Cadignan estaba muerto de miedo, y notó cómo la orina caliente le recorría la pierna. A pesar de que el atracador lo había soltado, ahora estaban disparando en su dirección. No sabía qué hacer, y se mantuvo quieto como una estatua. -¡N-no me maten!, gritó con voz aguda mientras se tapaba la cara.
Entonces vio la enorme mole que era Orpheus Anthony correr hacia el mostrador para saltar por encima...
El salto de Oprheus resultó insuficiente para pasar al otro lado, y él acabó boca abajo en el mostrador, encima de los papeles de Cadignan. El disparo de Nathan había impactado cerca de la cabeza de Rob Stevenson, pero no parecía afectarle más al atracador, aunque seguía anonado por el disparo del rifle de Clive Montana. El guardia del banco recargaba su arma para acabar de una vez con él.
Motivo: Rob-SABvsDisparoNathan
Tirada: 1d20
Dificultad: 10-
Resultado: 4 (Exito)
...50N-disparo#2@A2,51,52
Nathan: tu disparo salió en el 50, confirma acción
Orpheus: tu siguiente acción empieza en el 55, estás en una posición comprometida.
Zack: tienes un disparo bastante claro al atracador (al menos a la cabeza), aunque el cuerpo de Anthony le tapa hasta la altura de los hombros.
Rob (el atracador): se quedó amedrentado hasta el 55 por el disparo de Clive, pero no le acobarda el de Nathan. En el 55 comienza su acción (declara que va a recargar y apuntar con el arma a bocajarro a Anthony)
Clive: disparó en el 49, recarga
Las cosas no habían salido como Nathan se había imaginado, pero la experiencia en la guerra le decía que la mayoría de las veces era así y que uno sobrevivía por la capacidad de improvisar o reaccionar. Dado que Orpheus no había alcanzado su objetivo y que su disparo al único que había asustado era a Diggory, Nathan avanzó con la intención de poder parapetarse tras el otro lado del mostrador y así tener mejor ángulo y una menor distancia en caso de tener que disparar.
Avanzo hasta el mostrador y sigo apuntando mientras nadie más dispare o la situación no cambie.
Bien por ti, grandullón!
Orpheus calculó mal el salto, con lo que acabo en medio del mostrador. Tuvo que reaccionar muy rápido, aprovechando que había soltado al rehén. Por su cabeza pasó por un segundo el apuntarle con el revolver, pero no sabía cuan rápido era su rival, así que se decidió por agarrar el arma de éste, a ver si podía desarmarlo, o al menos, atraérselo hacía el mostrador y que se alejara del pobre Diggory.
-Idiota, aún tienes una posibilidad de salir de esta. Pero como le pegues un tiro a alguien...
Motivo: Desarmar
Tirada: 1d20
Dificultad: 16-
Resultado: 9 (Exito)
Si con mi fuerza puedo intentar desarmarle con una mano, con la otra voy agarrando el arma bien para encañonarlo.
El atracador vio cómo Orpheus trató de saltar el mostrador pero acabó tumbado boca abajo. No obstante, el sudor de su frente y los disparos le habían distraído, y antes de que pudiera reaccionar notó cómo el guardia le agarró con fuerza el brazo derecho. Intentaba zafarse pero sin éxito...
Al mismo tiempo, Nathan se acercó hasta el mostrador. Tenía ahora un disparo despejado.
Motivo: FUE.Rob
Tirada: 1d20
Resultado: 5(+12)=17
...53,54,55,56,57,58,59,60...
Nathan: a partir del 54 puedes disparar, en el 60 tendrás el bono de +3 y en el 62 (si apoyas con la mano) tendrás +5. El movimiento sucede simultáneo, y en el 60 estás junto al mostrador.
