El interior de lo que pensabais que era un laberinto es, en realidad, un entramado de rosales plantados sin lo que parece una estructura clara. Quizás una espiral o tan solo las zarzas que han crecido como han querido sin cuidado, el camino de adoquines, tras unos metros, ya no está tan despejado como esperabas, aunque sigue siendo claramente visible y marcado.
Una rama aquí, una rosa allí, algunas cosas sobresalen de los límites de este pero nada que te impida avanzar. Las plantas, tan hermosas y fragantes como en la entrada, no dificultan tu paso pero sí aíslan bastante bien del sonido de tus compañeros, que llega ligeramente amortiguado... pero los otros que han entrado se han adelantado tanto que no eres capaz de verlos.
El interior de lo que pensabais que era un laberinto es, en realidad, un entramado de rosales plantados sin lo que parece una estructura clara. Quizás una espiral o tan solo las zarzas que han crecido como han querido sin cuidado, el camino de adoquines, tras unos metros, ya no está tan despejado como esperabas, aunque sigue siendo claramente visible y marcado.
Una rama aquí, una rosa allí, algunas cosas sobresalen de los límites de este pero nada que te impida avanzar. Las plantas, tan hermosas y fragantes como en la entrada, no dificultan el paso pero sí aíslan bastante bien del sonido del viento y el exterior. Tampoco se alcanzan a oir los pasos o exclamaciones del resto del grupo. Tan solo Paco se encuentra unos metros por delante de la zona de entrada, que se cierra a vuestra espalda cuando el viento se levanta.
No podéis volver, solo avanzar.
Pues nada, aquí nadie espera por nadie.
O los que entraron antes han aparecido directamente en otra zona, o han seguido adelante a su bola.
Me adelanto unos pasos en un breve trote desgarbado.
-¡Paco! -llamo-. ¿Has visto a los demás?
Me vuelvo para hacer un gesto con la mano a Red, Lyria y Fran, indicándoles que se apresuren un poco para alcanzarle. Sigo pensando que cuantos más de nosotros vayamos juntos, mejor.
Al final no creo haga falta la norma de Steckles, porque esto no es un laberinto. Si solo hay un sendero que seguir, no parece que tengamos muchas opciones... Aunque sigo mirando las rosas con desconfianza.
-Toca seguir el camino de baldosas amarillas... ¿no? -pregunto de forma retórica, y agudizo el oído mientras avanzamos por si oyera a alguno de los otros.
El camino de adoquines va alargándose y alargandose y, aunque hasta el momento era recto, tuerce a la izquierda levemente, pero incluso seguir caminando no hace que nada varíe. Simplemente, las rosas siguen decorando las paredes aquí y allá.
Tirada oculta
Motivo: Sala (defensa)
Tirada: 1d20
Resultado: 14 [14]
Tirada de todos, por favor (1d20).
Al escuchar a alguien decir su nombre, Paco se para. Era ese chico de proporciones desproporcionadas...
Al verlo correr incluso siente un poco de pena.. Joder, que putada ser tan alto....
- No tío. No he visto a nadie ni los veo. Ni los escucho. Ni ostias en vinagre... ¿Por que cojones han entrado corriendo como si supieran donde van?. A lo mejor uno de ellos (o varios) son los infiltrados y nos están conduciendo a las trampas... Joder, no me fio ni de mi sombra...
Paco se puso las manos en forma de bocina y grito con todas sus fuerzas:
- TODOS QUIETOS JODER!!!!. ¡¡¡ ESPERADNOS!!!
Motivo: A petición del DJ
Tirada: 1d20
Resultado: 20 [20]
Pues nada... No se si será un crítico o una pifia esto pero bueno... Ahí va mi tirada...jajaja
El grito de Paco y su eco se extiende por el jardín de rosales y se escucha durante unos segundos. Nada cambia a su alrededor así que es dificil saber si le ha llegado a alguien su voz.
Cuando todos tireis, resolveré la tirada
¿Que está pasando? ¿por qué no están?
