Partida Rol por web

Sil Auressë

[18.4.1] Los Guardianes de Enila

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29/12/2017, 20:34
Director

Russef se acercó al herido para atarle los brazos según le habían indicado, y a continuación se sentó en el suelo a descansar. Pronto se quedó dormido.

Mientras tanto, Denelloth sujetaba el curioso medallón y lo observaba con detenimiento. Era de creación reciente, aunque con cierto desgaste en los bordes. Se había usado el mismo molde para crear una serie de amuletos iguales o parecidos, y luego con cuidado se habían repasado los detalles. El metal era una aleación, y aunque no era de oro macizo, pesaba bastante. Sin duda tenía su valor, además del simbólico. Y la cadena sí era de oro, de una orfebrería bastante delicada, como también pudo corroborar Ferrim.

No era desde luego una baratija como para abandonarla sin más en los tiempos que corrían. En cuanto al dibujo, representaba sin duda la huella de un cachorro de lobo. El tamaño del amuleto era pequeño, como para un niño. Incluso la cadena era bastante corta.

Mientras los dedos del montaraz recorrían el objeto, Norion se incorporó ligeramente. Era un erudito, y había consultado innumerables tomos y había bebida de muchas fuentes de sabiduría. Conocía los mitos y las creencias de Cardolan, y de los dúnedain en general. La figura del lobo había estado presente con frecuencia en las tradiciones de los hombres de Arnor. La cercanía de la Naturaleza de los dúnedain del Norte, representada en los montaraces reales sobre todo, había preparado un terreno propicio para adoptar y asimilar creencias pre-númenoreanas de culturas más primitivas. Los espíritus de la Naturaleza eran representados en su forma animal, y conferían protección a los creyentes. Y para Norion, el amuleto sin duda era un amuleto de protección.

En cuanto a los lobos, en Cardolan se multiplicaron masivamente en los años posteriores a la Gran Plaga. Eran una amenaza constante para los rebaños de las ovejas. Un animal temido y respetado, a pesar de las inclinaciones a servir a la oscuridad de algunas razas o ejemplares. En Cardolan existía un lobo autóctono, ágil y de pelaje largo y rojizo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Suponemos ciclos de 4 horas. Norion has descansado ya una par de horas. Ferrim necesita menos descanso.

Al finalizar el ciclo de 4 horas, Eben podrá descansar y otro tiene que subir. Otho sigue un poco más en la atalaya.

Norion: si quieres inspeccionar el objeto para saber si tiene propiedades mágicas, debes tenerlo en tu mano.

Russef: lo he PNJtizado un poco aquí y he aprovechado para que descanse.

Entiendo que el plan es que Denelloth, Eben y Ferrim partan al alba. Norion, el herido, Otho y Russef se quedan en la cabaña. Si no se dice lo contrario, voy con eso.

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29/12/2017, 20:37
Director

El dúnadan se sentó junto a la mesa, y miró el fuego. Recordó otros fuegos, de campamento, rodeado de nieve. En las lejanas tierras al norte de Angmar. La unidad de Faradrim Aran. Sus camaradas. Entre los Montaraces Reales, la figura del lobo tenía un significado especial. La Hermandad del Lobo había sido fundada unas décadas antes en aquellas tierras por dos montaraces de renombre. Después había caído en desgracia, aunque algunos como su compañero Khelroc, habían mantenido viva la llama en secreto. Thelran, el Lobo Blanco, era el sobrino de uno de los fundadores, y recientemente Denelloth había tenido visiones que le hacían sospechar de alguna relación entre aquel amuleto y los Lobos de Arthedain. Pero no tenía ninguna muestra concreta. Simplemente, parecía mucha casualidad en unos días marcados por el destino más que por el azar.

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30/12/2017, 13:32
Ferrim, hijo de Ferric

Ferrim se levantó a observar el medallón. No estaba muy seguro de que pudiera interpretar el significado oculto de la huella del lobo, quizá un icono propio de ciertas gentes de Arnor, tierra en la que era un extraño. ¡Aunque nunca se sabía cuáles eran las rutas del conocimiento!

