Partida Rol por web

Nieve y Hambre, capítulo 1: La silueta entre los árboles

P7 (Drunfo y Bedelia) - Dos viajeros

Cargando editor
27/06/2016, 17:25
Encrucijadas

La noche ha sido dura, más que las anteriores. El viento, más fuerte y frío que los días anteriores, se unió a una serie de breves aunque molestas nevadas, que han supuesto que despiertes con la entrada de tu improvisado refugio taponada por un manto blanco. Aunque creías haber calculado bien el tiempo, parece ser que los caminos que llevan a ese condenado pueblo no están en tan buenas condiciones como creías, y probablemente todavía te quede medio día de camino pese a tus esfuerzos del día anterior. Las mantas y la ropa de abrigo te han servido para tolerar la climatología, pero sobrevivir no significa estar cómodo.

En resumen, que podrías haber dormido mejor. Además, estaba... Eso. Fuera lo que fuera, no ha desaparecido de tu cabeza. Diablos, ni siquiera sabes si te lo has imaginado. Pero has dormido con una mano en el estoque, casi sin darte cuenta.

Sea como sea, has aprovechado los primeros rayos de luz para ponerte en marcha. Llevas ya una hora caminando cuando, a cierta distancia, ves como la senda que sigues empieza a ensancharse, justo antes de cruzarse con otro camino que llega por el Sur, a tu izquierda.

Cuando estás a punto de llegar a la altura de dicha encrucijada, escuchas unos pasos que llegan desde el camino del sur. Probablemente algún otro viajero, o alguien de la aldea. Aunque tan pronto en la mañana... Debería haber partido cuando estaba oscuro, o haber pasado la noche fuera como tú. Poco probable.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Advertir a Drunfo

Tirada: 1d100

Resultado: 70(+35)=105

Notas de juego

Quítate una ración de viaje (te quedarían 6), ya que entiendo no has invertido tiempo en cazar o buscar comida por otros medios, aprovechando las horas de luz al máximo para andar todo lo posible

Cargando editor
28/06/2016, 11:17
Bedelia

Bedelia sonrió, emocionada ante la idea de entablar conversación con alguien. Después de tanto tiempo viajando sola era agradable tener contacto humano, aunque fuera de un completo desconocido.

Esperó pacientemente hasta que el viajero la viera a ella, y entonces alzó una mano a modo de saludo. No esperaba a nadie demasiado elocuente o amistoso, pues daba por hecho que aquel clima habría moldeado el carácter de los habitantes de Los Yermos. ¿O quizá no era natural de allí? Esperó hasta tenerlo un poco más cerca y observar su reacción. Igual el no tenía tantas ganas de conversación como ella...

Cargando editor
28/06/2016, 12:00
Encrucijadas

La noche ha sido dura, más que las anteriores. El viento, más fuerte y frío que los días anteriores, se unió a una serie de breves aunque molestas nevadas, que han supuesto que despiertes con la entrada de tu improvisado refugio taponada por un manto blanco. La piel del lobo y la ropa de abrigo te han servido para tolerar la climatología, pero sobrevivir no significa estar cómodo.

En resumen, que podrías haber dormido mejor. Además, estaba... Eso. Fuera lo que fuera, no ha desaparecido de tu cabeza. Diablos, ni siquiera sabes si te lo has imaginado. Pero has dormido con una mano en el pomo de tu mandoble, casi sin darte cuenta.

Por suerte, no todo son malas noticias. Antes de que anocheciera, el día anterior, divisaste una columna de humo sobresaliendo entre los árboles, en la lejanía. Aunque debe de encontrarse a medio día de camino (razón por la que decidiste no continuar andando durante la noche, lo que debido al frío y al cansancio hubiera sido un suicidio), quizás si aprietas un poco más llegarás antes de la hora de la comida. Parece que al final tu suerte empieza a mejorar.

