Partida Rol por web

Herederos del lobo

22. De cena

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23/11/2012, 02:05
Viviane Flecha-de-plomo

-Yo tampoco sé, tranquila. Me gustaba más bien poco ir a clase, y menos lidiar con la Ashley idiota -Se cayó un momento y los hombros para esconder el rostro hasta la nariz tras el cuello de la chaqueta. Todavía se sentía algo avergonzada por la metedura de pata de la cena, razón por la que no iba tan borracha como Alecto-. Bueno, pues Jabalí ya ha cumplido su misión: Estamos al completo. Sólo falta que nadie mate a nadie. Otra vez. Por suerte tenemos a... ¡Awen!

Viviane dio un salto y alzó el puño a lo estrella del rock.

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23/11/2012, 02:31
Alecto Tres-Acordes

Con la cabeza espesa como la tenía le costó un segundo de más procesar el arranque rockero de Viviane, pero al instante le dio la vuelta a la guitarra para ponerla delante de ella y rasgó unas cuantas notas triunfales para la alarma y sorpresa de un grupo de jóvenes que pasaban al otro lado de la acera.

-¡Se acabó el matarse unos a otros! -les dijo al grupo, señalándolos con un dedo antes de que se escabulleran. Devolvió la guitarra a su espalda y deseó tener un chicle de menta a mano.

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23/11/2012, 02:38
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane se rió sonoramente ante la espontaneidad de la Galliard. Sin duda había sido una buena elección. Entonces dio varias zancadas y se plantó frente a Alecto, caminando hacia atrás.

-No guardes a Awen tan deprisa. Me parece fatal que lleves tanto tiempo, hayas entrado en la manada, y todavía no me hayas dedicado una canción -Cruzó los brazos bajo el pecho y echó un vistazo por encima del hombro, por si había obstáculos que sortear. La miró enfadada-. ¡Ni siquiera he tenido un adelante de Delincuentes Lupinos! Quiero una canción. Porfa.

La ragabash se paró un momento, pensativa. Miró hacia el final de la calle y recordó que había un parque medianamente decente más abajo. Tampoco era cuestión de darle la noche a los vecinos. Y, no. La negativa no estaba dentro de las respuestas que iba a aceptar, así que se enganchó del brazo de Alecto y tiró de ella.

-Hay un parque más abajo. No puedo garantizarte la ausencia de más borrachos, pero no te preocupes, yo te defiendo si hace falta.

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23/11/2012, 02:51
Alecto Tres-Acordes

-Ya, si me llevas al parque garantizar la ausencia de borrachos estando yo allí va a ser complicado...

Alecto se dejó arrastrar al parque. En aquello en lo que ahora pensaba como 'su vida anterior', que una chica la arrastrara por razones misteriosas (la posibilidad de que la gente que vivía en aquel lugar pudiese no apreciar a una garou borracha berreando bajo su ventana ni se le pasó por la mente) a un parque de noche era más que razón para ansiar un chicle de menta. Alecto sospechaba que respondía a algún tipo de maniobra, aunque no sabía muy bien a cual específicamente, por lo que sencillamente la siguió hasta el camino polvoriento que llevaba a las entrañas del parque, con Awen pegada al la cadera. Algunos metros más adelante vio un banco a un lado del camino y saltó encima, alzando las manos para calmar a un público imaginario:

-Esta canción se la dedico a Viviane -dijo inclinándose ante un micrófono invisible. Normalmente una canción dedicada también era señal de que los chicles de menta estarían en demanda, pero estaba ocupada decidiendo rápidamente qué canción debería tocar, porque la mayoría de las que su grupo había tenido en repertorio habían estado orientadas, de nuevo, hacia el gasto potencial de chicles de menta. Finalmente escogió la que menos vergüenza le daba teniendo en cuenta que era un show privado y empezó a tocarla, dando gracias de sabérsela tan bien que la calidad de los acordes no se veía demasiado afectada por el alcohol.