De lo que estaba seguro era de que podía hablar largo y tendido sobre las características del metal, sobre cómo fue trabajado y, quién sabe, sobre misterios ocultos en su interior.

Dejadme ver—solicitó. Sujetó el medallón y lo estudió con ojo experto. Era más una curiosidad innata que un verdadero misterio. Para él, ese medallón era una señal de algún aliado que había pasado por la cabaña, alguien que deseaba informar discretamente de su paso. Difícilmente sería alguien que Ferrim conociera, en cualquier caso.

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01/01/2018, 17:57
Denelloth
Sólo para el director

Sabía que el sueño tardaría en acudir. A su cabeza afluían las imágenes de lo vivido aquel largo día. La sangre en las sienes antes del ataque, el olor del miedo en los prisioneros, la expresión aterrorizadas de los orcos, el rostro sombrío de Norión a la mínima luz del Oscurecimento, los momentos de tensión, la presión de saberse en un momento clave de su vida y de la de muchos otros.

Además ahora se añadían, como fantasmas del pasado, visiones de su vida como montaraz. Las largas caminatas, los helados vientos y la nieve, las jornadas de acoso durmiendo a la intemperie y alimentándose de raíces. La visión, no siempre fugaz ni agradable, de los lobos en lotananza. Historias contadas a media voz sobre animales protectores y viejas hermandades. Una vida de ataques fugaces y retiradas constantes, siempre cediendo terreno, palmo a palmo, inexorablemente.

La jornada del día siguiente prometía parecerse a aquella guerra de guerrilla que había conocido de primera mano en las llanuras de Oilad y los páramos más al norte, y buscaba en su memoria los detalles, las estratagemas, lo aprendido en aquel tiempo. Al mismo tiempo, no podía dejar de notar una presión en las cuencas de los ojos, cuando se cruzaban por su cabeza la visión del cadáver andante del claro, y el horror de pesadilla que se intuía tras el portal abierto junto al monolito. Pero el cansancio no le permitía pensar con claridad, y los recuerdos e imágenes iban y venían sin control.

Notas de juego

Editado, que me quedó un poco parco... Estaba al móvil...

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02/01/2018, 21:18
Director

El medallón parecía aún más pequeño en la mano de Ferrim, quien ahora lo observaba con ojos expertos a la luz de una vela. Denelloth se encontraba sentado en el suelo, separado de Norion por una distancia que reflejaba la grieta que se había formado entre los dos. Habían pasado por mucho para llevar a cabo la misión, y habían dejado mucho por el camino. Tal vez con el tiempo, se podía comenzar a volver a unir aquello que la Oscuridad y el Abismo habían separado. 

En cuanto al amuleto, Ferrim pudo corroborar que era efectivamente obra de humanos. Carecía de la contundente perfección de los naugrim, y de la delicadísima orfebrería de los eldar. No obstante, estaba hecho por un artesano más que competente, y de cierto renombre. Pues los hombres buscaban perdurar su legado más allá de su corta vida, y a través de sus obras. Por aquel motivo, a veces los herreros y otros artesanos de los hombres dejaban una pequeña marca... Como una firma. 

Y allí estaba. Escondida en un lugar del propio relieve, invisible para el que no podía verlo. Una "T" y una "H". Y una serie de puntos que indicaban que en efecto el amuleto era el tercero de una serie de siete. 

Ferrim deposió con cuidado el objeto en la mesa de madera. Y entonces volvió a cogerlo. Una vez más lo depositó, y lo cogió. Lo sopesaba, y no pudo evitar fruncir el ceño. Notaba algo raro en el metal... 

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02/01/2018, 21:24
Director

La aleación era de oro y de otros metales, pero era una aleación demasiada pura y demasiado refinada para los conocimientos humanos. Solo la fundición fría o las forjas de los enanos eran capaces de producir algo así. La diferencia era muy sutil, pero no había duda. Habían fundido un metal extraordinario para crear un objeto de apariencia más bien básica.

