Al finalizar la Guerra de Secesión, el gobierno de los EE.UU. se embargó en el mayor proyecto de ingeniería de la historia de la humanidad. Se trataba de un ferrocarril de costa a costa del continente americano. Para completar el trazado transcontinental, era necesario domar a los indios, atravesar las montañas, cruzar los ríos, vencer al frío invierno y a los cálidos desiertos… El tren se convirtió en un símbolo de progreso y de atrevimiento del hombre. De su desafío a la Naturaleza. Y los pueblos nacían y morían según el trazado a veces caprichoso de las empresas encargadas de llevar cabo ese proyecto.
Judas Crossing, como otros muchos pueblos, contaban con un representante del ferrocarril. Un agente cuyo trabajo era valorar si el pueblo se merecía ser incluido en alguna ruta de aquella máquina imparable que transportaba riqueza y civilización a los lugares más recónditos. El nombre del agente era Richard “Gabby” Burton, y por su relevancia era considerado uno de los líderes de la facción de los aristócratas.
El tema del ferrocarril dividía a las facciones. Los Aristócratas, en general, consideraban que era una enorme oportunidad de progreso y de enriquecimiento. El agente Burton era hábil, y había conseguido que incluso Cavendish que se dedicaba al transporte de mercancías estaba ya prácticamente convencido. . Sin embargo, la empresa rival de transportes, Singleton Freight, se había acercado a las posturas de Ortega. El dueño de la mina, Bordeaux, también apoyaba el ferrocarril, pues iba a permitir enviar el oro rápidamente y con protección federal a los mercados de las costas.
La facción de Yeates no estaba tan entusiasmada, y sobre todo quería garantías de que el progreso y la mejora no fuera solo para los que ya controlaban los negocios del pueblo. El tren podía convertir Judas Crossing en un pueblo de peso en la región, incluso más que Lazarus. Era el futuro, pero con ciertos controles. Además, podía ser el primer paso para una futura anexión a un estado. Cashpaw no compartía el entusiasmo con el resto, pues sus negocios podían verse perjudicados en algún modo. Los Lobos Negros se oponían con determinación y con fuerza.
JEB
Paying a Visit: At this time, the more decent townspeople will begin calling on the character from time to time, just “to see how they’re getting along.” Such visits will enable a bit of conversation, like the bringing of lemonade on a hot day, or the offer of a smoke.
ZACK:
Keeping an Eye Out: In this phase, the faction will be vigilant and gather information while being mindful of potential opportunities to help the character in question. The faction has a good “gut feeling” about the character, but folks remain wary, as they have been fooled before.
NATHAN:
Keeping an Eye Out: In this phase, the faction will be vigilant and gather information while being mindful of potential opportunities to help the character in question. The faction has a good “gut feeling” about the character, but folks remain wary, as they have been fooled before.
GERARDO:
Intervention: At this stage, faction members will come en masse and unarmed to confront dangerous characters in public and warn them against continuing their nefarious habits. The action will not be intended as a threat exactly, but rather as a show of solidarity and resolve.
MORGAN
Keeping an Eye Out: In this phase, the faction will be vigilant and gather information while being mindful of potential opportunities to help the character in question. The faction has a good “gut feeling” about the character, but folks remain wary, as they have been fooled before.