Sea como sea, has aprovechado los primeros rayos de luz para ponerte en marcha y llegar al pueblo cuanto antes. Llevas ya una hora caminando cuando, a cierta distancia, ves como el camino se cruza con una senda algo menos cuidad, que llega por el Este, a tu derecha. Todavía no has llegado a dicha encrucijada cuando escuchas, en la lejanía, el sonido de pasos. Alguien se acerca por dicha senda, caminando a ritmo tranquilo. Aunque no puedes decir exactamente la distancia a la que se encuentra, calculas que en unos minutos llegará a la encrucijada. Es posible que, si la cruzas por el centro, te vea.

No es común encontrarse viajeros por estas sendas. Quizás es alguien de la aldea cercana, que ha sido especialmente madrugador. Aunque la aldea debe de estar a varias horas de camino, por lo que debería haber salido cuando todavía estaba oscuro. Quizás viene de algún otro asentamiento cercano, o es un viajero como tú...

Notas de juego

Quítate una ración de viaje (te quedarían 6), ya que entiendo no has invertido tiempo en cazar o buscar comida por otros medios, aprovechando las horas de luz al máximo para andar todo lo posible

 

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Advertir a Bedelia

Tirada: 1d100

Resultado: 100(+105)=205

Tirada oculta

Motivo: Advertir a Bedelia (Abiertísima)

Tirada: 1d100

Resultado: 24(+205)=229

Cargando editor
28/06/2016, 12:01
Drunfo Ulfrym

Aunque el instinto me dice que debo ocultarme lo cierto es que deseo la compañía, aunque espontanea, de otro ser humano y puede que pueda orientarme y contarme nuevas sobre la zona.

Me dirijo al encuentro con el desconocido.

Cargando editor
28/06/2016, 12:01
Encrucijadas

Dos viajeros que se encuentran en el camino. Dos almas solitarias ansiosas por algo de compañía, que intersectan en cualquier parte, en un momento como otro cualquiera.

El primero es una figura imponente, inmensa, de aspecto bárbaro y salvaje. A su espalda, una inmensa espada, en su rostro, la mirada dura de aquel que ha visto la cara de la muerte y ha vivido para contarlo. Facciones toscas y una expresión seria se conjugan para formar un rostro que posee cierto atractivo salvaje. Paso desgarbado y firme, actitud relajada.

La segunda supone un constraste obvio con este último. Pelo castaño, ojos del color de la miel, expresión risueña y amistosa. Una mujer alta, aunque pequeña en comparación al inmenso nórdico. No procede de estas tierras, es algo que se ve rápidamente al mirarla. En su costado, un estoque, en su forma de moverse, cierta gracilidad natural que solo poseen los bailarines. Atractiva, aunque sin llegar a ser despampanante. Alza una mano para saludar al desconocido.

Los dos ya están cerca el uno de lo otro, lo suficiente como para poder hablar sin tener que alzar la voz.

Cargando editor
28/06/2016, 12:19
Bedelia

-Hola, extraño-Saludó con una sonrisa. Hablaba en Latín-Me llamo Bedelia y soy nueva en estas tierras.

La actitud, el gesto y el tono de voz de Bedelia eran amigables. Antes de añadir nada más, dejó tiempo al desconocido para decidir si quería presentarse, ignorarla o entablar una conversación.

Notas de juego

Director: Te lo pongo en privado y se lo transcribo a él, porque Drunfo no sabe latín

Cargando editor
28/06/2016, 12:31
Director

La mujer sonríe y dice algo en un idioma extranjero, probablemente la lengua que se habla en las tierras del sur. Su actitud, gesto y tono son amigables.

Parece que espera una respuesta.

Cargando editor
28/06/2016, 15:18
Drunfo Ulfrym

Algo sorprendido por encontrar tal viajero por estas zonas también alzo la mano de forma amigable, pero por desgracia no entiendo su idioma.

-Lo siento, no entiendo lo que dice, ¿Usted me entiende a mi?

Notas de juego

Cargando editor
28/06/2016, 16:00
Bedelia

Bedelia sonrió y volvió a hablar, esta vez en Arkes.

-Perdonad, no sabía cómo introducirme. Decía que me llamo Bedelia, y que soy nueva por estas tierras. Es agradable encontrar a otro viajero como yo.