¿Un elfo había entregado el metal a un herrero humano? 

No tenía sentido, y el misterio era cada vez mayor. 

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03/01/2018, 00:07
Director

A medida que Girion se acercaba a la torre en llamas, pudo comprobar que no se trataba de una construcción fija ni tampoco una torre de asedio. Era una estructura creada de forma rápida, apilando troncos de madera con cierto orden. Y el uso final era encender el fuego como señal de algo. Eso explicaba la posición elevada. 

Girion estaba atento a todo. A su alrededor, vio grupos de orcos dispersos, pero distantes entre sí. Parecían acudir en la misma dirección aproximada a toda prisa, y resultaba fácil pasar de largo ya que los alcanzaba de espaldas. Además, conocía esta parte del feudo, y pudo encontrar un sendero marcado con algunas rocas por el que se podía ir mejor a caballo. Vieneto llegaba ahora también la pica con la cabeza de Gothdush bien visible en un costado.  

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

tirada de montar con el siguiente post

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03/01/2018, 16:41
Norión

Norión abrió los ojos tras el par de horas de descanso, a su lado yacía el hombre mal herido cuyo espíritu seguía en el Umbral de la muerte. Su supervivencia dependía de él y de la voluntad de Namo, así que puso su mano sobre la frente del discípulo e hizo una plegaria al Valar intercediendo por él. Un cosquilleo recorrió su cuerpo mientras la esencia fluía a través suyo sanando moribundo. Luego se quedó en silencio.

Ferrim observaba la moneda, como si pudiese penetrar la materia y descubrir la esencia de a roca que había dado origen a ese metal. El anamarta había percibido el poder del amuleto, la fuerza que lo convertía no solo en un símbolo sino en un objeto protector, sin embargo no había comprendido su función. Se acercó a la mesa dónde el Naugrim estudiaba la pieza - Me permites?- preguntó y tomó unos segundos la pieza, sintiendo la magia impregnada en el medallón. Algunos detalles se le escapaban, pero en sus manos podía seguir los rastros de esencia del objeto y desentrañar parte del misterio que rodeaba a ese símbolo.

Dio unos pasos hacia atrás, volvió a sentarse y cerró sus ojos, concentrándose en el objeto que llevaba en la mano. En ese momento eran él y la impronta del lobo, y nada mas. Apenas percibía su respiración, ignorando el entorno que lo acompañaba, pero en el silencio y la oscuridad, el metal parecía brillar, y el entramado mágico se veía con claridad. El tiempo parecía haberse detenido, mientras Norión contemplaba la obra. Un cordón lo unía al mineral que le dio origen, otro al herrero que lo había forjado, otro a quien había hecho el encantamiento, otro a la fuerza que lo alimentaba y otro a quien lo había portado pocas horas atrás. Otros lazos, nuevos y débiles aún, lo unían al artesano que lo había descubierto, al anamarta que lo estaba portando, y al montaraz que estaba destinado a caminar entre los lobos. Poco a poco los secretos se fueron develando hasta que finalmente volvió a abrir los ojos. Se puso de pie y se acercó a Denelloth.

Extendió su mano con el colgante y se lo ofreció al montaraz - Los lobos están contigo, Denelloth, estas unido a esta pieza, quien lo dejó sabía que vendrías- sea que lo fuese a usar o que se lo entregara a otra persona, el dúnedain era el único que podía decidir el destino de ese amuleto. Luego el anamarta comenzó a moverse de un modo que le era ajeno, imitando algo que creía recordar, lo agarró del hombro derecho con su mano derecha, cruzando el brazo por delante y le miró. El gesto era idéntico a uno que le había visto hacer al gran Lobo - La Hermandad del Lobo, Denelloth. He tenido visiones de ellos frente al monolito, cuando los misterios de Arda estaban abiertos para mi. He visto a Haldamir, el fundador de la orden, tío de Thelran, quien confiaba la protección del Rey de Arthedain a Benaldamat. De algún modo estoy unido a ello, pero tu... tu eres protagonista de lo que vendrá y no me extraña que la Hermandad te haya dejado el medallón, me temo que te están llamando - Norión no había descubierto todo lo que esperaba del amuleto, pero podía unir las hebras del destino y comprender que el montaraz era parte de un engranaje inmenso del cual el anamarta apenas había visto un destello -Tal vez puedas hablar con Benaldamat a través de la piedra de la luna, él te mostrará el camino- soltó al montaraz y dio un paso atrás, para tener a la vista a Ferrim - Los lobos aprendieron a leer las runas y a respetar su significado como muy pocos lo hacen hoy en día. Las marcas del medallón no son casuales, ni es solo magia, para ellos están asociadas a quien lo porta, no solo a su creador, y tienen un profundo significado- agregó. 

