Cuando los jirones de negrura desaparecen en el aire te das cuenta de que has dado un par de pasos hacia atrás sin darte cuenta. Movido por un miedo primario, al que incluso tú eres incapaz de ser indiferente, notas que tus músculos están completamente tensos, preparados para defenderte de cualquier peligro. Y una vez tus ojos recuperan la percepción del entorno, no puedes evitar moverlos de forma frenética, intentando encontrar el origen de la amenaza. Detrás de ti, Yngrid se remueve en el suelo, intentando incorporarse con rapidez: Probablemente la explosión le ha pillado por sorpresa y le ha hecho perder el equilibrio. Mientras recoge su arco, murmura una maldición por lo bajo, completamente aterrada. ¿Qué clase de energía impía ha podido originar aquel despliegue de poder sobrenatural?
No tardas en descubrir la respuesta a esa pregunta.
Como ya comenté, discreción absoluta en lo que respecta a esto. Sobre todo con Rayden
Rodeado por un aura negra, la silueta de Resmit emite un brillo espectral que, irónicamente, parece ensombrecer la blanca nieve a su alrededor. Su pecho sube y baja al respirar, y cada vez que se mueve la nube oscura que baila a su alrededor se expande o contrae al unísono, como si fuera una extensión de su cuerpo. Decenas de lenguas incorpóreas se retuercen a su alrededor, desapareciendo segundos después para dejar paso a otras que pronto han desaparecido también. Un misterioso fuego negro, y en el centro, él...
Cuando alza el rostro, distingues un extraño destello en sus ojos... Una chispa de caos, un asomo de locura que, sin dejar de pertenecerle, le hace parecer distinto. Más peligroso. Más cruel. Más loco.
Los deslumbrantes ojos de Resmit despliegan una escalofriante sensación que recorre la espina dorsal del gigante. Por un instante Drunfo olvida todas las secuelas de tus heridas y consigue reconocer la ya casi familiar sensación de la bestia que hay en su interior acechando tras sus instintos.
Con aquello en mente, el gigante escruta al otro norteño, que ha dejado de serle humano y no consigue encontrar un atisbo de racionalidad. Aun con ello, lo intenta.
-¡Resmit! ¡Que cojones eres!
En lugar de responder, el Solvgilftanden alza su maza y os apunta con ella, sonriendo como un maníaco. Lo hace lentamente, como saboreando el momento, así que tanto Yngrid como tú tenéis tiempo de echaros a un lado antes de que una lengua de fuego negro arrase el lugar donde estabais un segundo antes. La llamarada avanza en línea varios metros detrás vuestra hasta alcanzar un árbol, que estalla subitamente en una explosión.
Yngrid suelta una maldición, de nuevo, mientras sus manos temblorosas intentan cargar una flecha en el arco. Percibes que está aterrada, pero a diferencia de muchos otros parece que el miedo en ella es más un incentivo que una limitación, porque rápidamente su postura se convierte en la de una fiera acorralada, que enseña sus dientes a su enemigo en una mueca desafiante. Hay personas que, en la adversidad, parecen sacar lo mejor de sí mismas, y aquella mujer parece una de ellas.
Resmit, sin embargo, parece estar más interesado en ti, porque girándose e ignorándola por completo, alza la maza y te apunta con ella.
Motivo: Turno Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 70(+40)=110
Tirada oculta
Motivo: Blahblah
Tirada: 1d2
Resultado: 2
Turno (y cualquier otra tirada que corresponda)
Ante tal situación Drunfo recurre directamente a la voz de su cabeza.
¿Sabes algo de esto?
Mientras tanto intenta apartarse a un lado dejando a Yngrid en un flanco del combate al mismo tiempo que aguarda el momento propicio para atacar.
Motivo: Turno
Tirada: 1d100
Resultado: 35(-10)=25
El martillo se rodea de llamas negras, como antes, pero antes de que estas te alcancen Resmit da un paso hacia atrás y lanza un gruñido de dolor. En su costado, la flecha que Yngrid acaba de disparar. El impacto hace que el guerrero dé un par de pasos hacia atrás, y las llamas que le rodean se esfuman en el aire entre nubes de humo.
