Foxier no se acobardó ante la propuesta del Profesor Westerberg de olvidarse de la prueba y disfrutar simplemente de un paseo en barca bajo la luz de la luna. A Melker no le importaba el juego que le tenía preparado la Dama Gris, y mucho menos después de lo que había dicho sobre ellos ¿Quién era ella para saber si el Profesor era desdichado o no? Le demostraría que era feliz siguiendo su propio camino. - Entonces disfrutemos de un bonito paseo nocturno Dijo separando el bote del amarradero ayudado con el remo - ¿De verdad no sabes nadar? Eso tenemos que solucionarlo Le parecía curioso que no supiera, ya que siempre había creído que era algo que los padres enseñaban pronto a sus hijos. - ¡Claro que sé! Y este agua no está nada fría Dijo al recibir el salpicado - En Suecia es tradición hacer agujeros en el hielo y que los padres metan dentro a sus hijos sujetándoles por los tobillos. Justo después de contar eso, se dió cuenta de que fuera de contexto podría sonar hasta cruel - Luego vas corriendo a la sauna y la sensación es increíble.

Cuando se empezaron a alejar, los alumnos llamaron la atención de la Profesora Foxier y Melker frenó la barca para que ella pudiera resolver su duda. Entendía que los jóvenes querían elegir con quién ir, pero tenían que comprender que el juego tenía esas reglas y si querían participar tendrían que acatarlas. -¿Yo soy el simpático? No creo que todos opinen lo mismo Había tenido muchos roces con los alumnos, y sabía que si no fuera por que su asignatura era de las más populares, no caería igual de bien a los jóvenes.

- Esperamos a que suban y se encaminen ¿No? Melker no confiaba mucho en dejar a los chicos solos, y mucho menos después de lo que había pasado a principio de curso con los dragones.

Melker prepara la embarcación bajo la atenta mirada de la profesora de pociones, la cual no perdía detalle del movimiento masculino hasta el momento de zarpar, justo cuando el docente se sorprende de que ella no supiera nadar.

- De verdad..., no sé nadar..., y quizás sí debamos solucionarlo pero no hoy..., por favor... - comenta con media sonrisa observando de reojo las negras aguas del lago, aquellas que le deban cierta inseguridad, mientras escucha las vivencias que los niños de Suecia tenían cuando aún eran muy pequeños -...yo creo que prefiero quedarme con la sauna..., no llevo nada bien eso del frío...., jamás me he metido en un lago ni nada por el estilo... - Cuando Melker indica que las aguas del lago no estaban frías le hizo determinar a Cyllene que aquel varón podía resistir muy bajas temperaturas sin apenas pestañear, algo a lo que Foxier no estaba acostumbrada.

Y si Cyllene se centraba en el hecho de nadar, sólo el pensar en quedarse en traje de baño delante de él le hacía encender sus mejillas, pero eso fue algo que no verbalizó, aunque el color de su rostro aumentase varios grados.

- Oh sí..., de esta barca tú eres el simpático... aunque por lo visto no tenemos nada que hacer si nos comparamos con Rowle o Dumbledore... - indica la mujer con una sonrisa -... bueno, en mi caso le acharé la culpa a mi excelente pero muy británica educación..., ¿cuál es tu excusa?.... ¿Los norteños son hombres fríos?.... - la mirada verde y traviesa de la dama buscan los ojos masculinos, obviamente provocando una nueva pullita entre ambos. Últimamente la profesora bromeaba mucho más con Melker, siendo más natural en sus actuaciones con él, cualquiera que les viese tendría claro algo, ella no dejaba de mirarle, lo que dijera u opinase tenía mucho valor para la fémina.

