Partida Rol por web

Nieve y Hambre, capítulo 1: La silueta entre los árboles

4.3 - El líder dubitativo

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26/11/2016, 21:53
Lamont

Lamont suelta un bufido.

-Oh, por favor, no me vengas con esas, Thaldein. Todos hemos oído lo que has dicho antes en el thing, cuando has propuesto decidir por todos.

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26/11/2016, 21:54
Thaldein

-¿Y crees que me gustaba esa idea? -Thaldein se echa hacia atrás, frunciendo el ceño-. ¡Me he sentido aliviado cuando Ashe ha propuesto la alternativa! Si lo he dicho, ha sido solo porque no veía otra opción. El thing es la base de nuestra sociedad, pero a veces es lento y tedioso. No podemos permitirnos esos lujos.

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26/11/2016, 21:56
Hjalmar

Hjalmar mira hacia el centro de la mesa, pensativo. Cuando interviene, su tono es tranquilo, pero sus palabras llevan el inconfundible acento de un consejo de abuelo.

-Ten cuidado, Thaldein. La línea entre el deber y el querer es muy fina. Tantos hombres habrán caído a su ambición convenciéndose de que era su responsabilidad...

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26/11/2016, 22:00
Thaldein

Thaldein niega con la cabeza, algo molesto.

-Ya os lo he dicho: No quiero estar aquí. Dejad de insinuar que soy un capullo sediento de poder, que me cabrea bastante. Solo quiero que esto acabe cuanto antes. Que acabemos con esa cosa, que sobrevivamos al invierno. Al cuerno con el puesto de líder, le pertenece a Eskol por derecho, y no le envidio nada, sinceramente.

Nadie dice nada más, así que Thaldein continúa, algo más calmado.

-Sea como sea, y como iba diciendo antes de que me interrumpierais, el hecho es que todavía dudo en el plan de acción a seguir. Si os he llamado no es porque seáis mis amigos, ni porque quiera comeros la cabeza. Es porque os necesito, a vosotros en concreto.

Varias miradas se cruzan, algunas escépticas, otras confusas. Thaldein se aclara la garganta y luego te mira.

-Ya he explicado porque Resmit, un forastero, está aquí con nosotros. Tanto si creéis en mi corazonada como si no, es un hecho que su presencia aquí no supone un problema, así que no volveré a ello.

Nadie se queja, así que Thaldein pasa a mirar a Fredrick.

-Tú, Fredrick, eres un buen hombre. No digo que los demás no lo seamos, pero en tu caso es algo obvio. Tienes un buen corazón, y siempre buscas el bien para los demás, sin olvidarte de los tuyos. Por eso valoro tus consejos.

Fredrick, halagado, se dispone a protestar, pero Thaldein sigue hablando, sin darle oportunidad de hacerlo. Esta vez se gira hacia Hjalmar.

-En cuanto a Hjalmar, su presencia aquí no necesita justificación. Es el más experimentado de todos nosotros. Por alguna razón que no entiendo, ni las alas de Verdal ni el infecto toque de Helion han conseguido arrancarte de este mundo aún. No podemos desaprovechar tus consejos.

Hjalmar se limita a soltar un gruñido, que hace que Thaldein sonría, divertido. Por último, se gira a Lamont.

-En cuanto a ti, Lamont, eres el más justo de todos nosotros. Eso ha quedado claro en todo momento. Te aplicas las mismas reglas que exiges a los demás, independientemente del resultado, y eso es bueno. Sé que todas tus palabras no harán sino evitar que tome malas decisiones.

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26/11/2016, 22:15
Lamont

Lamont frunce el ceño.

-Regálame los oídos todo lo que quieras, Thaldein. Sigue sin gustarme.

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26/11/2016, 22:15
Thaldein

-No lo digo por halagarte, imbécil. Es lo que pienso.

La mirada de Lamont no deja lugar a dudas en lo que respecta a su opinión, que no parece haber cambiado demasiado. Thaldein suspira, resignándose.

-En fin, basta de cháchara. Resmit quería preguntarte algo, Hjalmar. Luego hablaré yo.

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26/11/2016, 22:17
Hjalmar

Hjalmar se gira hacia ti con curiosidad.

-Te escucho.