Orpheus: primero es un ataque de Forcejeo para agarrar al rival, después puedes intentar quitarle el arma. El forcejeo es una tirada enfrentada, has elegido fuerza. Es decir, le agarras con la mano izquierda. Has sacado 9 y sumamos tu Atributo (15), lo que da un 24. El atracador se resiste con un 17, así que le tienes agarrado del brazo del arma en el 60. Hasta el 70 lo tienes enganchado. Al mismo tiempo agarras tu arma. Lo siguiente tendrás que elegir entre intentar desarmarlo (tirada de ataque de FUE), sería como golpear su brazo con la culata de tu pistola, o bien apuntarle o golpearle en la cara u otra parte del cuerpo.
Rob: apuntaba a Orpheus, pero en el 60 le agarran el brazo. Forcejeando.
Zack: sigues apuntando, puedes disparar en cualquier momento.
-¡No me váis a colgar!, gritó Rob rabioso y comenzó a golpear a Orpheus con la mano izquierda. Pero el guardia esquivó con facilidad el puñetazo dirigido a su cabeza.
Motivo: SAB
Tirada: 1d20
Dificultad: 10-
Resultado: 8 (Exito)
Motivo: ataque.cabeza
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+5)=7
Ataque puñetazo: se suma modificador DES del atacante (tiene 11, así que 0) y se resta el modificador de Orpheus (+3), así que nada, falla. Anthony podría dedicarse al boxeo creo :)
La acción tiene lugar en el 60, y en el 62 puede volver a actuar. Orpheus le sigue agarrando del brazo del arma
Con paso sigiloso, casi levitando, la asiática llegó sin ser visto hasta la puerta. Tenía delante al cajero Cadignan, y detrás de ellos a Orpheus y al atracador peleándose. También pudo ver a Nathan y a Zack, ambos armados, al otro lado del mostrador.
ya te has asomado por la puerta y ves a Orpheus peleando por el arma, a Nathan acercándose al mostrador. Y a Cadignan muerto de miedo en medio. Tu acción comienza en el 57.
Con el atracador agarrado, e intentando que sus compañeros tuvieran una buena linea de fuego para dispararle, Orpheus intenta desarmarlo a base de golpes con la culata.
¿A colgar? Vas a acabar en un ataúd idiota...
Motivo: Culatazo al canto
Tirada: 1d20
Resultado: 18
Motivo: Pupa
Tirada: 1d4
Resultado: 4(+3)=7
DJ: tira también daño. 1d4+3. El +3 es por tu bono de fuerza.
S: Hecho! y he sacado el máximo xD DJ: Cuando sacas el máximo en una tirada, se repite y se suma (daño de penetración). Tira 1d4 de nuevo y mientras sigas sacando 4s
Orpheus había demostrado ser un hombre con experiencia y muy rápido de reflejos, su fallo inicial al saltar el mostrador no le impidió reponerse y pronto estaba agarrando al atracador del brazo por el que sostenía el revólver impidiéndole disparar. Nathan siguió atento a la lucha apuntando con su pistola pero decidido a intervenir solamente si Orpheus o el otro empleado de la banca peligraban, esperaba que el guardia pudiera reducirlo pues parecía mas fuerte y ducho en las peleas.
Visto como está todo, de momento sigo acumulando bonos y no disparo a no ser que el atracador revierta la situación.
-CRAC-
El golpe de Orpheus fue brutal al brazo del atracador, y el hueso se partió como una rama seca en el desierto. -¡NNNGGHH!, gritó Rob de dolor, y soltó su arma al instante. Se caía al suelo, pero como Orpheus aún le agarraba del brazo ahora roto por el golpe de la culata, no terminó de caerse y el dolor fue todavía peor.
Motivo: daño.adicional
Tirada: 1d4
Resultado: 2(+7)=9
Orpheus: he tirado el daño adicional por ti. Como has sacado un 4, se repite y se suma. Total 4+2=6 y +3 por el modificador de daño, son 9 HP al brazo del arma: "suelta todos los objetos, se cae al suelo, brazo roto"
Con esto termina la "fase táctica", pues ya no hay peligro en el banco.