Resmit baja la mirada, hacia la flecha, visiblemente sorprendido. Parece que el haber ignorado a Yngrid le ha salido caro...
Tirada oculta
Motivo: blah
Tirada: 1d100
Resultado: 36
Tirada oculta
Motivo: blah
Tirada: 1d100
Resultado: 11
Tirada oculta
Motivo: blah
Tirada: 1d100
Resultado: 50
Pffff vaya suerte tenéis
El momento para atacar le llega a Drunfo como agua de mayo. Que se precipita hacia Resmit.
Motivo: Ataque
Tirada: 1d100
Resultado: 55(+90)=145
Es tu momento de vacilación, mientras esperabas el momento de atacar, lo que con toda seguridad ha salvado la vida a ese tipo. En el último momento logra interponer su maza en la trayectoria de tu espadón, desviándolo y salvándose por los pelos de ser alcanzado. Sin embargo, la pobre manufactura del arma hace que esta estalle en pedazos de forma casi inmediata al enfrentarse a la impresionante fuerza con la que lanzas el golpe. Resmit se queda con un trozo de mango en la mano...
Siguiente turno. Resmit está desarmado y herido, vosotros dos estáis como una rosa, en principio. Aunque bueno, tú tienes el -40 a toda acción, no se te olvide aplicarlo en el turno siguiente.
Declara acciones y haz todas las tiradas que correspondan (incluida la de defensa, por si acaso). Si se te olvida alguna te la hago yo para agilizar, así que si tienes duda tú tira, y si no hace falta al final pues se ignora y ya (por ejemplo, si tiras defensa y no llega a atacarte, como este turno).
La repentina sacudida del coche de armas hace que el dolor de las heridas de Drunfo, quien las había olvidado debido a la adrenalina del momento, le obliguen a retorcerse sobre si mismo. Al volverse hacia Resmit, la imagen le envuelve, el instinto asesino le embriaga, la bestia le posee.
Su adversario, desarmado, como aquella vez hace unos días, en la batalla contra aquellos hombres a las afueras del pueblo, cuando aquel infeliz se arrodilló pidiendo clemencia, pidiendo que no fuese devorado por las ansias asesinas de su adversario. Aquella vez no pudo ser, pero esta, esta es distinta. Drunfo casi puede saborearlo, y le parece oír de nuevo aquella voz en su cabeza.
-Sangre...
Los ojos se le inyectaron en rojas venas y relamiéndose se lanzó con ambas manos en una embestida total, cerrando los ojos de forma placentera para disfrutar del momento al máximo, evadiéndose de todo sonido, ruido o sensación colindante, descargando toda su furia sobre el mandoble.
-Si...
Pero en un ultimo instante, a mitad del movimiento, una idea, más bien un recuerdo, le surca la mente y rectifica la trayectoria del mandoble hacia el hombro.
Motivo: Turno
Tirada: 1d100
Resultado: 94(-50)=44
Motivo: Turno (abierta)
Tirada: 1d100
Resultado: 8(+44)=52
Motivo: Ataque
Tirada: 1d100
Resultado: 10(+50)=60
Motivo: Defensa
Tirada: 1d100
Resultado: 98(+25)=123
Motivo: Defensa (abierta)
Tirada: 1d100
Resultado: 4(+123)=127
Ataque total (aplicalo tu que no recuerdo cuanto era)
ya le aplico yo el -40 al ataque defensa turno
(defensa creo que se quedaba a cero por el ataque total, pero tiro por si acaso)
y apunta al hombro, que se me ha olvidado decirlo, no se cuanto se le resta al ataque tambien
Yngrid vuelve a cargar una flecha y dispara con sorprendente rapidez, mientras empieza a rodear a Resmit lentamente, moviendo sus pies sobre la nieve con total naturalidad. La flecha va directa al cuello del Solvgilftanden, pero una llamarada negra la consume en el último momento, antes de que alcance su destino. Súbitamente, el escudo de llamas vuelve a aparecer a su alrededor, derritiendo la nieve a vuestros pies. Una de ellas te golpea antes de que consigas golpearle con la espada, lanzándote unos metros hacia atrás pero sin hacerte daño.