Se preguntó nerviosa, aún sin soltar la mano de los chicos. Es que esto se puso en verdad muy serio, Lyria pensó en sacar las garras para al menos defenderse. Aunque esto significaría... Estar en peligro.
—Esto puede ser una trampa, debemos ir con cuidado. Si no podemos verlos, quizás avanzaron mucho o son diversos caminos los que hay en esta sala— comentó pensativa —. Será mejor que vayamos despacio, trabajemos como equipo y no pensemos ahora en los que no nos esperaron. Estamos juntos en esta, ¿verdad?
Miró a Fran, a Red y Kiran, estaba Paco también. Si los cinco se mantenían firmes, podían superar esto. El camino estaba trazado, pero nadie podía confiarse, la trampa era mortal y como todo laberinto, puede estar lleno de sorpresas. Lyria comprendió que era la primera prueba de muchas y era conveniente cuidarse las espaldas.
—Vamos, avancemos.
Les dió un tirón a sus manos, dispuesta a seguir.
Motivo: tirada
Tirada: 1d20
Resultado: 10 [10]
Perdón, soy muy mala con los nombres y hay muchos aquí. :3
Prefiero no pensar de momento en los infiltrados, al menos hasta que entienda del todo como funciona el juego macabro del Anfitrión.
-Creo que la mayoría no han pensado que la entrada nos podía separar. O simplemente han intentado no dejar solos a otros -no sé por qué los estoy justificando, si de lo que realmente tengo ganas es de soltar cuatro improperios, como Paco-. No hay más caminos... No es un laberinto -respondo a Lyria-. Solo se puede seguir avanzando. Porque entre los matorrales de rosas no me meto. Al menos no sin algo como la armadura de Erik, mínimo.
Espero a que Lyria y Red me alcancen de nuevo para avanzar todos juntos con Paco.
Sin prisa pero sin pausa.
Motivo: Tirada
Tirada: 1d20
Resultado: 11 [11]
Miró a Fran, a Red y Malik,
Kiran... ;P (Y en ese momento no estamos de la mano, me adelanté un poquito para llamar a Paco antes de que se nos escapara también ^^).
Algo te llamaba la atención desde hace un momento pero no estabas seguro de qué hasta que echas un vistazo atrás para comprobar el camino, te percatas rápidamente.
Las flores que al comienzo del laberinto eran de un blanco completamente puro, pero las que se encuentran a unos metros frente a vosotros comienzan a verse ligeramente rosas.
Mensaje personal solo para ti por superar la tirada. Puedes compartir o no esta información con el resto
Aunque hay algo en el lugar que llama lgeramente la atención, por más que mirais no sois capaces de decidir qué es. Quizás solo es la inquietud de adentraros en un lugar desconocido...
Faltan por tirar, pero voy resolviendo, con 3 tiramos para delante.
Habeis fallado la tirada.
¡Oh no! ¿Ahora qué?
Miro en todas las direcciones y no encuentro a ninguno de los que cruzaron antes que nosotros. Me pregunto si se los habrá tragado el jardín. Seguía siendo hermoso, de hecho la entrada me recuerda al invernadero de mi ciudad en el que respirar era un deleite y podía pasar horas ahí. Siempre me tranquilizó ese sitio. No obstante, este jardín en el que estamos, nunca me inspiró tanta confianza y ahora menos que parecía una trampa mortal de flores.
Lo que parecía ser un laberinto no lo era, más bien era una especie de espiral.
-¡No, estamos ahora en Uzumaki de Junji Ito!
NI siquiera quería tocar las flores o pasar por ahí. Sentía temor de convertirme en un caracol o que mi cuerpo se contorsionara hasta quedar transformado en una espiral. Sin embargo, veo a Paco más adelante y a Kiran que va a su encuentro. Siguiendo el ejemplo de este último y tomando a Lyria y Fran del brazo las invito a avanzar. Con los nervios a flor de piel miro a mi alrededor. Una vez alcanzó a Paco y Kiran trato de calmarme y digo:
-¡Mu! En efecto Lyria, esto tiene la finta de ser una especie de trampa. Ya me veo convertido en un ser sacado del universo de Junji Ito -La sola idea me aterra y un leve temblor se apodera de mi. Me dirijo a Paco -¡Mu! Ho..ola Paco, que bueno ver qué... Estás bien... Y eso.. -digo con torpeza y un poco de tartamudeo sin dejar de mirar a los alrededores. Y a Kiran le comento- Aunque el amarillo no es mi color, confío en tu juicio. ¡Mu! -exhalo esto último logrando controlar mi nerviosismo, o lo más cercano a ello.
