Partida Rol por web

Sarah seguía mirando con ojos brillantes a Joel, esperando una respuesta a sus preguntas sobre su hermana.

¿Tu hermana estudia aquí? ¿La podemos conocer?

También comenzaron a hablar de las magias que querían estudiar o que tenían innatas. -No sé si me viene de familia, ¡pero hice bajar chuches que mi madre había dejado fuera de mi alcance! 

Entraste de vuelta al salón de actos, encontrándote la fiesta ya algo menos activa, con gente que se había ido ya a dormir, Aetheldryd y Aki entre ellos.

Por suerte, los profesores aún estaban por allí. Bueno, los que quedaban. El profesor Witchward estaba charlando con el profesor Sviksemi mientras que la directora se encontraba hablando con la banda invisible que estaba tocando la música de la fiesta. El resto de profesores que quedaban estaban vigilando a los alumnos o charlando entre ellos. Aparte del profesor Beleem y la profesora Deadeye, echabas en falta al conserje y al médico de la academia.

Joel asintió a las palabras de Álex.

 -Tercero y cuarto, en esos cursos es donde vas a aprender a controlar la magia elemental. Luego ya si te quieres especializar en eso, tienes quinto y sexto. Y crear llamas es más sencillo de lo que crees, es lo mismo que calentar objetos, pero en vez de hacerlo con un objeto sólido, lo haces con el aire que hay sobre tu mano. Es fácil una vez le pillas el truco.

Luego volvió a mirar a Sarah, respondiendo por fin a la pregunta que la chiquilla le había hecho.

 -Perdona Sarah, hablo de magia y me olvido de lo demás. Mi hermana por suerte o por desgracia sí que estudia aquí, empieza 3º este año. Ahora no la veo por aquí, pero si queréis mañana u otro día os la puedo presentar. Es muy buena chica, un poco cotilla, pero muy buena chica.

Luego pensó en la anécdota que la pequeña estaba contando.

 -Hmmm... Mover un objeto relativamente poco pesado como unas chuches hasta tus manos ciertamente podría ser indicativo tanto de magia de aire como de telekinesis. Mira, mañana podemos quedar en el campo de prácticas después de clase para hacer un par de pruebas. Álex- Joel miró al chico -Tú puedes practicar a encender alguna llama o sólo a ver cómo controlas tus poderes. Y Sarah- de vuelta a mirar a la niña -Puedes probar a ver si distinguimos el origen de tus poderes. ¿Qué os parece?

 -Oh, ¡yo me apunto también! No sé casi nada de magia salvo lo poco que conozco de pociones, pero puedo llevar un botiquín por si algo sale mal.- miró de reojo a älex y se sonrojó- Y puedo ir a animaros, por supuesto.

Mientras las conversaciones proseguían y la fiesta empezaba a apagarse ya, Kyrt entró de nuevo en el salón, con actitud de estar buscando a alguien.

Álex se quedó sorprendido con las palabras de Joel, era un chico súper majo y no solo eso, encima no hacía más que invitarles a ayudar. El muchacho asintió ante la cita que le había ofrecido. ¡Claro! Estaremos encantados de practicar contigo mañana. Sería genial probar a hacer todo lo que dices. Después miró a Sarah emocionado, va a ser muy guay cuando aprendamos a saber usar nuestra magia. Concluyó con una sonrisa contento por lo que estaba por llegar. 

Entonces entró Kyrt en el salón de baile. Ahora que parecía que todo empezaba a acabar llegaba ese elfo del frío y sintió como si el corazón le diera un vuelco. Era como si su presencia le molestase soberanamente, y lo más probable es que todo se debiese a que precisamente sus elementos eran opuestos.

-¡SÍ! ¡SERÁ GENIAL!- respondió entusiasmada mientras aplaudía y saltaba alrededor del grupo. La idea de entrenar y ver de lo que eran capaces se le asemejaba a un juego así que estaba encantada.