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28/11/2016, 06:59
Resmit Kruik

Parece que Thaldein nos a reunido por otro motivo a parte de organizar la luchar contra el monstruo ¿será por lo que le comenté antes de irme...?

Sin embargo Hjalmar se encuentra frente a mi y puedo contarle todo lo que me dijo Saga y así buscar algún punto débil de la criatura.

-Bien, verás... He tenido una conversación con Saga antes de esta reunión - al recordar la conversación con Saga y la atrevida Bedelia no puedo evitar enojarme ligeramente. - y por lo visto ella ya conocía a la bestía. -miro al resto -  quizá en el Thing podáis preguntarle cuanto tiempo puede llevar en Sultünge. -vuelvo con Hjalmar. - Pero me ha dicho que ha investigado sobre él y que podría tratarse de una bestia que luchó contra Aslof el tuerto, aunque yo lo conocía como Aslof el ciego en las cumbres de Miürenheim. Quería preguntarte si sabías algo más de esa historia que nos pueda ser útil. Aunque ella piensa lo mismo que yo, que la luz y el fuego son nuestro mejor arma contra ella.

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30/11/2016, 21:49
Hjalmar

Hjalmar parece escuchar tus palabras con atención, y durante unos segundos mira la mesa, pensativo, sumido en sus propios recuerdos. Luego niega con brusquedad.

-No me suena de nada. Es error común el de los jóvenes el esperar que nosotros los ancianos sepamos todas y cada una de las leyendas e historias de nuestro pueblo -Suelta un bufido, a medio camino entre la risa y la indignación-. Pero los Yermos llevan existiendo desde que el mundo es mundo, y sus cuentos ensombrecen las estrellas del firmamento. Este que relatas no es sino otro de los muchos que nunca han llegado a mis oídos.

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30/11/2016, 22:24
Fredrick

-Yo sí recuerdo haber oído algo -Interrumpe Fredrick, sorprendiéndoos a todos-. En una visita a Hermagor, hace ya muchos años. Una mujer bastante fea contaba historias junto a la lumbre a los chiquillos, y algunos nos detuvimos a escucharla. No recuerdo demasiado, pero sí me suena ese nombre. Creo recordar que ella lo llamaba Alzug el Ciego, un hombre muy poderoso que en el pasado se enfrentó a un gran demonio conocido como Kragdul.

Intenta hacer memoria, y luego se rasca la cabeza.

-No recuerdo nada del fuego o la luz. Aunque me suena que la última batalla entre los dos era en una montaña, al amanecer.

Se encoge de hombros.

-Un cuento para asustar a los niños.

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30/11/2016, 22:33
Thaldein

-Puede. O puede que no.

Thaldein suspira.

-Sea como sea, con simples leyendas no vamos a conseguir librarnos de esa criatura. De ellas solo podemos sacar que, quizás, esa criatura es más débil por el día. Y que teme al fuego. Pero no son certezas.

Tras dirigirte una breve mirada, se echa hacia delante para dirigirse a todos bajando el tono.

-Sea como sea, os he llamado para contaros el plan que tengo en mente. Retrasarlo otra vez es alargar esta reunión más de lo necesario, así que escuchad bien. Luego, cuando termine, os pido digáis lo que pensáis sin tapujos, pues no me lo tomaré mal. Pero, mientras tanto, escuchad sin interrumpir, pues es necesario que veáis la idea general antes de opinar.

Todos parecen conformes. Thaldein asiente, y empieza a hablar en tono monótono, desgranando las ideas que probablemente lleva planificando en su cabeza desde esa mañana.

-La situación es crítica, como todos habéis oído en el thing. Ashe me ha dicho que, con la comida que tenemos, aguantaremos solo tres días... Cinco, a lo sumo. Y eso racionándolo de forma bastante parca. Por supuesto, esa perspectiva es inaceptable de cara al Invierno, y por desgracia, tras la ventisca, las pocas rutas para traer provisiones habrán quedado bloqueadas. El hambre nos acecha.

Deja unos segundos para que la gravedad de sus palabras cale en vosotros, aunque no es necesario. Ya se habló de ello en el thing, y recalcarlo es solo insistir en un problema en el que la mayoría de los habitantes de Sultünge probablemente ya ha pensado bastante.