Motivo: Tirada
Tirada: 1d20
Resultado: 4 [4]
Aunque hay algo en el lugar que llama ligeramente la atención, por más que miras no eres capaces de decidir qué es. Quizás solo es la inquietud de adentraros en un lugar desconocido...
Tirada fallida
Francesca cruza con los ojos cerrados y los abre cuando Kiran le suelta la mano, al abrirlos ve el camino, escucha a sus compañeros y asiente.
-Yo estoy de acuerdo en seguir juntos, no sabemos si alguno de nosotros es el infiltrado o no, ¿desen que intente ver con mi espada que hay atras de esos matorrales. O mejor no provocar nada de nada?-
Luego mirando que no hay vuelta tras vuelve a comentar -No han esperado, asumiria, porque no sabian si se iba a volver a abrir o no, paso mucho tiempo, aunque aquí el tiempo es relativo-
Motivo: Tirada
Tirada: 1d20
Resultado: 17 [17]
Algo te llamaba la atención desde hace un momento pero no estabas seguro de qué hasta que echas un vistazo atrás para comprobar el camino, te percatas rápidamente.
Las flores que al comienzo del laberinto eran de un blanco completamente puro, pero las que se encuentran a unos metros frente a vosotros comienzan a verse ligeramente rosas.
Mensaje personal solo para ti por superar la tirada. Puedes compartir o no esta información con el resto
Joder qué tío más raro el Eduardo este.... ¿¿Mu???.... ¿En serio...???
Se habían juntado ya los 6 (Fran, Kiran, Ricardo, Lyria y Paco), pero no había rastro de Ephi, Erik, Zoe, Danilo, Ink y Duke.. se los había tragado la tierra... o los rosales....
- Chicos, las rosas han cambiado. Cuando entramos eran de un blanco nuclear que dolían verlas y ahora, como podéis ver, se están volviendo rojas... ¿Le encontráis algún sentido...?.
-Se estarán bebiendo la sangre de alguien -comenté con ironía mirando las rosas.
Me arrepentí en el mismo momento que lo dije, porque en aquel sitio las ironías perdían toda su gracia. Ese tipo de cosas no resultan ni pizca de divertidas si son remotamente posibles. Y estamos en un lugar donde al parecer todo, o al menos casi todo, es posible.
-Ey, conozco esos viejos comics clásicos -respondo a Red mientras avanzamos, intentando calmarle (y de paso a mí mismo) con un poco de conversación-. No creo que vayamos a convertirnos en caracoles solo porque el camino tenga forma de espiral. Ni siquiera estoy seguro de que la tenga... Y ya no hay adoquines en el suelo; el camino no es de baldosas amarillas, así que también puedes estar tranquilo por eso -le doy una suave y tímida palmada amistosa en la espalda.
No había podido evitar sentir como se me apretaba el pecho al ver los rosales cerrando nuestra entrada y atrapándonos allí dentro. Todavía me pesaba haber dejado atrás a Lian, y aún seguía mirando hacia atrás por encima de mi hombro de vez en cuando, sin perder del todo la esperanza de que apareciera a nuestra espalda.
-Yo no me aventuraría a cortar los matorrales, Fran... Al menos de momento, sin haber intentado soluciones más... conservadoras. Con suerte el camino llevará a ese cenador que vimos al fondo, y allí encontraremos a los demás. Si no vemos la forma de llegar... A lo mejor entonces lo de la espada termina siendo una buena idea.
Aferrada al brazo de Red, abrió los ojos de par en par sorprendida. Había leído los mangas de Junji ito, se los conocía a todos.