Alzó la vista hacia el sol y entornó los ojos para no deslumbrarse. Todavía era muy pronto.

-¿Hacia dónde os dirigís? Quizá nuestros caminos confluyan por un tiempo.

Cargando editor
28/06/2016, 19:24
Drunfo Ulfrym

Drunfo se sorprendió aun más al encontrar a un extranjero, pero ocultó su sorpresa como pudo y respondió.

-Estaba buscando un poblado que debería estar por aquí cerca.

Hizo una pausa y examinó a la mujer de arriba abajo.

-He visto el humo desde lejos, ¿Sabe donde está?

Cargando editor
29/06/2016, 10:01
Bedelia

La sonrisa de Bedelia se ensanchó.

-Yo también estoy buscando el mismo poblado. Mirad, está en esa dirección.

Señaló con el dedo y después volvió a girarse hacia el extraño.

-Me dirijo hacia allá buscando comida, calor e historias que escuchar-Hizo una pausa, sopesando la situación-¿Os importa que me una a vos?

Todavía tanteaba al desconocido. A Bedelia le apetecía un poco de compañía pero no quería ser descortés, y menos en tierras extranjeras. No conocía el carácter de los nórdicos más allá de lo que había leído, le habían contado o se podía imaginar. Tenía ciertas nociones básicas de su cultura y sus costumbres, pero todo aquello era simple teoría. La práctica, como siempre, podía suponer un cambio abisal y no quería arriesgarse.

Cargando editor
29/06/2016, 15:21
Drunfo Ulfrym

Definitivamente aquella mujer no podía ser peligrosa y de seguro que no conocía la situación de Drunfo.

-En ese caso supongo que nuestros caminos se juntan por unos instantes. ¡Vamos! La acompañaré hasta el poblado.

Aun con todo, la presencia de un extranjero en esta época del año era algo inusual.

-Decidme, ¿Que os trae a estas frías tierras?

Cargando editor
29/06/2016, 15:42
Bedelia

Comenzó a andar alegremente. Pese a que el aspecto del hombre que iba a su lado era imponente parecía amigable, y eso la contentó.

-Me gusta viajar-Dijo, contestando a su pregunta-Quiero aprender un poco más de vuestra gente y visitar lugares.

Bedelia se movía con gracia y ligereza, aunque eso no implicaba nerviosismo. Se adaptaba al paso del nórdico y disfrutaba observando los alrededores del camino por el que transitaban.

-Y a vos, ¿qué os trae por aquí? ¿Volvéis a casa, tal vez?

Cargando editor
30/06/2016, 05:21
Drunfo Ulfrym

La poca amabilidad que el rostro de Drunfo mostraba cesó de golpe.

-Vengo de enterrar a mi padre, y ahora estoy buscando una ruta hacia el sur. El invierno no es bondadoso en estas tierras y menos para un extranjero como tú.

Cargando editor
30/06/2016, 09:26
Bedelia

La sonrisa de Bedelia se congeló. Aquella respuesta le había cogido totalmente por sorpresa.

-Oh. Vaya, lo siento mucho. Es muy duro...

Reflexionó un segundo en silencio. Cabía la posibilidad de que no hubiera sido una muerte natural.

-No hay consuelo que valga con las pérdidas, sólo aprendizaje. Cada día se sobrelleva un poco mejor su ausencia y llegado cierto punto podrás seguir adelante. Sin olvidar, pero tampoco sin que condicione tu vida

Frunció el ceño. Esa era la teoría al menos. Tragó saliva, dudando si decir algo más, pero finalmente calló. Ya no sonreía.

Cargando editor
30/06/2016, 16:15
Drunfo Ulfrym

Drunfo miró hacia sus pies, pensativo.

-No es la congoja por su perdida, sino que...

Hizo una pausa y miró a los ojos a Bedelia.

-En fin, da igual, prosigamos. Por cierto, mi nombre es Drunfo, un placer conocerla.

Pese a el trato rudo, típico de los hombres del norte, se podía entrever que la amabilidad de Drunfo no había cesado aun por el recuerdo de su padre.