Ni siquiera se dio cuenta de la tensión que recorría ahora el cuerpo de Alex al ver a Kyrt.

 -¡Genial! ¿Os hace ir sobre las cinco? Venid con el estómago poco lleno y con ropa cómoda. Por si acaso hay que salir corriendo.

Que si el recinto que contenía el campo de prácticas hablara... Pero bueno, eso eran detalles secundarios, lo importante era que Joel tenía planes para entrenar con aquellos chavales tan majos. Y es que el buen rubiales sabía que muchas veces la mejor manera de aprender era enseñando a los demás.

¿Salir corriendo? ¿Por qué? Por miedo a que la liemos parda, o por miedo a que nos descubran. Preguntó con algo de interés sobre lo que sucedía. Después miró de reojo a Kyrt a ver qué era lo que estaba haciendo el elfo y así también saber a quién se dirigía.

-¡Vale!- seguramente de ahí a que llegase el día siguiente se le habría olvidado el consejo, ¡pero no el entusiasmo y las ganas que tenía de ver en qué trataba lo que había pensado Joel!

Eh, y eso era algo importante: ¡Lo estaba pensando Joel! Las mejillas de Sarah se sonrojaron mientras sonreía y bailaba como una boba.

Mi mirada recorría a todos los profesores del salón, buscando a alguno que me diera una sensación mínima de confianza, pero era inútil, ya que no conocía a ninguno de manera particular. Empecé a sopesar mis opciones: "Quizás deba ir derecho con la directora. Si me pongo a reflexionar, creo que ella encontraría mejores maneras de hacer... lo que sea que estuvieran haciendo fuera del castillo, de manera más privada y secreta."

Entonces, con paso decidido, me acerqué a ella, y en un tono bajo, para que nadie me oyera, le dije:

- Directora, mi nombre es Kyrt, soy un alumno de primer año. He notado desde la ventana de mi habitación, una actividad sospechosa y he venido a reportarla. Vi personas descargando cosas de una furgoneta, esto lo noté debido a una figura alada que pasó por la ventana y llamó mi atención. En mi camino hacía aquí, he visto también al profesor Beleem y al profesor Deadeye, dirigiéndose en esa particular dirección. -

Me quedé mirándola, esperando su respuesta.

La directora dejó de prestar atención a los músicos transparentes para mirar al alumnno que había ido a hablar con ella.

 -¿Hablas en serio muchacho? ¿Dónde dices que lo has visto y qué has visto exactamente? Como sean esos gamberros de la academia Grimoire du Verentia... Esa maldita Justine Delacroix siempre intenta jugármela.

Señaló a Kyrt con el dedo y luego a la puerta.

 -¡Ya tardas en llevarme allí! La última vez que llegué tarde a una cosa de estas el señor Ackermann estuvo limpiando baba fétida de la fachada del edificio durante días.

No entendí por qué mencionaba baba fétida, pero me di la vuelta, yendo hacia la puerta.

- Los vi en los jardines, por aquí... - y guié a la directora.

- Parecían estar descargando algún tipo de objeto de una furgoneta. Me temo que la oscuridad no me permitió ver bien, pero pude notar a un ser con alas, y como le dije, al venir para acá, vi a los dos profesores Beleem y Deadeye yendo en esa dirección. -

 -Tío, la magia es una fuerza de la naturaleza, neutral y sin dueño. Incluso los magos más experimentados la tratan con respeto. Lo de salir corriendo es por si acaso algo no sale tan bien como esperábamos y tenemos que refugiarnos de una explosión energética. Es raro, pero puede pasar.

Que aún recordaba cuando quiso montar aquella trampa mágica para atrapar a Papá Nöel y acabó volando el salón de su casa.

 -Digamos que podemos acabar chamuscados si no nos andamos con un poco de cuidado. Pero bueno, habrá un profesor por allí, así que si no la montamos muy gorda no debería pasar nada.