Partida Rol por web

-No es la más mayor, Red. Solo es que viene... de un tiempo anterior. Pero creo que es la más joven de todos nosotros -sigo mirándola dormir con una sonrisa tierna-. Me recuerda a mi hermana pequeña.

Aunque eso no es del todo cierto. Mi hermana no es tan guapa. Bueno, sí que lo es, pero es mi hermana, narices. 

Antes de que me de cuenta, Red se ha acercado embelesado a mirar la estatua, pero debe haber algo en ella que lo perturba. Más de lo que ya venía de casa, quiero decir. Intenta volver por donde hemos entrado, pero se da de bruces contra el mismo muro contra el que me di yo en la sala anterior al intentar apremiar a los que se quedaban atrás. Se deja caer, se tira de los pelos, grita, se golpea la cabeza contra el suelo e incluso se araña los ojos. 

Por un momento me quedo paralizado ante semejante despliegue, pero cuando por fin reacciono me pongo de pie precipitadamente en un torpe y desgarbado jaleo de brazos y piernas y corro para agacharme junto a él, intentando sujetarle por las muñecas para evitar que se haga daño. Me parece entender que lo que le ha puesto en ese estado son las piedras verdes que la mujer alada tiene por ojos. Es como si despertaran en él algún recuerdo traumático. 

-No son... No son las mismas, Red. Son otras esmeraldas. Estas no van a hacerte daño. No vamos a mirarlas, y no vamos a tocarlas. ¿Vale?

Sus manos escapan de mi agarre y se rasga la parte baja de la camiseta. Bueno; mientras la tome contra su ropa y no contra su cabeza, su pelo o su cara, supongo que es una mejora. Pestañeo confuso cuando veo que se venda los ojos con el trozo de tela, pero si eso le calma, es una buena solución. Le ayudo a anudársela en la coronilla.

-Tienes que intentar descansar un poco. Aunque sean solo un par de horas o tres. Te pondrás peor sin lo haces -no tenía nada claro que Red estuviera en condiciones de hacer una guardia, y no tenía corazón para pedirle que sacara una carta.

Lo único que podía hacer era predicar con el ejemplo.

Guío a Red tomándole de un brazo como a un ciego hacia donde duerme Ephi, y le ayudo a sentarse.

-En seguida vuelvo, Tiresias -intento bromear, y al ser posible en los términos que me da la impresión que tienden a llamar su atención.

Me acerco donde Duke se está acomodando para dormir.

-Se supone que tienes que sacar una carta, Duke -digo sonriendo comprensivamente, porque todos parecemos una panda de refugiados de guerra agotados y, al menos algunos, también heridos-. A ver, déjame a mí coger una -me inclino para sacar una carta al azar-. Segundo turno -digo mostrando mi carta, y me tapo la boca para cubrir un bostezo, porque el de Duke se me contagia.

Me parece bien. - respondió Erik a Francesca, asintiendo levemente. - No me importa que me acompañes, siempre y cuando no me distraigas demasiado. Necesito concentrarme en la investigación, podría darnos pistas importantes sobre quien trabaja para ese Anfitrión.

Erik sonrió al ver que todos estaban colaborando, más bien, la mayoría. Nadie se había tomado especialmente mal su tono imperativo al querer tener el primer turno, pero lo consideraba necesario y con esa idea en mente, Erik se preparó para el primer turno de guardia, listo para enfrentar los peligros que pudieran acechar en la oscuridad.

Paco flipó en colores fluorescentes cuando entraron en la nueva sala.

Pero que puta locura es esta...???..

En su vida había visto ni siquiera un puñado de esas monedas que ahí estaban amontonadas como si fueran basura en un vertedero. Quizá para el anfitrión el dinero fuera eso.

Basura.

Y estaban en su vertedero.

No sé porqué le vino ese símil a la cabeza pero lo daba por bueno... Sí, esto no es más que basura. Baratijas insignificantes para él y que nos lo pone al alcance de nuestras manos para ver si caemos en el segundo pecado capital: la avaricia.

Igual eso sería lo que desencadenara un futuro ataque. Si alguien decidiera coger algo para guardárselo en el bolsillo...

Pensando eso, la primera sala sería la de la ira. Cuando Ephi decidió sacar la guadaña a pasear y se cargó aquel ramillete de rosas...

Ummmm... me estaré volviendo loco o tendré razón???

Al escuchar a Erik lo de la guardia, Paco se acercó y le dijo:

- Eh tú, me parece bien lo de las guardias pero que tú quieras estar sí o sí en el primer turno no le encuentro sentido. ¿Dime porqué cojones te tenemos que hacer caso y no lo echas a suerte con la baraja de Duke igual que estamos haciendo el resto?...

Paco estaba frente a Erik mirándole a los ojos...