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23/11/2012, 10:36
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane aplaudió y coreó el nombre Tres-acordes con un entusiasmo excesivo, actuando como una auténtica fangirl; dio un par de saltitos en el sitio, aplaudió cuando la Galliard se inclinó sobre el micrófono, e incluso se hizo la sorprendida al ser nominada para la siguiente canción, lo que celebró con un aullido. Lo cierto es que, siendo una guitarra solitaria, el espectáculo no tendría por qué estar garantizado, pero cuando Alecto rasgó las cuerdas y la melodía llenó el parque le pareció sencillamente brillante. Al principio lo atribuyó al efecto de Awen, aunque medio minuto después le dio igual si era eso o la destreza de su amiga. Formaban un dueto que cualquiera querría tener como compañía durante una noche de borrachera. Acompañó el ritmo con la cabeza y los pies, y cuando terminó el último acorde volvió a aplaudir.

-¡Bravo! ¡Tres-acordes, Tres-acordes! -gritó entre medias. Se acercó al banco y se desplomó en el asiento, a su lado, sabiendo que duraría poco parada y sin hacer nada. Tenían que repetir esa escena en verano, pensó, cuando hiciera menos frío, aunque se guardó la idea para sí. Ladeó la cabeza-. Tocas muy bien. Deberías encontrar un nuevo grupo con el que seguir, ¿sabes?. Llevas la música en las venas, como si la musa Euterpe te estuviese rondando todo el rato. -Se dejó caer hacia su lado sonriente-. ¿Puedo pedir otra?

Notas de juego

Alecto también es vocalista?

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24/11/2012, 09:45
Alecto Tres-Acordes

Alecto bajó del bancó de un salto que casi le costó la vida a media canción para sentarse, y cuando Viviane se sentó a su lado pensó que jugarse la vida había valido la pena.

-Claro -dijo, animada por su entusiasmo cuando le pidió otra canción-. Ya te lo dije, si no fuera por tí, Awen y yo no estaríamos aquí, cantando en el parque después de perdí-la-cuenta-después-de-la-octava cervezas... Así que estamos a tu servicio. Puedes pedirme... todo lo que quieras -dijo intentando hacer una pausa significativa y consiguiéndolo sólo a medias. Se contuvo antes de intentar usar la voz de ligar. La experiencia le había enseñado que la voz de ligar era una operación delicada que podía volverse en tu contra después de la tercera copa.

Notas de juego

Puede cantar también, sí :3

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24/11/2012, 11:36
Viviane Flecha-de-plomo

No era la primera vez que Alecto le decía esa frase. Lo había hecho el día que se conocieron y también durante su primera borrachera, y cada vez que lo escuchaba le sonaba más especial e íntimo, como algún tipo de juego o clave. Esa vez, quizá por la pausa, el tono o las circunstancias, le quedó claro que iba totalmente en serio. Y todo lo que quieras podían ser muchas cosas, aunque a ella sólo se le pasó una por la cabeza.

Como en la anterior celebración, la Ragabash se quedó mirándola fijamente en silencio y sin respuesta. Parecía tratar de averiguar sus pensamientos, y la verdad era que los que le preocupaban eran los suyos propios. No se sentía cohibida ni avergonzada, pero tenía la sensación de estar bailando en una cuerda floja y que lo siguiente que dijera iba a tener más peso de lo habitual. Empezó a notar calor en las mejillas y la boca seca.

-¿Todo lo que quiera? Eso suena... divertido y arriesgado.-dijo finalmente, tratando de darle un tono desenfadado tras la larga pausa antes de lograr contestar.

Apoyó el brazo en el respaldo del banco y sobre este la cabeza.

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24/11/2012, 20:41
Alecto Tres-Acordes

-Las cosas divertidas siempre son un poco arriesgadas... -empezó a decir, pero el final de la frase se diluyó con el vapor que formaban sus palabras en el aire frío. Viviane estaba adoptando una de las posturas que conformaban el lenguaje universal de las primeras citas. No estaba muy segura de que si lo estaba haciendo a propósito, pero el hecho es que se había colocado en la línea de fuego y estaba segura de que cualquier jurado del mundo habría estado de acuerdo, especialmente el muy honorable que conformaban todas las cervezas que se había tomado. Intentando no pensar en lo que podría pasar si Viviane se ofendía, o aún peor, se enfadaba, apartó a Awen como mejor pudo hacia un lado y se inclinó, besándola con fuerza.

