Partida Rol por web

-¿I-i-indice guiado? ¿Página concreta? ¿D-de qué hablas? -dijo Aida, muy asustada, a la arañita sobre su hombro- ¡N-no lo haré! ¡Está brillando! ¡Definitivamente explotará!

Entonces las chicas llegaron, aunque Aida estaba demasiado asustada como para sentir alivio. Ocultándose detrás de Renata se quedó mirando el libro, curiosa de lo que sucedería.

Etna llega a la biblioteca y se encuentra aquella escena, además había alguien más Sayaka que parecía había llegado allí con las demás. Al ver cómo estaban asustadas las tres por el libro suspira y dice mientras mueve la mano:

¿Qué estáis haciendo?... No me digáis que os da miedo un índice auto guiado…

Decía en un primer momento sonriendo y ahora riéndose abiertamente:

Jajaja… os habéis asustado de un hechizo para encontrar la pagina porque brilla… jajaja… que inocentes… pero si eso es una tontería

Decía mientras se acercaba al libro para ver que habían estado buscando y demostrarles que no pasaba nada

Sayaka se quedo con los ojos abiertos como platos cuando escucho la explicación y la burla de Etna a la cual dice:

Hey… no te rías… seguro que en una situación así actuarias igual

Decía bastante molesta, no sabía quién era esa chica pero no le gustaba demasiado como estaba actuando, así que se acerca a Renata y a Aida y les ayuda mientras dice:

¿Estáis bien?

Cuando llegó, Aetheldryd observó la escena peculiar con una mezcla de alivio y preocupación, aunque le costaba entender por qué las chicas se comportaban así con el libro que era bastante inofensivo. Lo comprendía de Renata y Sayaka porque era nuevas.... pero de Aida... 

-Aida, lo que te dice la araña es verdad...-comentó aún comprendiendo lo que pasaba y Etna aclaraba el malentendido. No pudo evitar sonreír levemente por la actitud de la demoniza y terminó de acercarse al grupo para cerciorarse de su estado-. ¿Están bien? El libro se ilumina así cuando ocupan usar su índice... no es nada del otro mundo en sí-se encogió de hombros y miró a todas-. El incidente de los soggoths ha terminado... todo está bien.

Recordar el origen liberó una ira momentánea en su mirada, pero se obligó a cerrar los ojos y controlarse.

-Primero relájense y luego les explicamos qué sucedió. ¿Necesitan algo el libro? Ahora que saben cómo funciona, solo pidan qué requieren leer-invitó con una sonrisa afable, aunque se podía ver que intentaba calmarse por algo.

 -Diles que busquen el conjuro para hacerme más fuerte. O al menos más grande o glamuroso. Que aunque los soggoths ya no estén, tener un amigo fuerte nunca viene mal.

La arañita se movió de uno de tus hombros al otro, emocionada. ¡Que le hacía ilusión ser una criatura mejor!

Las más observadoras os fijasteis en que la arañita de Aida se estaba venga a mover de uno a otro de sus hombros. Parecía que estaba hablando con ella, pero no conseguíais oír nada. ¿Sería algo referente al libro?

Todo había dado la vuelta tan rápido que Renata no sabía si reír o llorar, la sensación de impotencia le pego demasiado fuerte y su cuerpo temblaba como resultado de tanto estrés en tan poco tiempo.

-Estoy bien, es solo que… pasaron muchas cosas.

Aunque intentaba ser valiente, sus manos se movían como gelatina, aunque ella parecía normal en su modo de actuar.

-¿Y qué dice el índice?

Pregunto ya que no sabía lo que la arañita y el libro intentaban decirles.

Cuando Etna se burló de ellas, Aida se puso roja hasta las orejas, sin dejar de ocultarse detrás de Renata. Estaba desconcertada y ahora se escondía solo de la vergüenza. Sayaka les habló y Aida apartó la mirada, demasiado avergonzada para contestar. Que Aetheldryd confirmase eso hizo que las orejas de Aida cayeran y que la chica se agachase, poniéndose las manos en la cabeza. ¡Había sido demasiado inocente! ¡Quería volverse bolita! ¿El índice? ¿¡Solo era el índice!? Le alegraba que el incidente hubiese terminado, pero...

-Tierra, trágame -Aida se corrió la capucha, tratando de cubrir su cara enrojecida. Fue entonces que la arañita le habló y, ante la pregunta de Renata, decidió contestar, sin destaparse el rostro-. L-la arañita dice que busquemos un conjuro para hacerle más fuerte... o-o más grande y glamuroso. 

Aetheldryd sonrió levemente al ver a las chicas dudosas sobre la habilidad del libro, sabiendo que la magia podía tener una perspectiva buena o mala, dependiendo del punto de vista. Concluir eso provocó que perdiese aquella curva en sus labios y se acercó a las chicas para explicar.

-Entonces di eso, Aida. Toma el libro y pide el hechizo, sé lo más exacta posible para que no vaya a confundirse y a ver si está aquí o no. Anda, inténtalo-motivó a la peliblanca con mirada afable y luego vio a Renata para luego ponerle una mano en el hombro de la rubia-. Las clases tardarán en retomarse, así que pueden descansar. Solo que cuando venga el Bibliotecario guardemos silencio para no molestarle. 

