Partida Rol por web

El Despacho del Director es la oficina de Castillo de Hogwarts en la que los directores o Directoras del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería trabajan durante el año escolar. Se encuentra ubicada en la Torre del Director. Aunque esto nunca se menciona, es probable que la residencia del director se encuentra junto a la oficina. Se accede a ella por medio de una escalera de caracol de piedra en movimiento, que a su vez está oculta por una gárgola en el tercer piso. La gárgola se hará a un lado en respuesta a una contraseña.

Durante la clase de Historia de la Magia se me adelantaron a  responder  las preguntas del profesor y casi no pude participar, pero en el trabajo que nos mandó tenía la oportunidad de impresionarlo. El problema era como hacerlo, encontrar la forma de hacer algo diferente a los demás. 

Por suerte, en un momento de iluminación se me ocurrió acudir al que mi madre consideraba el mago más poderoso y sabio de nuestros tiempos, mi director, Albus Dumbledore. Me daba un poco de nervios ir a visitar al director a su despacho, no sabía como reaccionaría ante mis preguntas o si estaría dispuesto a atenderme, pero a la final me di cuenta que no perdía nada con intentarlo. Además, si mamá hablaba tan bien de él debía ser por algo. 

Llegué hasta el lugar que me habían indicado, donde debía estar el despacho de Albus Dumbledore, aunque lo que encontré me dejó un poco confundido. En vez de una puerta o una oficina llegué frente a una gárgola, por un momento pensé que el alumno mayor que me había dado el dato me estaba gastando una broma y me sentí un tonto por creerle. Estaba por darme media vuelta cuando la apariencia de la gárgola llamó mi atención y nuevamente llegué a la conclusión de que nada perdía con intentar. 

-Hola señora gárgola. Comencé a decir con un poco de timidez. -Me... me gustaría ver al director, es que necesito su ayuda. ¿Podría por favor decirle si puede recibirme? Al acabar estaba intrigado y avergonzado, si de verdad era una broma y me escucharon decir eso no me dejarían olvidarlo hasta la graduación. 

-El director está reunido en este momento, vuelve otro día

A pesar de no poder pasar a ver al director me quedé tranquilo de, por lo menos, haber dado con el lugar correcto. Mañana volvería y esperaba tener mejor suerte. -Gracias señora gárgola. Le dije antes de irme 

Con cada día que pasaba la entrega del trabajo de historia de la magia se acercaba peligrosamente, tenía que darme prisa si quería terminarlo a tiempo. Es por eso que siguiendo las instrucciones de la gárgola regresé a preguntar si el día de hoy el director podría atenderme. 

-Hola señora gárgola. Si seguía regresando tan seguido tendría que ponerle un apodo, que ya sentía que iba entrando en confianza. -He venido a ver al director ¿cree que hoy tenga suerte?

Aguardé pacientemente la respuesta de la guardiana de la entrada al despacho del director. 

La gárgola se queda callada, por un momento te da la impresión de que no te ha oído, cuando vas a volver a formular la pregunta gira sobre sí misma dejando ver una escalera de caracol, al entrar ves al director de la escuela, Albus Dumbledore, sentado en su despacho escribiendo en un pergamino, al verte levanta la cabeza y te mira a través de sus gafas

- Señor Rider, ¿a qué debo este placer?

Fue genial ver como aparecía la entrada al despacho del director, pero claro no esperaba menos del despacho del hombre más importante de la escuela. -Gracias. Le dije a la gárgola aunque no sabía si al girarse podría escucharme, pero no quise pasar sin agradecer a la señora gárgola, que aunque era de pocas palabras me había caído muy bien. 

Seguí las escaleras y encontré a Dumbledore sentando en su escritorio, él casi de inmediato se percató de mi presencia y preguntó el cuál era el motivo de mi visita. En ese momento me di cuenta que no había pensado a fondo lo que le preguntaría y me quedé helado unos segundos. Luego recordé las palabras de mi padre y me di cuenta que no podía atemorizarme algo tan simple como una charla. 

Respiré profundamente y caminé unos pasos para estar más cerca al escritorio. -Hola. Alcé mi mano derecha y sonreí tímidamente. -Mi madre me dijo que usted era el mago más sabio y poderoso que había conocido y ella casi siempre tiene la razón.  Por eso venía a pedirle ayuda. Mi mano derecha se fue involuntariamente a mi codo izquierdo, señal de los nervios que sentía.  -Se trata de un deber de historia de la magia. Mis ojos ganaron un brillo peculiar cuando añadí. -Nos han pedido hacer un trabajo sobre Bertie Botts, pero yo quiero hacer algo diferente, algo que sea más... emm... divertido. 

No dije más, pues quería ver la reacción del director, la que esperaba que fuese posita. Con la ayuda de Dumbledore podría hacer un trabajo que destacara de los demás, pero lo más importante era que sería más divertido que hacerlo enteramente en la biblioteca. 

-¿Más divertido?- el director pareció meditarlo, después asintió lentamente- Aunque aún no has dicho para qué me necesitarías

Con un gesto de su mano te invitó a tomar asiento

Por qué no puedo realizar una tirada de lanzar hechizo en la asignatura de Encantamientos? Hay algún error?

Porque no tienes rangos en la habilidad, si ves pone SI al entrenamiento, por lo que necesitas rangos para poder usarlo. Lo pone en la creación de la ficha y lo he repetido muchas veces

Y no podría cambiar algunos puntos de rango para ponerlos ahí? Es que entonces no voy a poder hacer hechizos.

Ahora ya no, cuando subas de nivel si puedes añadir puntos

[Entrando por la mañana del miercoles]

- ¿Hola? ¿Hay alguien aquí? ¿Señor director?

Lo siento hice la segunda tirada cuando ya no hacía falta

La gárgola se queda callada, por un momento te da la impresión de que no te ha oído, cuando vas a volver a formular la pregunta gira sobre sí misma dejando ver una escalera de caracol, al entrar ves al director de la escuela, Albus Dumbledore, sentado en su despacho escribiendo en un pergamino, al verte levanta la cabeza y te mira a través de sus gafas

- Señor Castle, ¿a qué debo este placer?

- Yo... la verdad es que esperaba que usted pudiera... darme algunas respuestas sobre por qué estoy aquí, es decir, no se quien está interesado en que yo esté aquí, no tengo a nadie, hasta hace unos días no conocía a nadie fuera del orfanato y ahora asisto a un colegio de magia, tengo una escoba voladora fantástica, compañeros increíbles... No lo entiendo, de donde vengo esto no pasa, no creo en los finales felices, acaso esto es un juego perverso de alguien... Si es así, por favor, que pare ya. Las lágrimas se me acumulan en los ojos, necesito entenderlo para no sospechar lo peor.

-Por favor calmese- dice el director mirandote con cierta ternura- Los magos al nacer están inscritos en las listas del Ministerio de Magia, al cumplir los 11 años, todos aquellos que son magos se les envía una carta para fomentar sus poderes, ese es su caso, está aquí porque es su derecho de nacimiento

Pero Hagrid dijo que mi solicitud había sido una carta negra y que alguien había donado 300 galeones para que yo pudiera asistir... 

-La matricula de Hogwarts es gratis, si alguien ha donado esa cantidad será para tus materiales, pero no sé quien haya podido ser, siento no serte más de ayuda