—No puedo creerlo, tenemos los mismos gustos aunque dudo que sea "esta la situación"—confesó y luego se dirigió a los demás, cuando mencionaron el asunto de las rosas y su color—. Esto me da la impresión de que estamos inmersos en The Hunger games, recuerdan al tío de la rosa y lo que significaba para él...
Al final, sin querer Lyria se había puesto a pensar como Ricardo y relacionó cosas. Seguramente nada tenía que ver, aunque el dato de Paco y las palabras de sus compañeros, tenían todo el sentido del mundo. Avanzando unida al chico, sin querer soltarlo porque sentía ese apoyo necesario para seguir, continuó conversando.
—Tenemos que ser une equipo y continuar.
Segura de ello, comenzó a avanzar.
—Lo de las rosas, pueden que reaccionan cuando pasamos... ¿Será eso?
Recordando la extrañeza que se dibuja en la cara de las personas, tanto en mi mundo como en este, cada vez que pronuncio mi palabra de seguridad, trato de explicarme con un poco de torpeza:
-Como ustedes se habrán dado cuenta, yo soy un tipo nervioso, y cuando me encuentro en situaciones con alta carga de ansiedad digo ¡Mu! para calmarme. Es mi especie de mantra, de palabra de seguridad. Antes repetía seguidamente ¡Un! ¡Une! ¡Un! ¡Une! ¡Un croissant! ¡Une Baguette! ¡Un croissant! ¡Une Baguette! pero era demasiado largo, así que lo reservé para situaciones más complejas.
Seguimos el camino y salió la conversación sobre el trabajo de Junji Ito y yo, como máxima autoridad en el tema (o eso me digo mitad en broma mitad en serio), no pude hacer menos que poner a rodar al hámster e imaginar varios escenarios como las dichosas espirales de Uzumaki, o que comenzaran a salir globos gigantes en forma de nuestras cabezas y que quisieran atraparnos, que nuestro anfitrión fuera Souchi o el mismo Junji Ito. Tal vez iba acompañado sin saberlo por Remina, Tomie, el chico del cruce y yo tal vez sería Hitoshi de los bizarros hermanos Hikizuki. Sonrío ante tamañas ideas que comento en voz alta, en especial a Kiran y Lyria que señalaron su gusto por estos mangas.
Kiran me da ánimos y me tranquiliza en relación al color de las flores a lo que digo:
-Si, pero me hubiera encantado que siguieran siendo blancas -Por otro lado escucho a Lyria hablar de The Hunger games y le comento- ya no se que universo literario sería peor habitar, lo único que se es que no podría culpar al captor por tener gustos tan exquisitos.
Continúo sujetando a Lyria y me alivio al pensar que después de todo lo ocurrido mi sonrojo era lo de menos, una raya más al tigre, sin embargo, no deja de distraerme la sensación de que hay algo esperando por nosotros en ese recorrido y, aunque no logro ver nada, de vez en cuando creo notar algún movimiento o alguna forma ante lo cual trato de tranquilizarme y pensar que tanta imaginación ya me está jugando una mala pasada.
De alguna manera se sintió cómoda estando de la mano con Red, como si fuera una zona segura estar así. Si bien, el anfitrión les había quitado todo tipo de sensación y sentimiento, algo le decía que a su lado era mejor. Tal vez se equivocaba, pero como todo era genuino, seguiría así.
—Lo entiendo, si necesitas algo puedes decirme y te ayudo—se ofreció sonriendo, eso de las palabras de seguridad lo conocía de oído—. Somos un equipo.
Pese a centrarse en él, estrechando con un poco más de calidez su mano, sí que luego desvió la mirada hacia los demás para transmitir aquello. Sería para ellos también, Lyria no tenía malas intenciones. Cuando comentó sobre los mangas, ella se detuvo a hablar de ello, diciendo algunas de sus impresiones pese a que lo seguía relacionando con The Hunger Games y los tributos, considerando que aquí moriría la gente.
—Gustos exquisitos y trampas, quizás hay una pista.
De la mano junto a él, miro al resto. Seguimos avanzando, pero nada parece cambiar. ¿Se nos escapan las pistas?