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Nieve y Hambre, capítulo 1: La silueta entre los árboles

F6 (Drunfo) - Una difícil confesión

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18/12/2016, 11:41
Recuerdos

Montañas nevadas, paisajes que se pierden en la distancia. El cielo es un lienzo infinito, un lienzo en el que pintar historias, leyendas, cuentos sobre viajeros que avanzan bajo su tutela. Los caminos son cientos, se pierden entre los bosques oscuros, entre árboles que susurran advertencias a aquellos tan osados como para entrar en su dominio. Hojas de pino que susurran la música de los dioses, rocas que encierran el secreto de antiguos sueños, criaturas mitológicas que compartieron sus tierras con los hombres, y sin embargo hoy se ocultan ante su mirada. Pero ahí están, ahí siguen, aunque otros hayan olvidado, y los norteños recuerdan. Recuerdan porque es lo que siempre han hecho, porque el olvido es el destino más funesto, y aquellos mundos de fantasía no merecen tal final.

La tierra mojada, cubierta por mantos blancos a ratos, otras veces negra como el hollín o grisácea, fría y seca o pringosa y caliente, Tan diferente como homogénea, tan constante. Los pies que levantan ecos de pisadas en los valles interminables, los ríos que susurran en un lenguaje incomprensible para oídos mortales. Kilómetros y kilómetros de lo salvaje, un mundo inexplorado, una tierra indomable y desconocida, en la que el hombre, que cree ser su dueño, solo es un invitado molesto, un extranjero al que se le ha ofrecido un voto de confianza, pero que debe probar su valía frente a las fuerzas del invierno y la naturaleza. Ingenuo aquel que piense que puede domar las fuerzas primigenias de lo elementos a su voluntad, pues la ambición acabará por llevar directamente a la más horrenda de las muertes. Y la estupidez no está permitida en estas regiones.

Belleza oculta, reflejos cristalinos en cascadas congeladas, en parajes helados donde el aliento se convierte en nubes de vapor, donde la piel se escarcha y los ojos pierden la capacidad de general lágrimas. Belleza terrible, envuelta en ventiscas furiosas, en masivos bailes caóticos de copos de nieve que se arremolinan buscando formas y efectos imposibles, de niebla y cielos nublados, pintados hasta el horizonte por millares de pinceladas blancas. Belleza eterna, que existió antes de la memoria, antes de la humanidad, y que seguirá existiendo hasta el fin de los días, hasta la última guerra de los dioses. Belleza sobrecogedora, vistas al horizonte, en el que halcones sobrevuelan siluetas de gigantes dormidos, montañas inmensas y majestuosas que contienen el secreto de la inmortalidad.

Así son las tierras del norte. Tu hogar, Goldar.

Tu vista se pierde en el sobrecogedor paisaje que te rodea. Aquella colina no es muy alta, pero ofrece un lugar estratégico en el que observar la zona. Subir no ha sido fácil, pues el camino estaba en mal estado, pero la alternativa pasaba por entrar en un pueblo, y con un precio en vuestras cabezas, no podéis permitiros ese lujo.

Lleváis un rato en silencio, descansando del ascenso, cuando tu padre te mira fijamente.

-Drunfo. ¿Cómo te encuentras?

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19/12/2016, 13:49
Drunfo Ulfrym

-Estupendamente, ¿Por que lo preguntas?

Aquellas vistas casi idílicas se estaban quedando grabadas a fuego en la memoria de Drunfo y él mismo sentía que fuera a abandonar su cuerpo material para unirse a aquella belleza que los dioses antaño habían esculpido.

Notas de juego

¿Misma libertad que en el otro flashback?

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20/12/2016, 01:28
Recuerdos

Tu padre clava la vista en el horizonte, permitiéndose unos segundos de silencio antes de responder.

-Eres fuerte, hijo mío.

Otra pausa. Luego, sin apartar la vista del horizonte, procede a explicarse.