-La bestia es una prioridad inmediata, pero el hecho es que no podemos enfrentarnos a ella todavía. Sería una matanza iniciar una partida de caza, aunque muchos opinarán lo contrario. Resmit puede confirmarlo: Ni diez hombres podrían contra esa bestia. La posibilidad del fuego y la luz como arma es una ventaja a tener en cuenta, pero no voy a arriesgar la vida de nadie por meras suposiciones. Así que, por ahora, volvamos al tema del hambre. Luego regresaré a la bestia.

Levanta tres dedos al aire.

-Necesitamos tres grupos de cazadores, que vayan a intentar conseguir las pocas piezas que aún queden en el bosque de cara a conseguir más provisiones. Un ciervo adulto puede alimentar a toda la aldea durante uno o dos días. Un jabalí, puede que incluso más. Cualquier animal pequeño, como conejos o aves, pueden alimentar a dos o tres personas. Es cierto que las piezas de caza son menos frecuentes ahora que el frío ya ha llegado, y más teniendo en cuenta lo fuerte que está azotando el invierno. Pero, según mis cálculos, con un poco de suerte y mucho esfuerzo, podremos conseguir suficiente comida esta semana para aguantar un mes.

Se cruza de brazos, y su rostro se ensombrece.

-Por supuesto, queda el problema de la criatura. Si encuentra a cualquiera de los grupos de cazadores, los destrozará sin piedad. Sin embargo, tengo la sospecha de que esa bestia solo ataca cuando ha anochecido. Durante el día parece estar adormecida, así que es posible que sus hábitos sean puramente nocturnos. Es arriesgarse demasiado, pero no nos queda ninguna alternativa. Debemos conseguir comida. Sin embargo, también es posible que estemos sobrevalorando a ese monstruo. Puede que no sea siempre tan poderoso, por ejemplo. Incluso si ataca por el día, puede que a la luz esté medio ciego, como algunos animales nocturnos. Quién sabe. De ahí que los grupos de cazadores sean de tres personas, mínimo. Así, en el hipotético caso de que sean emboscados, podrán intentar defenderse. Aunque la primera opción será, siempre que sea posible, la de huir.

Hace una pausa, mirándoos a todos para asegurarse de que lo habéis entendido.

-Hoy saldrán los primeros grupos de cazadores, por la tarde. Quedan pocas horas de luz, pero no podemos desperdiciar más tiempo. Todos los grupos, sin embargo, volverán antes de que empiece a anochecer. Si, después de un par de días, nos hemos asegurado de que la bestia no está activa, las mujeres y niños saldrán también, en los límites del pueblo, para intentar recolectar las pocas bayas y frutos que aún queden en el bosque. Si es que queda algo. Sea como sea, nadie irá nunca solo. En cuanto a las antorchas, espantarían a los animales, así que los cazadores tendrán que prescindir de ellas. Las mujeres, sin embargo, podrán tenerlas a mano.

Frunce el ceño. Está claro que la idea de implicar a las mujeres en un peligro tan evidente le gusta bien poco, pero eso no hace que se eche atrás. En su lugar, sigue explicando su plan.

-Por la noche, todos nos reuniremos en el salón del jarl, donde dormiremos. Se harán turnos de guardia, y todos dormirán con sus armas a mano. Algunos dirán que eso es ofrecerle a la bestia un festín indefenso, pero yo opino lo contrario. Si cada uno duerme en su casa, será más complicado vigilar todo el recinto. El monstruo podría ir matándonos uno a uno, familia a familia, en el silencio de la noche, sin que los otros lo percibieran. Y, si llegamos al punto de tener que luchar, lo mejor será hacerlo todos juntos. Quizás, así, tenemos una oportunidad. De esta manera, si todos seguimos esa rutina y cada uno hace su parte... Puede que podamos sobrevivir al invierno.

Miradas incómodas. No parece un plan muy sólido. Tampoco es que haya muchas alternativas mejores.

-En cuanto a la bestia... No podemos ignorar su amenaza, encerrándonos en el caparazón de Sultünge durante todo el invierno. Debemos tomar la iniciativa, intentar encontrar una manera de acabar con ella antes de que ella acabe con nosotros. Porque llegará un punto en el que esto será así. O ella nos devora, o nosotros la cazamos. Así que he pensado en dejar a las dos mujeres libres.