- Deberíamos..., ni se han subido aún..., esperemos a que se encaminen y dejemos que la magia les haga seguir la ruta que deben...., no deberían surgir problemas dentro del castillo... ¿no?.... - la mujer no había vivido los ataques al castillo, y a pesar de conocer el hecho, no podía siquiera imaginar lo peligroso que había sido el ataque del dragón, la contrariedad de los unicornios muriendo, la desazón de que ninguna criatura se comportaba como debieran, acorde a su naturaleza -... de todas formas es una prueba de Halloween, si quieres estamos cerca de ellos, pero debemos dejar que resuelvan las situaciones solos, si no..., no estaremos ayudándoles en absoluto..., sino enseñándoles a ser dependientes de los demás....

La bonita  profesora suspira de nuevo tras ver que no se subían a la barca aún

- De verdad menos mal que no son tan lentos en mi asistencia a clase, o ya les habría quitado puntos de las casas... - indica la mujer cruzándose de brazos, observando a los niños como pollos sin cabeza, mirando las barcas sin lanzarse aún a la aventura de navegar.

Melker dejó de bromear cuando Cyllene le confirmó que no sabía nadar e intentó tranquilizarla - Bueno, yo te enseñaré en otra ocasión. Nunca había enseñado a nadie a nadar, pero no pensaba que fuera muy difícil. Lo que sí que tenía claro, es que no usaría el método de su padre, lanzarla hasta la mitad del lago para que intentara regresar a nado por instinto de supervivencia. - Si lo haces bien, daré cincuenta puntos a Slytherin Dijo volviendo a bromear - ¿O prefieres a Ravenclaw? Teniendo en cuenta su casa de estudiante - Y tranquila, que en Suecia te cansarás de saunas. Prácticamente cada casa tiene una propia. Prefirió omitir por el momento que en Suecia lo normal era entrar desnudos en la sauna, aún siendo mixtas.

Sabía que no podía competir en simpatía contra el Profesor Rowle ni contra el Director Dumbledore, aunque en su defensa él llevaba muchos menos años de Profesor y eso era un plus para ellos. - Pero nosotros somos más guapos No solía ser muy bromista, pero con Cyllene le salía ese lado humorístico - Si que son fríos y serios los norteños, pero yo no salí así. Quizá mi vena rebelde se manifestó siendo más cálido y sonriente que mis paisanos. Si no fuera que él se parecía mucho a sus padres físicamente, habría jurado que era adoptado por la forma de ser. En cambio Gunnar era lo opuesto a ellos físicamente, pero igual en personalidad.

Mientras esperaban a que los alumnos se subieran a las barcas, Melker sacó los remos del agua y los cruzó enfrente suya para descansar los brazos - ¿No sientes curiosidad por lo que había preparado la Dama Gris para ti? No quería que su decisión de rebelarse contra la fantasma perjudicara a la Profesora Foxier, por eso le preguntó si estaba segura de seguir adelante o no.

todo había sido un verdadero desastre, la noche había empezado muy mal y seguía sin repuntar. Ginevra suspiró profundamente, por lo menos los niños habían comprendido la finalidad de haberlos separado de esa forma y Daniel también se había dado cuenta que su actitud había sido pésima. La niña se quedó mirando a Francis, le agradecía que no se hubiera molestado aun más con Daniel, o que por lo menos, no lo hubiera hecho tan patente, así que una vez que todo eso se arregló, Ginevra tomó la mano de su amigo y subió al bote, no sin algunos problemas, pues el hecho de que se moviera tanto, le dificultó algo al principio, recordando el día en que había llegado, pero ahora iban a ir en una prueba que no sabía que tanto de juego tenía.

Mientras esperaban, los ojos de Ginevra se quedaron mirando a Daniel, al que le regaló una pequeña sonrisa, el chico sí que se había pasado, pero pronto comprendió que no era necesario todo lo que había hecho, esperaba que pudiera solucionar su problema con Sinclair, porque ella parecía muy ofendida de que la hubiesen querido mandar sola.