- Es más... por tu actitud lo único que me inspiras es que eres uno de los topos del Anfitrión. Por eso quieres estar en el primer turno cuando prácticamente el resto estamos todos durmiendo. 

Dicho eso se acercó a Duke y sacó una carta. 

- Cuarto turno. Me jode haber sacado esa carta, la verdad. Pero al menos podré descansar del tirón 6 horas.

Se volvió a Erik:

- Vas a sacar carta o vas a quedar como que ocultas algo????... Decide....

- 

No voy a cambiar mi decisión - dijo Erik con firmeza, mirando a Paco a los ojos. - ¿De verdad crees que voy a arriesgar mi vida y la de los demás por un simple sorteo? Mi objetivo es investigar quiénes son los espías y quiero hacerlo cuanto antes. No puedo permitirme perder la oportunidad de revisar ahora que puedo.

Erik hizo una pausa, consciente de que su tono podía sonar autoritario, pero no estaba dispuesto a ceder en este punto. - Si quieres pensar que soy un topo del Anfitrión, adelante - dijo Erik con un encogimiento de hombros - pero eso no va a cambiar mi decisión. Voy a tomar el primer turno, y voy a investigar esta noche, con o sin tu aprobación. Ya descansaré cuando termine y revele a quienes estén conmigo lo que descubra.

- Esto.... creo que no me has entendido bien. Te estoy diciendo que no vas a hacer la primera guardia. Al menos no sin que yo esté delante. Lo siento pero no me fío de ti. Tus palabras son muy bonitas, pero visto lo visto, no me fío ni de mi madre. Así que la primera guardia yo también estaré. Haré 2 guardias si es necesario. El primer y el último turno. Pero ni de coña vas a hacer la primera guardia mientras yo duermo. Vamos, ni loco....

Paco seguía encarado a Erik sin dar muestras de duda ni flaqueza. Estaba decidido y le acompañaría en la primera guardia por las buenas o por las malas.

- A ver, tenemos 2 opciones.... Primera, no te opones a que haga la guardia con vosotros. La hacemos y, si al final está todo bien y resulta que no has hecho nada para jodernos, pues nada... Me tocará pedir perdón y tan amigos. 

- Segunda, te opones a que haga la guardia con vosotros pero ya te aviso que no te conviene elegir esa segunda opción. 

Al decir eso Paco se acomodó los nunchakus en su mano derecha. Quedaba bien claras sus intenciones y sólo quedaba por ver cual era la elección de Erik. 

Susto o muerte muchacho....

-No es para tanto, Paco -digo alzando las manos para pedir calma-. Si no te fias de Erik, recuerda que a Fran y a Ink les ha tocado el primer turno con él. Duke también se pidió el tercero y no pasa nada: con que los demás lo echemos a suertes ya se incorpora suficiente componente aleatorio. Los que de momento no tenemos compañía para el nuestro somos Duke y yo... -fruncí el ceño con algo de desaliento-. Podría despertar a Ephi para hacer el segundo turno conmigo, pero no sé si seré capaz de despertarla. Parece tan a gusto... miradla -la señalo con una mezcla de ternura y forzada diversión, algo nervioso pero tratando de calmar los ánimos-. Menuda envidia. No creo que sea capaz de dormir como ella. Me conformo con ser capaz de pegar ojo un rato. Red, si aún estás despierto para el segundo turno, a lo mejor quieres hacerme algo de compañía -no es que vaya a ser muy útil montando guardia con los ojos vendados, pero al menos no me sentiré tan solo.

Aún faltan Danilo y Bastian por pronunciarse; y tengo la esperanza de que también se apunten a las guardias. 

Estoy demasiado cansado y todo empieza a resultarme absurdamente sospechoso.

¿Y si la insistencia de Paco es porque quiere quedarse a solas con alguno de sus... "aliados"? ¿Y si el azar había jugado en nuestra contra?

...¿Y si su discusión con Erik no era más que una pantomima?

- Perdona Kirian, pero igual que éste (dice señalando a Erik) dice que no hay nada ni nadie que le haga cambiar de opinión, pues yo igual. No me fío de alguien que no coge una carta, por sus santos cojones, y dice que quiere hacer la primera guardia. Lo siento pero ni de coña....

No quiso meterse en la discusión hasta no tener un motivo, tal vez el muchacho si lo tenía y por esa razón es que soltó todo aquello. El asunto de las guardias comenzó a complicarse, así que Lyria intervino.

—Cuenten conmigo en otra de las guardias, así no quedan solos. Con Duke o Kiran... 

Muy tentada estuvo de preguntar que sucedía, que le hizo cambiar rápido de parecer. Pero se quedó allí, escuchando ambas partes, buscando el motivo. Es que cualquier persona de los presentes era sospechosa, hasta la tierna Ephi que decidía dormir en vez de vigilar. Todos podían ser sometidos a un juicio de intenciones, todos pecadores hasta que no se dijera lo contrario.