La frase crea cierta tensión en el ambiente, pero nadie dice nada. Thaldein se empieza a mesar la barba.

-Puede que hayan traicionado nuestra confianza, pero su justificación es coherente... Y hay que priorizar. Además, la hedense parece saber mucho sobre la bestia, como ha dicho Resmit. Yo mismo he hablado con ella antes y me he convencido de ese hecho. Ella misma me ha pedido liderar un pequeño grupo, una expedición, hacia el lugar donde anoche atacó la bestia, para reunir información. Por ahora, ese será nuestro objetivo: Investigar, observar. Puede que dentro de unos días tengamos que tomar una decisión, pero precipitarnos es suicidarnos. Nuestra mejor baza es confiar en que pueda encontrar algo útil, y gracias a esa información trazar un plan más coherente que el de ir al bosque a buscar a ese bicho. Lo que no quita que mientras no podamos ir planteando algunas medidas de seguridad...

Se gira hacia ti, y te sonríe.

-Tu propuesta de anoche no era mala. Una trampa para la criatura podría ser lo que nos diera la ventaja... Sin embargo, con una no basta. Tenemos que plantear varias líneas de defensa, atrincherarnos en el salón de Einar para estar seguros por las noches. Las mujeres y los niños pueden ir montando empalizadas, pero no deberíamos limitarnos solo a ese método de protección. Se me ocurren varias trampas que podrían dar resultado, y estoy seguro de que los tres sureños que están en Sultünge podrán aportar sus propias ideas. Si todos colaboramos, puede que podamos dormir más o menos seguros.

Se echa atrás y se frota los ojos, cansado.

-Por último, está el asunto de los Yormef...

De nuevo, miradas incómodas. Fredrick frunce el ceño, Lamont se cruza de brazos. Hjalmar suelta un bufido.

-Sí... Lo fácil que sería ejecutarlos sin más. Y, sin embargo, creo que se nos ha puesto en esta situación por una razón. Creo que los dioses observan nuestras acciones, y nos juzgarán por las decisiones que tomemos en los siguientes días. He decidido, por tanto, esperar a que Eskol se recupere... Y dejar que sea él quién haga el juicio. Al fin y al cabo, él es el jarl. Y por mucho que esos cabrones se merezcan morir, lo cierto es que mataron a nuestros amigos en combate, no a traición. Tienen derecho a ser juzgados como dicta la ley, por mucho que todos sepamos como va a acabar todo. Las antiguas tradiciones deben respetarse.

Esboza una sonrisa de desprecio.

-Lo que no implica que tengan que recibir comodidades. Para empezar, no se les dará de comer. No vamos a desperdiciar comida en ellos. Tampoco se les dejará libres. No podemos permitirnos el lujo de dejar a alguien vigilando, como ahora está haciendo Sigbjörn, así que nos aseguraremos de que están bien atados. En ese cobertizo hace frío, pero sobrevivirán. Y si la criatura les encuentra... Bueno, un problema menos del que preocuparnos.

Cierra los ojos y toma aire. Luego os mira con seriedad.

-Creo que no me dejo nada. Decidme qué opináis.

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03/12/2016, 15:48
Resmit Kruik

Escucho atentamente la explicación de Thaldein, es evidente que lo ha meditado bastante y que lo tiene bien pensado, mucho más que en el thing. Alumbrado parcialmente por la chimenea permanezco callado esperando que termine y pendiente de todos los puntos. Finalmente, cuando nos pregunta:

- Bien, si no os importa empezaré yo. - hecho una mirada rápida a los presentes por si alguno prefiriese hablar primero. - La idea de formar grupos de caza esta semana me parece bien, es evidente que debemos prepararnos para el invierno. No sé si me quedaré aquí todo este tiempo, pero lo que está claro es que no puedo partir yo solo con esa bestia en el bosque. Asique, si crees que podemos obtener suministros para todo el mes en esta semana, es la mejor opción sin duda. -  medito un segundo las siguiente palabras - Pero como dices, el monstruo sigue ahí, asique mientras algunos cazamos, el preparar defensas es casi igual de importante, y mientras reunimos información del monstruo es mejor actuar con precaución y tomar la iniciativa apartir de la semana que viene, cuando ya tengamos suministros. - poco a poco bajo la voz para que no suene cruel o insensible lo siguiente que digo. - No os lo toméis mal, pero la otra noche tuvo tres cuerpos que devorar, y no creo que tenga hambre en los próximos días, con eso podemos ganar tiempo.