Por otro lado, aún podían escuchar el constante coqueteó de los adultos, la chica miro a Francis y torció el gesto, ya estaban arriba de la barcaza y comenzaría la prueba, ella se quedó en silencio, y esperó poder tomar algo de distancia del grupo para hablar con su compañero, aunque quizás a susurros no podría el resto oír. 

— disculpa a Daniel, se puede poner muy tonto.. a veces — estaba enamorado de ella, y luego de lo que había hecho, estaba dudando de que la pócima de Foxler le hubiera hecho efecto realmente, la chica se encogió de hombros y le susurró un poco más a su compañero — hiciste un gran trabajo en el coro, cantas hermoso, Francis — le sonrió ahora mirándolo a la cara, sus cuernos le daban un aire extraño, sin lugar a dudas el haberse disfrazado del hada Maléfica se había concedido mucho con su propia naturaleza, entre peligrosa y hermosa. 

Daniel sube al bote y Victoria sube detrás de él poniendo cuidado de no caerse. Por fin se había solucionado todo, ¿cómo algo tan simple les había hecho “discutir”? Victoria esperaba que no volviese a repetirse pues no le gustaban los problemas. Se sentó en el bote y un escalofrío la hizo estremecerse a causa del frío que hacía junto al lago ¿por qué no había elegido un vestido más largo para la fiesta?

La pequeña agarró uno de los remos y le tendió uno a su compañero, entonces pudo ver que él se había puesto la máscara de su disfraz.

- ¿No crees que así te será más difícil ver? – le dice amablemente intentando romper el hielo que se había formado entre ambos – Venga, ayúdame – dice y se pone a empujar el borde del muelle con el remo para zarpar, una escena algo cómica teniendo en cuenta el tamaño de la niña y el del remo que sostenía.

-Vale te ayudo- tome los remos del bote, aunque la verdad no tenía muchas ganas -Puedo ver bien, al menos lo suficiente, papá es bueno haciendo máscaras y trajes- conteste, mire como sostenía el remo, me parecía bastante curioso, -Oye lo estas haciendo mal trata de sujetarlo mas firme- le dije, por lo general cuando iba de visita a casa de mis primos pasear en bote era algo común, igual un poco de canotaje , incluso cuando estuve en el campamento Happy Oaks se había practicado,  las niñas exploradoras sabía remar mejor acaso los ingleses no tenían sus exploradores.

Victoria no puede aguantar la risa al sentirse tan torpe.

- ¡Cielos no tengo ni idea! Nunca hice esto antes, de hecho.. ¡creo que el Quidditch es el primer deporte que practico!

El bote de los niños por fin zarpa.

- Veamos que nos tienen preparado.. 

Increíble pero cierto. Tras el tiempo invertido en la decisión surgen historias tan míticas como "Me subo o no me subo a la barca", o la versión casera de "Quién maneja mi barco", quizás una interesante reproducción  de "Vacaciones de amor en el lago", y eso sin olvidar la fantástica "No sin mi veela"... Solo la magia impediría que se repitiera la segunda parte de Hogwarttitanic, no lo quisieran los dioses..., ni la dama gris, por supuesto.

Cuando Melker deja de remar el mismo bote toma su propia iniciativa, comenzando a navegar rodeando los acantilados cercanos al castillo, alejándose de las barcas de los alumnos, tan solo las acciones del remero podrían determinar un cambio de dirección y rumbo.

El bote de Gin y Francis se dirige hacia el centro del lago, tomando una velocidad considerable, como si la distancia que debieran de salvar fuera mucho mayor que la de los demás. En la lejanía a donde se dirigían había neblina, bruma, bastante frescor. La humedad ambiental se pegaba en la piel y el sonido de las olas al chocar contra el casco se intensificaba, a un ritmo frenético, constante. Ponerse en pie podía significar acabar en el agua.

