Partida Rol por web

La Philodox levantó la vista para sonreír a Donny. Bebió otro largo trago de cerveza y dijo:

-Bueno. Aprovechando que hay un elefante en la habitación, ¿qué vamos a hacer después de esto? ¿Ahogar nuestras penas en alcohol? Porque mañana me gustaría poder hacer algo productivo. Todavía tenemos mucho té que quemar.

Sin levantar la vista del plato, Viviane dijo:

-Yo había pensado en aprovechar para ir a ver a mi amiga, para que cambie de proveedor y llevarme la mierda que haya allí.

Se abstuvo de comentar que también pensaba pasar parte del día con Adam. Hacía tiempo que no tenía un rato para estar en casa.

Sueño los miró de hito en hito extrañado. Parecía ser costumbre el quedarse fuera de las conversaciones, así que siguió mordisqueando su alita de pollo, hasta que Ashley dijo algo que llamó su atención.

- ¿Un elefante? ¿Dónde?

Alecto se tapó la boca con la mano para no regar de cerveza la mesa, tragó a duras penas, echándose a reir tan pronto como pudo. Intentó ponerse seria con más o menos éxito y dijo, frunciendo el ceño ligeramente:

-Te lo has perdido, ha pasado por detrás.

Donny bajó la mirada para dedicarle su entera atención a la hamburguesa. Hasta que Sueño abrió la boca. Esperó a que alguien lo aclarase pero Alecto lo había encontrado muy divertido. La tenía delante, y en un acto reflejo levantó la hamburugesa para cubrirse de una posible ducha de cerveza. Que por suerte no llegó a tener lugar, porque se habría arrepentido mucho de estropear así su cena.

-Es una forma de hablar, Sueño -aclaró muy serio mientras examinaba su hamburguesa desde todos los ángulos para asegurarse de que no tenía cerveza.

El lupus meneó la cabeza de lado a lado.

- Tenéis una forma de hablar muy extraña.

Y sonaba tan irónico como parecía viniendo de un Theurge.

Cuando acabaron la comida y llenaron la tripa, el grupo se trasladó al mismo bar donde habían bebido la última vez. Estaba algo más lleno y la música más alta, aunque pudieron ocupar la mesa del fondo donde nadie les molestaría. Pidieron un par de jarras de cerveza y unos cuantos vasos, y algo de chocolate para el Lupus.

Ashley ladeó la cabeza e hizo ademán de retirarle el batido a Sueño.

-¿El chocolate no es malo para los Lupus?

-No lo se, yo nunca lo había probado antes.

-Supongo que tan mal como le puede sentar a un homínido.

No tenía mucha idea de anatomía o funciones internas, pero dado que eran Garous (y eso ya les daba cierta resistencia a todo) y podían alternar de forma, dudaba que el chocolate fuese a ser nocivo sin intervención del Wyrm.

Esta vez, Viviane había optado por evitar la cercanía de Ashley debido a la metedura de pata en la cena. También estaba moderando su consumo, o al menos la cerveza le estaba aguantando mucho más que la vez anterior, quizá también por la ausencia de un reto que superar. Cabizbaja, repasaba el borde la botella con la yema del pulgar.

Alecto, que había estado mucho más atenta a la hora de escoger asiento, le dio un golpecito a la botella de Viviane con la suya y se inclinó hacia ella para preguntarle algo mientras los demás ponderaban los efectos del chocolate en el Lupus.
 

-¿Y esa cara? -dijo usando el volumen de la música para que fuera lo más privado posible, maravillándose de que, en la cuarta cerveza, todavía pudiese hablar como si estuviera cien por cien sobria.

Viviane se recostó sobre el respaldo y alzó la botella para beber antes de contestar.

-Nada. -mintió-. No me apetece acabar como el otro día si mañana hay trabajo que hacer. Aunque sería divertido.

Tiró del coletero que sujetaba su pelo para volverlo a hacerse la coleta peinándolo hacia atrás. Después cruzó las piernas y tamborileó sobre las rodillas con las manos, imitando el ritmo de la canción que sonaba en aquel momento.

Donny estaba todavía más enfurruñado que durante la cena. O al menos esa es la impresión que daba, porque fruncir el ceño y mirar con hostilidad era su manera de expresar cualquier emoción intensa. Dio un trago de cerveza; estaba bebiendo despacito porque la últma vez no le había parecido bien terminar mucho peor que tres chicas que pesaban la mitad que él. Dos de las cuales bebían ron como si fuera agua.

Cuando vació su vaso se puso en pie con la determinación de alguien que acaba de hacer decisión importante. Miró a Viviane, al parecer sin notar que estaba cuchicheando con Alecto.

-Voy a por más. Viviane, acompáñame -dijo. No solía ofrecerse a ir a comprar nada porque no tenía dinero para pagarlo, así que parecía prudente llevarse a alguien que sí que tuviese.

Viviane alzó la cabeza y tras unos segundos de sorpresa se levantó.

Donny fue con Viviane hasta la barra. Sabía que iban a tener intimidad porque desde allí era imposible que les oyeran y porque en cuanto él llegara se iba a alejar todo el mundo. No hizo nada por llamar la atención del camarero. En vez de eso carraspeó y se volvió hacia Viviane. Volvió a carraspear.

-Eh, tu padre es médico, ¿no? -preguntó, aunque ya lo sabía. Conocía al padre de Viviane.

Viviane apoyó los codos  sobrela barra, y al ver que Donny quería hablar de algo acercó un taburete.

-Sí, es médico. ¿Por?

El Ahroun no solía hablar por hablar y la posibilidad de que necesitara un médico para él resultaba remota. Levantó la mano para llamar la atención del camarero y pedir algo de picotear, de mientras.

-Es que, eh... ¿Crees que me haría un favor?

El doctor Olsen era de la Parentela de las Furias, que eran como esclavos de las Furias. Suponía que estaría acostumbrado a obedecer sin preguntar.

-Si se lo dice mi madre, sí. Si se lo pido yo, tal vez.

La ragabash miró directamente a Donny. Podía decírselo directamente a Lysandra y ahorrarse la duda, y si no lo hacía era o porque le daba mucho miedo o porque no estaría muy bien que alguien de fuera de la manada se enterase. Tal vez tuviese que ver con todo el secretismo que se traía con Ashley.

-También puedo mentirle -Cosa que hacía a menudo-. ¿Qué es?

-Pues, eh... Necesito un poco de ayuda. Alguien que conozco. Es una cosa médica. Y de dinero. No pueden pagarlo. No digo que tu padre lo pague ni nada -aclaró de inmediato-. Pero si puede, eh, buscar alguna solución, sería...

Donny se había ido desinflando durante las últimas palabras, hasta que al final era prácticamente imposible escucharle con todo el ruido que había en el bar. Al final se quedó callado, sin saber qué más decir y esperando una respuesta.