- Nuestros caminos estan por separarse. Lamento no ser de utilidad allí dónde van, pero contáis con mi bendición , si es que aún tiene valía para ustedes. Pero lamento mas cosas - dijo, viendo a ambos a los ojos - A ambos los consideré mis amigos*, los únicos tal vez, ambos han demostrado ser dignos de la bendición de los Valar y de portar la responsabilidad que llevan en sus hombros, Arda está a salvo con personas como ustedes dos. Lo que ocurrió allí... Lo que decidí sacrificar para lograr cerrar el portal... todo ello ha tenido un precio muy alto - hablaba pausado, sentía un nudo en la garganta que entrecortaba su voz, aunque su semblante seguía siendo inexpresivo - Que Namo me juzgue el día que parta de aquí, pues aún habiendo salvado el monolito y cerrado el portal, aún habiendo interrumpido el ritual y purificado el altar de Yavanna, aún con todo lo bueno, el precio ha sido enorme. He entrado en la oscuridad y la conozco... y vaya si la conozco. He cometido sacrilegios, he levantado a los muertos, he matado personas, he lidiado con demonios, y quien sabe a cuanto mas estaba dispuesto. Logré mi objetivo, al costo de ennegrecer mi alma y alejarme de los pocos hombres que confiaban en mi... Sin embargo en el camino e ido mas allá, he descubierto el verdadero equilibrio entre los opuestos, he comprendido la red que nos vincula y he encontrado la fuerza que todo lo enciende. Por ello, pese a todo, os digo a ambos... llegará el día, y pronto es, en el que los Valar pongan otra carga sobre ustedes, y cuando todo parezca perdido y sus fuerzas desfallezcan, miraran a un lado y allí estaré, para sostenerlos como lo han hecho conmigo, os lo juro por el fuego que arde en mi y que nunca perece - dijo, antes de guardar silencio. Respetaba a esos dos como a ningún otro, pero sabía que la herida llevaría años en cicatrizar y no había magia alguna que pudiese sanarla antes.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Notas a todos:

Asumo que Russef duerme y Eben está arriba en su ciclo de guardia (4 horas)

* si si, a ambos, Ferrim incluido, pues pese al arranque del vínculo, en la cabaña Norión dejó el pasado atrás y confió para dejarle a su bien mas preciado (el libro que le regalo Finduilas)... tal vez el anamarta tiene tan pocos amigos que con solo hablarle cinco minutos seguidos ya los considera amigos XD

Notas para el Master, a revisar si estan bien las cuentas:

Preserve II (3 PP) (El moribundo va a estar estable otras 4 horas y recupera 8 PV en las dos horas durmiendo, quedando en -60 PV)

PV  10/56  ( estaba con 24 de daño pero recupera 22 PV /3 horas durmiendo = 14 PV)

PP  23/35   (tenía 3 PP disponibles, gasta 3 PP en hechizo, recupera 17.5 PP/ 3 horas durmiendo = 12 PP)

Meditación: +5 por 15 minutos, +30 por cabaña tranquila, +38 por habilidad = +73 

Sintonización y Leer runas: 33 + efecto meditación... tirada horrible, no se que puede llegar a descubrir!! Si algo sale, te pido si podes compartirlo a Ferrim y Denelloth, porque tardaré en volver a postear.