Resmit se lleva una mano al costado y arranca la flecha de golpe. Ya no sonríe.
-Acabaré con vosotros...
Motivo: Turno Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 69(+40)=109
Motivo: Ataque Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 42(+110)=152
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 47(+110)=157
Tirada oculta
Motivo: Flechas que le quedan a Yngrid
Tirada: 1d10
Resultado: 1
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 35
Cuatro cosicas:
-Este turno no ataca, lo de la llamarada es una descripción mía para describir el efecto del escudo de llamas. Aun así, logra defenderse de los dos ataques sin sufrir daño (por los pelos en el caso de Yngrid).
-No lo aclaré antes, pero entiendo que entiendes que la voz ha pasado de ti.
-Si declaras Ataque Total (o Defensa Total, o cualquier cosa que afecte a todo el turno), hazlo en la tirada de turno. En el motivo, en plan "Turno (ataque total)".
-El penalizador se reduce a la mitad en el turno. Es decir, tirarías con un -30.
Ninguna de estas cosas supone diferencia alguna este turno, pero bueno, para la próxima.
Next round!
Drunfo se incorpora de nuevo, sus ojos ya no tienen aquella mirada. La repentina sacudida de fuego le ha hecho darse cuenta que no se encuentra ante un hombre cualquiera.
Elevando de nuevo la espada Drunfo se lanza al ataque, pero esta vez de un modo mas calmado, evaluando los movimientos y controlándolos.
Motivo: Turno
Tirada: 1d100
Resultado: 16(-30)=-14
Motivo: Ataque
Tirada: 1d100
Resultado: 37(+50)=87
Motivo: Defensa
Tirada: 1d100
Resultado: 30(+35)=65
La mitad de -40 es -20 no? Supongo que te has equivocado...
Parece que el enfoque más calmado te otorga cierta ventaja, porque esta vez consigues evitar las llamaradas con solo prestar un poco de atención. Sin embargo, Resmit no parece dispuesto a dejarse alcanzar, y constantemente se aparta de tus golpes o interpone su escudo de humo y cenizas entre medias, haciendo que tus golpes fallen por poco. Aun desarmado, parece un enemigo formidable... Y, sin embargo, no ataca en ningún momento, limitándose a defenderse. El calor de las llamas te golpea en la cara, recordándote el castigo que te espera en caso de descuidar tu defensa, y el dolor de tus heridas no ayuda. Sin embargo, parece que, al menos por ahora, llevas la voz cantante.
La gran oportunidad llega con una nueva flecha de Yngrid, que dispara desde la retaguardia de Resmit. Este consigue apartarse por unos centímetros, partiéndola en dos con una llamarada concentrada, y dejando de centrarse en ti por un momento. Cuando ves el hueco, das un paso adelante, intentando abrazar la oportunidad y golpeando con todas tus fuerzas... Pero entonces tus músculos tiemblan, y el daño acumulado de unas noches atrás regresa en forma de debilidad momentánea, haciendo que por poco sueltes la espada. Resmit interpone de nuevo sus llamas, y la oportunidad desaparece.
No has dejado tiempo para que sanen tus heridas, y te está pasando factura.
Entonces algo te llama la atención. Resmit se está sujetando la cabeza con ambas manos, y en su rostro se lee una expresión de dolor. Parece que su mente estuviera ardiendo...
Motivo: Turno Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 18(+40)=58
Motivo: Ataque Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 45(+110)=155
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 17
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 97
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 8
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 54
Motivo: Turno Drunfo (defensa total)
Tirada: 1d100
Resultado: 50(-30)=20
Motivo: Turno Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 85(+40)=125
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 26
Sí, es -20, y yo no sé dividir :)
No pasa nada esta ronda (os ha parado los dos ataques, el de Yngrid de nuevo por los pelos, y él no ataca). Siguiente ronda.