Blossom: al final no te han necesitado :) ahora te incluyo en la narración que estabas a punto de entrar
Con el segundo atracador reducido, desmarado y sentado en el suelo con el brazo roto y bajo la atenta mirada de Clive Montana, la situación en el First Bank of the West estaba bajo control. La ayudante asiática de Caprice D'Vialdi, de nombre Blossom, apareció por detrás de Cadignan. Había llegado hasta la puerta detrás del mostrador, y desde allí podía haber evitado el escape de Rob Stevenson, o haberle atacado por la espalda, aunque finalmente no fue necesario.
Los clientes ya se habían marchado, y al no escuchar más disparos desde el interior, algunos querían asomarse para ver qué estaba sucediendo. También se había ido a avisar al sheriff de Judas Crossing, que no iba a tardar en aparecer.
Orpheus no se andaba con chiquitas, pero la situación lo había requerido y Nathan no pudo si no asentir ante el desenlace, desarmado y con un brazo roto el ladrón ya no era ninguna preocupación así que miró a su alrededor para asegurarse de que nadie más hacía ninguna tontería. La mayoría de clientes se había marchado del banco aunque algunos curiosos asomaban la cabeza de vez en cuando. Nathan sacó el tambor de su revólver y comenzó a recargar los espacios que habían quedado vacíos, aprovechando la calma mientras se dirigía hacia la puerta, donde se había quedado Isaac, le dedicó un sonrisa.
-Parece que sabe defenderse Señor Rubenstein. -Cuando terminó de cargar su revolver lo enfundó y le tendió la mano a su jefe para que se incorporase.- ¿Está usted bien?
Las demoledoras manos de Orpheus hicieron lo que mejor sabían hacer, y el pobre desgraciado cayó al suelo con el brazo hecho añicos. AL caer vio aparecer por detrás a su compañera Shikibu, a la cual le dedicó un leve movimiento de cabeza. Aunque no la viese, sabía que ella estaría cerca y que la señorita Caprice estaría a salvo.
Anthony se levantó mientras su compañero Clive vigilaba a los atracadores.
-Buen trabajo amigo. Esta noche te has ganado una ronda en el salón. -le dijo mientras le palmeaba la espalda. Luego se acerco a aquellos dos hombres que les habían ayudado en el atraco, mientras el pistolero ayudaba a levantarse al hombre que había jugado a romper la piñata con la boca de uno de los atracadores. Levantó su gorro con dos dedos saludando a Isaac.
-Muchas gracias por su ayuda. Siento todo lo sucedido y las molestias que esto le hayan acarreado, seguro que la señorita De Vialdi estará gustosa de atenderle tan buen punto todo esto se arregle. Aunque viendo al caballero que le acompaña, no creo que usted pueda sentirse en peligro en ningún momento.
Entonces Orpheus miró al otro hombre mientras le alargaba una de sus enormes manos.
-Orpheus Anthony. Muchas gracias por su ayuda amigo, creo que le debo una copa.
Orpheus esbozó una sonrisa por primera vez esa mañana.
La adrenalina aún corría por la venas de Isaac. La visión de como Orpheus había quebrado el brazo del bandido aún seguía clavada en su retina, no querría nunca encontrarse en bandos opuestos.
- Estoy bien, gracias - contestó dirigiéndose a su amigo con la sonrisa de vuelta en su rostro - Siempre es bueno hacer algo de ejercicio. Aunque cuando encuentre a Jeb va a tener que explicar muchas cosas, mezclarse con esa gentuza de los buscadores de oro solo puede traer desgracias.
Entonces se fijó en los puños de su chaqueta, el derecho estaba manchado por la sangre del forajido al que había golpeado con la culata. Una de las cosas que mas odiaba era echar a perder un traje, y la sangre era muy difícil de quitar.
- Creo que la situación actual no es la más adecuada para tener una reunión con la señorita de Vialdi, pero aceptamos el trago si pagamos nosotros el segundo.
Lamentaba no poder ver ahora a la dueña del banco. Todo lo que había oído y visto de ella, había hecho que el interés por conocerla fuese más allá de los intereses comerciales, y ansiaba el poder conocerla en persona.
Nathan estrechó la mano de Orpheus mientras negaba con la cabeza.
-Nathan Ollerton. Hice lo que tenía que hacer, pero nunca rechazo una copa.