Miro a todos con seriedad, las caras que ponen ante estas últimas palabras, soy consciente de que es un tema mucho más desagradable para ellos. Pero tras tomar un poco de aliento continuo, hablando con un tono tranquilo y suave.

- En cuanto a las mujeres... he tenido una conversación con ellas. En realidad ayudaron a los Yormef por que pensaban que no fueron culpables del incendio, y que sería injusto matarles por ello. Saga sostiene que pudo ser provocado por el ataque de la bestia, que atacó al hombre que allí encontramos, lo siento, no sé como se llamaba... y que al caer la antorcha que sostenía en su guardia el incendio empezó. No lo encuentro descabellado, aunque ya te conté, Thaldein, otra posible versión, casi más desagradable. Pero en lo que se refiere a las mujeres no veo la razón de dejarlas cautivas, como bien dices no tenemos hombres para vigilarlas y pueden ser útiles buscando información del demonio. Es más, veo útil la petición que te hicieron y me gustaría ir con ellas donde nos atacó la bestia, así podría tener las cosas un poco más claras.

Finalmente, en cuanto a los Yormef... no os voy a negar que su muerte me agradaría, su clan a acabado con mucha gente a la que quería . -  Esto último se nota que me cuesta decirlo puesto que recuerdo especialmente a mis padres cuando digo estas palabras. -  Si has decidido esperar a Eskol está bien, aunque luego me gustaría hablar con ellos de todas formas, pero deberíamos alimentarlos. Si llegase el momento de luchar contra la bestia ya han demostrado ser mejores guerreros que Eskol y sus hombres. Por eso se les podría proponer una vía de escape a la muerte... - miro fijamente a los ojos de Thadein durante unos segundos en silencio.  - que luchen contra la criatura con nosotros. Estamos escasos de hombres y puede que la lucha contra la bestia llegue antes que la recuperación de Eskol. Eso no quiere decir que no puedan pasar hambre unos días mientras recogemos para garantizar la supervivencia del pueblo.

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04/12/2016, 12:56
Thaldein

Aunque Thaldein parece satisfecho al escuchar tus razonamientos, cuando acabas con tu propuesta de soltar a los Yormef su expresión se vuelve algo menos amistosa.

-Lo siento, Resmit, pero no. No podemos permitirnos el lujo de confiar en ellos, incluso en una situación como esta. No solo mataron a dos de los nuestros, y medio Sultünge se me echaría encima si dejo que se vayan. También ellos guardan rencor a nuestro pueblo, y no dudarían ni un momento en traicionarnos. Puede que sea una situación desesperada, pero no pondré un arma en sus manos hasta que hayan sido juzgados. Lo cuál significa, seguramente, que no volverán a tocar un arma en esta vida.

Niega con la cabeza y sus rasgos se suavizan.

-No es solo por la desconfianza, sin embargo. He de admitir que yo mismo no podría perdonarme si dejara a esas dos bestias sueltas. Lo siento, Resmit, pero los Yormef se quedan donde están.

Los otros norteños asienten convencidos, por lo que deduces que la decisión es bastante unánime. Si quieres intentar convencerlos de que usen a los Yormef como aliados, vas a tener que trabajar mucho más de lo que parece, porque da la sensación de que estás solo en esa postura.

-Sin embargo -Añade Thaldein, sonriéndote-, coincido en lo demás con tus otras palabras. Esta tarde acompañarás a Saga y Bedelia al bosque. Puede que ellas sepan más sobre esa cosa, pero necesitarán protección, por si acaso. No se me ocurre mejor persona que tú, que además eres un forastero como ellas.

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04/12/2016, 13:02
Fredrick

Fredrick da un puñetazo sobre la mesa.

-¡Me parece un plan cojonudo, Thaldein! Es decir, estamos jodidos, pero eso no quita que tus ideas sean buenas. Estoy de acuerdo con todo lo que has propuesto, y creo que es la única posibilidad que tenemos.