-Yo... Sé que hemos evitado hablar de ello, desde que ocurrió. Pero lo que ocurrió... Bueno, algo así cambia a las personas.

Suspira.

-No puedes dormir bien, lo sé.

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20/12/2016, 19:14
Drunfo Ulfrym

La confusión se hizo patente en el rostro de Drunfo.

-¿De que hablas padre?

El semblante siempre calmado del padre le permitía ocultar sus pensamientos con facilidad, incluso para sus mas allegados.

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20/12/2016, 21:22
Recuerdos

-Te remueves por las noches. Gruñes, sudas. A veces lloras. Dices su nombre...

Suspira.

-No se me dan bien estas cosas. Tu madre habría sabido qué decir...

La mención hace que su recuerdo taladre tu cabeza. Hace apenas unos meses que ocurrió todo, aunque parece una vida. Hace menos de un año, erais una familia feliz. Ahora, sin embargo, solo os tenéis el uno al otro.

Notas de juego

Por cierto, me he dado cuenta de que no te respondí:

¿Misma libertad que en el otro flashback?

No. El otro era un viaje-tripi-mental, por estar inconsciente. Tenía recuerdos del pasado entre medias, pero también visiones psicodélicas que me apetecía meterte. Esto es flashback flashback, así que no hay tanta libertad como para inventarte cosas.

Dicho esto, por supuesto que tienes cierto control. Al fin y al cabo, es el pasado de Drunfo. Por mucho que me apetezca presentarte una escena en concreta, siempre tienes la libertad de decir "Esto no ocurrió así" o "Esto ocurrió de otra manera". O incluso algo del estilo "Máster, ahora quiero que ocurra esto". Pero no es como antes, que podías decir que el lobo se transformaba en tu hermano o cosas del estilo.

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20/12/2016, 21:57
Drunfo Ulfrym

El recuerdo de una madre fallecida siempre es un jarro de agua fría para cualquiera, en este caso, para el gigante, le hizo darse cuenta de quien era en realidad, un niño, que había escapado de la muerte recientemente.

-No me apetece hablar de ello...

Drunfo bajó la vista de niño, cada día menos inocente, hacia sus pies.

Notas de juego

Creo que no hace falta que lo diga, pero me parece natural que un padre insista y que un hijo no quiera hablar de ello jajaja

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21/12/2016, 21:13
Recuerdos

Tu padre asiente.

-Lo sé.

Acto seguido se acerca a ti y apoya una mano en tu hombro, agachándose un poco para quedar a tu altura.

-Esas... Pesadillas. Yo también las tengo, Drunfo.

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26/12/2016, 03:09
Drunfo Ulfrym

Drunfo se mostraba algo confuso, su padre no solía hablar así nunca.

-¿Que pesadillas padre?

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02/01/2017, 00:26
Recuerdos

Tu padre permanece callado, sin saber qué decir. Al final, parece armarse de valor.

-No hemos vuelto a decir su nombre desde que ocurrió... Pero no se lo merece. Merece ser recordado.

Te mira con expresión firme, y luego toma aliento.

-Guldron -Su expresión se quiebra por un instante-, vive en nosotros, Drunfo.

El nombre de tu hermano resuena en tu cabeza como una palabra herética, una maldición que acabara de romperse. El frío te inunda.

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02/01/2017, 20:47
Drunfo Ulfrym

"En el fondo ya sabia de que se trataba, aunque no quisiese admitirlo..."

-Mientras le recordemos si, y siempre le recordaremos padre.

El recuerdo hacia que la vista se nublara levemente y la cabeza se aliviara un poco de su peso, aunque eso no era precisamente bueno.

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03/01/2017, 20:48
Recuerdos

Tu padre asiente, analizándote con su mirada.

-Lo que hice... Lo hice porque no había otra opción. Fue algo horrible, pero no tuvimos alternativa. No hay nada que hubiéramos podido hacer para salvarle. Lo entiendes, ¿no?