Sonrió agradecido por la invitación y sobre todo porque pensaba que lo que había ocurrido podía allanarle el camino a Isaac en las gestiones que quería realizar con la dueña del banco. En cualquier caso lo importante era que seguían vivos y de una pieza. Isaac parecía satisfecho y eso le animaba.
-Me alegro, temía que pudiera haber algún disparo perdido, nunca se sabe como van a acabar estas cosas. Después de verte hoy no me gustaría ser su socio señor Rubestein.
Tras eso Nathan volvió a su papel de pasar a un segundo plano y dejó la conversación en manos de Isaac mientras sacaba un pañuelo del bolsillo y comenzaba a limpiarse las manos.
Un sencillo apretón de mano entre Nathan y Orpheus puso fin a una situación tensa que al final se había saldado sin muertos. Incluso los atracadores seguían vivos y podían pasar por un juicio, aunque no lo iban a tener fácil para evitar la horca si habían cometido delitos en otros lugares con anterioridad. De momento, el sheriff “Bud” McCoy acudió para llevárselos.
Se trataba de un hombre serio y con cierto aire de tristeza permanente. No resultaba raro verle visitar varios de los saloons de Judas Crossing durante sus jornadas de servicio, pero luchaba contra la delincuencia salvaje del lugar con los medios de los que disponía. Tomó nota de lo sucedido, e hizo llamar a un médico para atender a los prisioneros.
El First Bank of the West iba a cerrar para el resto del día, así que Orpheus Anthony pudo acompañar a Isaac y a Nathan a tomar ese trago de whiskey. Fue algo rápido, ya que para entonces ya se había acercado al lugar el reportero del periódico local, y Anthony tuvo que atenderle.
Quedaron en volver a verse el día siguiente. El banco iba a abrir algo más tarde de lo habitual, y así podían atender primero los asuntos del Sr. Rubenstein.
¡FIN DE LA ESCENA! Espero que os haya gustado.
Cierro escena, y abro inmediatamente una nueva para Nathan e Isaac aquí
Orpheus & Blossom: os comento por el Off Topic
En Judas Crossing era habitual que un rodamundos desapareciera un día sin dejar rastro. Pasaba. La gente iba y venía, el desierto que rodeaba al pueblo era amplio y los cerdos siempre tenían hambre. No se hacían preguntas, y todo seguía como si nada a la espera de nuevos incautos que llegaban con los bolsillos llenos en la diligencia de las once desde Lazarus.
Así era con la mayoría de los hombres y mujeres que nunca llegaron a echar raíces en el pueblo. Con otros el asunto era diferente. Como por ejemplo aquel perito contratado por el First Bank of the West y por su propietaria la Srta. D’Vialdi. El cadáver fue hallado por un cazador y lo trajo al pueblo hacía ya unos meses. O por ejemplo la repentina y preocupante desaparición del doctor Samuel Rayne. Esos casos tenían la fea costumbre de permanecer en el recuerdo colectivo y encima de mesa del sheriff más tiempo de lo necesario. O Dios no quisiera, podían llegar a oídos menos propensos a cerrar expediente a cambio de dinero o de favores.
Había pasado más de una semana de la desaparición de Samuel Rayne. El reportero local Pembleton había publicado alguna cosa al respecto, y aún husmeaba por el barrio chino más de la cuenta. Algo lógico por otro lado, ya que el doctor contaba con una considerable clientela que ahora le echaban en falta.
De momento Cashpaw había sido precavido, como de costumbre. No había movido ficha, y tenía al Doctor Opio a buen recaudo en un almacén. Unos días a solas y atado a una silla, con los ojos vendados… Eso solía ablandar a cualquiera. Algunos amarillos de Goodfriend le llevaban arroz y agua. Había podido contrastar la calidad de la mercancía que vendía a ese precio rebajado, y era realmente buena. Cashpaw confiaba en que pronto iba a estar listo para cantar.
Copio un post de El Saloon Peacock del 19/09/2017 como introducción a la siguiente escena
Siguiente escena en orden de lectura: [Cap I-Esc3.3] Doctor Opio