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03/01/2018, 23:03
Girion

Estaba claro que aquella tremenda pira era una señal y por la dirección en la que se topaban con los orcos era una señal para que se acercaran las tropas de la oscuridad.

La cosa no pintaba bien y menos el hecho de que llevara la cabeza de Gothdust clavada en una pica. Pero no podía echarse atrás ahora, no, sobre todo con lo cerca que estaba y lo importante que podía ser este.

Girion apretó con fuerza las rodillas contra el lomo de Veinto para sentir a su amigo y para tener más fuerza y entereza.

-Vamos amigo mío, ya falta poco -susurró el joven dunadan a su corcel para darle y darse ánimos.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Perdón, se me ha olvidado mirar los destinatarios U_U' 

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04/01/2018, 00:18
Denelloth

Las primeras revelaciones de Norión no parecieron pillar por sorpresa a Denelloth; más bien parecía ausente, abatido, como pensando en personas y lugares lejanos. Aceptó el medallón alzando despacio la mano derecha, asintió y no dijo nada. Tras una larga mirada al suelo levantó los ojos hacia el anamarta. Una mirada que expresaba comprensión por el dolor sufrido. Mirada que, conforme Norión seguía hablando, fue mutando en otra de respeto y compasión, y que terminó siendo emotiva.

Pareció costarle encontrar qué responder al sacerdote. Al final pareció atreverse a formular con sencillez algo como la respuesta a una pregunta que parecía haber rumiado largamente.

-Ese... cadáver andante... Esa abominación, tú lo levantaste... ¿es así? Llevo todo el día dándole vueltas. Terrible. No quiero saber el cómo ni el por qué. Sólo espero que los Valar sean compasivos contigo... Pues sin duda esa es una carga dura de llevar durante toda una vida, de la que no creo que nadie pueda aliviarte- concluyó, sacudiendo la cabeza con pesar. -Pero recibo agradecido tu bendición, Norión, pues bien sé y he visto el sacrificio que has hecho hoy por todos nosotros y por tantos otros. No os dejaremos olvidados; sé que pronto volveremos a sostenernos mutuamente, cuando la necesidad apriete, amigo- añadió, respondiendo al gesto de Norión con el brazo con el mismo.

Notas de juego

Pensaba dejar el tema del zombi para una charleta final con Norión, pero ya que saca el tema...

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06/01/2018, 19:11
Director

El resto de la noche pasó sin incidencias, y todos pudieron descansar un poco sin desatender en ningún momento la vigilancia desde la pequeña atalaya. Antes del alba, Denelloth, Ferrim y Eben se preparaban para partir. Habían acordado que Russef se iba a quedar con Norion, Otho y el discípulo herido de Gothdush en la cabaña.

A los tres que abandonaban la relativa seguridad de la casa les esperaba un trayecto a pie por las tierras altas de Cardolan, con el peligro de los murciélagos y bandas de orcos  de la retaguardia del ejército enemigo. Pero contaban con dos montaraces que conocían el terreno.

Por la ventana pudieron comprobar cómo durante la noche se habían ido formando nubes oscuras, y ahora había empezado llover. Una lluvia fina, pero incesante.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Russef, Norion y Otho se quedan
Eben, Denelloth y Ferrim se marchan => la historia sigue para ellos aquí

Denelloth&Norion => si queréis añadir algo más, se puede hacer a modo de flashback (contando que Norion está OUT hasta el 10.1.). También podemos dejar esa charla interesante para el futuro.

Norion&Russef => seguís por esta escena, avisarme en estar disponibles. El jugador que lleva a Russef lleva un mes sin conectarse creo.

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06/01/2018, 19:38
Director

Girion manejaba el caballo con soltura en los últimos momentos del día. Quedaban pocos instantes de luz, y trató de reconocer el terreno desde un punto más elevado. Vio orcos dispersos, más que antes. Junto a la torre incendiada había también bastantes enemigos.