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05/01/2017, 00:24
Drunfo Ulfrym

-Claro que entiendo que no pudimos hacer nada para salvarle, pero... ¿Que hiciste? No te entiendo.

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05/01/2017, 22:12
Recuerdos

Silencio, de nuevo. Tu padre parece haber llegado a un punto muerto, no sabe como seguir. Esta vez, la pausa se alarga más de lo habitual.

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06/01/2017, 13:13
Drunfo Ulfrym

La pausa incomoda algo a Drunfo, que mirando a los ojos de su padre se vuelve a dirigir a él.

-¿Padre? ¿Que hiciste?

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14/01/2017, 20:54
Recuerdos

El rostro de tu padre se ensombrece.

-Drunfo... Tu hermano estaba condenado a morir. Hice lo posible por salvarle... Pero sus heridas eran muy graves. Llegó un punto en el que, encerrados allí y sin comida, nuestras vidas también peligraban. Yo... Tomé una decisión.

Baja la mirada, y toma aire. Sin embargo, luego vuelve a alzar la cabeza, como recordándose a sí mismo que debe mostrar coraje frente a su hijo.

-No encontré ninguna pieza de caza, hijo mío. Lo que comimos no era carne de venado.

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16/01/2017, 03:26
Drunfo Ulfrym

Los ojos de Drunfo se perdieron en la lejanía, recordando. Aquella carne, parecía como cualquier otra, no era posible, su padre no podía haber hecho tal atrocidad. Las palabras se arrejuntaban en la boca.

-Pero que me... No, no es posible... Aquello era carne... era carne normal... yo lo probé... sabia... sab...

La voz se quebró, los ojos se inundaron, su padre, su padre no podía haber hecho algo tan atroz.

 

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16/01/2017, 20:51
Recuerdos

Tu padre baja la mirada, incapaz de enfrentarse al horror que refleja tu rostro.

-Lo siento, hijo mío. No espero que lo apruebes, y entiendo que me odies, pero debías saberlo.

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18/01/2017, 21:32
Drunfo Ulfrym

Durante un largo periodo de tiempo nadie dijo nada, el pensamiento atroz de haberse comido una parte de su hermano destrozaba a Drunfo, que intercalaba los silencios con leves llantos. Despues de varios intentos de empezar hablar con frases entrecortadas, Drunfo consiguió articular.

-¿Como pudiste padre? ¿Como a una persona se le puede pasar por la cabeza hacer semejante monstruosidad? Los dioses deben estar furiosos con nosotros, por eso nos vemos obligados a viajar sin rumbo.

La ira empezaba a brotar de dentro. EL niño continuó hablando alzando rapidamente el tono de voz.

-Pero, ¿Quien sabe desde cuando llevaban enfadados con nosotros?

Drunfo se levantó, amenazador, y señaló a su padre.

-Dime, ¿Acaso en alguna de tus expediciones ya lo habías hecho antes? ¡¿Acaso ya te habías comido antes a los muertos y por eso los dioses confabularon para matarnos a todos?!

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19/01/2017, 19:59
Recuerdos

Tu padre abre los ojos de par en par.

-No, Drunfo, pero... ¡Por Anzus, no! ¿Cómo puedes pensar eso de mí?

Tu padre baja la mirada, avergonzado.

-Nunca había hecho nada así... Pero tuve que hacerlo. ¡Al diablo con los dioses! Si no lo hubiera hecho, habríamos muerto. Y si es verdad que nos observan, no hicieron nada para ayudarnos. Nos habríamos congelado, muertos de inanición, en medio de la nada. Los nuestros nos traicionaron, y también los dioses. ¡Al diablo con todos ellos!

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20/01/2017, 14:58
Drunfo Ulfrym

Drunfo ya estaba gritando practicamente.

-¡Claro! Mandemos al diablo a absolutamente todo el mundo, ¡Vayamos por el campo cantando canciones! Padre, yo quiero volver a casa.