Cargando editor
30/06/2016, 18:17
Bedelia

-Encantada, Drunfo.

La mirada de Bedelia se perdió, una vez más, por el paisaje.

-¿Sabéis? Quizá estas tierras no sean bondadosas con los extranjeros, pero me gustan sus paisajes.

Con el tiempo, había aprendido a apreciar la belleza natural de las cosas.

-Decidme, ¿cómo es la vida de un nórdico? ¿Cómo debería dirigirme a vuestra gente?

Cargando editor
30/06/2016, 20:19
Drunfo Ulfrym

-¿Como es la vida de un norteño? Menuda pregunta jaja, pues normal supongo. La verdad es que yo siempre he estado viajando de un lugar a otro junto a mi padre, pero de pequeño recuerdo ayudar en el campo cuando el sol calentaba y protegerse del frio cuando la luna asomaba. En otras palabras, yo no soy el más adecuado para preguntar sobre ese tema, pero no te preocupes, cuando lleguemos al poblado podrás descubrir al menos la hospitalidad norteña.

Parece que esta chica no ha estado en muchos poblados si me pregunta sobre las costumbres. Penso Drunfo.

-En cuanto a como tratarnos, mmm, supongo que con respeto y amabilidad, como a todo el mundo. Eso si, ni se te ocurra manchar el honor de un norteño, es el mayor insulto que nos podeis hacer. No es por ser quisquilloso, pero del poco contacto que he tenido con extranjeros si he podido aprender que no respetais vuestro propio honor, eso no gusta por estas tierras.

 

Notas de juego

Kyra, jamás volverás a tener el control sobre esta trama, la conversación seguirà para siempre muhahaha

Cargando editor
30/06/2016, 20:32
Bedelia

Bedelia bebía de las palabras de Drunfo. Le miraba con curiosidad.

-Me alegra saber que vuestra gente es hospitalaria. La verdad es que ahora mismo me vendría de perlas una sopa caliente que tomarme junto al fuego.

Se apretó la ropa contra el cuerpo. Pese a que el sol ya había salido era consuelo pequeño con aquel clima tan desolador.

-Respecto al honor, tenía alguna idea de lo valorado que era. No pretendo faltarle al respeto a nadie, al contrario, aquí soy una invitada.

Bedelia evitaba las piedras y montículos de tierra que la nieve tapaba dando pequeños saltitos de vez en cuando. En aquel camino uno podía tropezar fácilmente y lo que menos le apetecía ahora mismo era mojarse la ropa con nieve.

-Calculo que, quizá, nos quede medio día de camino hasta el poblado. Creía que tomando esta ruta llegaría antes hasta allí, pero parece que el camino no es tan bueno como pensaba. Me gusta vuestra espada, ¿es un mandoble?

Notas de juego

Bedelia es curiosa, va a estar haciendo preguntas sin importancia gran parte del camino, a no ser que Drunfo se sienta incomodado o le de señales de no querer hablar. Si queréis podemos hacer un fundido en negro, como gusten los señores.

Cargando editor
30/06/2016, 22:28
Drunfo Ulfrym

Aunque un poco incomodado por la cantidad de preguntas, Drunfo se sentía agradecido de poder charlar un rato, aunque fuera de cosas tan banales. Demasiada soledad en los viajes desde que su padre murió.

-En efecto, es un mandoble, perteneció a mi hermano y él mismo lo forjo hace ya muchos años.

Antes de que Drunfo volviese a perderse una vez más en sus recuerdos se percató.

-Disculpad, pero no se como será la hospitalidad sureña, en el norte se espera de un invitado que colabore como uno más del clan el tiempo que permanece como tal. Estos pueblos son algo pobres así que no creo que pueda quedarse apenas uno o dos días, me temo que si lo que quiere es aprender de estas tierras, cosa que no llego a comprender del todo, va a tener que viajar bastante y hacerlo con el invierno que se aproxima no es una buena idea.

Notas de juego

Por mi si quereis hacer el fundido en negro (con erotico resultado) guay. Lo que diga el master

aclarado en el offtopic