Notas de juego

tirada de Observación

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08/01/2018, 00:15
Girion

Girion seguía cabalgando cada vez más preocupado, pues los orcos crecían en número y más al lugar al que parecía dirigirse: la enorme pira que ardía en lo alto de aquel cerro. Pero necesitaba acercarse, necesitaba otear el terreno desde una posición elevada, pues necesitaba encontrar a Khôradur, al ejercito que luchaba por la libertad de Sil Auressë.

No sabría la repercusión y efecto que tendría mostrar la cabeza del líder enemigo en el fragor de la batalla, pero esperaba que la desmoralización de los oponentes se notara en sus compañeros, otorgándoles un plus de energía o euforia que acabara por determinar la balanza de la contienda.

- Tiradas (1)
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09/01/2018, 22:22
Director

Con la cabeza de Gothdush convertida en un potente estandarte, Girion dirigió su montura hacia un lugar elevado. De repente algo captó su atención. Un sonido, como un trueno pero a pesar de las nubes que había en el cielo, no había tormenta.

Pero lo escuchaba cada vez con más fuerza, desde el otro lado de la colina donde se ubicaba la torre en llamas. Y ahora, al mirar desde más alto, pudo ver movimiento a lo lejos. ¡La batalla!

No obstante, el sonido que le había captado la atención llegaba de más cerca, y cada vez se escuchaba con más fuerza. ¡Eran jinetes! Y cabalgaban directos hacia la batalla, a una velocidad cada vez mayor. Pronto los iba a ver aparecer en su campo de visión.

Notas de juego

espero que se entienda el plano. La flecha azul es el sonido de los jinetes y la dirección a la que van (Girion de momento no los ve porque están al otro lado de una colina)

La batalla parece que se está librando más cerca del río, a más de una milla de la posición de Girion

Los puntos lilas son pequeños grupos de orcos, de 2-3 normalmente (hay algunos más pero a caballo no parecen difíciles de evitar)

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11/01/2018, 13:53
Girion

El ruido resonó en el ambiente como un trueno, pero seguido, casi infinito, que aumentaba el volumen poco a poco. 

-Caballos, muchos caballos...y nuestros enemigos no montan caballos...solo puede ser... -verbalizó Girion aquel pensamiento tras comprender lo que era y la importancia que tenía.

Entonces el joven dúnadan abrió los ojos y comprendió que quizás fuese una tropa de jinetes aliados que entrarían a la batalla en un último asalto.

Sin pensárselo un momento Girion espoleó a Viento apremiándole para que corriera. Pero esta vez, aunque delicadamente, se notaba que había tensión y premura en su petición.

-¡Rápido amigo mío! Debemos darnos prisa y llegar hasta los jinetes que marchan antes de que lleguen a la lucha. Si cargamos junto a ellos con la cabeza de Gothdust como estandarte la entrada será tremenda y tendrá el efecto que esperamos.

Dicho esto apremió aun más a su montura para que corriera todo lo que pudiera en pos de los jinetes que avanzaban a la contienda.

Notas de juego

He supuesto que son aliados...ya verás como esté equivocado. Bueno, espoleo a Viento para que de todo lo que le quede ...y más para llegar al ataque junto a ellos.  

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12/01/2018, 04:05
Norión
Sólo para el director
- Tiradas (18)

Notas de juego

Norión: 23/35 PP

Hechizos para curación discípulo: 

Inicio -60 PV. Se curan 54 PV gastando 9 PP. Descansaría otras 4 horas y allí ya tendría que tener algún punto en positivo (las tiradas son para ver que no falle, hubo un 100 pero creo que no aplicaría nada extraordinario esta vez).

Norión quedaría con 32/35 PP y dormiría 4 horas (lo que dura el Preserve) para recuperarse y poder seguir atendiendo a los dos heridos. 

Si estas de acuerdo, al amanecer podríamos tener al paciente de este lado de los vivos como para conversar.... lo dejo a tu criterio.