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25/11/2012, 03:58
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane lo había visto venir desde que salieron del bar, y ninguno de sus actos podía negar la evidencia. De  forma más consciente de lo que quería creer, había acabado con Alecto borracha en un parque remoto de Naperville. ¿Quién creería que no había sido a posta? Por eso, cuando la Gallliard se inclinó hacia ella no hizo ningún ademán de apartarse. No se sintió ofendida ni enfadó, aunque tampoco respondió al beso con fervor. Se dejó hacer unos segundos, todavía incrédula al notar los labios fríos de Alecto y respirar su aliento de cerveza, y luego se separó,azorada.

Miró sus manos y la guitarra, ascendiendo hasta toparse con los ojos de su Galliard. Notaba el corazón el los oídos y la incertidumbre haciendo presión en el pecho. Sabía que debía de estar roja, aunque la oscuridad fuese su aliada, porque aquello no era como con John-Dan-Dave, ni tampoco nadie de su anterior vida. De alguna forma lo esperaba y a la vez lo deseaba, aunque no lograba explicárselo. Se encontró de repente pensando en las palabras de Ashley, y también en Tiffani. Y, por supuesto, en las de Alecto. Estaba tratando de abarcar toda la información posible sobre cómo había llegado a ese puto mientras los segundos se sucedían demasiado deprisa, y lo único que se le ocurrió decir al final fue:

-Lo siento. 


Ella misma se preguntó por qué lo sentía, pero no supo responderse. Quizá por la situación o la forma en la que habían ocurrido las cosas. Tal vez porque se sentía mal. Pero al volver a mirar a Alecto se dio cuenta de que no se arrepentía en absoluto.

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25/11/2012, 04:36
Alecto Tres-Acordes

Alecto se apartó de inmediato, sintiendo que le ardían las mejillas. Se pasó la mano por el pelo, sintiéndose de repente casi sobria y acabando por palparse la nuca, avergonzada:

-No, no, por favor... es mi culpa... no debería haber... yo pensé que... -cerró los ojos e hizo una mueca. Parecía una imbécil, no acabando nada de lo que empezaba a decir. Al final se forzó a sonreír-. Soy yo la que lo siente, he bebido demasiado y me dio la sensación... bueno, de que tú también querías... pero oye, no lo sientas por mí, yo me he llevado un beso después de todo -de repente se puso seria, levantando las manos con las palmas hacia ella-. No es que me alegre de habértelo dado... es decir, sí, me alegro, a no ser que haya sido muy desagradable para tí, en cuyo caso me alegro... eh, moderadamente... -se apresuró a decir, fuera de control-, pero tendría que haber preguntado... creo.

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25/11/2012, 12:00
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane se cubrió la cara con las manos, culpable por el enredo que se había formado. Y aun así, Alecto conseguió aliviar la presión del momento con su forma de ser, tan adorable y auténtica. Sonrió tras la máscara de dedos, sintiéndose un poco menos estúpida. Volvió a mirarla.

-No, no. No es culpa tuya, yo debería... Tendría que haberte llevado al Clan al salir. Estás borracha y lo sabía, y tendría que haber... No sé. Agh. -trató de explicar, gesticulando demasiado con las manos. Pero se dio cuenta de que cuanto más hablaba menos se estaba entendiendo. Se tomó un momento para aclararse y lo intentó de nuevo-. No se pide permiso para esas cosas... ¿no? Surgen y ya está. No... Deberías sentirte así. Tú lo has dicho, eso que te llevas.

Exhaló todo el aire notando como la fuerza se le escapaba por la nariz. Se atrevió a mirar a Alecto, con sus mejillas encendidas y Awen pendiendo del lateral. Lo último que quería era que se sintiera mal, sobre todo sin haber razón para ello.

-Eh, Alecto -llamó, y de algún lugar consiguió sacar fuerzas para frotarle la pierna con la mano temblorosa, tratando de calmarla. Despegó los labios queriendo decir algo que no sabía varias veces, y al final, de forma torpe e imprecisa, se inclinó hacia ella. Si dejaba brotar las palabras acabaría por enredar más el enredo, y no era lo que quería. De modo que volvió a embriagarse con la mezcla de olores; cerveza, humo y bosque, y probó sus labios una segunda vez.