La barcaza de Victoria y Daniel comienza su avance, más lento y continuo, pero en dirección contraria a como debiera circular aquel medio de transporte, siendo la popa quien marcaba el rumbo, yendo ambos alumnos de espalda, alejándose de todos mientras los ojos de sus ocupantes quizás se perdieran en la lejanía, los de Daniel puede que al centro del lago, los de Victoria, quizás hacia el frente donde quedaba apostada la barca de Alen.

Y allí quedó Alen Ryder, justo al lado del puerto, en aquel sitio sin apenas desplazarse, siendo su bote mecido por una leve ráfaga de viento. Todos se alejaban de él, no avanzaba ni a un lado, ni al otro. Aquella broma parecía de muy mal gusto, quizás y solo quizás, el Ravenclaw no tuviera dónde ir....

-Pero que ocurre- dije contrariado al ver como la barca se alejaba en dirección hacia la orilla contraria o hacia donde querían llevarnos los fantasmas, era bastante curioso por los ojos de la mascara pude apreciar una sonrisa pequeña de Ginevra, eso era un indicación para seguirla o era una señal de que debería  remar en su dirección era tonto y a la vez arriesgado pero recordaba lo que habían dicho los fantasmas si intentábamos cambiar la dirección del bote puede que sería peligroso así que preferí hablar con ella después si acaso había un después.

-¿Estas Bien?- le pregunte a Victoria el movimiento nos había sorprendido y ahora vagamos quien sabe por que parte del lago.

Cyllene escuchaba las propuestas de Melker sobre enseñarle a nadar, riéndose con ganas cuando le indica que le daría 50 puntos a su casa si lo hacía bien, la broma le resultaba tentadora y no perdió la oportunidad de ser un poco más atrevida de lo habitual. Solía jugar con las miradas, pero esta vez, las palabras darían un añadido a sus propios gestos.

- Vaya..., me está resultando sumamente tentadora tu propuesta.... Si lo hago bien... sumarías 50 puntos a una de las casas que represento... - se aparta del rostro sus cabellos, los cuáles se alborotaban un poco con la brisa húmeda del lago -... por supuesto la casa beneficiada sería Ravenclaw..., siempre Ravenclaw.... - y es que aunque estuviera controlando Slytherin, ella siempre sentiría afinidad por aquellos que llevaban la inteligencia por bandera -.... pero...¿y si lo hago mal profesor?... ¿me castigarás?.... - se muerde el labio en una actitud provocativa, y da un paso más al coqueteo -...¿cómo?....

Los ojos verdes de la mujer no perdían detalle sobre las pupilas del varón, y es que si en algún momento Melker tuviera duda sobre los intereses femeninos, tendría ahora claro que el acercamiento de ella tenía un firme propósito. Le gustaba y no tenía reparos en mostrarlo, algo que no evidenciaba con nadie más.

- Tienes razón, somos más guapos..., sobre todo tú.... - le guiña un ojo -... vaya, bueno es saber que no eres frío, pero en mi tierra siempre se ha dicho que de lo que te jactas, has de demostrarlo... -¿otro reto?....

La barca comenzaba su avance por los acantilados del castillo, sin separarse demasiado de las zonas donde las rocas sobresalían, maniobrando mágicamente para no chocar contra ellas. Melker le hace una pregunta con una respuesta muy clara por parte de Cyllene.

- El reto de la dama gris sí me da curiosidad..., pero no muero por ello...., al fin y al cabo hay tiempo para todo..., podemos pasear a nuestro libre albedrío si lo prefieres, unirnos a nuestros alumnos.... - mira las diferentes direcciones que toma cada barcaza -... aunque la pregunta sería con quién, hay tres líneas diferentes a la nuestra....- o simplemente dejarnos llevar por la magia.... Tú tienes los remos..., decide si quieres usarlos, o prefieres sentarte a mi lado, en vez de enfrente mía mientras nos dejamos llevar.... - dice más seria -... sea como sea, yo estaré bien..., voy contigo....