Yngrid se lleva una mano a la espalda, dispuesta a cargar una nueva flecha... Y entonces escuchas como suelta una maldición, bastante obscena incluso para los estándares norteños. Apartándote unos metros de Resmit para recuperar el control del combate, te permites un momento para desviar la mirada hacia ella. Es en ese momento cuando te das cuenta, al igual que ha hecho ella un segundo antes, de que no le quedan flechas. La norteña mira a todos lados, frenética, hasta que sus ojos se posan en un punto en la nieve. Siguiendo su mirada, descubres donde está el resto de su munición: en el mismo punto en el que fue abatida cuando Resmit se transformó, antes de empezar el combate. No hay que ser un genio para deducir lo ocurrido: la caída volcó su carcaj, derramando parte del contenido sin que Yngrid, dominada por la adrenalina de la situación, lo percibiera. Algo que puede costaros la vida, pues a pesar de que ella reacciona rápidamente y comienza a correr hacia dicho punto, los segundos que tardará en volver a estar activa pueden suponer una gran diferencia...
Como si hubiera oído tus pensamientos, Resmit deja de sujetarse la cabeza y te mira con los ojos inyectados en sangre. Luego alza las dos manos, señalándote...
La idea de que Resmit esté poseido por algun demonio le cruza la mente a Drunfo, pero la situación es demasiada arriesgada para intentar no herirle de muerte. Cuando el gigante vuelva a centrarse en su enemigo, solamente tiene el tiempo necesario para soltar media blasfemia e intentar una esquiva hacia el lado contrario al que se dirige Yngrid.
-La puta que le...
Motivo: Esquiva (2 cansancio)
Tirada: 1d100
Resultado: 76(+5)=81
-130 + 30 defensa total + 30 cansancio + 75 defensa = +5
Motivo: Crítico
Tirada: 1d100
Resultado: 93(+35)=128
Una sensación abrasadora envuelve a Drunfo, que rueda por la nieve intentando equilibrarse, pero el dolor de las heridas más el añadido dolor de las llamas hacen que el gigante se quede con una rodilla clavada en el suelo y el resto de su peso sobre su brazo. Parte de su capa se ha chamuscado a una velocidad sorprendente, dejando al aire parte de su pecho y el brazo con el que se está apoyando en el suelo. Ambas partes están chamuscadas.
Drunfo mira a Resmit jadeando de cansancio, las gotas de sudor le corren por la frente pese al frío. Es increíble que haya podido esquivar el ataque, al menos parcialmente. El norteño no puede hacer nada, su mandoble está a unos metros de él, tirado en la fría nieve, el fuerte impacto a impedido que pueda seguir sujetando tan pesada arma.
El dolor le envuelve, pero Drunfo intenta resistirlo quedándose quieto, es solo cuestión de segundos que la adrenalina haga efecto y el dolor vuelva a esfumarse. La cuestión es que Drunfo no sabe si tiene esos segundos.
Motivo: RF
Tirada: 1d100
Dificultad: 128+
Resultado: 37(+45)=82 (Fracaso)
Motivo: RF - Chungo
Tirada: 1d100
Dificultad: 35+
Resultado: 29(+45)=74 (Exito)
Motivo: Resistir Dolor
Tirada: 1d100
Dificultad: 70+
Resultado: 11(-5)=6 (Fracaso)
Motivo: Turno (defensa total)
Tirada: 1d100
Resultado: 20(+35)=55
Motivo: Defensa Total
Tirada: 1d100
Resultado: 15(+34)=49
Resmit suelta un rugido de rabia, sin motivo aparente.
-¿¡QUÉ HAS HECHO, MALDITO HIJO DE PUTA!?
Distingues por el rabillo del ojo como Yngrid se agacha junto a sus flechas, y se dispone a disparar cuando el Solvgilftanden la señala con un dedo.
-¡TE MATARÉ!
Motivo: Turno Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 59(+70)=129
Motivo: Esquiva Yngrid
Tirada: 1d100
Resultado: 71(+40)=111
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 33
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 77
Tirada oculta
Motivo: Blah
Tirada: 1d100
Resultado: 81