 -Busca un conjuro que fortalezca familiares invocados. No te vas a arrepentir de esto, Aida. ¡Pronto tendrás al compañero más genial de toda la academia!

Y la arañita no podía esperar para ver su nueva apariencia. ¿Sería más alto? ¿Con cara mejor definida? Ay, si le salieran pómulos se moriría de la felicidad...

Renata trataba de mostrarse con el temple firme, pero veía de reojo a Aida, se veía tan preciosa tan apenada, pero sabía que ella misma estaba así de avergonzada por dentro.

 -Yo pensé que nosotras invocaríamos algo.

Dijo en un intento de broma a la arañita y viéndola con la intensión de que ella le siguiera el juego, aunque debido a su falta de interacción con otras personas, aquello parecía bastante difícil.

-Bien, Aida tu guías –No la empujo al frente, le gustaba tenerla detrás suyo, era algo egoísta pero quería darse ese pequeño lujo. Yo optaría por la eficiencia en vez del glamour.

Sayaka mira algo molesta a Etna, lo cierto es que no conocía a esa chica, pero no le caia muy bien ya que se había reído de ellas. Se acerca a Aida y a Renata y dice:

Bueno, no os preocupéis… ¿puedo ayudaros en lo que estabais haciendo? Yo no soy una gran conocedora de la magia ni una erudita de ella y me gustaría saber un poco más, a ver

Decía mientras miraba con curiosidad y movía su cola de un lado a otro para mostrar esa curiosidad que sentía por lo que sus amigas estaban haciendo en ese momento.

¿Que tomase el libro después de todo aquello? Imposible. No, no, ella definitivamente no lo haría. Estaba tan avergonzada que ni siquiera miró a Aetheldryd cuando se dirigió a ella, manteniendo su capucha lo más baja que podía. Sin embargo, al menos se sentía reconfortada por tener a Aetheldryd, a Renata y a Sayaka allí y que, además, no se estuviesen burlando de ella.

-S-s-s-s-sayaka. L-la arañita dice q-que busquemos un conjuro que fortalezca familiares invocados. Lo siento... ¿p-podrías encargarte tú? Yo... todavía no tengo ganas de moverme de aquí -y sus orejitas cayeron un poco más.

Etna observaba la escena con cara de aburrimiento mientras dice:

¿Para fortalecer familiares? Esa cosa… ¿es tu familiar?

Decía acercándose un poco a Aida y señalando donde debería estar la araña. Etna mira con cierta desconfianza y dice mientras prácticamente quita el libro de las manos a quien lo tenga:

Mira se hace así… libro, muéstrame rituales para poder fortalecer a familiares…

Decía con un tono ciertamente grandilocuente y como dándose cierta importancia

Renata solo podía inflar sus mejillas aguantando un puchero en contra de Etna, su actitud no le molestaba pero aquel momento no era el mejor ya que su temple se había caído con el asunto de las bestias mágicas.

-Tranquila –Le susurro a Aida cuando vio ele estado de sus orejas, buscando un poco de apoyo en Sayaka o Aetheldryd. Estamos todas bien, y seguiremos así.

Tenía curiosidad en preguntar al libro sobre como invocar un familiar, pero debía ser considerada con sus compañeras.

Al escuchar la orden de Etna, el libro empezó a mover las páginas buscando el conjuro adecuado a la petición de la diablesa. Al cabo de unos instantes, el libro se detuvo en el aire, abierto en una página doble en la que podía leerse "Fortalecmiento de Familiares en cinco pasos".

En las páginas estaban escritos los cinco pasos con todo lujo de detalles. El primero consistía en conseguir un caldero del 10 y ponerlo al fuego alimentado con madera de acacia, el segundo consistía en llenarlo de agua y diversos ingredientes, el tercero en llevar la mixtura a punto de ebullición, el cuarto servirlo en un plato de cerámica con cilantro para decorar y el último en dárselo de comer tibio al familiar. Reconfortante y fortalecedor con sabor a cacahuetes.

La arañita hizo un ruidito emocionado al leer el conjuro.

 -¡Ese! ¡Ese suena bien! Podríais hacerlo y fortalecerme. Piensa en las ventajas. Tendrías un buen amigo que da unos consejos excelentes y además lo bastante fuerte como para protegerte de futuras amenazas.

Renata pareció mirar con extrema curiosidad el libro que aun sabiendo en teoría como funcionaba, le extrañaba demasiado.

-Lograr fortalecer un Familiar…

Las instrucciones parecían fáciles, en primera ella quería obtener un familiar, pero también le daba curiosidad un nuevo tipo de hechizo u magia.

-Creo que podemos hacerlo todo ahora… -Dijo mirando a los alrededores, eran cosas sencillas y la magia siempre le había parecido similar a cocinar, un poco de rana, una pizca de sal, menear en sentido cardinal, etc. ¿Lo intentamos?

Dijo viendo a sus compañeras, aunque su mirada se detuvo en las orejas de Aida y Sayaka.