 

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13/01/2018, 15:31
Director

Girion apretó a Viento todo lo que pudo, y bajó la cuesta y siguió cabalgando. Pero pronto comprendió que era imposible llegar hasta la altura de la torre antes que los jinetes del otro de la colina. Y en efecto, la unidad apareció por detrás de la colina cuando Girion aún estaba a varios cientos metros de ellos.

Eran una treintena de jinetes, en una formación cerrada de tres filas de diez y los de la primera fila iban armados con lanzas. No llevaban emblemas ni estandarte, aunque uno portaba un palo con restos de una bandera y lo que parecía un yelmo en la punta. Todos ellos cabalgaban a una gran velocidad hacia los orcos. ¡Era una carga!

Algunos de los jinetes giraron la cabeza hacia Girion que llegaba desde su izquierda. Pero ya no iban a detenerse.

- Tiradas (1)
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15/01/2018, 19:35
Girion

Al ver a los jinetes y descubrir que realmente era lo que había imaginado Girion apretó el paso si esto era posible, pues Viento ya marchaba a un ritmo casi insuperable. Pese a que no tenía una lanza con la que ofender a sus enemigos, el joven contaba con la pica y la cabeza de Gothdust para enardecer a los aliados y por el contrario crear confusión y pánico en las filas de sus oponentes.

Así, se unió a sus compañeros en la carga y alto y fuerte les gritó que le dejaran pasar adelante para que vieran su "estandarte".

-¡¡AMIGOS!! ¡¡TRAIGO UNA SORPRESA QUE NOS AYUDARÁ EN NUESTRO ATAQUE!! ¡¡TRAIGO LA CABEZA DE SU LÍDER, GOTHDUST, CLAVADA EN ESTA PICA!! ¡¡DEJADME PASAR PARA QUE LA VEAN!! ¡¡CARGUEMOS CONTRA ELLOS!!

Notas de juego

No sé si puedo lanzar conjuros o pedir que lo hagan...lo que quisiera es que se viera la babeza iluminada en lo alto de la pica como un reclamo, como la luz azul para matar las moscas...
 

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16/01/2018, 21:32
Director

Girion cabalgó todo lo rápido que pudo, pero vio pasar a los guerreros por delante. Algunos le miraron, pero era imposible que le escucharan por encima del atronador sonido de la carga. Hasta que uno de ellos, un explorador rubio, le miró fijamente y parecía oirle.

El dúnadan guió a Viento hasta ponerse a la retaguardia de la carga, y escuchó un grito de guerra que le hizo estremecer. Un grito que repitieron unos y otros de aquella unidad de guerreros de leyenda.

¡GARAN GWALORN!

Notas de juego

Seguimos aquí

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21/01/2018, 08:44
Director

Norión siguió con la mirada la estela de Ferrim, Denelloth y Eben. Se alejaban de la cabaña hacia el este, hacia Sil Auressë, hacia la batalla. La fina lluvia formaba una cortina que distorsionaba las siluetas de sus compañeros Guardianes en la distancia, pero reconocía aún así el andar pesado y fuerte del enano, los pasos casi flotando del joven aprendiz de montaraz en la vanguardia... y los pasos de Denelloth. Su cuerpo había sufrido horrores indescriptibles, el mal le había dejado marcado a fuego la cara y el cuello, amputado dedos y su pierna ... Instintivamente el sacerdote se tocó la suya propia. Compartían una dolencia similar, pero mientras Norion podía permitirse el lujo de caminar apoyándose en un cayado, Hugaew arrastraba en su paso por este mundo el dolor con el resto de su carga como si de una mochila pesada se tratara.

El Búho de los Guardianes, el líder del grupo, avanzaba decidido hasta desaparecer de la vista del sacerdote. Pero no de sus pensamientos, ya que al regresar a la cabaña éste recordaba lo sucedido en la noche. Ahora se sentó en el banco de madera a esperar a que el discípulo de Gothdush se despertara. Arriba, en la atalaya, Russef y Otho hacían guardia. Así que a Norión solo le acompañaban sus recuerdos.