Esboza una sonrisa radiante.

-Así que cuenta con mi apoyo, y con el de los míos.

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04/12/2016, 13:03
Thaldein

Thaldein le devuelve la sonrisa.

-Gracias, Fredrick. Significa mucho para mí.

Se gira hacia Lamont, que mira hacia la nada, pensativo.

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04/12/2016, 13:05
Lamont

-... He de reconocer que no se me ocurre nada mejor. Sigue sin gustarme que nos hayas reunido aquí a espaldas del resto -Dirige a Thaldein una mirada acusadora, antes de seguir hablando-, pero he de concederte que has pensado esto con detenimiento. Habrá que ver qué dicen en el thing... Pero en fin. No me parece mal.

No puedes dejar de observar que no ha dicho en ningún momento que vaya a dar su apoyo a Thaldein, pero el rubio parece quedarse satisfecho igualmente, y asiente con gratitud. Luego todos os giráis hacia Hjalmar, el último que queda por responder.

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04/12/2016, 13:07
Hjalmar

Hjalmar medita la respuesta durante un rato, tanto que empezáis a pensar que no se vaya a dar por aludido. Cuando responde, lo hace mientras se incorpora de la silla.

-Sultünge ha sobrevivido inviernos duros, y situaciones muy críticas. Hemos perdurado en el pasado... Y perduraremos ahora.

Empieza a dirigirse a la puerta, con lentitud. Lamont se acerca a él para ayudarle, pero Hjalmar lo rechaza con suavidad. Luego se gira hacia Thaldein por última vez.

-Eres un buen hombre, Thaldein. No pierdas la cabeza.

Thaldein no responde, pero asiente en silencio. Hjalmar no ha dicho nada en relación a sus ideas, pero parece que para el rubio ese simple comentario es suficiente.

Notas de juego

Voy a dar la reunión por terminada (con algún post de cierre cuando Lamont y Hjalmar salgan de la casa), a menos que quieras añadir algo más

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05/12/2016, 11:28
Resmit Kruik

Valla, parece que Fredrick apoya a Thaldein tanto como yo, sin embargo a Lamont y Hjalmar no los veo tan convencidos. Lo que sucede es que Thaldein no se comporta como un lider y puede que ese sea el motivo por el cual puedan dudar.

Ambos se había levantado, parece que el viejete no se dejaba ayudar, supongo que quiere ser autosuficiente cuanto más tiempo mejor... aunque también es el deber de un hijo cuidar de su padre. Esbozo una ligera sonrisa al ver el gesto de Hjalmar, ese acto me hace recordar momentáneamente a mi padre y lo unidos que estábamos. Los observo mientras terminan de salir de la casa y cuando la puerta se cierra me vuelvo a los dos hombres que aún permanecen sentados.

- No los he visto muy convencidos... pero es lógico, por mucho que no quieras serlo, ahora eres el lider de Sultünge, aunque sea temporalmente, pero no actúas como tal. Esta bien que escuches a los que te rodean, pero debes tomar decisiones con autoridad y no acojonarte ante idiotas como Rorar o Godwin cuando te llevan la contraria, esa actitud es la de un niño cobarde.

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05/12/2016, 19:41
Thaldein

Thaldein suspira. No parece haberse tomado a malas tu provocación.

-Y la tuya es la actitud de un guerrero, Resmit. Por desgracia, en estos momentos Sultünge no necesita ser dirigido por un guerrero. No si queremos evitar que corra más sangre.

Se incorpora, y Fredrick le imita. Parece que ha dado la conversación por finalizada.

Notas de juego

Aunque, desde luego, nada te impide contestarle de nuevo. Tampoco sería de mala educación.

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06/12/2016, 01:20
Resmit Kruik

Espero que mi provocación al menos le haga cambiar su actitud en thing.

Al ver que ambos se levantan o también les sigo, creo que con lo que he dicho es suficiente, no quiero que tampoco se cabree conmigo, pero es importante la forma de dar el mensaje a su pueblo.

- No te lo tomes mal, solo digo que necesitas inspirar confianza con tus palabras, y para ello debes tenerla tú.- digo mirándole a los ojos - Ahora iré a buscar a Ashe, después me gustaría dormir un poco antes partir con Saga y Bedelia.