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26/11/2012, 12:17
Alecto Tres-Acordes

Cuando se separaron por segunda vez, Alecto miró hacia arriba e inhaló despacio, como intentando ordenar sus palabras:

-Estoy bastante confusa ahora mismo -dijo sin quitar las manos de los hombros de Viviane, aunque no estaba muy segura de en qué momento había llegado hasta allí ni por order de quien-. Lo que podría llevarme a volver a darte un beso, y que tú te confundas, y me des un beso, y yo me confunda -hizo una pausa para poner un brazo en el respaldo del banco por detrás de Viviane, inclinándose un poco hacia ella con una sonrisa estúpida-, entrando en una espiral infinita de besos y confusión... cosa a la que no me opongo en un principio...  pero sólo para asegurarme y con ánimo de eliminar la confusión de la fórmula, si te sigo besando hasta que nos congelemos en este banco, ¿te parecería bien?

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26/11/2012, 14:03
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane también miró hacia el cielo, oscurecido por la contaminación lumínica. Hinchó los carrillos y arqueó las cejas. Luego suspiró dejando una nubecilla de vaho en el aire.

-Sí... Supongo que sí. -Bajó la cabeza para observarla-. Aunque preferiría evitar lo de la congelación. Ya sabes, Ashley se enfadaría mucho si mañana no hacemos nada de provecho.

Sonrió de la misma forma que Alecto, atontada, y se encogió sobre sí misma con timidez. Entre el alcohol y la Galliard le habría resultado imposible tener frío en aquel momento.

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26/11/2012, 21:17
Alecto Tres-Acordes

Alecto miró a su alrededor y se encogió de hombros con aire despreocupado, sonriendo e intentando no parecer demasiado nerviosa. ¿Quería decir aquello que Viviane quería que se fueran a un sitio más... resguardado? Era mejor no pensarlo y acabar cayendo en otro bucle de confusión infinita.

-Normalmente te ofrecería irnos a algún sitio a cubierto para evitar llegar a esos extremos -sorió sentándose de lado en el banco con las piernas cruzadas y echándose a Awen a la espalda como de costumbre-. Desgraciadamente el único sitio que conozco es el bar del que acabamos de venir, y sólo estoy medianamente segura de saber hacer el camino a la inversa- y se puso muy seria para decir con voz solemne-. Es difícil llevar la cuenta de los giros después de hacer la tercera ese.

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26/11/2012, 23:26
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane se rió y subió las piernas al banco, rodeándolas con los brazos.

-Siempre nos quedarán los supermercados. Es algo que hacemos habitualmente -dijo, muy seria. Ya le había cogido el truquillo a lo de las cerraduras y las cámaras no le suponían mayor problema. En breves sería una delincuente profesional. Se pasó una mano por el pelo, pensando-. Podría llevarte a mi casa, pero... no creo que sea una buena idea. ¿Buscamos otro bar?

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27/11/2012, 23:40
Alecto Tres-Acordes

Alecto la escuchaba atentamente, asintiendo a todo lo que decía. No era sólo por parecer más atenta, verdaderamente en aquel momento todo le parecía estupendo. ¿Un bar? Magnífico. ¿Un supermercado? Fantástico. Si Viviane le hubiese propuesto entrar a la cámara acorazada del banco más cercano le habría parecido fabuloso. Cuando mencionó su casa carraspeó, fingiendo que no le importaba demasiado:

-Ya, lo entiendo, es por... tu padre, ¿no? De todos modos, cualquier sitio al que te apetezca ir me parece bien. Es decir, prefiero evitar los que entren más o menos en el espectro de lo ilegal... aunque, sólo me opongo en el sentido más ligero de la palabra, si te apetece que forcemos un par de cerraduras o que mate a alguien por tí, aprovecha, porque esta es la noche.

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28/11/2012, 01:07
Viviane Flecha-de-plomo

Viviane se quedó pensativa.

-Hum... Igual está trabajando. Bueno, da lo mismo -la ragabash saltó del banco enérgicamente y le hizo un gesto para que se levantara. Sonreía-. Vamos. No puede ser peor que Ashley. Y no quiero llevarte al Clan de madrugada.

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28/11/2012, 20:39
Alecto Tres-Acordes

Alecto saltó del banco torpemente, acordándose demasiado tarde de que aunque el susto le había bajado un poco las cervezas, sus rodillas todavía las llevaban encima. Salvó su dignidad de milagro y la siguió, concretamente sin dar saltitos.

-Ya te digo, mejor que Ashley es casi cualquier cosa... -dijo, aunque en aquel momento, mientras seguían el camino que salía del parque, lo cierto es que volvía a sentirse Superman.