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Judas Crossing [18+]

[Cap II-Esc16] Un pueblo en auge

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29/08/2019, 14:46
Sum Quod Eris

Y si Dios en su gracia me ha tomado,
tanto que quiere que su corte vea
de modo inusitado en estos tiempos,
no me ocultes quién fuiste antes de muerto;
dímelo, y dime si el camino es éste;
y tus palabras sean nuestra escolta.

            Canto XVI - L40

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29/08/2019, 14:47
Narrador

El crecimiento de Judas Crossing fue realmente espectacular. Como con tantos otros pueblos de la Frontera, el origen de ese auge fue el descubrimiento de grandes reservas de algún metal valioso. Los pueblos que nacieron y crecieron rápidamente en torno a una mina recibieron el nombre de “boomtown”, o pueblos en auge.

Con ese auge llegaron grandes oportunidades, pero también malhechores, personas incapaces de adaptarse a la sociedad y gente sin escrúpulos. Morty y Fabian habían sufrido en sus carnes la delincuencia del Salvaje Oeste cuando un par de rufianes les habían robado sus caballos, y varias prostitutas habían desaparecido sin dejar rastro. Pero nada podía detener el progreso.

En caso de Judas, el origen de su auge era el oro de las Montañas de San Juan. Y no eran treinta piezas como los que había cobrado Iscariote por su traición, sino muchas más. Tantas como para alimentar las ambiciones de las distintas facciones del pueblo, y para costear los excesos de los aristócratas.

Y fue gracias al oro que el ferrocarril también se interesó por aquel poblado remoto, lejos de las grandes urbes y situado en un territorio sin reclamar por parte de ningún estado. Antes de hallar la primera piedra con metal dorado, aquella tierra era de los indios y ningún estado la quería. Ahora las cosas habían cambiado.

Por un lado, el agente del ferrocarril Gabby Burton tenía cada vez más apoyos, sobre todo entre los ricos y poderosos que veían en el ferrocarril una oportunidad de progreso y de ganancias aún mayores. También la facción de Yeates apoyaba la llegada del tren, y también la anexión a algún estado federal lo antes posible.

Enfrente tenían la firme oposición de Ortega y sus Lobos Negros. Una oposición que se había convertido en actos de vandalismo a la oficina de Burton, y la tensión entre los dos mundos tan opuestos, entre lo viejo y lo nuevo, entre la tradición y el progreso, era cada vez más palpable.

La noticia del asalto de una banda de confederados rebeldes a “Fuerte Lobo”, la guarida secreta de Ortega centraba la atención inmediata del pueblo, aunque la política general siempre estaba presente en las tertulias. Los bandos se estaban formando, y las facciones de poder de Judas tenían que adaptarse a los nuevos tiempos.

En su despacho del First Bank of the West, Caprice d’Vialdi recibía la información de sus personas de confianza Orpheus y Blossom. Necesitaba tener todas las cartas en la mano antes de preparar su jugada.

No muy lejos, en el balcón del Peacock Saloon, Cashpaw miraba el camino que serpenteaba desde Judas Crossing hacia Lazarus. Pronto iba a llegar el carromato, y entre la mercancía había algo de valor para él. Los negocios eran lo primero, pero después retomaría el difícil juego de equilibrios entre las facciones.

La reparación de la línea de telégrafo se recibió con gran alegría por parte de todos, y el pueblo esperaba ansioso la llegada de la mercancía del señor Rubenstein. Era símbolo de que la ruta a Lazarus volvía a funcionar, pero iba a ser difícil olvidar las penurias y la preocupación cuando se habían sentido aislados del mundo.

Isaac Rubenstein y Fabian Castellon aprovecharon el tirón de la situación general, y para la inminente inauguración de sus respectivas tiendas prepararon una promoción conjunta. Y como evento estrella una carrera de caballos por la Main Street de Judas Crossing.

Notas de juego

escena de solo lectura para completar las tramas de este capítulo.
Siguiente escena en orden de lectura: [Cap II-Esc17] Regreso con la mercancía

Zack sigue en: 18. La fiesta de la apertura